El Don de la Vida
Habla Dios Padre
Hijitos Míos, os he dado a Mi Hijo para que fuera vuestra salvación.
Manifestación:
Veo a Nuestro Señor, crucificado;
a Su izquierda está Dios Padre, un poquito más arriba que Él, pero un poquito más atrás.
Y nos lo está mostrando:
“Este es El Cordero de Dios que os he dado”
Es Mi Hijo, es el Cordero que se ha dado, que os he dado;
porque Él aceptó en obediencia lo que Yo Le pedí para vuestra salvación.
Hijitos Míos, mucho habéis desperdiciado a través de vuestra existencia,
Mi Amor es vuestro, os lo envié a través de Mi Hijo, Sus Enseñanzas, Su Sabiduría, todo era vuestro.
Y vosotros no las tomasteis, no quisisteis poneros del lado Divino.
¿Acaso Satanás os ha dado lo que Yo os he dado, empezando por el Don de la vida?
Os he dado todo, Mis pequeños, todo lo que tenéis bueno, no viene de Satanás.
Todos los Dones que tenéis, capacidades intelectuales, físicas, espirituales,
VIENEN DE MÍ
NO VIENEN DE SATANÁS
¿Y así Me pagáis?
Aquí Lo tenéis crucificado y se tuvo que dar así, porque vosotros no quisisteis defender lo Mío…
Y que era vuestro.
¡Qué tontos sois, Mis pequeños, qué tontos sois!
OS FALTÓ FE
Quisisteis nada más aceptar aquello que podíais tocar, lo que podíais ver
y no quisisteis aceptar lo que Yo os daba en vuestra mente y en vuestro corazón.
Si hubierais seguido lo que Mi Santo Espíritu os pedía y que Lo tenéis en vuestro corazón para escucharLo,
otra vida hubierais tenido
Y no tendrías que estar pasando todo lo que está sucediendo…
Y LO QUE VENDRÁ.

7. Entonces se entabló una batalla en el cielo: Miguel y sus Ángeles combatieron con el Dragón. También el Dragón y sus Ángeles combatieron,
8. pero no prevalecieron y no hubo ya en el cielo lugar para ellos.
9. Y fue arrojado el gran Dragón, la Serpiente antigua, el llamado Diablo y Satanás, el seductor del mundo entero; fue arrojado a la tierra y sus Ángeles fueron arrojados con él. Apoc. 12
Aquellos que entendieron, aquellos que Me siguieron
y por haberMe seguido han sido socialmente eliminados, blasfemados, apartados;
aquellos, los que también,
HAN TENIDO UN MARTIRIO INCRUENTO,
PERO CIERTAMENTE DOLOROSO,
SERÁN LOS ESCOGIDOS
PARA LOS NUEVOS TIEMPOS.
Mucho, mucho traté de hacer por vosotros, enviándoos a través de Santos, videntes, profetas…
Es más, a Mi Misma Hija, La Siempre Virgen María,
para que moviera corazones, para que volvierais a Mí.
Y no quisisteis.
¡Son dos mil años de Enseñanzas!
Pero os mantuvisteis en la maldad, en el error, no quisisteis vuestra santificación,
que si así lo hubierais tomado;
HUBIERAIS VENCIDO A SATANÁS FÁCILMENTE
Y QUE AÚN PODRÍAIS
Pero ya, es demasiado tarde para muchísimos de vosotros que
tendréis que padecer por todo ello.
Algunos padeceréis solamente un tiempo en el Purgatorio.
Y MUCHOS MÁS,
TENDRÉIS QUE PADECER ETERNAMENTE
EN EL INFIERNO.
Todo esto os lo digo, y no Me alegro de ello, Mis pequeños.
Podría deciros que lloro por esto que os va a suceder,
porque vuestra alma es parte de Mí y Me duele perder esa parte de Mí,
que se va a condenar o que va a sufrir fuertemente en el Purgatorio.
Porque no respondieron con el amor con que Yo los Creé
y sobre todo, con el Amor que Mi Hijo os llevó a la Tierra,
para que vosotros entendierais Quién Soy Yo y cómo Soy Yo,
Yo que Soy Puro Amor.
