379 LA TRANSFIGURACIÓN
379 IMITAR A JESUS ES EL EJEMPLO QUE SALVA
349 La Transfiguración en el monte Tabor
Una de las gracias más hermosas de la Naturaleza despertada por la primavera;
es contemplarla en pleno y en detalle:
Desde el firmamento rutilante en el alba, con su espléndida vía Láctea cantando la
gloria del cántico de las esferas, en un salmo perpetuo….
Y en la Tierra, las montañas señoriales coronadas de nieves eternas,
los lagos y los ríos cantando, dando la bienvenida a las nuevas corrientes,
que el deshielo aumenta cada vez más;
desfogándose sobre maravillosos torrentes y cascadas.
Junto con los árboles que lucen sus penachos de distintos colores,
por las florecillas que se abren…
adornando la campiña con las hierbas nuevas y cargadas de rocío,
con flores de distintos colores y diseños diferentes contribuyendo a la armonía,
que el planeta vivo, con sus naturaleza también viva manifiesta sonoramente…
Con el alborear de un sol radiante, los pájaros se despiertan,
con un batir de alas gorjeando su primer “¿chip?” interrogativo;
preludio de todos sus canoros discursos de la jornada;.
El viento esparce llevando en el aire cargado de diversos aromas que la tibieza
de los primeros rayos solares, desprenden de todas las cosas que tocan…
Olor del aíre, que se ha perdido durante la noche, por el rocío.
En medio de esta gracia, van Jesús, los apóstoles y los discípulos.
Está con ellos también Simón de Alfeo.
Van en dirección sureste, superando las colinas que hacen de corona a Nazaret;
vadeando un torrente, atravesando una llanura estrecha,
situada entre las colinas nazarenas y un grupo de montes hacia el este.
Estos montes están precedidos por el cono semitruncado del Tabor;
Cuando llegan al monte. Jesús se detiene,
y dice:
– Pedro, Juan y Santiago de Zebedeo subirán conmigo al monte.
Vosotros diseminaos por la base, separándoos hacia los caminos que la bordean…
Y predicad al Señor.
Al atardecer quiero estar de nuevo en Nazaret, así que no os alejéis mucho.
La paz sea con vosotros.
Y volviéndose a los tres que había nombrado,
dice:
– Vamos.
Y empieza a subir sin volverse ya, con un paso tan veloz, que pone a Pedro en
dificultad para seguirle.
Pedro, rojo y sudando, jadeante, con respiración afanosa:
le pregunta:
– ¿Pero a dónde vamos?
No hay casas en el monte.
En la cima, sólo está aquella vieja fortaleza.
¿Quieres ir a predicar allí?
Jesús responde:
– Habría subido por la otra vertiente.
Como puedes ver, le vuelvo la espalda.
No vamos a ir a la fortaleza.
Y quien esté en ella ni siquiera nos verá.
Voy a unirme con mi Padre.
He querido teneros conmigo porque os amo.
¡Venid y caminad ligeros!
Pedro suplica:
¿Y no podríamos ir un poco más despacio…
Y hablar de lo que oímos y vimos ayer, que nos ha tenido despiertos toda la noche,
para comentarlo?
– A las citas con Dios hay que ir siempre sin demora.
¡Ánimo, Simón Pedro!
Que arriba os permitiré que descanséis.
Y reanuda la subida…
Conforme van subiendo, la mirada se expande por dilatados horizontes,
que un hermoso día sereno hace detalladamente nítidos;
hasta en las zonas más lejanas.
El monte no forma parte de un sistema montañoso como el de Judea.
Con su cima que de levanta aún más, a unos centenares de pasos
Sin embargo donde están, es muy alto.
Y la mirada puede extenderse libremente en un vasto radio.
El lago de Genesaret parece un recorte de cielo engastado en el verde de la tierra;
una turquesa oval ceñida de esmeraldas de distintas tonalidades;
un espejo trémulo, que se riza con el viento leve y por el que se deslizan,
con agilidad de gaviotas, las barcas con sus velas desplegadas,
ligeramente inclinadas hacia la superficie azulina,
con la misma gracia del vuelo de una gaviota cuando sigue el curso de la onda
en busca de presa.
Luego, de la vasta turquesa sale una vena, de un azul más pálido en los lugares
donde el guijarral es más ancho y más oscuro donde las orillas se estrechan.
Y el agua es más profunda y opaca, por la sombra que proyectan los árboles que
crecen vigorosos junto al río, nutridos con su linfa.
El Jordán parece una pincelada casi rectilínea en el verde de la llanuraA uno y otro lado del río, diseminados por la llanura, hay pequeños poblados…
Algunos de ellos son realmente un puñado de casas y otros son más grandes,
ya con aire de pequeñas ciudades.
