Agosto 17_2009
Mensaje de Dios Padre a J. V.
Habla Dios Padre:
Hijitos Míos, mucho Amor se ha derramado sobre todos vosotros, sobre la humanidad entera, por muchos siglos. Mucho Amor os he regalado Mis pequeños,
habéis tenido muchas oportunidades de crecer, de vivir más en Mi Vida, de alimentaros con un Alimento Divino, que solamente puede venir de Mí, vuestro Dios y la humanidad entera lo ha despreciado.
Ciertamente hay algunos de vosotros que queréis crecer, que no aceptáis lo que una gran mayoría hace; pero vuestro crecimiento es lento.
Ciertamente os queréis apartar del mundo, pero estáis llenos de mundo y caéis; aunque os levantáis.
Pero el error persiste, la maldad aún está en vuestro corazón y tenéis momentos en vuestra existencia, en donde aprovecháis la corrupción y la maldad que os rodea, para sacarle provecho a ésas situaciones que queréis vosotros para vuestra vida y no aceptáis vivir rectamente; porque a veces se os hace difícil y aprovecháis los medios corruptos para obtener lo que queréis.
La maldad sigue avanzando alrededor del mundo y queréis seguir aprovechando ésos medios corruptos para obtener lo que queréis y hay hermanos vuestros, que han llegado a tal grado de corrupción;
que son los que se están aprovechando de estos momentos difíciles alrededor del mundo para quitarle a los buenos, a los cumplidos; lo que ellos no han trabajado.
Roban, destruyen, matan, con tal de obtener lo que vuestros hermanos tienen.
Y el fariseísmo persiste; porque así se aprovechaban los fariseos de su mismo pueblo.
Ved, Mis pequeños cómo no ha cambiado el mundo.
SATANÁS, OS SIGUE ATACANDO DE LAS MISMAS FORMAS QUE EN EL PASADO Y VOSOTROS NO ENTENDÉIS.
Si leyerais las Escrituras, veríais exactamente que la situación de vuestro mundo en estos momentos, ya estaba ejemplificado en las Sagradas Escrituras, en el Antiguo Testamento.
Podéis ver claramente lo que sucedía cuando Me dabais la espalda y sabréis qué es lo que os va a pasar, si persistís en vuestra idea y en vuestra negación hacia Mí.
Mucha maldad se ha acumulado en el corazón del hombre, ya no os tratáis como verdaderos hermanos, os tratáis de destruir los unos a los otros.
Os queréis quedar con lo que el hermano tiene, con todo tipo de bienes materiales y aún humanos; porque ya no respetáis a vuestros hermanos ni a sus familias ni a sus esposos e hijos.
Os queréis quedar con todo. Ya no os importa el pecado, no os importa vuestro estado de Gracia, no os importa nada; solamente queréis gozar, queréis tener, queréis ser más que los demás en lo material.
La soberbia del hombre está llegando a niveles muy altos y por otro lado, la envidia de aquellos que no tienen.
Y esto no es bueno para el corazón del hombre. Ha causado que muchas guerras y matanzas entre hermanos. Comenzaron por ahí, al ver cómo unos tenían mucho más y al ver, cómo aquellos que tenían mucho, se burlaban de los de abajo.
No se puede degradar al hombre y ahora lo están provocando masivamente y a eso os está llevando Satanás.
¿Por qué no comprendéis los signos de los Tiempos? Ya están escritos Mis pequeños, están ejemplificados en las Sagradas Escrituras.
El hombre sigue cayendo en los mismos defectos y pecados abominables y así Satanás va a provocar ésa guerra entre hermanos; de aquellos que tienen menos, contra aquellos que tienen más.
Porque el que tiene más, querrá seguirle quitando al pobre lo poco que tenga y el pobre, al envidiar lo que tiene el rico, aunado al odio que crecerá más en su corazón.
Porque además, querrán quitarles posesiones, mujeres, hijas; es cuando el pobre ya no soportará la prueba y empezará la gran lucha entre hermanos.
Todo esto sucede, Mis pequeños; porque seguís viviendo en la maldad, aceptáis la maldad y la engrandecéis en vuestro corazón, en lugar de luchar contra ella.
No hacéis casi nada o simplemente nada; por tratar de crecer en virtud y en amor, como os he pedido tanto a lo largo de los siglos.
OS HE ENVIADO A MI HIJO JESUCRISTO PARA QUE OS ENSEÑARA ESTO.
