UNA ESTIRPE DIVINA 4
El Nacimiento de la Virgen María.
Su virginidad en el eterno Pensamiento del Padre.
Veo a Ana saliendo al huerto – jardín. Va apoyándose en el brazo de una pariente (se ve porque se parecen).
Está muy gruesa y parece cansada, quizás también porque hace bochorno, un bochorno muy parecido al que a mí me hace sentirme abatida.
A pesar de que el huerto sea umbroso, el ambiente es abrasador y agobiante.
Bajo un despiadado cielo, de un azul ligeramente enturbiado por el polvo suspendido en el espacio, el aire es tan denso, que podría cortarse como una masa blanda y caliente.
Debe persistir ya mucho la sequía, pues la tierra, en los lugares en que no está regada, ha quedado literalmente reducida a un polvo finísimo y casi blanco. Un blanco ligeramente tendente a un rosa sucio.
Sin embargo, por estar humedecida, es marrón oscura al pie de los árboles, como también a lo largo de los cortos cuadros donde crecen hileras de hortalizas.
Y en torno a los rosales, a los jazmines o a otras flores de mayor o menor tamaño (que están especialmente a lo largo de todo el frente de una hermosa pérgola que divide en dos al huerto,
hasta donde empiezan las tierras, ya despojadas de sus mieses.
La hierba del prado, que señala el final de la propiedad, está requemada; se ve rala.
Sólo permanece la hierba más verde y tupida en los márgenes del prado, donde hay un seto de espino blanco silvestre, ya todo adornado de los rubíes de los pequeños frutos.
En ese lugar, en busca de pastos y de sombra, hay unas ovejas con su pastorcito
Joaquín, con otros dos hombres como ayuda, está dedicado a las hortalizas y a los olivos. A pesar de ser anciano, es rápido y trabaja con gusto.
Están abriendo unas pequeñas protecciones de las lindes de una parcela para proporcionar agua a las sedientas plantas.
Y el agua se abre camino borboteando entre la hierba y la tierra quemada, y se extiende en anillos que, en un primer momento, parecen como de cristal amarillento para luego ser anillos oscuros de tierra húmeda
en torno a los sarmientos y a los olivos colmados de frutos.
Lentamente, Ana, por la umbría pérgola, bajo la cual abejas de oro zumban ávidas del azúcar de los dorados granos de las uvas, se dirige hacia Joaquín, el cual cuando la ve, se apresura a ir a su encuentro.
– ¿Has llegado hasta aquí?.
– La casa está caliente como un horno».
– Y te hace sufrir.
– Es mi único sufrimiento en este último período mío de embarazo.
Es el sufrimiento de todos, de hombres y de animales. No te sofoques demasiado, Joaquín.
– El agua que hace tanto que esperamos…
Y que hace tres días que parece realmente cercana, no ha llegado todavía. Las tierras arden. Menos mal que nosotros tenemos el manantial cercano y muy rico en agua.
He abierto los canales. Poco alivio para estas plantas cuyas hojas ya languidecen cubiertas de polvo. No obstante, supone ese mínimo que las mantiene en vida. ¡Si lloviera!…
Joaquín, con el ansia de todos los agricultores, escudriña el cielo.
Mientras Ana, cansada, se da aire con un abanico (parece hecho con una hoja seca de palma traspasada por hilos multicolores que la mantienen rígida).
La pariente dice:
– Allí, al otro lado del Gran Hermón, están formándose nubes que avanzan velozmente.
Viento del norte. Bajará la temperatura y dará agua.
Joaquin está desalentado,
y dice:
– Hace tres días que se levanta y luego cesa cuando sale la Luna.
Sucederá lo mismo esta vez
Ana, que de repente ha palidecido,
comenta:
– Vamos a casa.
Aquí tampoco se respira; además, creo que conviene volver.
– No. Siento la misma gran paz que experimenté en el Templo cuando se me otorgó la gracia.
Y que luego volví a sentir otra vez al saber que era madre. Es como un éxtasis.
Es un dulce dormir del cuerpo, mientras el espíritu exulta y se aplaca con una paz sin parangón humano. Yo te he amado, Joaquín.
Y cuando entré en tu casa y me dije: “Soy esposa de un justo”, sentí paz, como todas las otras veces que tu próvido amor se prodigaba en mí.
Pero esta paz es distinta. Creo que es una paz como la que debió invadir, como una deleitosa unción de aceite, el espíritu de Jacob, nuestro padre, después de su sueño de ángeles.
O semejante más bien, a la gozosa paz de los Tobías tras habérseles manifestado Rafael.
Si me sumerjo en ella, al saborearla, crece cada vez más. Es como si yo ascendiera por los espacios azules del cielo…
Y no sé por qué, pero desde que tengo en mí esta alegría pacífica, hay un cántico en mi corazón: el del anciano Tobit. Me parece como si hubiera sido compuesto para esta hora… para esta alegría…
Para la tierra de Israel que es su destinataria… para Jerusalén, pecadora, mas ahora perdonada… bueno… no os riáis de los delirios de una madre…
Pero, cuando digo: “Da gracias al Señor por tus bienes y bendice al Dios de los siglos para que vuelva a edificar en ti su Tabernáculo”,
yo pienso que aquel que reedificará en Jerusalén el Tabernáculo del Dios verdadero, será este que está para nacer…
Y pienso también que, cuando el cántico dice: “Brillarás con una luz espléndida, todos los pueblos de la tierra se postrarán ante ti, las naciones irán a ti llevando dones, adorarán en ti al Señor y considerarán santa tu tierra, porque dentro de ti invocarán el Gran Nombre.
