P La Gran Fiesta
Habla Dios Padre.
Hijitos Míos, desde hace tiempo se os ha venido anunciado un cisma, pero
UN CISMA, NO SOLAMENTE DE LA IGLESIA,
UN CISMA DE LA HUMANIDAD.
Estáis viendo cómo se van separando las personas,
las que creen, las que no creen,
las que atacan a unos, atacan a otros,
los que llevan una vida más cerca de Mí y otros que se aferran a la vida material.
Se os ha venido anunciando alrededor del Mundo,
y ya os lo había Yo anunciado,
QUE LOS ACONTECIMIENTOS
DE LA PUIRIFICACIÓN
IBAN A SER CADA VEZ PEORES
SI NO CAMBIÁBIAIS
Vuestra forma de pensar, de amar, de vivir en Mí, vuestro Dios.
Pero parece que no hay gran respuesta a ello.
Y estáis viendo, entonces, cómo las almas van directas al desfiladero.
Las que viven para el Mundo, se aferran a las cosas del Mundo,
ven que están perdiendo sus propiedades,
lo material, que les ha costado, quizá trabajo en obtener,
SE AFERRAN A LO QUE PRONTO PERDERÁN
Y esto lo permito, Mis pequeños, para que volteen hacia arriba, hacia Mí,
PIDIENDO PERDÓN,
PIDIENDO MISERICORDIA,
PIDIENDO UNA OPORTUNIDAD MÁS
PARA EL ARREPENTIMIENTO.
Ciertamente, os envío, también, Mi Santo Espíritu,
para que en estos momentos de debilidad, y lo digo así, de debilidad humana,
los lleve a que entren a su corazón,
QUE SE DEN CUENTA DE LA FORMA DE VIDA,
TAN DESPERDICIADA, EN LO ESPIRITUAL,
COMO LA HAN VIVIDO.
Se les da esta oportunidad a toda la Humanidad,
para que, estando Conmigo, puedan salvar su alma.
Entended, Mis pequeños, y se os ha repetido tantas veces,
que este NO ES vuestro Hogar Eterno;
ESTE NO ES VUESTRO HOGAR
AL CUAL VINISTEIS A TRABAJAR
PARA CAMBIAR TODO LO CREADO,
QUE SATANÁS AFECTÓ
Y que vosotros debierais haber levantado nuevamente, hacia lo Bueno,
hacia lo Bendito que Yo creé para vosotros.
Vuestra vida debiera haber sido de ejemplo,
debiera haber sido de rechazo total a la maldad de Satanás, a sus mentiras,
a todo aquello a donde él lleva, para que os olvidéis de vuestra espiritualidad.
Así que no toméis como una desgracia el perder vuestros bienes,
vosotros, los que confías en ellos plenamente.
LOS QUE ESTÁIS CONMIGO,
SABÉIS PARA QUÉ SON ESOS BIENES
Y NO OS ENFRASCÁIS EN ESE DILEMA,
De que si los perderéis o no los perderéis;
ya sabéis vosotros, los que Me habéis seguido, los que habéis aprendido la lección,
que se os han dado, para caminar en este mundo, para cuidar vuestro cuerpo y vuestra alma,
pero buscar más lo espiritual de todo lo que veis a vuestro alrededor, y sobre todo, de vuestra propia alma.
Cosa muy diferente a aquellos que han vivido para llenarse de los bienes de este mundo.
Lloráis por vuestros bienes materiales;
¿Por qué no lloráis por el estado de vuestra alma?
Pasaréis de un, supuesto estado de placer, de comodidad,
A UN ESTADO INFINITO DE DOLOR,
Porque os habéis aferrado a ellos, a estos gozos, goces materiales,
que en la mayoría de las veces os han llevado al error, a la soberbia, que os aparta de Mí.