El mismo Maligno Satanás, atacó a Mi Hijo; pero no pudo, porque él vio en Él al Santo de los Santos. Lo reconoció después de que vio Sus actos.
Y estáis llamados a ello, a vivir también de actos santos, transmitirMe a vuestros hermanos, vivirMe para vuestros hermanos; pero no estáis dando éste ejemplo.
Por otro lado, ¿De dónde podréis aprender si no estáis recibiendo ejemplo de los que están más arriba que vosotros?
Mis mismos ministros: los sacerdotes a todos niveles de la Iglesia, que son los que debieran estar dando el ejemplo de vida, ya no lo dan.
Vosotros mismos sabéis que los hijos pequeños en una familia, aprenden primeramente de los actos y el ejemplo de los padres y así es como van normando su conducta,
¿Cómo pues, queréis crecer en virtud y en amor si aquellos mismos: Mis ministros sacerdotes de la Iglesia, que debieran ser los padres de la Fé; no están siendo ejemplo a seguir?
Los gobernantes de las naciones tampoco dan ejemplo de honestidad, de pureza de corazón, de justicia entre los hombres.
¡Ayde aquellos a los que les he dado ésa capacidad de gobernar!, ¡Pobres de aquellos en su juicio personal que no entreguen buenos resultados por el ejercicio del poder que Yo les concedí!,
Mucho se les dio, mucho se les pedirá y vuelvo a repetir, ¡Pobres de aquellos que aprovecharon ése sitio de poder que Yo les concedí y se aprovecharon de sus hermanos!
¡Que vivieron en la injusticia, que vivieron en la maldad y que fueron repudiados por los pueblos; porque vieron en ellos: maldad, corrupción, muerte, destrucción!,
VOY A SER IMPLACABLE CON ELLOS, PORQUE SE LO MERECEN.
Debieron haber producido amor y justicia entre los hombres, paz entre los pueblos y se vendieron a Satanás y causaron todo lo contrario de lo que Yo quería que vivieran y enseñaran
¡Pobres de aquellos padres de familia que no transmitieron valores a sus hijos, que no transmitieron vida, vida espiritual, paz en su corazón, que no los llenaron de virtud, de amor, de enseñanza de vida para que ellos transmitieran posteriormente ésa vida!
También serán juzgados fuertemente; porque Yo Soy un Dios Justiciero; aunque Misericordioso.
Pero Mi Justicia es recta y tiene bases fuertes cuando castigo; porque conozco vuestro interior, conozco vuestro pensamiento, conozco vuestros actos, nada se escapa a Mi Mirada.
Mis pequeños, se acerca el Juicio ¿Cómo estaréis ante Mí, vuestro Dios? ¿Cómo estarán las naciones enteras? Habrá mucho llanto y dolor en todos los pueblos de la Tierra,
Llegará el momento Mis pequeños, en que os concederé que conozcáis vuestro interior ante Mis Ojos.
Vosotros mismos os juzgaréis bajo Mi Mirada y conoceréis vuestro interior con Mi Juicio Verdadero y ahí empezará vuestro llanto y vuestro dolor;
Porque conoceréis cómo os habéis comportado ante Mis Leyes y ante Mis Mandatos.
Conoceréis cómo despreciasteis Mi Amor y cómo vivisteis en la maldad. Conoceréis la maldad en vuestro corazón como cuando aparentabais transmitir un bien o vivir en un bien y vuestras intenciones eran todo lo contrario.
Conoceréis perfectamente vuestra maldad interior y asco os dará conoceros verdaderamente ante Mi Justicia.Y lloraréis…
Y espero que os arrepintáis, PORQUE SI NO OS ARREPENTÍS ; más grave será vuestra situación ante Mí, vuestro Dios
Os queda poco tiempo, Mis pequeños. Empezad desde ahora. Arrepentíos de vuestros pecados. Cambiad vuestra vida y vividla de acuerdo a Mi Voluntad.
Todavía podréis lograr algo; todavía podréis alcanzar Vida; todavía podréis ayudar a vuestros hermanos con vuestras oraciones
Pero, por Mi Misericordia y porque escucho el lamento de aquellos que aman; tengo que detener ya la vida sobre la Tierra como se está llevando ahora.
Todo tiene un límite y vuestro límite ha llegado. Siempre pensáis que el tiempo todavía se alargará.
Yo os digo, Mis pequeños que ya no se va a alargar esto. Os prometo Mis pequeños, que en un muy poco tiempo de vuestro tiempo del que vosotros contáis, meses serán en que graves acontecimientos se sucederán uno a otro alrededor del mundo.