Serás feliz en tus hijos porque todos serán bendecidos y se reunirán ante el Señor. ¡Bienaventurados aquellos que te aman y se alegran de tu paz!…”, cuando dice esto, pienso que es profecía no ya de la Ciudad Santa,
sino del destino de mi criatura, y la primera que se alegra de su paz soy yo, su madre feliz…
El rostro de Ana, al decir estas palabras, palidece y se enciende, como una cosa que pasase de luz lunar a vivo fuego, y viceversa.
Dulces lágrimas le descienden por las mejillas, y no se da cuenta.
Y sonríe a causa de su alegría. Y va yendo hacia casa entre su esposo y su pariente, que escuchan conmovidos en silencio.
Se apresuran, porque las nubes, impulsadas por un viento alto, galopan y aumentan en el cielo mientras la llanura se oscurece y tirita por efectos de la tormenta que se está acercando.
Llegando al fibra! de la puerta, un primer relámpago lívido surca el cielo.
El ruido del primer trueno se asemeja al redoble de un enorme bombo ritmado con el arpegio de las primeras gotas sobre las abrasadas hojas.
Entran todos.
Ana se retira.
Joaquín se queda en la puerta con unos peones que le han alcanzado, hablando de esta agua tan esperada, bendición para la sedienta tierra.
Pero la alegría se transforma en temor, porque viene una tormenta violentísima con rayos y nubes cargadas de granizo.
Joaquin comenta:
– Si rompe la nube, la uva y las aceitunas quedarán trituradas como por rueda de molino.
¡Pobres de nosotros!».
Joaquín tiene además otro motivo de angustia:
Su esposa, a la que le ha llegado la hora de dar a luz al hijo.
La pariente le dice que Ana no sufre en absoluto.
Él está, de todas formas, muy inquieto.
Y cada vez que la pariente u otras mujeres (entre las cuales está la madre de Alfeo)
salen de la habitación de Ana para luego volver con agua caliente, barreños y paños secados a la lumbre, que brilla en el hogar central en una espaciosa cocina…
Él va y pregunta…
Y no le calman las explicaciones tranquilizadoras de las mujeres.
También le preocupa la ausencia de gritos por parte de Ana.
Dice:
– Yo soy hombre.
Nunca he visto dar a luz. Pero recuerdo haber oído decir que la ausencia de dolores es fatal….
Declina el día antes de tiempo por la furia de la tormenta, que es violentísima. Agua torrencial, viento, rayos… de todo, menos el granizo, que ha ido a caer a otro lugar.
Uno de los peones, sintiendo esta violencia,
dice:
– Parece como si Satanás hubiera salido de la Gehena con sus demonios.
¡Mira qué nubes tan negras! ¡Mira qué exhalación de azufre hay en el ambiente.! También hay silbidos y voces de lamento y maldición! Si es él, ¡Está enfurecido esta noche!
El otro peón se echa a reír….
y dice:
– Se le habrá escapado una importante presa…
O quizás Miguel de nuevo le habrá lanzado el rayo de Dios… Y tendrá los cuernos y la cola cortados y quemados.
Pasa corriendo una mujer y grita:
– ¡Joaquín!
¡Va a nacer de un momento a otro! ¡Todo ha ido rápido y bien!
Y desaparece con una pequeña ánfora en las manos.
Entonces se produce un último rayo; tan violento, que lanza contra las paredes a los tres hombres.
En la parte delantera de la casa, en el suelo del huerto, queda como recuerdo un agujero negro y humeante.
Luego, de repente, cesa la tormenta
De detrás de la puerta de Ana viene un vagido… (parece el lamento de una tortolita en su primer arrullo).
Mientras, un enorme arco iris extiende su faja semicircular por toda la amplitud del cielo.
Surge, o por lo menos lo parece, de la cima del Hermón, la cual besada por un filo de sol, parece de alabastro… de un blanco – rosa delicadísimo.
Se eleva hasta el más terso cielo septembrino y, salvando espacios limpios de toda impureza, deja debajo las colinas de Galilea y un terreno llano que aparece entre dos higueras, que está al Sur,.
Y luego otro monte, y parece posar su punta extrema en el extremo horizonte, donde una abrupta cadena de montañas detiene la vista.
Todos los presentes comentan:
– ¡Qué cosa más insólita!
¡Mirad, mirad!
– Parece como si reuniera en un círculo a toda la tierra de Israel, y… ya…
¡Fijaos!, ya hay una estrella y el Sol no se ha puesto todavía.
¡Qué estrella! ¡Reluce como un enorme diamante!…
– ¡Y la Luna, allí, ya llena y aún faltaban tres días para que lo fuera!
¡Fijaos cómo resplandece!.