Las vías de comunicación son rugosidades amarillentas en el verde campirano.
Pero aquí, en la parte del monte, la llanura está mucho más cultivada…
Y es mucho más fértil, muy bonita.
Se ve a los cultivos, con sus distintos colores, sonreír al bonito sol que desciende
del cielo sereno en esta esplendorosa mañana de primavera…
Los cereales están altos, aunque todavía verdes y ondean como un mar glauco.
Los penachos de los más precoces de entre los árboles frutales,
parecen nubecillas blancas y róseas sobre este pequeño mar vegetal.
Los prados florecidos por los altos henos, lucen pequeños cúmulos de nieve
amontonadas acá o allá sobre la hierba…
Porque eso es lo que parecen los pequeños grupos de ovejas, que pastan
alegremente sobre ellos.
Al pie del monte, en las pequeñas colinas que constituyen su base, hay dos
poblaciones y la llanura ubérrima se extiende hacia el sur.
Jesús, después de una breve pausa al fresco de un puñado de árboles;
pausa que, sin duda, ha sido concedida por piedad hacia Pedro,
que en las subidas se cansa visiblemente, reanuda la ascensión.
Sube casi hasta la cima, hasta un rellano herboso con un semicírculo de árboles
hacia la parte de la ladera.
En este lugar,
Jesús dice:
– Descansad, amigos.
Yo voy allí a orar.
Señalando con la mano una voluminosa roca que sobresale del monte….
Jesús se arrodilla en la tierra herbosa, apoyando las manos y la cabeza en la roca;
como acostumbra hacerlo en las noches dedicadas a la Oración profunda…
El sol no incide en Él, porque la cima lo resguarda.
Pero el resto de la explanada está toda iluminada por el sol,
hasta el límite del borde arbolado a cuya sombra se han sentado los apóstoles…
Pedro se quita las sandalias y las sacude para quitar el polvo y las piedrecillas.
Y se queda descalzo, con sus pies cansados entre la hierba fresca,
Está casi echado, apoyando la cabeza, como almohada, sobre en un matojo
esmeraldino que sobresale más que los demás en su trozo de prado.
Santiago hace lo mismo.
Pero para estar cómodo, busca un tronco de árbol;
en él apoya su manto y en el manto la espalda.
Juan permanece sentado, observando al Maestro.
Pero la calma del lugar, el viento fresco, el silencio y el cansancio
lo vencen a él también.
sobre el pecho, la cabeza y sobre los ojos, los párpados.
Ninguno de los tres duerme profundamente;
están en ese estado de somnolencia veraniega que atonta…
Los despabila una luminosidad tan viva, que anula la del Sol;
se esparce penetrando hasta debajo del follaje de las matas y los árboles,
bajo los cuales se han puesto.
Abren estupefactos los ojos…
Y ven a Jesús transfigurado.
Está igual que como se muestra en el Paraíso…
Cuando bajaba a conversar con Adán y Eva, antes del Pecado Original…
Con la misma majestad en su Rostro y su Cuerpo emanando Luz.
Es tan fuerte y poderosa esta Luz, que su ropaje rojo oscuro,
parece el adiamantado y perlino tejido inmaterial que le viste en el Cielo,
Su Rostro es un sol de luz sideral, pero intensísima,
en el cual centellean los ojos de zafiro.
Hasta su estatura ha cambiado…
Físicamente parece más alto aún;
como si su glorificación hubiera aumentado su estatura.
Emana una luminosidad, que parece volver fosforescente incluso el rellano,
Una Luz maravillosa que proviene enteramente de El, y también fuese viviente…
Como si a la luz propia se uniera toda la luz que hay en el universo y en los cielos,
concentrada en su Señor.
Indescriptible, sublime e inefable Misterio del Aniquilamiento de Dios.
Dios envolvió a Cristo de aspectos que son comunes a todos los nacidos de mujer.
Y no sólo mientras fue “el niño y el hijo del carpintero”,
sino también cuando fue “el Maestro”.
Sólo la sabiduría y los milagros lo distinguían de los demás.
Pero Israel – aunque en menor medida – conocía otros maestros:
Los profetas y obradores de milagros.
Ellos también fueron prueba de FE para el Pueblo de Dios.
Jesús ES prueba de Fe, de sus elegidos:
Los apóstoles y discípulos de los antiguos y los Últimos Tiempos:
quienes debían “creer sin ver” cosas extraordinarias y divinas.
Así, veían al Hombre docto y santo que también, hacía milagros;
pero que en todo lo demás, era similar a ellos en sus necesidades humanas.