Ahora os pido, oréis muchísimo, Mis pequeños,
orad muchísimo, porque lo necesitaréis.
Sacrificaos, implorad de rodillas perdón por vuestras faltas,
para aminorar los dolores que padeceréis.
YA ESTO NO SE DETIENE,
TENDRÉIS QUE PADECER.
Algunos, para una purificación que os llevará directamente,
a las Nuevas Tierras que os habéis merecido, porque no os separasteis de Mí.
Os vuelvo a repetir, y con mucho dolor:
Pudisteis haber evitado todos los dolores que se vendrán
si os hubierais mantenido Conmigo, vuestro Dios.
Soy vuestro Padre Dios, Soy Todopoderoso, Soy el Único y Verdadero Dios.
Yo he creado todo cuanto existe y os conozco a cada uno de vosotros.
Y OS CONOZCO PERFECTAMENTE
¿De dónde sale que vosotros digáis que Yo no os estoy cuidando,
que os olvido, que Soy un Dios lejano, que no conozco vuestra vida?
Mis pequeños, OS FALTA MUCHA FE,
MUCHA CONFIANZA EN MÍ VUESTRO DIOS

Confiar en Dios es tener la CERTEZA, de que Él tiene todo bajo control y que aunque la situación parezca imposible, ¡ÉL ES EL DIOS DE LOS IMPOSIBLES!… Aunque ruja un huracán a nuestro alrededor…
Yo Soy el Amor, el Verdadero Amor que existe.
Y fuisteis Creados por el Amor.
El Don de la vida os la he dado para que vivierais Mi Amor y también, sobre lo creado.
Ciertamente, en el Cielo, vivís Mi Amor y lo gozáis.
Yo os di el Don de la vida para venir a la Tierra a servirMe
y ayudar a vuestros hermanos a alcanzar el Amor;
porque muchos lo han perdido por falta de Fe y por los ataques de Satanás, eso es Amor.
Toda vuestra vida está envuelta en Amor.
¿De dónde sacáis, Mis pequeños, que Yo sea maldad y que busco vuestro mal;
cuando todo lo que tenéis, en vosotros y lo que dais, si estáis Conmigo, es Amor?
Cuando regresáis al Reino de los Cielos, después de haber cumplido vuestra misión en la Tierra,
os dais cuenta de lo equivocados que estabais.
Manifestación:
Veo el Cielo abierto y veo muchas almas, acá, con nosotros.
Vuestros hermanos en el Cielo, os acompañan, os cuidan, ellos ya pasaron por la prueba,
pero más que prueba, ya gozaron, también, la vida sobre la Tierra.
Ciertamente, el vivir para Mí, en la Tierra, lleva una dificultad,
porque no es lo mismo cuando estáis aquí, Conmigo, donde no tenéis ningún ataque de Satanás,
que el vivir en la Tierra y que tendréis continuamente los ataques de Satanás.
Ylo más importante de todo esto, es que os mantengáis Conmigo,
a pesar de todas las pruebas a donde os lleva Satanás,
para que caigáis y perdáis Mi Amor.
Esto es muy importante, Mis pequeños, que lo entendáis,
porque satanás perdió el Amor y no soporta el Amor.
Y especialmente, cuando vosotros al tenerlo en vuestro corazón,
lo compartís con vuestros hermanos.
Os he dicho que mientras más deis amor, más seréis atacados.
Vosotros mismos os podéis perfectamente dar cuenta,
que son dos entidades totalmente separadas el Bien y el Mal.
¿Cómo una persona puede estar produciendo un bien y buscando el bien y por esa causa,
ser tentados por Satanás y caéis en el mal?
Y esto se debe, Mis pequeños, al libre albedrío.
Yo respeto vuestro libre albedrío.
Los mismos Ángeles tuvieron que pasar por esa prueba y tenían, también, el libre albedrío.
Yo no presiono a las almas, Yo no las ato, como Satanás lo hace,
que os quita la libertad, os presiona para vivir en la maldad.