Situaciones muy graves a vuestra paz interior y exterior, se irán sucediendo una tras otra. El hombre irá perdiendo la paz interior y exterior; porque al ir conociendo todas las situaciones graves que se darán alrededor del mundo, no tendréis paz. Sabiendo que si todavía no os llega el momento a vosotros y a vuestro pueblo, sabréis que pronto os llegará también
Ciertamente son momentos difíciles que pasaréis, pero es purificación para vuestro bien. Porque no va a ser igual para unos que para otros. Ciertamente, si Me habéis buscado y habéis tratado de vivir para Mí y habéis respetado Mi Amor, Mis Leyes, Mi Vida en vuestro corazón, los acontecimientos no serán graves para vosotros.
No es lo mismo en una familia, aquél que comete una travesura inocente, aunque fuera fuerte y dañina; que aquellos que premeditadamente estudian cómo hacer un mal a los hermanos y un mal que les puede causar un dolor muy grave.
Ciertamente el primero tendrá su castigo, de acuerdo a la travesura que haya causado; en cambio el segundo, tendrá un castigo mucho más fuerte; porque lo hizo deliberadamente y con una alevosía plena.
ASÍ SERÁ TAMBIÉN VUESTRA PURIFICACIÓN.
Algunos tendrán una purificación, o sea un castigo menos fuerte y otros, quizá hasta se ganen la condenación eterna; porque actuaron con dolo y maldad contra Mí y contra sus hermanos.
Me duele Mis pequeños, anunciaros todo esto; PERO EL TIEMPO SE TERMINÓ,
Tengo que actuar por aquellos que están implorando Mi Misericordia.
Tengo que escuchar a los hijos buenos, tengo que salvarlos de las garras de Satanás.
Orad pues Mis pequeños, sois del rebaño escogido, habéis escogido la mejor parte. Y así como a María, no se os quitará.
Escuchasteis Mi Voz, la seguisteis y la cuidasteis en vuestro corazón y no solamente os quedasteis ahí, sino quisisteis engrandecer toda ésa Sabiduría que se puede obtener de Mí, para que poco a poco Me fuerais amando más
Yo no puedo castigar a un alma que está en esa situación, al mismo nivel que aquél que está en contra Mía, que destruye la vida, que destruye Mi Amor entre los hombres.
Por eso os he dicho tantas veces Mis pequeños; que si hay alguien Justo, ése Soy Yo, vuestro Dios.
Esto os lo digo nuevamente para que confiéis en Mí, para que no os preocupéis con lo que os vaya a pasar. Yo cuido a Mis hijos buenos y castigo a los hijos malos…
Pero sí os pido Mis pequeños, que oréis fuertemente y de todo corazón, por vuestros hermanos que viven en el mal; que viven traicionando al Bien, que viven arraigados a la podredumbre, que viven obedeciendo a Satanás.
Seguid creciendo en el Amor y estad seguros Mis pequeños, que algo muy bello y muy grande veréis pronto. Yo os cuidaré de los ataques de Satanás; porque seréis un nuevo pueblo; el Pueblo Escogido que gozaréis las bellezas de Mi Corazón.
Vida bellísima veréis, bellezas inimaginables para el hombre; habéis confiado en Mi Omnipotencia y la gozaréis Mis pequeños, os lo aseguro.
Sí, Me duele ver la parte mala del hombre y la castigo; porque ellos Me han castigado primero con su desprecio y su maldad.
Me cambiaron a Mí, vuestro Dios y Creador, por un ángel malvado y traicionero.
A pesar de que se les dio la oportunidad de regresar a Mí, no quisieron. Conocieron perfectamente de Mi Bien y de Mi Amor y siguieron despreciando Mi llamado.
Así como vosotros tuvisteis libertad para escoger el Bien, ellos también la tuvieron y escogieron el Mal.
Benditos seáis Mis pequeños, los que habéis escogido el Bien; porque os esperan regalos inimaginables para la mente del hombre. Confiasteis en Mis Bondades y en Mi Amor y ahora seréis recompensados con ellos.
NO TEMÁIS A LOS ACONTECIMIENTOS, cuando empecéis a escuchar de destrucciones, muertes y de más situaciones graves que se sucederán.
Venid a Mí, poned vuestra cabeza en Mi Pecho, Yo os acurrucaré hacia él, os apretaré a Mi Corazón, para que no temáis; para que os sintáis protegidos por vuestro Padre, que todo lo puede.
Así como el hijo, que se asusta con el trueno y va a buscar al padre o a la madre para buscar protección, así será en estos tiempos.