Pero para confirmar a los tres, después de la turbación sufrida
por el anuncio de la futura muerte de cruz,
Él ahora se manifiesta en toda la gloria de su Naturaleza Divina.
Están viendo a Dios, en el Hombre que ha anunciado su muerte.
Es la manifestación de las dos Naturalezas hipostáticamente unidas,
manifestación innegable que no puede dejar dudas.
Y al Hijo-Dios que como tal se manifiesta,
se une el Padre-Dios con sus palabras y el Cielo:
representado por Moisés y Elías.
Después de zarandear su Fe por el anuncio de su muerte,
Jesús restablece aumentando, la Fe de los tres apóstoles, transfigurándose.
Jesús está levitando levantado del suelo, porque entre Él y la hierba del prado
está un espacio constituido únicamente por una evaporación de luz,
sobre el cual parece erguirse Él.
es tan viva que pareciera vibrar e impide ver el verde de la hierba
Esta luz intensa que vibra y produce ondas,
como algunas veces se ve en los fuegos intensos.
Ondas que aquí, son de un color blanco, incandescente.
Jesús tiene el Rostro levantado hacia el cielo y sonríe como respuesta a Alguien
que habla con Él, en una manifestación, poderosamente sublime.
Los apóstoles sienten miedo y lo llaman;
porque ya no les parece que sea su Maestro, de tanto como está transfigurado.
Hablando con voz ahogada y llena de ansia…
Lo llaman:
-¡Maestro, Maestro! – dicen bajo, pero con ansia.
Pedro temblando susurra:
– Está en éxtasis.
¿Qué estará viendo?
Los tres se han puesto en pie.
Querrían acercarse a Jesús, pero no se atreven.
La luz aumenta todavía más, debido a dos llamas que bajan del cielo
y se colocan a ambos lados de Jesús.
Una vez asentadas en el rellano, se abre su velo…
Y aparecen dos majestuosos y luminosos personajes.
Uno, más anciano, de mirada aguda, grave y con barba larga bipartida.
De su frente salen cuernos de luz que el Espíritu Santo dice que es Moisés.
El otro es más joven, enjuto, barbudo y velloso, muy parecido al Bautista,
por estatura, delgadez, conformación y gravedad.
Mientras que la luz de Moisés es cándida como la de Jesús,
especialmente en los rayos de la frente;
la que emana Elías es solar, de llama viva.
Los dos Profetas toman una postura reverente ante su Dios Encarnado.
Y aunque Él les hable con familiaridad, ellos no abandonan esa su postura reverente.
Los tres apóstoles caen de rodillas temblando;
cubriéndose el rostro con las manos.
Querrían ver, pero tienen miedo.
Por fin Pedro habla:
-¡Maestro, Maestro, óyeme!
Jesús vuelve la mirada sonriente hacia su Pedro…
y dice:
– Es hermoso estar aquí contigo, con Moisés y con Elías.
Si quieres hacemos tres tiendas para Ti, para Moisés y para Elías,
y nosotros os servimos…
Jesús vuelve a mirarlo y sonríe más vivamente.
Mira también a Juan y a Santiago:
Una mirada que los abraza con amor.
También Moisés y Elías miran a los tres fijamente.
Sus ojos centellean.
Deben de ser como rayos que atraviesan los corazones.
Los apóstoles no se atreven a decir nada más.
Atemorizados, callan.
Dan la impresión de ser personas un poco ebrias, porque están como aturdidos.
Pero, cuando un velo, que no es niebla, que no es nube, que no es rayo
envuelve y separa a los Tres gloriosos detrás de una pantalla aún más luminosa;
que la que ya los circundaba, celándolos a la vista de los tres…
Una Voz potente y armónica vibra y llena de Sí el espacio…
Los tres caen con el rostro contra la hierba.
La Voz infinitamente poderosa y bellísima,
dice:
“Éste es mi Hijo amado, en quien me complazco.
Escuchadlo.”
Pedro, al arrojarse rostro en tierra,
exclama:
– ¡Misericordia de mí, que soy un pecador!
¡La Gloria de Dios está descendiendo!
Santiago no dice nada.
Juan, como si estuviera próximo a desmayarse, con un suspiro,
susurra:
-¡El Señor habla!
Ninguno se atreve a levantar la cabeza…
Ni siquiera cuando el silencio se hace de nuevo absoluto.
No ven por tanto, el retorno de la luz a su naturaleza de luz solar,
que muestra a Jesús solo, de nuevo.
El Jesús de siempre, con su túnica roja.