Y Yo, que aun siendo vuestro Creador, el Dios Amor,
no os obligo a que viváis en el Bien, os aconsejo, os guío, si Me dejáis hacerlo.
Si Me dejáis a Mí, que habite en vosotros, os lo agradezco.
Y todo eso va produciendo una fortaleza inmensa en vosotros,
para poder vencer el mal que os rodea.
EL MAL EXISTE
PERO NO VIENE DE MÍ
El Bien es lo que viene de Mí y lo trato de transmitir a vuestros hermanos, a través de vosotros
que sois Mis instrumentos en la Tierra.
Siendo Dios, Yo podría imponer el Bien, pero
¿En dónde quedaría realmente, la prueba que vosotros debéis pasar
para ganar el Cielo o perderlo eternamente?
El Bien está al alcance de todos vosotros, pero vosotros mismos decidís si lo tomáis o no.
El mal, también está al alcance de vuestra mano…
Y también, vosotros decidís si lo tomáis o no.
Eso es el libre albedrío.
Por Mi parte os repito, no hay presión, pero sí hay Consejo.
Yo cuido de las almas, porque fuisteis Creadas por Mí para producir un bien.
Y luego regresar al Reino de los Cielos, como premio de ese Amor de ese bien que produjisteis y con él,
salvasteis muchas almas.
El Mal siempre estará alrededor vuestro.
Mucho mal es el que estáis viviendo ahora y ciertamente,
como ya ha llegado a límites, en los que vosotros, fácilmente, os puede vencer Satanás,
por eso, por cuidar las almas que han tratado a lo largo de su existencia, a permanecer Conmigo,
viene esta Purificación.
Porque ya no puedo permitir que las pruebas que se han de venir,
que son, muy por encima de vuestras capacidades, para vencer al Mal,
LO TENGO QUE DETENER
Si no, podría Yo perder a estas almas que Me han buscado, que Me aman,
que realmente quieren estar Conmigo eternamente y hacen lo posible de que su misión sea muy bella,
muy grande para servirMe y agradarMe a Mí, vuestro Dios.
Hay mucho mal a vuestro alrededor, Mis pequeños, mucho mal.
Y no deseo que las almas buenas sufran un mal innecesario,
porque ya, por los méritos que habéis obtenido, son suficientes
para que podáis pasar al Premio que os he escogido, de vivir en una nueva generación.
Y seréis la primera generación de las Nuevas Tierras,
que veréis Nuevos Cielos y que gozaréis inmensamente,
como un regalo inmenso que Yo, vuestro Dios os quiero dar.
Ciertamente, se vienen pruebas fortísimas, manipuladas por Satanás,
pero NO TEMÁIS los que están Conmigo,
No dejéis que lo que se anuncia a vuestro alrededor, os quite la Paz.
Estando Conmigo, sabéis que os puedo librar fácilmente,
de lo que sea doloroso a vuestro ser.
Ciertamente, os he dicho que seréis purificados también, los escogidos,
para que podáis entrar a las Nuevas Tierras con alegría de saber que estáis limpios,
como si se os hubiera dado la Bendición después de una confesión.
Y así será, Mis pequeños, quedaréis limpios,
para poder gozar del gran Premio que os tengo preparado.
Orad, pues, por el mismo Amor que tenéis en vuestro corazón, que es Mi Amor,
orad por aquellos que no entienden todo esto,
que se han dejado llevar por las mentiras de Satanás.
Orad por aquellos que han caído fuertemente en vicios, que ciertamente, otras fuerzas humanas los llevaron a ellos.
Buscad Mi Misericordia para que llegue a estas almas afectadas de tanto mal por Satanás.
Todavía podéis hacer mucho por estas almas que han venido sufriendo, por mucho tiempo,
al haber caído, sin querer, a veces, en vicios que los han esclavizado por mucho tiempo de su vida.
Llorad junto Conmigo, Mis pequeños, por estas almas,
porque Me duele verlas sufriendo en estos vicios, a donde Satanás las ha llevado
y que ya, hasta podría decirse,
QUE NO SON YA SERES HUMANOS
Por cómo se comportan y viven.