LES HABÉIS DADO UN VALOR QUE NO TIENEN
Y HABÉIS DESPRECIADO EL MAYOR VALOR
QUE DEBISTEIS HABER CULTIVADO,
QUE ES EL AMOR,
la Caridad entre vuestros hermanos, la Humildad, la Sencillez, la Bondad entre todos vosotros.
¡A eso vinisteis!,
¡Esa era vuestra tarea!
¡Os la enseñó Mi Hijo Jesucristo!
Pero también despreciasteis Su Ejemplo, Su Vida,
todo lo que Él hizo por vosotros para abriros las Puertas del Reino de los Cielos.
Y todavía, estáis, a estas alturas, en donde estáis viendo cómo poco a poco,
vuestros hermanos van muriendo
, cómo poco a poco, vuestros bienes van desapareciendo.
Veis cómo vuestra salud se va perdiendo y queréis, todavía, aferraros a lo que os ha llevado hacia el Mal.
No habéis entendido la lección, Mis pequeños,
no os ha servido de nada, el haber vivido mucho tiempo, mucho tiempo o un tiempo regular en la Tierra,
para que crecierais espiritualmente, al hacer Mi Voluntad, siguiendo los Pasos de Mi Hijo: Su Vida, Su Ejemplo,
compartiendo el Amor que os compartió,
tomándoLo como un gran Tesoro y dándoLo vosotros a vuestros hermanos.
Estáis viendo cómo todo se va derrumbando y
¿Cuántos de vosotros os estáis arrodillando, pidiendo Misericordia por vosotros y por vuestros hermanos?
ESTÁIS CEGADOS
A TODO LO BUENO QUE DEBISTEIS HABER SEGUIDO.
Tuvisteis mucho, pero todo eso os sirvió para que os cegarais todavía más.
¡Tanto que se os ha repetido!
Y lo tenéis en la Sagradas Escrituras,
como aquellos que se llenaron de bienes, difícilmente entraron en el Reino de los Cielos.
Os di Parábolas, para que entendierais eso,
pero no las quisisteis escuchar, y menos, vivir.
SERÁN PROTEGIDOS
TODOS AQUELLOS QUE TOMARON EN SERIO Y CON AMOR,
MIS ENSEÑANZAS, DIFUNDIDAS A TRAVÉS DE MI HIJO.
Todos aquellos que compartieron lo mucho o poco que tenían, para darlo a sus hermanos,
el Cielo se os abrirá de par en par, a las almas bondadosas,
a las almas humildes, sencillas, a las almas sacrificadas, para llevar el Bien que os enseñó Mi Hijo a Sus hermanos.
Ya no tenéis tiempo, lo vuelvo a repetir.
HABRÁ MUCHAS,
MUCHAS MUERTES ESTE AÑO,
MUCHA MALDAD
HA CAUSADO SATANÁS ENTRE LOS HOMBRES
Y ¿Cuántos de ellos, se salvarán?
¿Cuántas almas regresarán a Mí y podrán vivir Conmigo eternamente?
Aún en los últimos momentos de su existencia, se seguirán aferrando
a los pocos o muchos bienes que tengan,
cuando el Bien Mayor, que debierais tener en vuestro corazón,
se debe alegrar, al saber que son sus últimos momentos de la Tierra,
y que llegará ese momento tan deseado, de éstas almas escogidas,
porque saben que el gran Tesoro, ya es de éstas almas, porque entrarán Conmigo a gozar eternamente.
Orad, pues, Mis pequeños, por esas almas que están cegadas por Satanás y las ha llevado al error,
que comprendan que mucho se les ha dado,
muchas oportunidades para escoger el buen camino y no lo han hecho.
DenMe almas, pequeños, necesito almas para su salvación,
Mi Hijo os lo pidió, y os lo sigo pidiendo a vosotros, que estáis siguiendo los Pasos de Mi Hijo.
DadMe almas, Mis pequeños.
Habla Nuestro Señor Jesucristo.