Venid pues, con confianza, pidiendo Mi ayuda e inmediatamente os la daré. Son tiempos de gran prueba, se os probará en el AMOR a todos vosotros.
Aún aquellos que estáis Conmigo, también tendréis vuestra prueba en el Amor y es para que os acerquéis todavía más a Mí.
Para que confiéis plenamente en Mí para que seáis niños en totalidad, niños confiados en vuestro Dios.
Os amo Mis pequeños, no despreciéis todo esto que Yo os he dicho. No desoigáis Mi llamado y Mis Consejos. No desconfiéis nunca de Mi Amor, os lo pido Mis pequeños; porque Mi Amor es el que se va a manifestar en breve en toda la humanidad y si estáis en el Amor, agradecidos os sentiréis, porque os llamé desde que erais pequeños.
Porque respondisteis cuando crecisteis y os afianzasteis en éstos momentos de prueba.
Os bendigo Mis pequeños. Bendigo a la humanidad entera, aún a aquellos de Mis hijos que viven en el error; porque son Mis hijos. Aunque la Bendición no hace el mismo efecto en el hijo malo que en el hijo bueno,
Pero Mi Bendición llega a todos vosotros. Os amo, os amo, Mis pequeños.
Mensaje de Dios Padre, Dios Espíritu Santo, y La Santísima Virgen María a J.V
Hijitos Míos, Yo Soy vuestro Padre y Creador y así como vosotros, que sois padres en la Tierra, conocéis a vuestros hijos, conocéis su carácter, conocéis su forma de ser, sabéis cómo reaccionan en determinadas situaciones; así Yo os conozco y os conozco perfectamente, más que los padres de la Tierra conocen a sus hijos.
Y porque os amo Mis pequeños. Y porque quiero la salvación de todos, vais a tener señales. Señales en lo material, en lo físico, alrededor del mundo; ciertamente fuertes, Mis pequeños y que se saldrán de toda lógica humana; para que os deis cuenta que hay Alguien más poderoso que puede lograr esto.
Ciertamente muchas almas regresarán a Mí, vendrán a buscar Mi ayuda y protección, al ver todas estas situaciones que se darán alrededor del mundo; porque el miedo, el temor a lo que pueda suceder, los acercará a Mí.
Y luego, Yo los traeré a Mi Corazón y el miedo se tornará en amor, en alegría, en paz;
porque todos aquellos que Me siguen, que están Conmigo; vienen a Mí, no por temor, ni para vivir en el temor.
Si vienen por temor, será como un niño asustado que se ha salido del hogar y que se asusta ante el mundo y las situaciones que se están dando. Y así regresaréis muchos de vosotros, porque os salisteis de la Casa Paterna; quisisteis hacer vuestra voluntad y os asustásteis con el mundo y con lo que Satanás os quiso hacer para que destruyera vuestra alma, destruyera vuestro ser.
Por eso Mis pequeños, os advierto y os advierto con Amor. Os advierto como un padre amoroso haría con los hijos cuando salen del hogar sin permiso y se van a hacer lo que es su voluntad.
Tendréis os repito, situaciones fuertes, dolorosas, que os asustarán; que no sabréis qué hacer en ésos momentos; especialmente aquellos que no contáis con Mi apoyo, porque no lo habéis buscado.
VERÉIS COSAS MUY, MUY DIFERENTES A LO QUE NORMALMENTE VEIS EN LA NATURALEZA…
Y esto será para que vosotros empecéis a reaccionar y empecéis a daros cuenta que os habéis alejado de Mí, vuestro Dios y Creador. Que Yo os estoy esperando, que abro Mis Brazos, para que vosotros, TODOS vosotros lleguéis de regreso a Mí, porque Yo os voy a proteger.
Ciertamente Satanás, ante toda esta situación que Yo permitiré, que parte saldrá de Mí y parte de él; no solamente tratará de atemorizaros, sino también de destruiros.
Por eso deberéis acercaros lo más pronto posible a Mí; para que Yo os proteja de todo lo que se dará.
Os amo Mis pequeños, amo vuestra vida, amo vuestro corazón, amo vuestra alma, os quiero proteger contra la destrucción, que Satanás quiere producir alrededor del mundo.
Que Mi Amor os proteja, que Mi Amor os cubra y que la Gracia del Espíritu Santo esté sobre vosotros y os haga reaccionar para que todos regreséis a Mí. Gracias, Mis pequeños
Hijitos Míos, Mi Hijo os dijo: “ámense los unos a los otros como Yo os he amado”.