Que vuestro corazón se compadezca de ellas y podáis vosotros,
entregarMe muchas almas que vienen sufriendo, desde hace mucho tiempo,
por estos males a donde Satanás las llevó.
Yo, vuestro Padre y vuestro Dios, os di todo lo que tenéis;
A ALGUNOS LES HE DADO MÁS
PERO PARA QUE PUDIERAN
TAMBIÉN COMPARTIRLO
Y QUE DIERAN EJEMPLO A SUS HERMANOS
De que, lo que tenéis de sobra, lo deis, compartáis, produzcáis amor
y que haya ejemplo de Caridad entre todos vosotros.
Yo no estoy peleado con las riquezas, os las he concedido.
Lo malo de la riqueza,
ES EL USO QUE LE DÉIS A ELLAS
Como os dije, si vosotros las utilizáis para actos de Caridad,
para ayuda de vuestros hermanos necesitados.
Y compartiendo con Sabiduría y con amor, podéis ganar muchas almas para el Cielo.
Pero os repito: si las utilizáis para el mal, buscando los placeres de la carne,
buscando las drogas y todo aquello que pueda llevaros a la perversión en cuerpo y alma,
entonces estáis mal utilizando los bienes que Yo, vuestro Dios os he dado.
Os quiero volver a repetir…
Y que esto entre muy profundamente en vuestra mente y en vuestro corazón:
TODO lo que tenéis es Mío,
Yo os lo he prestado para vuestro bien, NO para que le deis un mal uso a lo que tenéis.
Muchas, muchas almas están necesitadas, hasta de lo más básico.
Otras, exageran en avaricia, teniendo riquezas que están guardadas y que no sirven para ayudar a sus hermanos.
¿De qué os servirá el tener tanto, que cuando lleguéis ante Mí,
os pida cuentas de esas riquezas que son Mías, de CÓMO las utilizasteis,

El Día del Juicio ante el Tribunal de Cristo, seremos recompensados. O nuestras obras serán quemadas como la paja. Tal vez recibamos alguna recompensa, quizás ninguna.
qué hicisteis con ellas, a cuántas almas ayudasteis?
¡Podéis hacer tanto bien con ellas!
Pero el hombre las utiliza en soberbia, en vanidad…
Causando también, desamores y tiranizando a los pueblos.
Estáis viendo en estos tiempos, cómo son unos cuantos los que tienen muchísimo dinero.
Y lo utilizan solamente para ensoberbecerse,
para anunciarse quiénes son los más grandes millonarios de este tiempo.
¿Qué harán ellos, cuando se presenten ante Mí?
No podrán ellos ensoberbecerse en Mi Presencia, puesto que Yo tengo eso y mucho más…
Puesto que todo lo que tenéis y existe en el Universo es Mío.
¡Insensatos!
¡Cómo habéis malgastado los bienes que no os pertenecen!
Y así, también, con los bienes espirituales.
A todos os he dado algún tipo de bien espiritual, con el cual o con los cuales,
podéis también, traerMe muchas almas a Mí, a vuestro Dios, a la salvación.
¿Qué haréis cuando os pregunte:
¿Qué hicisteis con esos bienes, a cuántas almas ayudasteis a alcanzar Mi Gracia, Mi Perdón, Mi Gloria?
Estáis dormidos, Mis pequeños.
Estáis siendo engañados por Satanás.
¿Acaso no os dais cuenta que él os separa en todo momento, de estar Conmigo?
Os hace creer que lo que tenéis es para vuestro bien, para que lo gocéis.
Y en ningún momento os dice que tendréis que dar cuentas de todo eso que tenéis.
Os apropiáis de algo que no os pertenece.
¿Por qué actuáis de esa forma tan avariciosa, que os lleva a la perdición?
Tened cuidado, Mis pequeños, pronto estaréis ante Mi Presencia.
¿Qué habréis hecho, para que Yo os pueda abrir las Puertas del Reino u os las cierre,
PORQUE NO LAS MERECÉIS?
Os amo, Mis pequeños, y os bendigo con Mi Amor.