Las mujeres irrumpen, alborozadas, con un envoltorio rosado entre cándidos paños.
¡Es María, la Mamá! Una María pequeñita, que podría dormir en el círculo de los brazos de un niño.
Una María que al máximo tiene la longitud de un brazo, una cabecita de marfil teñido de rosa tenue, y unos labios de carmín que ya no lloran;
sino que instintivamente quieren mamar, tan pequeñitos, que no se ve cómo van a poder coger un pezón.
Y una naricita diminuta entre dos mejillas redondeadas.
Si la estimulan abre los ojitos: dos pedacitos de cielo, dos puntitos inocentes y azules que miran, Y NO VEN.
Entre sutiles pestañas de un rubio tan tenue que es casi rosa. También el vello de su cabeza redondita tiene una veladura entre rosada y rubia como ciertas mieles casi blancas.
Tiene por orejas dos conchitas rosadas y transparentes, perfectas. Y por manitas… ¿Qué son esas dos cositas que gesticulan y buscan la boca?
Cerradas, como están, son dos capullos de rosa de musgo que hubieran hendido el verde de los sépalos y asomaran su seda rosa tenue;
abiertas, como están ahora, dos joyeles de marfil apenas rosa, de alabastro apenas rosa, con cinco pálidos granates por uñitas.
¿Cómo podrán ser capaces de secar tanto llanto esas manitas?
¿Y los piececitos? ¿Dónde están?
Por ahora son sólo pataditas escondidas entre los lienzos. Pero, he aquí que la pariente se sienta y la destapa…
¡Oh, los piececitos!
De la largura aproximada de cuatro centímetros, tienen por planta una concha coralina; por dorso, una concha de nieve veteada de azul;
sus deditos son obras maestras de escultura liliputiense, coronados también por pequeñas esquirlas de granate pálido.
Me pregunto cómo podrán encontrarse sandalias tan pequeñas que valgan para esos piececitos de muñeca cuando den sus primeros pasos,
y cómo podrán esos piececitos recorrer tan áspero camino y soportar tanto dolor bajo una cruz.
Pero esto ahora no se sabe.
Se ríe o se sonríe de cómo menea los brazos y las piernas.
De sus lindas piernecitas bien perfiladas, de los diminutos muslos, que, de tan gorditos como son, forman hoyuelos y aritos,
de su barriguita (un cuenco invertido), de su pequeño tórax, perfecto, bajo cuya seda cándida se ve el movimiento de la respiración y se oye ciertamente, si, como hace el padre feliz ahora,
en él se apoya la boca para dar un beso, latir un corazoncito…
Un corazoncito que es el más bello que ha tenido, tiene y tendrá la tierra, el único corazón inmaculado de hombre.
¿Y la espalda? Ahora la giran y se ve el surco lumbar y luego los hombros, llenitos.
Y la nuca rosada, tan fuerte, que la cabecita se yergue sobre el arco de las vértebras diminutas, como la de un ave escrutadora en torno a sí del nuevo mundo que ve.
Y emite un gritito de protesta por ser mostrada en ese modo;
Ella, la Pura y Casta, ante los ojos de tantos, Ella, que jamás volverá a ser vista desnuda por hombre alguno, la Toda Virgen, la Santa e Inmaculada.
Tapad, tapad a este Capullo de azucena que nunca se abrirá en la tierra, y que dará, más hermosa aún que Ella, su Flor, sin dejar de ser capullo.
Sólo en el Cielo la Azucena del Trino Señor abrirá todos sus pétalos.
Porque allí arriba no existe vestigio de culpa que pudiera involuntariamente profanar ese candor.
Porque allí arriba se trata de acoger, a la vista de todo el Empíreo, al Trino Dios – Padre, Hijo, Esposo – que ahora, dentro de pocos años, celado en un corazón sin mancha, vendrá a Ella.
De nuevo está envuelta en los lienzos y en los brazos de su padre terreno, al que asemeja. No ahora, que es un bosquejo de ser humano. Digo que le asemeja una vez hecha mujer.
De la madre no refleja nada.
Del padre, el color de la piel y de los ojos y sin duda, también del pelo; que si ahora son blancos, de joven eran ciertamente rubios a juzgar por las cejas.
Del padre son las facciones — más perfectas y delicadas en Ella por ser mujer, ¡Y qué Mujer!; también del padre es la sonrisa y la mirada y el modo de moverse y la estatura.
Pensando en Jesús como lo veo, considero que ha sido Ana la que ha dado su estatura a su Nieto, así como el color marfil más cargado de la piel;
mientras que María no tiene esa presencia de Ana (que es como una palma alta y flexible), sino la finura del padre.
También las mujeres, mientras entran con Joaquín donde se encuentra la madre feliz, para devolverle a su hijita,
hablan de la tormenta y del prodigio de la Luna, de la estrella, del enorme arco iris.
Ana sonríe ante un pensamiento propio.
Y dice:
– Es la estrella. Su signo está en el cielo.
¡María, arco de paz! ¡María, estrella mía! ¡María, Luna pura! ¡María, perla nuestra!.
Joaquín pregunta:
– ¿María la llamas?