Él mostró ése Amor, el Amor de todo un Dios entre los hombres, un Amor Divino, para que pudierais compararlo con el amor del ser humano, que creíais que era el verdadero.
Este Amor Divino es el que se debe posesionar de las almas, porque este es el Amor Divino que tenían vuestros Primeros Padres, Adán y Eva.
Ellos perdieron éste Amor Divino y debéis vosotros volver ahora, con vuestro libre albedrío y sobre todo, deseándolo de corazón a regresar al Amor Divino en vuestro ser,
Para ello, debéis vosotros ejercitar éste deseo, continuamente debéis repetir, en vuestro corazón, que deseáis que Mi Amor Divino se posesione nuevamente de vosotros, porque Yo no puedo entrar a los corazones si vosotros no Me lo permitís.
Yo respeto vuestro libre albedrío, Yo respeto vuestro ser, porque así Yo lo quise hacer para con vosotros; para que vosotros realmente os ganarais el Reino de los Cielos luchando por obtenerlo.
Ciertamente Soy vuestro Padre, vosotros Mis hijos y el Padre regala a los hijos infinidad de cosas; pero cuando van creciendo, después tienen que ganarse todos ésos regalos.
Cuando sois pequeños no podéis meditar sobre esto; porque todavía no tenéis el uso de razón ni tenéis todavía edad para saber que se tienen que ganar las cosas.
Pero los padres desde pequeñitos, os van enseñando que si queréis algo; debéis hacer bien vuestra tarea, os debéis portar bien. De una forma u otra se os va enseñando que os debéis ganar las cosas.
Y por eso os pido Mis pequeños, que Me pidáis que Yo derrame Mis Bendiciones sobre vosotros, que os dé todo lo necesario para que os podáis ganar Mis Gracias; porque vosotros, ciertamente sois muy pequeños; no sabéis cómo actuar en verdadera Gracia, en verdadero amor, en verdadera humildad y sobre todo, en verdadera pureza ante Mí.
Satanás os ha desviado tanto, que ya vosotros no sabéis lo que es perfectamente bueno;
porque lo que es perfectamente bueno, viene de Mí y vosotros en el mundo, que estáis tan agobiados ya con el ataque de Satanás; ya no sabéis realmente lo que es bueno para vosotros y para vuestros hermanos.
Por eso, pedidMe de corazón, que Yo pueda ya entrar en vosotros, dadMe permiso Mis pequeños, de que todo un Dios: Yo, vuestro Padre; pueda entrar en vosotros,
os purifique, limpie todo aquello que se ha ido deteriorando con los siglos y que ya podáis regresar a Mí, limpios, purificados y sobre todo, deseosos de estar ante Mi Presencia y vivir siempre en Mi Amor.
Haced vuestra tarea Mis pequeños; hacedla lo mejor posible, que el regalo ya está frente vosotros y se os dará, os lo prometo. Pero trabajad aunque sea un poquito, para recibirlo. Gracias, Mis pequeños.
Hijitos Míos, Soy vuestro Dios Espíritu Santo. Vengo con vosotros, Mis pequeños; porque Soy Luz, Soy Amor, Soy Vida, Soy la Presencia Viva en el corazón de cada uno de vosotros, de vuestro Dios.
Soy la Tercera Persona de la Santísima Trinidad y VIVO EN VOSOTROS, Mis pequeños, es un regalo inmenso que Nuestro Padre Dios hizo para cada uno de vosotros, que Yo pudiera habitar desde vuestra concepción, en vuestro ser.
Mis pequeños, estos son momentos en que Yo os llevaré hacia la Verdad. Os llevaré a la Luz Verdadera. Os llevaré al Amor Infinito de Nuestro Dios.
Soy Dios y reconozco la Paternidad del Padre, porque he sido Creado por Él y Soy el Amor Infinito de Él y que Yo Me doy hacia vosotros y vosotros estáis llamados a ser parte de ése Amor, porque fuisteis creados para el Amor y para vivir eternamente en el Amor.
Ciertamente Satanás se ha encargado de llevaros por caminos contrarios a la Verdad; para la que fuisteis creados y para la razón por la que tenéis ésta vida que Él os ha prestado para servirLe.
Mis pequeños, no os dais cuenta de éste don tan grande que habéis recibido de vuestro Padre, de vuestro Dios y Creador: El Don de la vida.