Él camina hacia ellos sonriendo;
los toca moviéndolos…
Y los llama por su nombre:
– Pedro, Santiago, Juan…
Soy Yo. No temáis.
Porque los tres no se atreven a levantar la cara,
e invocan misericordia para sus pecados…
Temiendo que sea el Ángel de Dios queriendo mostrarles al Altísimo.
Con un tono más imperioso,
Jesús repite:
– Levantaos. Os lo ordeno.
Ellos levantan el rostro y ven a Jesús sonriente.
Y exclaman…
– ¡Oh, Maestro, Dios mío!
– ¿Cómo vamos a vivir a tu lado, ahora que hemos visto tu gloria?
– ¿Cómo vamos a vivir en medio de los hombres?
¿Y nosotros, hombres pecadores, ahora que hemos oído la voz de Dios?
Jesús dice:
– Deberéis vivir conmigo y ver mi gloria hasta el final.
Sed dignos de ello, porque el tiempo está próximo.
Obedeced al Padre mío y vuestro.
Volvemos ahora con los hombres…
Porque he venido para estar con ellos y para llevarlos a Dios.
Vamos.
EL LLAMADO DE LA CREACIÓN 2
PROFECÍAS Y REVELACIONES
Enero 06 de 2005
Habla Dios Padre
Sobre: Pronto veréis catástrofes más grandes que la que acabáis de ver.
Hijitos Míos, sabéis que la maldad viene en el hombre desde su nacimiento;
sabéis que si no lucháis contra ese mal, que traéis por familia, no venceréis.
La lucha debe de ser constante, el Bien vencerá al Mal;
pero debéis poner mucho de vuestra parte.
El Mal va ganando terreno entre vosotros,
el Mal Me va arrebatando muchas almas.
El hombre al separarse de Mí, al separarse del Amor, al separarse de Mis Leyes;
va destruyendo todo lo que Yo con Amor creé.
EL HOMBRE SE HA VUELLTO
INSTRUMENTO DE SATANÁS,
NO QUIERE SABER DEL AMOR
Mis pequeños, los grandes males que azotarán a la Humanidad,
sabéis que serán de Purificación.
Ciertamente buenos y malos irán dentro de esa purificación.
Las almas buenas se dan por aquellas que viven en el error.
Vosotros estáis conscientes de ello, porque os he enseñando, os he predicado
y habéis abierto vuestro corazón a Mis enseñanzas, a Mis necesidades.
Mis pequeños, mucha vida espiritual se necesita,
pero si vuestra donación es total,
Yo puedo hacer grandes cosas a través de vosotros.
PRONTO VERÉIS CATÁSTROFES MÁS GRANDES
QUE LA QUE ACABÁIS DE VER
PERO EL HOMBRE NO QUIERE REACCIONAR
Orad, para que se DISMINUYAN ,
Pero que se disminuyan, porque el hombre debe entender que debe acercar a Mí.
Y que al acercarse a Mí,
su Oración hará que se disminuyan éstas pruebas.
El hombre no debe vivir sin Mí, no puede vivir sin Mí.
el ataque del Enemigo es continuo,
no se quiere dar cuenta el hombre de ello.
SE CREE SER ADULTO
SE CREE AUTOSUFICIENTE
Y NO ES ASÍ
Aquél que no se acerca a la Fuente de Vida que Soy Yo,
no puede beber ni de sabiduría, ni de ciencia, ni de piedad,
ni de Mi Amor que todo lo Vence, todo lo Purifica y todo lo Santifica.
Estáis aún viviendo la Obra de Mi Misericordia,
aunque veáis grandes desastres, grandes mortandades;
aniquilación de muchos de vuestros hermanos;
todo esto es todavía obra de Mi Misericordia. Agradecedla.
Interceded por vuestros hermanos,
especialmente por aquellos que no Me aman.
Pero gracias a éstos momentos de destrucción aparente,
en donde vosotros solo veis destrucción física, material;
POR ELLA SE VIENE LA VIDA ESPIRITUAL
Yo le doy a todos aquellos que pasaron por la prueba,
esos momentos para su arrepentimiento.
Una gran mayoría de vuestros hermanos, regresan a Mí,
regresan arrepentidos de su mala vida.
Por eso os digo que no temáis a los acontecimientos;
porque ellos, en Mi Misericordia, les están dando la oportunidad,
a una gran cantidad de vuestros hermanos,
del retorno a la Casa Paterna.
Orad, orad por aquellos a los cuales no ha llegado todavía Mi Misericordia.
O que no la quieren tomar;
aquellos que al vivir en el error, o al vivir en una falsa paz,
no buscan el acrecentamiento de su espiritualidad
O DE SU CONVERSIÓN,
CON EL ARREPENTIMIENTO
DE SUS PECADOS Y DE SU MALA VIDA
Todos esos hermanos vuestros, que viven en el error;
tendrán también su momento culmen.