645 Las Tinieblas contra la Luz
IMITAR A JESÚS ES EL EJEMPLO QUE SALVA
483a Polémica de los apóstoles sobre el odio de los judíos.
Sonriendo ante este pensamiento suyo, recogido dentro de sí como si monologara,
con su mirada velada por sus párpados bajados,
Juan continúa:
– Es la lucha de las Tinieblas contra la Luz.
La vemos todos los días en los amaneceres y en los crepúsculos.
Las dos fuerzas que se contraponen, que adquieren recíprocamente el dominio sobre la Tierra.
Pero las tinieblas siempre pierden, porque nunca son absolutas.
Siempre emana un poco de luz, aun en la noche más privada de astros.
Parece como si el aire por sí mismo la creara en los infinitos espacios del firmamento.
Y la diseminara, si bien limitadísima;
para convencer a los hombres de que los astros no están apagados.
Y yo digo que igualmente, en estas especiales tinieblas del Mal contra la Luz que es Jesús,
siempre, a pesar de todos los esfuerzos de las Tinieblas,
la Luz estará ahí para confortar a quien en Ella cree.
Santiago de Alfeo recoge su pensamiento:
-Los Libros (Génesis 1, 2-3. Números 11, 26-29; 22, 20-35; 23, 4-30; 24; 1 Reyes 13, 1-5; 2 Reyes 1, 15-16; Isaías 11-12)
Llaman al Cristo “Estrella de la mañana”.
Él, por tanto, también conocerá una noche…
Y ¡Oh, espanto mío!
También nosotros la conoceremos;
conoceremos una noche, un tiempo en que no parecerá fuerte la Luz…
sino victoriosas las Tinieblas.
Pero, dado que Él es llamado Estrella de la mañana,
excluyendo un límite en el tiempo;
yo digo que tras la momentánea noche Él será Luz matutina, pura, fresca, virginal,
renovadora del mundo, semejante a la que siguió al Caos en el día primero.
¡Oh!, sí.
El mundo será creado de nuevo en su Luz.
Tadeo agrega:
– Y la Maldición…
Caerá sobre los réprobos que hayan querido alzar las manos contra la Luz,
repitiendo los errores ya cometidos, desde Lucifer hasta los profanadores del Pueblo santo.
Yeohveh deja libre al hombre en sus acciones.
Pero, por amor del propio hombre, no permitirá que el Infierno prevalezca.
Judas exclama:
– ¡Oh!
¡Menos mal que después de tanto sopor de espíritu,
por el que todos parecíamos como obtusos y entorpecidos por vejez precoz;
la sabiduría vuelve a florecer en nuestros labios!
¡Ya no parecíamos nosotros!
¡Ahora reconozco de nuevo al Zelote, a Juan y a los dos hermanos de otros tiempos!
Pedro objeta:
– No me parece que hubiéramos cambiado tanto…
Que no pareciéramos nosotros.
Tadeo exclama:
– ¡Que si habíamos cambiado!
Todos.
Tú el primero.
Luego Simón;
los otros, incluido yo.
Si había uno que era más o menos el de siempre, era Juan.
Pedro replica:
– ¡Mmm!
Verdaderamente no sé en qué…
Felipe:
– ¿En qué?
Taciturnos, como cansados, indiferentes, pensativos…
Ya no se oía nunca una de estas conversaciones, semejantes a muchas de otros tiempos.
Semejantes a la de ahora, que son tan útiles…
Tadeo dice:
– Para discutir…
Recordando cómo efectivamente, con frecuencia degeneraban en disputas.
Judas rebate:
– No.
Para formarse.
Porque no todos somos como Nathanael;
ni como Simón, ni como vosotros de Alfeo, por nacimiento o sabiduría.
Y quien lo es menos, aprende siempre de quien lo es más.
Tomás dice:
– Verdaderamente…
Yo diría que más que nada es necesario formarse en la justicia.
Y de ésta nos ha dado magníficas lecciones Simón.
Pedro responde:
– ¿Yo?
¡Tú ves mal!
Soy el más necio de todos.
Mateo confirma:
– No.
Tú eres el que más ha cambiado.
En esto tiene razón Judas de Keriot.