Visión: Veo a Dios Nuestro Señor, sentado en la cabecera de una mesa larga, larga…
Y nos dice:
Hijitos Míos, todos vosotros estáis invitados a venir a la mesa,
o sea, al Reino de los Cielos. ES LA GRAN FIESTA es la gran fiesta para las almas.
Todas las almas en el Cielo han pasado la prueba, se purificaron, la gran mayoría de ellas, en el Purgatorio.
Y llegaron a la fiesta, la Gran Fiesta que Yo le doy a las almas, después de que ya, purificadas están,
y regresan al Reino de los Cielos a compartir las viandas del Reino de los Cielos.
Mis pequeños, todos vosotros estáis invitados,
pero, aquellos que no están vestidos correctamente, o sea, que su alma no está en estado de Gracia,
NO PUEDEN ENTRAR DIRECTAMENTE AL CIELO
Y tienen que purificarse, o, si su alma no está de acuerdo a lo que Yo os he pedido, o sea,
LIBRES DE PECADOS GRAVES
NO entrarán al Reino de los Cielos,
PORQUE EL PECADO GRAVE
NO SE PUEDE PURIFICAR EN EL PURGATORIO
Y muchos, muchos de vosotros, estáis así, viviendo en pecado grave.
y si murierais en estos momentos, no habría cabida para vosotros en vuestro Hogar Eterno,
porque éste es el Hogar de todas las almas en estado de Gracia,
que han caído, ciertamente, pero se han levantado,
y siempre vivieron buscando la Gracia, buscándoMe a Mí, vuestro Dios, para estar Conmigo.
Entended Mis pequeños, que ninguno de vosotros alcanza la perfección,
como para tener su alma perfectamente limpia, cuando es llamada por Mí.
Pero Yo siempre aprovecho EL MEJOR MOMENTO
EN QUE YA HAYÁIS CUMPLIDO CON VUESTRA MISIÓN
Y que vuestra alma está en el mejor momento para que no se pueda perder
Y ES CUANDO YO LA LLAMO
para que venga a Mí, nuevamente, y se pueda salvar
y gozar después de su purificación en el Purgatorio, en el Reino de los Cielos.
Muchos pensáis en que Yo estoy esperando el mal momento de vuestra alma, para que regresen a Mí y los condene.
Y esa es una gran mentira, Mis pequeños.
Yo Soy vuestro Dios, Yo he bajado a la Tierra para redimiros, os conozco perfectamente a todos vosotros
y sé cuándo vuestra alma está en el mejor momento para regresar a Mí.
En el Amor no podéis tener otro pensamiento más que salvación, vida Conmigo,
vida en la Gracia, vida eterna.
El Cielo es para todos aquellos que lucharon por mantenerse en estado de Gracia y cumpliendo con lo que Yo os pedí.
Nuevamente os repito: Yo no busco la perdición de las almas,
al contrario, continuamente estoy esperando que estéis vosotros en el mejor momento para regresar a Mí.
Buscad siempre el estado de Gracia, la vida de la oración, que Nos va a unir perfectamente,
y buscad mucho a Mi Santo Espíritu que vive en vosotros,
para que os guíe hacia la perfección a la que estáis llamados todos vosotros.
Os repito esto continuamente, porque sois como niños, se os olvida lo que Yo quiero de vosotros,
estáis muy distraídos con las cosas del Mundo y os debéis ya centrar en esta realidad, que,
EN CUALQUIER MOMENTO
OS VA A LLEGAR A TODOS,
ESPECIALMENTE,
PORQUE ESTOS SON MOMENTOS DE PURIFICACIÓN,
NO SOLAMENTE MUNDIAL,
SINO UNIVERSAL.
Buscad, pues, Mis pequeños, que cuando Yo os llame, estéis preparados,
para que podáis salvaros y podáis estar Conmigo eternamente.
Visión: Veo a mucha gente arrodillada, mucha, mucha gente arrodillada y todas adorando,
suspendida en el aire, a una Hostia grandota, es una Hostia grande y todos arrodillados ante ella.