– Sí. María, estrella y perla y luz y paz…
– Pero también quiere decir amargura…
¿No temes acarrearle alguna desventura?
– Dios está con Ella.
Es suya desde antes de que existiera. El la conducirá por sus vías y toda amargura se transformará en paradisíaca miel.
Ahora sé de tu mamá… todavía un poco, antes de ser toda de Dios….
Y la visión termina en el primer sueño de Ana madre y de María recién nacida.
Dice Jesús:
Levántate y apresúrate, pequeña amiga. Siento ardiente deseo de llevarte conmigo al azul paradisíaco de la contemplación de la Virginidad de María.
Saldrás de él con el alma fresca como si tú también hubieras sido recientemente creada por el Padre, una pequeña Eva antes de conocer carne;
saldrás con el espíritu lleno de luz, pues te habrás abismado en la contemplación de la obra maestra de Dios; con todo tu ser repleto de amor, pues habrás comprendido cómo sabe amar Dios.
Hablar de la concepción de María, la Sin Mancha, significa sumergirse en lo azul, en la luz, en el amor.
Ven y lee sus glorias en el Libro del Antepasado:
“Dios me poseyó al inicio de sus obras, desde el principio, antes de la creación.
Ab aeterno fui erigida, al principio, antes de que la Tierra fuera hecha; aún no existían los abismos, y yo ya había sido concebida.
Aún no manaba agua de los manantiales, aún no se elevaban con su pesada mole los montes, aún las colinas no eran para el Sol collares… y yo ya había nacido.
Dios no había hecho todavía la tierra ni los ríos ni las columnas del mundo, y yo ya existía.
Cuando preparaba los cielos, yo estaba presente, cuando con ley inmutable clausuró el abismo bajo la bóveda, cuando fijó arriba la bóveda celeste y colgó de ella las fuentes de las aguas,
cuando al mar le establecía sus confines y daba leyes a las aguas, cuando daba leyes a las aguas de no sobrepasar su límite, cuando echaba los fundamentos de la tierra, yo estaba con Él ordenando todas las cosas.
Siempre alegre jugueteaba ante Él continuamente, jugueteaba en el Universo…”.
Las habéis aplicado a la Sabiduría, pero hablan de Ella: la hermosa Madre, la santa Madre, la Virgen Madre de la Sabiduría, que soy Yo, el que te habla.
He querido que escribieras, como encabezamiento del libro que habla de Ella, el primer verso de este himno, para que fuera confesado y conocido el consuelo y la alegría de Dios;
la razón de la constante, perfecta, íntima alegría de este Dios Uno y Trino que os sostiene y ama.
N245 EL VALLE DE LÁGRIMAS
Habla Dios Padre
En las Escrituras leéis que le temáis a aquél que pueda matar vuestra alma y no tanto, vuestro cuerpo. Vosotros estáis aquí para servirMe; pero el servicio Mis pequeños, os he dicho, debe darse en la libertad total.
Los que estáis Conmigo, ciertamente tomáis éste servicio como obligación, pero una obligación de Amor; porque sabéis que si cumplís, salvaréis a inmensidad de almas y además, Me daréis un gran gusto con ello y Mi Premio hacia vosotros será inmenso, en el Reino de los Cielos.
Felices estaréis Mis pequeños, de haber trabajado para Mí salvando almas, trayendoMe almas a vivir realmente, porque mientras NO estáis Conmigo, NO estáis viviendo verdaderamente.
Seréis transformados y conoceréis lo que es el Verdadero Amor, como el que tenían vuestros Primeros Padres, antes del Pecado Original.
Lo que estáis viviendo ahora, es nada en comparación a lo que tendréis. Lo que vosotros ahora conocéis como alegría, como vida de amor, es muy diferente a lo que tendréis cuando todo sea purificado y santificado.Yo Soy vuestro Dios y todo lo que veis ahora, NO lo volveréis a ver. Estáis sufriendo, estáis realmente en un valle de lágrimas. Sufrimiento por todos lados, desamor, maldad, miedos, tribulación, eso NO es Amor.
Vuestros Primeros Padres fueron puestos en el Paraíso Terrenal, ¿Acaso, lo que os está rodeando ahora, lo podríais clasificar, como Paraíso?
¡NO, Mis pequeños!, Satanás os hace ver que lo que ahora estáis viviendo, es lo que debéis vivir; pero lo que estáis viviendo, está envuelto en pecado, en su Maldad.
Os está llevando, solamente a gozar de los placeres del cuerpo. Y desgraciadamente, hay muchas almas alrededor del Mundo, que consideran que lo que estáis viviendo, es un paraíso.
Estáis viviendo puro vicio, carnalidad, sexo desenfrenado, pasiones llenas de suciedad, que llegan al Reino de los Cielos y que hacen que volteé Yo Mi Cara para otro lado. Sodoma y Gomorra eran menos perversas que lo que ahora estáis viviendo.
El crecimiento científico os ha llevado a hacer cosas peores que lo que tenían los habitantes de Sodoma y Gomorra y por eso,
LOS PECADOS DE ESTOS TIEMPOS SON PEORES A AQUELLOS
Y vuestro castigo será peor que lo que tuvieron aquellos dos pueblos.
