Amados hermanitos en Cristo, en los últimos cuatro meses, varios problemas se han sumado para tratar de impedirnos el seguir adelante con la misión que nos encomendó N. S. Jesucristo. (accidentes, glaucoma repentino, la computadora se descompuso, enfermedades y diferentes obstáculos, etc.) Realmente Satanás es incansable…
Pero mientras Jesús nos conserve la vida y nuestra Madrecita nos siga protegiendo, seguiremos en el frente de batalla. Nosotros ofrecemos todos nuestros sufrimientos y nuestras oraciones por ustedes y por las almas que Jesús quiere salvar.
Ustedes oren por nosotros, para que Dios nos siga fortaleciendo y le sirvamos con todas las potencias de nuestro ser. Y cómo siervos inútiles, realicemos bien nuestro trabajo hasta con el último aliento.
Muy pronto reanudaremos la publicación de los post pertenecientes a la Iglesia Triunfante y continuaremos recibiendo la preparación del Espíritu Santo referente a cómo debemos actuar durante la PERSECUCIÓN.
La Santísima Trinidad nos dará las armas para triunfar en nuestro combate personal y para su honor y su gloria: ¡SOMOS LOS NUEVOS GUERREROS CELESTIALES!
La poderosísima Reina del Cielo, San José, San Miguel Arcángel, San Sebastián, San Jorge, San Antonio y San Patricio, serán parte del nuevo contingente de personajes que nos protegerán y nos enseñarán cómo.
En la historia del emperador Constantino Magno, aprenderemos como un pecador arrepentido y un cristiano novato, puede convertirse en un formidable guerrero. Y cómo Dios puede formar hijos valientes, que no desmerecen ante ningún superhéroe de los tan publicitados ahora.
La Persecución del emperador Dioclesiano en el siglo III, nos brinda la oportunidad de conocer los gloriosos testimonios de los martirios más increíbles y cómo Dios defiende a sus hijos en las situaciones más insólitas, pues lo único que necesita es que le entreguemos nuestra miseria, nuestras debilidades y que pongamos nuestra FE y nuestra confianza en ÉL.
Consagrados al Inmaculado Corazón de María Santísima, la victoria está asegurada.
No debemos olvidar que cuando nuestros actuales profetas utilizan la palabra UNIDAD, el Cielo se refiere a la Oración y al rezo del Santo Rosario.
¡Adelante hermanos! Los hijos de la Luz, jamás serán vencidos por las Tinieblas.
Que la paz de nuestro Señor Jesucristo quede en vuestro corazón y bendiga vuestros hogares.
Los amamos a través del Sacratísimo Corazón de Jesús y el Inmaculado Corazón de María Santísima y nos ponemos cordialmente a su servicio.
CRÓNICA DE UNA TRAICIÓN