Y dice Dios, Nuestro Señor:
Estoy Yo aquí, ante vosotros, Mi Amor se ha quedado entre vosotros, Mi Presencia Divina está ante vosotros.
Gracias, Mis pequeños, Mi resto fiel,
porque habéis venido de todas partes del Mundo a estar Conmigo, aquí,
reconociendo y amando Mi Presencia Divina entre vosotros.
Aquí estoy, Mis pequeños, para ayudaros a crecer más.
Vosotros Me escogisteis a Mí, en lugar de todos los placeres o cualquier otro vicio o cualquier otra tentación de Satanás.
Me escogisteis a Mí, no dejasteis que Satanás os llevara por otros senderos que no os iban a traer nada bueno.
Por eso, Mis Gracias, Mis Bendiciones y, sobre todo, Mi Amor caerán sobre vosotros y os transformarán.
SERÉIS ALMAS NUEVAS,
SERÉIS MI RESTO FIEL
RENOVADO PARA PODER VIVIR
EN LOS PRÓXIMOS TIEMPOS NUEVOS, QUE OS DARÉ,
LOS CUALES GOZARÉIS GRANDEMENTE.
Cuando un alma está Conmigo, que Me ha escogido, que Me lleva en su corazón, Yo habito plenamente en esa alma
y, si normalmente amo a todas las almas, aun a aquellas que Me desprecian y que aun así, las busco
para que se conviertan y regresen a Mí,
imaginad lo que haré con vosotras, almas buenas, almas que habéis buscado la santidad de vida,
almas que estáis buscando una vida en Mí, vuestro Dios.
Los regalos que os daré por haberos mantenido en Mí, por haber buscado vuestra perfección espiritual,
serán regalos inmensos, inconmensurables, agradables a cada uno de vosotros.
Todos sois diferentes, tenéis diferentes gustos, diferentes cualidades, pero unidos todos en una cosa:
en el amor a Mí, vuestro Dios.
Yo respeto vuestra manera de pensar y respeto la creación de Mi Padre sobre vosotros,
pero por el hecho de haberMe seguido, beatificados estaréis y lo que haréis, lo haréis con más perfección,
porque sois Míos, porque Yo habito y habitaré en vosotros.
SERÉIS ESTE NUEVO PUEBLO RENOVADO,
PERFECCIONADO,
AGRADABLE A MIS OJOS
PARA QUE YO OS PRESENTE A MI PADRE
COMO EL REBAÑO FIEL A NUESTRO AMOR.
Gozad ya desde ahora, Mis pequeños, el regalo que se os dará cuando, acabando las pruebas que se vienen,
gozaréis lo que se os dará.
Benditos seáis y seréis, benditos vosotros que os mantuvisteis fieles a Mi Amor,
a los Mandamientos que Mi Padre os dio, a las Verdades que se os han dado.
Benditos seréis, porque iniciaréis una nueva generación, con un corazón inflamado de Amor a Nuestra Santísima Trinidad,
PORQUE SERÉIS RENOVADOS
CON CAPACIDADES INMENSAS,
LAS CUALES, GOZARÉIS AL OBTENERLAS
y al darlas a vuestros hermanos.
Benditos y agradecidos estaréis, porque la descendencia que tendréis, será bendecida también,
porque enseñaréis a vuestros hijos las Verdades y el Amor
Y sobre todo, la cercanía que les daréis a vuestros hijos con Nosotros,
al hablarles a vuestros hijos de Nuestro Amor y de Nuestros cuidados hacia vosotros
porque actuasteis en obediencia, en amor, en Sabiduría.
LA NUEVA GENERACIÓN,
POR MUCHO TIEMPO, GOZARÁ DE LO QUE OS DAREMOS
POR HABER PERMANECIDO FIELES
A LO QUE SE OS DIO EN UN PRINCIPIO A VUESTROS PRIMEROS PADRES.
Gracias, Mis pequeños, por estar Conmigo, vuestro Dios.
Gracias. Os amo, Mis pequeños,