Preparaos Mis pequeños, porque Mi Justicia ya está sobre vosotros, ya está, sobre este Mundo, ya está sobre el Universo entero. Os he ido preparando a vosotros, los que estáis Conmigo, para que salgáis victoriosos de esta gran lucha. Lo que es Mío, lo que es bueno, permanecerá, lo que está contaminado por Satanás, desaparecerá.
Soy vuestro Dios y Yo consiento a los Míos, busco su bienestar y sobre todo, premio vuestra Fe, vuestra entrega y vuestro amor a Mí.
Hijitos Míos ¿Puede, acaso, un niño pequeño atemorizarse cuando está tomado de la mano de sus padres?
¡NO!
Mis pequeños.Aquellos que se dejan guiar por sus padres, sienten la protección, sus cuidados y se dejan mover por ellos, se dejan que los guíen, aceptan sus órdenes, sus direcciones, su educación.
Esto es, hablando de los deberes de los padres en la Tierra y algo similar tenéis Conmigo, vuestro Dios.
Soy vuestro Padre, tenéis a Mi Hija, como Madre de todo el género humano,
Y os heMos ido cuidando desde vuestra concepción. Cada uno de vosotros tenéis un cuidado especial primeramente, de acuerdo a la misión para la que os he escogido a cada uno de vosotros.
Seguidamente tenéis también otro tipo de cuidado, de acuerdo a la familia a donde llegasteis. Porque hay padres y madres, que no están de acuerdo en que el hijo tome cierta dirección en su vida y son atacados.O se les evita a toda costa, que vayan por ese camino que han escogido, a pesar de las enseñanzas buenas o malas de sus padres.
Ciertamente, eso provoca una lucha de muchos años y quizá de toda la vida, en la que los hijos que han sido escogidos por Mí para una misión especial, sus padres NO están de acuerdo en dejarlos ir por ese camino y entonces irán, en contra de Mí Voluntad.
Pero, hay otros padres que son cuidadosos con la vida espiritual y con los cuidados que sus hijos deben tener, pero ellos toman el mal camino.
Y los padres sufren; aunque por estar cerca de Mí, Me los pondrán bajo Mi Cuidado y Protección.
Vosotros decís que cada cabeza es un mundo y así es, Mis pequeños. Ciertamente, cada uno de vosotros tenéis libre albedrío y podéis ir por el camino que hayáis escogido en lo personal.
O si sois más espirituales, aceptaréis el camino que Yo os marque cuando esté hablando directamente, con vosotros.
Así como en la Naturaleza tenéis una gran cantidad de flores y su diversidad es tremenda, así sois vosotros.
Cada uno de vosotros sois diferentes.
Pero ciertamente, todos debéis tener un fin común: Regresar a Mí, vuestro Dios. Yo Soy a Quien debéis todos seguir, pero NO lo habéis hecho. Os habéis desviado por causa de Satanás y sus secuaces.
Os he dicho que Satanás es muy astuto y ha hecho de esta humanidad, una real problemática espiritual y aún, humana.
NO os ponéis de acuerdo, prácticamente en nada y eso, es causar división.
Y es lo que estáis padeciendo todos vosotros, división en todos sentidos, hasta en lo personal.
Vosotros mismos en vuestro interior estáis divididos, NO os ponéis de acuerdo; decís una cosa en un momento y al siguiente segundo cambiáis.Os quiero puntualizar esto Mis pequeños, porque vosotros fuisteis creados por Mí. Yo os di la vida que tenéis, pero para una finalidad espiritual y correcta, porque Yo Soy el Perfecto.
Y Yo os he dado una misión para hacer crecer a las almas caídas, principalmente.
Satanás os lleva a lo contrario, toda su “enseñanza” si lo podemos decir así, es la búsqueda de vuestro exterior: su gozo, su cuidado, su presencia.
Meditadlo y os daréis cuenta de lo que os digo, os lleva a querer más vuestro exterior y a cuidarlo, mientras que Yo os llevo a la profundidad, os llevo a vuestro corazón, os llevo a crecer en lo que no podéis ver, en lo espiritual.
Ciertamente, NO podéis ver vuestra alma, pero sí veis las acciones de vuestra alma.Y es lo que quiero que vosotros hagáis, los que estáis Conmigo, los que queráis estar Conmigo; dar ejemplo de que vosotros estáis Conmigo, de que vosotros os estáis dejando mover por Mi Voluntad y por Mi Amor.
¿Qué es lo que os decía Mi Hijo? “Al árbol se le conoce por sus frutos”, vosotros debéis ser buenos árboles, para que deis buenos frutos. Se os conoce que estáis Conmigo, porque vuestros frutos son buenos, son sanos, son sabrosos.
Si estáis Conmigo, llevaréis Mi Amor, llevaréis Paz, llevaréis Vida y muchas tantas Virtudes y aún Bendiciones que podéis dar a vuestros hermanos, porque las daréis en Mi Nombre.
Vosotros deseáis el Bien, porque el Bien vive en vosotros; pero hay hermanos vuestros que viven para el Mal y tratan de destruir a toda costa, esa vida espiritual que poseéis y que os ha costado mucho desarrollarla y además, protegerla.