Orad para que lo tomen positivamente y que venga esa conversión
de momento. Yo puedo romper los corazones duros;
pero se necesita vuestra Oración por vuestros hermanos.
ORAD FUERTEMENTE
PARA QUE EN EL MOMENTO DE LA PRUEBA
NO RECHACEN MI MISERICORDIA
Y PUEDAN SER SALVADOS POR MI AMOR
Porque el poder del Demonio se ha soltado.
Le habéis dado esa libertad por vuestra escasa Oración
Y DONACIÓN HACIA LA SANTIDAD
al haberos preocupado más por las cosas del Mundo.
Por haberos olvidado de vuestra espiritualidad,
el Demonio está actuando con toda su furia.
Mi Misericordia no puede permitir tanto mal,
los acontecimientos de la purificación, a los que llamaréis “grandes desastres”,
vienen prontos.
Mi Misericordia los permitirá para vuestro bien;
para la conversión de vuestros hermanos,
para que encontréis nuevamente la vida interior, vida espiritual,
que debisteis haber tenido desde hace mucho tiempo.
La Humanidad ha coqueteado fuertemente con la Serpiente.
Y en lugar de agradeceros el que hayáis caído en sus redes, en su mentira,
lo hizo para que os olvidarais de lo espiritual…
Y LE DIÉRAIS VIDA
CON LA CUAL ATACAROS
Y DESTRUIROS
¡Tonta humanidad que no comprende que al separarse de Mí,
le dais vida al Enemigo!
Y así os quiere destruir,
pero está prometido en las Escrituras,
que por la donación de unos pocos,
los tiempos se acortarán para el bien de muchos.
SU FURIA ES TREMENDA
SU DESTRUCCIÓN ASÍ SERÁ:
¡TREMENDA!
Para con toda la Humanidad, menos para los elegidos.
Llos que se han mantenido fieles, los que han creído,
los que han amado, los que Me han servido.
Ciertamente ellos verán esos grandes acontecimientos,
PERO CON LA PAZ EN SU CORAZÓN
Mientras que para otros, será el llanto y la desesperación,
al perder sus bienes materiales, sus posesiones, su “yo”.
Su soberbia será pisoteada por la Justicia, por el Amor,
hasta que entiendan que debéis volver a Mí,
para recuperar lo que en vosotros vale:
el Amor, la vida espiritual, la vida en vuestro Dios.
Orad, Mis pequeños por vuestros hermanos;
vosotros pertenecéis al Rebaño Escogido;
pero por ello, vuestro compromiso crece.
Debéis ayudar a vuestros hermanos en desgracia,
en Desgracia espiritual.
Os he venido repitiendo esto para que entendáis, Mis pequeños,
que el Demonio, el rey de la mentira, tratará de destruir todo lo Mío,
todo lo bueno, todo lo Creado,
para imponer nuevamente su “orden” sobre la Tierra,
que es maldad, que es desorden para el Cielo.
Vivís en un mundo de tiniebla,
en un mundo de maldad,
en un mundo de error,
PERO LOS MÍOS NO SE CONTAMINAN
Los Míos siguen adelante.
Y los Míos deberán levantar, a los que yacen muertos a la Gracia.
Reparad por ellos, amad por ellos, orad por ellos, levantaos por ellos
Y ASÍ YO RECUPERARÉ ALMAS
POR VUESTRA FIEL DONACIÓN
Hijitos Míos, os pido que LA TRISTEZA no envuelva vuestro corazón.
Por lo único que vuestro corazón se debe entristecer,
es por el saber que no se está viviendo en el Amor,
que muchas almas se pierden,
que muchas almas Me odian,
que muchas almas prefieren vivir en el Pecado
y no quieren venir hacia Mí.
Pero, de ahí en fuera, Mis pequeños,
DEBÉIS VIVIR SIEMPRE EN LA ALEGRÍA
Porque ésa alegría es la que va a hacer que vuestra vida sea más llevadera sobre la Tierra…
Y la alegría, quiere decir Esperanza en un futuro,
Esperanza de que algún día llegaréis a Mí
y que os daré un premio eterno,
por haber cumplido bien vuestra misión sobre la Tierra.
Ésa es la alegría que debéis vivir y que debéis mostrar a vuestros hermanos,
para que ellos se den cuenta de que, aún a pesar de que hay maldad,
tristeza, destrucción en el Mundo,
LA ALEGRÍA LES PUEDE PERMITIR TAMBIÉN A ELLOS,
SALIR ADELANTE…
Y vosotros debéis explicarles esto que os explico a vosotros,
que debéis tener siempre Esperanza en que habrá un Bien,
que esto que estáis padeciendo ahora es una Purificación,
que servirá para ver un nuevo amanecer.