Servir a vuestro Dios, es lo más grande que un alma puede tener y especialmente, cuando se os ha dado el don de la vida y para que vuestro camino fuera seguro, fui puesto en vuestro interior.
Estoy en cada uno de vosotros para que vuestra misión sobre la Tierra fuera correcta, fuera verdadera, fuera llena de Luz y que vivierais y trajerais de regreso hacia el Amor, a todas las almas que pudierais.
No os imagináis Mis pequeños, os vuelvo a repetir; esta Gracia tan grande que habéis recibido, no la habéis meditado lo suficiente para que esta Gracia la pudierais vosotros agradecer de corazón a vuestro Dios, a Nuestro Dios, a Nuestro Padre.
Yo siendo Dios, lleno de Amor, deseo daros a cada uno de vosotros esa Vida, esa Vida Divina a la que vosotros debéis llegar.
Mucha maldad hay a vuestro alrededor y en lugar de tratar de evitarla, os habéis involucrado dentro de ella; os habéis ensuciado.
Vinisteis a luchar a la Tierra, a que el Amor de vuestro Dios se impusiera con delicadeza, con respeto, en todas las almas.
Y os digo “se impusiera” porque esa es la realidad en la que debéis vivir; pero no sois forzados a vivir en el Amor si no queréis. Vuestros actos, vuestras palabras, toda vuestra forma de ser; debe llevaros a vosotros mismos y a vuestros hermanos hacia esta realidad Divina: vivir en el Amor.
Esta es la única y real función que tiene vuestra vida en la Tierra, producir Amor. El Amor que os enseñó vuestro Dios, Jesucristo Encarnado; para que pudierais tomar de Él ejemplo, ejemplo humano y llevarlo a vuestro corazón.
Yo no os abandono, siempre estoy con vosotros; pero hay tantos, tantos de vuestros hermanos que están tan distraídos en el mundo; que a pesar de que Yo Vivo en vuestro interior, no se Me toma en cuenta; no Me buscan, no buscan Mis Consejos, no buscan tener una vida interior.
A veces, hasta temen entrar dentro de su corazón, porque están temerosos de ver su realidad pecaminosa.
Pero, Mis pequeños, para eso estoy Yo. Os conozco perfectamente, no podéis esconder nada ante Mí. Y aún así, conociéndoos y conociendo vuestra pequeñez y debilidad, os acompaño en todo momento; para que pongáis vuestro corazón sobre Mi Corazón y os ayude a que éste se purifique y que podáis presentaros en algún momento, ante Nuestro Padre y Nuestro Dios; purificados.
Y que la Gracia de Nuestra Santísima Trinidad, os lleve a la perfección y podáis gozar eternamente el regalo al que habéis sido llamados.
Mis pequeños no Me abandonéis, debéis saber que estoy en vosotros. En cualquier momento de tribulación, si no obtenéis ayuda externa; la mejor ayuda que tendréis, es entrar a vuestro corazón y platicar Conmigo. PedidMe ayuda, Yo Soy vuestro Dios y os podré ayudar en todo lo que necesitéis.
Mis pequeños, estáis llamados a algo grande, a algo inmenso. Mi Gracia está con vosotros. Mi Poder Divino está con vosotros; solamente necesito vuestra humildad, vuestra sencillez y sobre todo, vuestro respeto a Mi Presencia en vosotros.
No llenéis vuestro corazón y vuestra alma con la maldad de Satanás; ensuciáis Mi Presencia, Me ensuciáis a Mí, que Soy vuestro Dios y que Vivo en vuestro interior.
YO NUNCA SALGO DE VUESTRO SER; pero quiero que vuestro ser esté limpio, esté puro y esto lo puedo lograr Yo.
Y si entendéis esto que os acabo de explicar, que siempre estoy con vosotros; por favor Mis pequeños, no Me hagáis Vivir, -perdón-, junto con las porquerías con las que llenáis vuestro corazón y en las que todo un Dios no debe estar:
Tanta maldad y tanta suciedad con la que llenáis vuestro corazón y que aceptáis de Satanás, cuando Yo estoy viviendo dentro de vosotros. Yo no Me merezco esto que Me hacéis. Gracias, Mis pequeños.
Habla La Santísima Virgen María:
Sí hijitos Míos, ésta Maternidad que Me concedió Nuestro Padre Dios, para que a través de Mí vuestra Madre, llegara El Salvador a la humanidad, fue una Maternidad física. Ciertamente Lo tuve en Mi Vientre ésos nueve meses Divinos, Celestiales.