Estáis en el Mundo y el Mundo ataca a los que son Míos. Por eso vuestra valía es inmensa cuando Me escogéis a Mí y estáis dando frutos de Paz, de Amor, de Vida y de Mi Amor entre los hombres.Que fue para lo que vino Mi Hijo, transmitirMe a todos vosotros y esa es vuestra acción también Mis pequeños, transmitirMe a vuestros hermanos.
Pero sentid, sentid esta palabra: transmitirMe, con eso estoy haciéndoos sentir Mi Vida en vosotros. TransmitirMe:
Me tenéis y Me estáis dando a vuestros hermanos, Me estáis viviendo y vais a hacer vivir también a vuestros hermanos, con vuestro ejemplo, con vuestras palabras, con vuestros buenos deseos, con la vida espiritual que lleváis.
A veces, ni siquiera palabras tenéis que decir, vuestra forma de ser, vuestra forma de actuar, ya Me lleva implícito en todo lo que hacéis y como os digo, a veces sin ni siquiera decir una palabra.
Cuando tratáis a vuestros hermanos con amor, con respeto, con un verdadero trato de hermano a hermano:
ya sea en la necesidad, ya sea en el juego, en la distracción, como niños pequeños, vuestro comportamiento Me lleva a vuestros hermanos.
Vuestros hermanos sienten el cambio; sobre todo, aquellos que están acostumbrados a vivir en el mal, en la grosería, en el error, en todo aquello que es de Satanás.
Cuando vosotros os presentáis a este tipo de hermanos vuestros, que están acostumbrados al error y de repente, vosotros les estáis llevando la Verdad, sienten el cambio.
Y así es como podéis vosotros, ir misionando: simplemente, viviéndoMe.
¡Hay tanto que puede hacer un alma en la Tierra! A veces, os quejáis de que NO tenéis nada qué hacer y ¡Podéis hacer tanto!
Vuestra oración, vuestra oración lejana, como os he dicho, vuestra oración puede llegar a todos los confines de la Tierra y cambiar almas. Vuestro ejemplo, también, puede cambiar almas.Palabras llenas de Mi Sabiduría, cambian corazones y los hacen reaccionar.
El respeto tan importante Mis pequeños, cuando NO hacéis diferencia entre sexo, ni color, ni edad, cuando os tratáis como verdaderos hermanos,
Cuando os ayudáis, porque necesitáis cada uno de vosotros, la ayuda de alguno de vuestros otros hermanos y la aceptáis, no importando su estado económico, social y aun, moral.
Entended Mis pequeños, que todo ser humano, se mueve buscando amor y desea el Amor.
Nadie puede vivir sin amor y cuando vosotros lo transmitís, lográis hacer el cambio en esas almas.NO desperdiciéis, las oportunidades que Yo os doy Mis pequeños, en poner en el camino de vuestra vida, a hermanos vuestros que necesitan de Mi Ayuda-
Y vosotros vais a transmitir Mis Pensamientos, Mis Palabras, Mi Voluntad, a través de vuestra presencia a vuestros hermanos.
Entrad en esa humildad a la que llegan los santos, después de conocerMe, amarMe, vivirMe y aprenden a entender, que Soy Yo en vosotros, que Soy Yo el que hace todo lo grande, lo bello que vosotros hacéis y decís en vuestros hermanos.
Nunca os quedéis con el crédito vosotros, porque vosotros no estáis creando la acción, la estáis repitiendo, Yo os la estoy diciendo y vosotros, estáis transmitiendo.
Vivid, pues, llenos de Mi Amor y agradecidos, Mis pequeños, de que os estoy tomando, de que os estoy tomando de la mano, de que os estoy llenando de una vida espiritual que no conocéis, que es incipiente y que irá aumentando, según pongáis también, de vuestra parte. Si vosotros dais poco, poco iréis creciendo; si dais mucho, mucho se os dará.
Cada uno de vosotros tenéis libertad de acción; pero también cada uno de vosotros tenéis diferentes niveles de Amor, ¿En qué nivel, estáis cada uno de vosotros?
Satanás sabe perfectamente lo que es la impureza para un alma.
La impureza es como un velo denso que no permite la entrada de Mi Gracia, la entrada de la Luz, la entrada de la Verdad, al corazón del hombre.
LA IMPUREZA OS SEPARA DE MI,Os volvéis mundanos, el pecado está a flor de piel. La impureza NO os permite crecer, NO le permite crecer al alma como es debido.
Al vivir en la impureza Mis pequeños, os mantenéis fuera de Mis Leyes, fuera de Mi Amor, os enlodáis, os ensuciáis.
Porque ésa falta de vida en la Virtud, ésa falta de pureza en los corazones, en la mente, en el ser humano, os va a llevar a la destrucción irremediablemente.
Orad, orad por vuestros hermanos que viven en la impureza, porque no se dan cuenta de la destrucción a la que están llevando a su alma y NO solamente eso Mis pequeños, es el ejemplo que están dando a sus hermanos.
Ciertamente, el Demonio va a presentar a la impureza como algo agradable a los sentidos…Y por eso muchos de vuestros hermanos caen en el error, caen en la mentira, caen en ésta trampa que les pone Satanás.