Que esto, que está sucediendo, es para un Bien para todas las almas,
ES PARA QUE VUESTRAS ALMAS
ENDURECIDAS POR EL EGOÍSMO
POR EL PECADO,
POR LA MALDAD
Que Satanás ha puesto en todos los corazones;
porque vosotros le abristeis vuestro corazón a Satanás
e hizo de vuestro corazón un corazón de piedra.
Ahora, con todos estos desastres que se están dando alrededor del Mundo,
vuestro corazón se tiene que enternecer, tiene que regresar al Amor;
tiene que vivir ése deseo de poder ayudar,

AMOR + FE + ORACIÓN = MILAGROS Abba, hoy no me voy a comer… esos panes, desayuno,, etc… Para que TÜ lo multipliques para mis hermanitos en…??… y tus ángeles se los entreguen a….¿¿¿
aunque no lo podáis hacer,
pero ya vuestro deseo ya está causando un cambio en vuestro corazón.
Si vuestro corazón está duro como piedra,
no se puede enternecer,
no puede sentir lo que vuestros hermanos están sufriendo,
y que vosotros no quisierais padecer,
YA ESE DESEO DE AYUDA
EN LA ORACIÓN
De pedriMe a Mí, vuestro Padre y vuestro Dios,
que Yo ayude de alguna forma a vuestros hermanos,
es lo que está haciendo el cambio, realmente, sobre la Tierra.
Y si vosotros podéis compartir de lo que tenéis,
eso va mejorando el amor en vuestros corazones,
estáis actuando el amor que vive en vuestro corazón
y así es cómo el mundo va a ir cambiando.
De tener un corazón de piedra,
lo estaréis cambiando en un corazón vivo, vibrante;
un corazón de carne,
un corazón que realmente está amando,
porque está pidiéndoMe por sus hermanos.
Así es como éste mundo va a ir cambiando.
Y preparándose para la Venida de Mi Hijo.
Ya habréis dejado toda ésa maldad, toda ésa pasividad de vuestra vida,
nada más pensando para lo vuestro, para vuestro bienestar.
Al ver todo esto que está sucediendo,
es cuando vuestro corazón pedirá,
para que vuestros hermanos también tengan de lo que han perdido.
POR ESO NO JUZGUÉIS MAL
LO QUE ESTÁ SUCEDIENDO
TODO TIENE UNA FINALIDAD
MIS PEQUEÑOS,

Cuando nos crucificamos y Dios nos convierte en corredentores, somos pararrayos de la Justicia Divina… ABBA, convierte todo nuestro sufrimiento, en ARREPENTIMIENTO para mis hermanitos que no te conocen…
MI JUSTICIA INVOCADA Y PROVOCADA
POR VOSOTROS MISMOS,
RESTABLECERÁ EL ORDEN
Y LOS QUE SE ARREPIENTAN
GOZARÁN DE MI MISERICORDIA EN ESTA VIDA
O EN LA ETERNA, MIS PEQUEÑOS
Y es para que os unáis los unos a los otros,
para que os ayudéis, como verdaderos hermanos,
para que deis de lo mucho o de lo poco que tengáis
a vuestros hermanos que están sufriendo o que están desesperados
por no tener hasta de lo más elemental.
He ahí, así será cuando vosotros volveréis a ser como verdaderos hermanos
y se cumplirá lo que os pidió Mi Hijo:
Que os amarais los unos a los otros.
Os tengo que advertir y muy seriamente,
que NO ESTÁIS PREPARADOS para los Acontecimientos de la Purificación,
S O N T E R R I B L E S
Y todos aquellos que no lleguen preparados a ellos, sucumbirán.
Os he ido preparando en estos Últimos Tiempos,
a través de Mis videntes y profetas,
para que podáis llegar preparados a ellos y vosotros, os podéis preguntar:
¿Cómo llegaréis preparados?
Y es lo que os he pedido tanto, aceptando Mi Voluntad.
Cuando Yo os digo aceptar Mi Voluntad,
os estoy cuidando, os estoy guiando, os estoy protegiendo:
Os estoy llevando por un camino seguro de Salvación.
Ciertamente, os reprendo, porque lo necesitáis.