Bien poco queda en ti del Simón que conocí yo cuando vine con vosotros.
Y que perdona, siguió siendo igual durante mucho tiempo.
Tomás dice:
– Desde que estoy de nuevo contigo después de la separación para las Encenias,
no has hecho otra cosa que transformarte.
Judas agrega:
– Ahora eres…
Sí, lo digo: eres más paterno.
Y al mismo tiempo, más austero.
Tienes conmiseración de todos tus pobres hermanos, mientras que antes…
Zelote añade:
– Y se ve.
Yo al menos lo veo, que esto te cuesta.
Pero te vences a ti mismo.
Y nunca nos has impuesto tanto respeto como ahora, que hablas poco.
Y regañas poco…
– ¡Pero, amigo mío, tú eres muy bueno viéndome así!..
Yo, aparte de en el amor hacia el Maestro, que me crece continuamente…
No he cambiado en nada de nada.
Varios confirman:
– No.
– Tomás tiene razón.
– Estás muy cambiado.
Encogiéndose de hombros,
Pedro dice:
– ¡Bueno, bueno!
Lo decís vosotros…
Y añade:
Sólo el juicio del Maestro sería seguro.
Pero me guardo bien de pedírselo.
Él conoce mi debilidad y sabe que incluso una alabanza mal dada, podría perjudicar a mi espíritu.
Por tanto, no me alabaría…
Y haría bien en no hacerlo.
Comprendo cada vez mejor su corazón y su sistema.
Y ahí veo toda la justicia.
Jesús, que hasta ese momento ha escuchado y guardado silencio,
interviene diciendo:
– Porque tienes ánimo recto y porque amas cada vez más.
Lo que te hace ver y comprender es tu amor por Mí.
Maestro tuyo.
El verdadero y más grande Maestro que te hace comprender, es el Amor.
Pedro le responde:
– Yo creo que…
Es también el dolor que llevo dentro…
Varios preguntan:
– ¿Dolor?
– ¿Por qué?»
– ¡Bueno, pues por muchas cosas!
Que en el fondo son una sola cosa:
Todo lo que sufre el Maestro…
Y el pensamiento de lo que sufrirá.
No podemos seguir pensando en las musarañas como en los primeros tiempos,
pensando en las nubes como críos que no saben,
ahora que sabemos de qué son capaces los hombres y cómo se debe sufrir para salvarlos.
¡Vamos!
¡Creíamos todo fácil en los primeros tiempos!
¡Creíamos que bastaba presentarse para que los otros vinieran a nuestra parte!
Creíamos que conquistar Israel y el mundo era como…
Echar una red en un fondo abundante en pesca.
¡Pobres de nosotros!
Pienso que si no consigue Él una buena presa, nosotros no conseguiremos ninguna.
¡Pero esto no es nada todavía!
Pienso que ésos son malos y le hacen sufrir…
Y creo que éste es el motivo de nuestro cambio en general…
Zelote confirma:
– Es verdad.
Por mi parte, es verdad.
Varios dicen:
– También en mi caso.
– También yo.
Judas confiesa:
– Yo hace mucho que estaba inquieto por esto…
Y he tratado de disponer de buenas ayudas.
Pero me han traicionado…
Vosotros no me habéis comprendido…
Y yo no os he comprendido a vosotros.
Creía que erais como sois por cansancio del espíritu, por falta de confianza, por desilusión…
Zelote dice:
– Yo nunca he esperado humanas alegrías.
Y por tanto, no estoy desilusionado.
Santiago con su admiración ilimitada por su Jesús,
dice:
– Yo y mi hermano querríamos verlo victorioso;
pero para alegría suya.
Lo hemos seguido por amor de parientes antes que de discípulos.
Lo hemos seguido siempre, desde niños.
Él, el más pequeño en edad de nosotros, hermanos;
pero siempre mucho más grande que nosotros…
Tadeo dice:
– Si tenemos un dolor;
es el que no todos nuestros hermanos:
nosotros, los de la parentela;
lo amamos en espíritu y sólo con el espíritu.
Pero no somos los únicos en Israel que lo aman mal…