NO abráis ni una pequeña rendija a la impureza, Mis pequeños; porque tan pronto se mete en vuestro ser, os va envenenando poco a poco, hasta que os va llevando a ésa muerte espiritual.
Manteneos atentos a los ataques del Enemigo, a su maldad. Manteneos en la oración y estad alertas porque él aprovecha cualquier ocasión para tratar de venceros.
Pedid, pedid Mis pequeños, ésta Pureza para Mis ministros, Mis sacerdotes, Mis consagrados,
Porque en el momento que entra la impureza en el corazón del hombre, especialmente en ellos; se desvían, se vuelven del mundo y os desvían a vosotros, que sois Iglesia, que sois Mis hijos.Orad por ellos para que NO caigan en el Error y SEAN ESCLAVOS DE LA MALDAD DE SATANÁS
Os amo, Mis pequeños y amo preferentemente a aquellos que están en éste dolor y que NO pueden salir de él por la falta de oración de vosotros,
Sois hermanos, levantadles, enseñadles que pueden regresar a Mí, llevadles Mi Amor.
Llevadles Esperanza, una nueva vida les espera, dádsela, dádsela, Mis pequeños.
Habla Nuestro Señor Jesucristo
Hijitos Míos, orad. Orad intensamente por Mis pequeñitos, por los niños pequeños que están siendo atacados por Satanás;
él sabe cómo daña Mi Corazón al atacar a Mis pequeños, inocentes.Su Maldad es extrema, su Odio hacia Mí, Infinito y por eso trata de molestarMe de la peor forma. Y una de ellas, es afectando el almita de Mis pequeños.
Os pido que reparéis por los pecados que se cometen contra ellos. Os pido que oréis muchísimo, para reparar sus almitas dañadas por los adultos y a veces, hasta de sus propios padres.
El niño es sencillo y obedece fácilmente, ellos van a tener un papel preponderante en estos tiempos.
Orad Mis pequeños, para que intercedáis por ellos y recuperen la inocencia que han perdido y vuelvan a ser ésos pequeños, limpios, puros y los pueda enamorar con Mi Amor, para que den mucho fruto.
NO os imagináis cuánto dolor Me causa la pérdida de la pureza de un niño pequeño. Satanás sabe dañar a Mi Corazón Sacratísimo.
Éstos pequeñitos, son parte de Mi Corazón, por eso os pido, Mis pequeños, que oréis mucho por vuestros hermanitos, son vuestros hermanos menores que están siendo destruidos en cuerpo y en alma;
Los necesito, Mis pequeños y sobre todo, necesito inmensamente a las almas escogidas para la Iglesia, para su crecimiento, pero dentro de la Fe y de las Enseñanzas. ¡Hay tantas almas qué salvar y tan pocas oraciones!
¡Ay, de aquellos que han tocado a estos pequeños y les han quitado su inocencia, su pureza y su amor hacia Mí!, su sufrimiento eterno será gravísimo.
Un alma vale muchísimo. Cuando vosotros hacéis de vuestros hijos, almas que Me amen y almas que den mucho fruto; ciertamente vosotros recibiréis grandes regalos de parte Mía, cuando regreséis al Reino de los Cielos.Pero NO así para aquellos como os dije, que hayan destruido la inocencia, el amor de estos pequeñitos; porque sufrirán eternamente, de una forma muy dolorosa.
Orad Mis pequeños por estas almitas, que ciertamente por vuestra intercesión y después de la Purificación, las transformaré, las haré olvidar toda ésa maldad con que fueron tratadas y serán renovadas, para que hagan una vida llena de Mi Amor.
Que Dios os Bendiga, Mis pequeños, os llevo en Mi Corazón, estáis Conmigo.
Os bendecimos en Nuestro Santo Nombre, Padre, Hijo y Espíritu Santo. Que la Paz y el Amor estén siempre con vosotros y los vuestros.
Y que la compañía y la veneración a Vuestra Madre Celestial os alcance la Vida Eterna.
P175 PURIFICACIÓN DE LOS SENTIDOS
Pueblo Mío:
Les Bendigo. No serán abandonados por Mí, en ningún instante.
Sean mi mismo Amor, sean honestos, justos, caritativos, bondadosos, cuidadosos al tratar a sus hermanos. Sean amables con sus semejantes, el buen actuar es alabanza ante mí.
Cada uno debe mantener presente cómo se encuentra espiritualmente. Si tienen esto presente, llegarán a hacer propósito de enmienda y se separarán de las Tinieblas, de los malos tratos hacia sus semejantes.
Algunos de Mis hijos se miran interiormente únicamente en lo que corresponde en el trato directo hacia Mí. Mis hijos deben ser reflejo de Mi Amor. Lamento que para algunos de Mis hijos, esta Palabra no se encuentra contemplada en su vida.
El Amor ha sido suplantado por el ‘yo soy’, descartando la posibilidad de ablandar el corazón de piedra y esto da como resultado criaturas egoístas y soberbias, que no toleran ni respetan el obrar y actuar de los semejantes, imponiéndose ante los hermanos.