Una Gracia inmensa, grandísima que Nuestro Dios hizo en Mí, Su Esclava, Su Pequeña, Su Creaturita.
Pero Mis pequeños, Mis hijitos; vosotros estáis llamados también a llevar a cabo una MATERNIDAD ESPIRITUAL.
Todos vosotros estáis llamados a traer en vuestro interior a Mi Hijo y es más, a que también Él Viva plenamente en vosotros.
También es una Gracia inmensa, que Nuestro Padre Dios en Su Santísima Trinidad, hace a cada uno de vosotros.
Meditad esto Mis pequeños; porque es un regalo grandísimo que tenéis cada uno de vosotros, el que Mi Hijo pueda habitar en vosotros y podáis darLo a vuestros hermanos.
Sí Mis pequeños, gozad este regalo tan grande, de la Presencia de todo un Dios en vosotros y que podáis también darLo a vuestros hermanos como Yo Lo di a la Humanidad entera.
Yo en Mi “fiat”, acepté que Mi Hijo pudiera Encarnarse y venir a la Tierra; ahora es vuestro momento Mis pequeños;
También dad vuestro “fiat” a Nuestro Dios y Creador, para que también la Presencia de Mi Hijo se dé en estos momentos de tribulación mundial.
Son vuestros momentos; sois Mis hijos; sois Mi Calcañal; sois la Fuerza del Cielo en estos momentos de la humanidad; en estos momentos de la historia, en estos momentos del cambio.
Tenéis esa Gracia inmensa Mis pequeños, en donde se va a dar el parteaguas, como se dio cuando Mi Hijo vino a la Tierra.
Y así como se habla del Antiguo y Nuevo Testamento, del antes de Cristo y después de Cristo; se habla ahora de la Venida de Mi Hijo para este nuevo tiempo de purificación.
Va a ser el fin del viejo hombre y vendrá el nuevo hombre. El hombre nuevo, que habitará los Cielos Nuevos y Tierras Nuevas, a las que seréis los elegidos vosotros, los que os habréis llenado de Gracia y de Amor y sobre todo, los que han aceptado la Voluntad Divina de Nuestro Dios en sí mismos y en su vida.
¿Ahora os dais cuenta Mis pequeños, de vuestra posición, en estos momentos de la humanidad; la Gracia tan grande que ha hecho Nuestro Dios con vosotros? Termina un mundo viejo y estáis vosotros, con Nuestra ayuda, iniciando un Mundo Nuevo.
Estáis viendo por un lado la obscuridad, la maldad de un mundo viejo, pero por otro lado, estáis viendo también la Luz, LAS PROMESAS, QUE YA SE VAN HACIENDO REALIDAD, Promesas antiguas, Promesas actuales; en donde estáis viendo que se van acercando ya los Cielos Nuevos y Tierras Nuevas, para que gocéis el Amor Pleno de Nuestro Dios.
La maldad acabará, la Bondad reinará, tenéis en estos momentos ambas cosas. Tenéis el libre albedrío; pero los que estáis llenos de amor o estáis buscándolo; tendréis ésa Gracia grande de Nuestro Dios, de gozar el regalo prometido y que lo estáis sintiendo ya en vuestros corazones.
Estáis ansiando ya vivirlo, sabéis que existe, tenéis ésa Fe; habéis aceptado en vuestro corazón las Palabras de Mi Hijo, las Palabras de los Evangelios, LA FE OS ESTÁ LLEVANDO A OBTENER ÉSE REGALO GRANDE.
Pero también Mis pequeños, hay que terminar la Tarea.
Todavía falta que el Amor destruya la maldad de Satanás y por eso, os debéis dejar invadir por la Presencia Santa y Divina de Mi Hijo en vosotros. Para que vuestros actos y vuestra presencia en esta Tierra, sea una realidad Divina.
Que vuestra presencia sea de Luz, para terminar con estas Tinieblas que ya se están terminando,
Porque el Amor vencerá toda la Maldad de Satanás.
Aunque estéis viendo como que ésta se va acrecentando, porque así es Satanás; sabe que él tendrá su fin y luchará hasta el final; cuando definitivamente será vencido por el Amor, por la Virtud, por la Gracia Divina de Nuestro Dios.
Sois Mis hijos, estoy con vosotros, Soy vuestra Madre y os acompañaré en todo momento. Y agradeced Mis pequeños, esta Gracia tan grande que os ha dado Nuestro Dios: la de estar en este momento de la humanidad, en este parteaguas que se está dando y que vosotros sois partícipes de él.