Muchos de vosotros descuidáis éste punto:
el de ser reprendidos para vuestro bien;
os sentís ofendidos cuando os llamo la atención a través de Mis Mensajes
o de aquellos de Mi Hija, la Siempre Virgen María;
os apartáis de ellos, os creéis buenos…

Los nuevos fariseos. Las almas víctimas SABEMOS que todo lo que recibimos de Dios, aunque sea maravilloso, NO NO LO MERECEMOS…
Os creéis que estáis cumpliendo suficientemente,…
Y NO ES ASÍ.
SATANÁS ES UN SER MALÉVOLO
UN SER QUE OS QUIERE DESTRUIR A TODOS
POR SU ENVIDIA Y POR SU MALDAD
Y en estos tiempos, estáis viendo cómo él ya ha tomado el poder mundial.
Y os está llevando a un desquiciamiento espiritual, moral, social, familiar.
Está destruyendo vuestra moralidad;
pero más, la de vuestros hijos,
QUE SON ALMITAS MUY SUSCEPTIBLES
A SER DESTRUIDAS
QUE LES ESTÁIS ENSEÑANDO
Y QUE ES CIERTAMENTE SATANÁS
Hacia donde volteéis, Mis pequeños,
veréis la destrucción que ha provocado Satanás en todo.
Ya no podéis voltear hacia aquellas personas que supuestamente,
os podrían ayudar, todo ha sido corrompido.
Ya os había avisado, hace tiempo,
que la Mentira estaba en todo.
Satanás engaña a unos y a otros, a grandes y a chicos
y por eso, muchos de vuestros hermanos,
en estos momentos,
hablan de una gran confusión y ciertamente, existe,
porque no os habéis preparado como se os ha pedido desde hace varios años.
Habéis echado en saco roto, todo lo que se os daba del Cielo para vuestro bien
Y AHORA ESTÁIS VIENDO
LAS CONSECUENCIAS
La Iglesia no tiene un guía fiel a Mí,
os está llevando hacia el Error
y tanto sacerdotes como fieles, estáis en confusión.
Los gobernantes de las naciones hacen lo que quieren con el pueblo,
Se aprovechan de sus conciudadanos, les roban, les quitan la paz,
porque no les ayudan a que tengan una seguridad ni social ni económica,
sólo ven por sus intereses y vosotros sufrís,..
Y en algunos países, hasta el extremo
y no podéis hacer nada,
porque Satanás protege a los que están con él.
Los alimentos, como os he dicho, están alterados para causaros enfermedades.
Todo, todo lo que vosotros utilizáis a diario,
está afectado para que vayáis muriendo poco a poco.
No os unís a orar, como os lo he pedido.
Satanás, os he dicho, que es fuerte,
PERO LO PODÉIS VENCER
CON VUESTRA DONACIÓN
LO PODÉIS VENCER ESTANDO CONMIGO
Yo Soy vuestro Dios y él no tiene ningún poder sobre Mí,
ni sobre Mi Hija, la Siempre Virgen María;
pero, como os dije, habéis echado en saco roto todo lo que Yo os había dado,
para que estos tiempos de Purificación,
no fueran tan desastrosos como lo van a ser.
Habéis perdido el tiempo,
pudisteis haber AMINORADO los acontecimientos
Y de hecho podríais hacerlo todavía, si os unierais en Oración,
Sobre todo, la del Santo Rosario;
Si hicierais sacrificios y penitencias, ayunos…
Pero ya no queréis poner de vuestra parte,
ya no queréis vivir para Mí,
ya solo queréis hacer vuestra voluntad.
Y esto es lo que os habéis ganado:
SUFRIMIENTO EXTREMO
Ya no vivís en paz, salís a la calle con temor,
sufrís por el bien de vuestros hijos,
sufrís porque no tenéis el suficiente dinero para cubrir vuestras obligaciones de estado.
Todo es sufrimiento a vuestro alrededor y en vuestra vida…
Os lo habéis ganado, porque contáis, solamente, con vuestras pobres fuerzas,
porque no queréis contar conmigo, vuestro Dios.
Me habéis hecho a un lado de vuestra vida,
ME HABÉIS DESPRECIADO
NO queréis Mis Consejos, Mi Guía Sapientísima,
Mi Protección contra los Ataques de Satanás.
Queréis hacer lo vuestro y como no Me llamáis,
Me hago a un lado y os dejo caminar solos,
porque eso es lo que queréis.
No dais ni siquiera dos, tres pasos, cuando caéis de bruces.
¿Cuándo entenderéis que si no Me llamáis, para que caminemos juntos,
caeréis continuamente?
Sois débiles, no tenéis la Sabiduría suficiente para poder moveros en el Mundo
Y sobre todo, en estos tiempos de la Gran Tribulación.
Contáis con vuestras propias fuerzas, débiles en extremo.
Y creéis que los bienes materiales os van a ayudar a salir adelante
y estáis viendo que, éstos, tampoco os están ayudando,
porque se os están acabando
y eso ya os lo había dicho hace años,
que os iba a ir quitando todo aquello en lo cual confiabais,
hablando de lo material, de lo de este mundo.
Mis pequeños, los dolores que tendréis, se irán acrecentando;
los desastres mundiales, cada vez, serán más fuertes,
no sabréis a dónde ir, qué hacer, cómo protegeros.
Hambre, muchas almas sin hogar, pleitos sociales,
arrebatándoos unos a otros los alimentos;
DESASTRES NATURALES EN EXTREMO,
Y MILES DE ALMAS EN SEGUNDOS…
Las estaciones alteradas,
caminaréis deambulando de un lado a otro, sin confiar en nadie.
Buscaréis el auxilio espiritual de parte de la Iglesia
y difícilmente, la encontraréis;
porque ellos también, sufriendo estarán.
Y como seres humanos, dejando a un lado su ministerio,
la Paz perderán y no os ayudarán tampoco,
porque no sabrán qué hacer.
Ciertamente, ayudaré a aquellos que en Mí confíen,
que Me busquen, que OREN, que luchen por el bien de sus hermanos.
Aún a pesar de la maldad que haya en esos momentos,
también, habrá bondad de parte de algunos de hermanos vuestros.
Difícilmente encontraréis la Paz, porque todo será un caos.
Como esta Purificación no ha habido antes algo parecido,
ni lo habrá después,
será dolorosa en extremo,
como dolorosa fue la Pasión de Mi Hijo.
Pocos, pocos Lo acompañaban, al menos, en su corazón,
sufriendo con Él,
pero, la gran mayoría, se burlaban y no Lo apoyaban,
a pesar de que habían recibido Gracias en extremo de parte de Él.
Él sufrió la Pasión, se dio por vosotros.
Y AHORA VOSOTROS SUFRIRÉIS
Y los que estén Conmigo,
verán la resurrección de los Nuevos Tiempos.
Me duele tanto, Mis pequeños, deciros todo esto, porque os amo,
pero veo que en una gran cantidad de vosotros,
Yo ya no Vivo en vuestro corazón.
No Me amáis, no Me buscáis, ni siquiera Oráis,
Yo Soy un Ser extraño para muchos de vosotros.
EL DOLOR QUE TUVO MI HIJO PARA SALVAROS
Lo recordaréis en el momento en que estaréis sufriendo,
los que estéis Conmigo, aceptadlo y eso os ganará vuestra salvación eterna.
Mucho se os advirtió,
os quise evitar todos estos dolores que vendrán,
Me duele, Me duele mucho, Mis pequeños,
pero esta generación, ha sido una generación nefasta
y podría decir satánica,
porque le hicisteis más caso al Enemigo que a Mí, vuestro Dios
y ahora estáis viendo hacia donde os está llevando él.
Yo os quería evitar estos dolores y os quería dar una salvación eterna
y ahora sufriréis lo que el Enemigo, a quien tanto mantuvisteis en vuestra vida,
os tiene preparado con tanto dolor.
Cometisteis un gran error al seguirle,
al aceptarlo en vuestra vida,
al acobijarlo pecando contra Mí.
Mi Misericordia se derramó abundantemente sobre cada uno de vosotros,
pero ni aún así respondías.
Y ahora, es Mi Justicia la que caerá sobre todos vosotros,
para algunos más, para otros menos.
ALGUNOS SERÉIS ELIMINADOS
Y otros purificados que seréis,
LOS QUE QUEDÉIS
los que os ganaréis los Nuevos Cielos y Nuevas Tierras.
TODO LO QUE SUCEDA ACEPTADLO CON ALEGRÍA
PARA DISMINUIROS
EN LA PERSONAL A CADA UNO
DE VUESTRA PROPIA PURIFICACIÓN
Entended que todo esto os lo habéis ganado por vuestros errores,
como los de Sodoma y Gomorra se ganaron su Destrucción.
Han sido los pecados del hombre los que os han atraído vuestros dolores.
¿Creíais que podías burlaros de Mí?
Ciertamente, Soy Paciente, esperando vuestra conversión;
pero abusasteis demasiado y ahora viene el mal que acumulasteis
Orad, Mis pequeños,
para que vuestros hermanos abran su corazón,
y así como hermanos, unidos a Mí, vuestro Padre,
podamos vivir como Familia, como una verdadera Familia.
Os Amo, Mis pequeños,
Amo vuestras intenciones,
Amo vuestro corazón y os Bendigo con Mi Amor.