Agradeced a Nuestro Dios, como esta Humilde Esclava de Nuestro Dios, agradece. Gracias, Mis pequeños.
Habla Dios Padre:
Hijitos Míos, prácticamente la humanidad entera se desvive por obtener las cosas materiales, lo que el mundo os da. Se os enseña desde pequeños, que debéis estudiar para obtener un trabajo y a través de él, os podáis llenar de las cosas del mundo que necesitáis para vivir cómodamente. Y así os afanáis, prácticamente toda vuestra vida y vuestros valores se vuelven simplemente materia y así os clasificáis: el que más tiene, es el más exitoso y se le respeta por ése supuesto éxito, por haberse llenado de más bienes del mundo.
Sale en cartelones, su fotografía está en todos lados, alabanzas se les hacen, se les invita a todos lados, porque tienen mucho del mundo.
Mis pequeños, ¿Os dais cuenta de los errores en los que caéis y cómo os ha engañado Satanás? Estas almas que se han llenado de tanto de lo material, llegará un momento en que llorarán haber perdido tanto tiempo; por haberse afanado en nada más llenar sus bolsillos, llenarse de cosas materiales, llenarse de posesiones,
que solamente han sido lastre para que ellos pudieran llegar a Mí y pudieran alcanzar el Verdadero Tesoro, que era el Reino de los Cielos.
Vosotros, todos vosotros en algún momento habéis caído en este error y lo habéis transmitido a vuestros hijos y vuestros hijos a sus hijos y así por generaciones se ha dado; en donde vosotros mismos les aconsejabais que buscaran los valores de la Tierra y poco o prácticamente nada, les disteis de educación espiritual.
Su alma quedó vacía, lo que debisteis de haber llenado; porque los debisteis haber educado para la verdadera vida que cada uno de vosotros tendréis eternamente; ésa vida espiritual quedó vacía, NO LES PREPARASTEIS.
Ciertamente, tuvieron lo del mundo, pero infinidad de almas llegan ante Mi Presencia y su alma está vacía; no saben qué hacer ante Mí.
Lloran, lloran el haber perdido su tiempo, por haberse llenado de las cosas del mundo y en el momento en el que sienten Mi Amor y que saben que eso es lo valioso para el alma; LLORAN EL HABER DESPERDICIADO SU TIEMPO EN COSAS DEL MUNDO;
Porque Mi Amor realmente es lo que hace que el alma se satisfaga, se dé como debe ser.
Mucho error hay en el mundo y vosotros sois parte de ese error.
Enmendad vuestros errores, pidiéndoMe que Mi Santo Espíritu llegue a todos los corazones de toda la humanidad, que lo que no pudisteis dar vosotros a vuestros hijos, a vuestros hermanos, a sus hijos; que la Luz de Mi Santo Espíritu les provea lo que vosotros no quisisteis o no pudisteis dar.
Sed humildes Mis pequeños, ante Mi Presencia y pedidMe perdón por lo que no pudisteis hacer con vuestros hijos o lo que vuestros padres no pudieron hacer con vosotros.
Y así pedidMe, para que Mi Santo Espíritu venga a poner orden a toda la Tierra; porque el desorden existe y lo estáis viendo por todos lados.
Y es porque falta Amor, es porque falta ésa Sabiduría Divina con la que debisteis vosotros haberos guiado toda vuestra vida y no le quisisteis hacer caso; os dejasteis solamente guiar por los valores humanos, que os llevaron al error.
Pero estos valores humanos, realmente fueron engaño de Satanás hacia todos vosotros.
Se os dio la oportunidad a lo largo de vuestra vida, de venir a Mí; pero muchos de vosotros, una gran mayoría; no quisisteis escuchar este llamado.
Pero porque sois Mis hijos os doy esta oportunidad, de que podáis retomar lo perdido; pero ahora a través de este regalo que os puedo dar a través de Mi Santo Espíritu derramado sobre todos vosotros.
Cuando llegue el momento, tomadLo y agradecedLo, Mis pequeños.
No desperdiciéis nuevamente la Gracia que Yo derramaré sobre vosotros; porque será la última antes de la Gran Tribulación.
Me conoceréis; conoceréis lo que es Mi Amor; conoceréis Mi Misericordia; pero vuestro libre albedrío decidirá: venir a Mí o estar en contra Mía.
No desperdiciéis Mis pequeños, esta oportunidad. El Amor os llama nuevamente a estar con Él. TomadLo Mis pequeños, tomadLo. Gracias, Mis pequeños.
http://www.diospadresemanifiesta.com/