Quien actúa de esta forma llega a convertirse en un tormento para sus hermanos, para su metro cuadrado y para él mismo. Hijos, no deben imponerse. Deben ser amados y no temidos.
En Mi Pueblo, todos se necesitan, todos son hermanos, todos se auxilian mutuamente, todos son generosos y tienen presente en la memoria y en el corazón, las ocasiones en que fueron auxiliados por un hermano.
Hijos Míos: es importante el que no olviden los buenos actos de sus hermanos hacia ustedes, esto es parte del Amor. No permitan que el orgullo, que se expande por la humanidad a través de los espíritus del Mal, erradique la humildad que debe morar en ustedes.
ENCONTRARÁN MI AUXILIO CUANDO LO SOLICITEN
Y lo que antes fue aflicción, llegará a ser deleite si permiten que Mi Espíritu les perfeccione en sus debilidades.
Pueblo Mío:
El Pensamiento y la Memoria para algunos de ustedes, se ha transformado en un gran impedimento para continuar el camino en verdadera paz.

Entregando nuestros sentimientos a Jesús y pidiéndole que reorganice nuestros afectos y nos ayude a hacer su Voluntad, es la perfecta solución…
Viven del pasado, de lo que no fue y olvidan Nuestra Voluntad. Anhelan situaciones del pasado y esto se convierte en una gran fuerza que les detiene. Quien añora el pasado quedará en el camino, ese impedimento del pasado le mantendrá atado y le impedirá mirar el instante y entregarse a Nuestra Voluntad.
Algunos se aferran tanto al pasado, que viven sumidos en los recuerdos. En los instantes de hiel en que vivieron y brota la amargura, el rencor o el enojo reiteradamente, hasta que llega a transformarse en una raíz que les oprime y les lleva a vivir en constante amargura.
El hombre permite que el pasado le atormente y de esto se sirve el Mal para mantenerles atados.
Ustedes hijos Míos, tienen que entregarme la mente y permitir que Mi Espíritu les guíe y les conduzca a meditar en Mis Promesas; para que Yo someta todo bajo Nuestro Dominio Divino y lo que les atormenta no continúe siendo un impedimento hacia la entrega a Nuestra Voluntad.
En este instante, son tantos hijos los que se conforman con mirar de lejos la salvación, que sienten que no precisan alcanzarla, sino que con mirarla de lejos se conforman.
Por ello, a Mis Ministros les llamo constantemente a ser testimonios de Mi Obrar y Actuar, ya que el hombre guarda en su memoria Mi Palabra y necesito que en este instante sean insistentes en el correcto Amor, la correcta y debida Obediencia, la Fe necesaria y la correcta conducción de Mis Ministros para que Mi Pueblo no se extravíe con banalidades.
Mis hijos deben ser fortalecidos constantemente con Mi Palabra. Mis hijos deben fortalecerse con Mi Palabra, para que el Mal no les tome por sorpresa al ser desconocedores de lo Mío.
NO pueden juzgarse a sí mismos. Esto no es competencia del ser humano, pues siempre tiende a mirar lo bueno de sus obras y actos o a barnizar con el Bien lo que no ha sido bien.
Por ello les llevo a PURIFICAR LOS SENTIDOS, para que en ese camino se desprendan de las justificaciones personales y permitan que Yo les muestre los impedimentos que mantienen encarnados en ustedes y les impiden llegar hacia Mí.
Esta generación comete grandes abominaciones en contra de Nuestra Voluntad. Comete sacrilegios como nunca antes el ser humano ha cometido. Demeritan a Mi Madre negando Su Pureza Virginal y Su Maternidad hacia toda la Humanidad.
Esta generación constantemente peca contra Mi Espíritu Santo, olvidando que la vida del hombre pende de Nuestra Voluntad.
No cree en la explicitación de Mi Palabra y se burla de los Llamados de Mi Madre, Negando la Purificación urgente para esta generación, antes de que los justos se pierdan.
El Pecado es alimento de la Humanidad, acrecentando en la Tierra las Huestes de Satanás, las que se abalanzarán sobre Mis Templos por todo el mundo, con el deseo de extinguir todo recuerdo de Mi Presencia en la Tierra.
Ante tales acciones no se hace esperar el Aviso (1), para que algunos de Mis hijos retomen el camino de la Verdad.
Insisto en el conocimiento de nuestra Palabra Divina para que al conocer,
AMEN CON INTENSIDAD Y EN VERDAD A NUESTRA DIVINIDAD.
Es necesaria la Fe Firme, Fuerte, Decidida. La FE indisoluble y vivida cada Instante, EN CADA ACONTECIMIENTO, para que logren superar las atrocidades del Mal.
Es necesaria la Donación de cada uno de mis hijos. La decisión de vivir en Nuestra Voluntad, la disposición a la Unidad, a la Fraternidad.
No son del Mundo hijos, NO permitan que el mundo les tome.
Deben vivir en la constante espera y en el cumplimiento de Nuestra Voluntad.
NO miren lo mundano.Ustedes no son de lo mundano. Ninguno de mis hijos es para lo mundano, ninguno debe vivir oprimido por Satanás.
Son de mi Propiedad, LES RESCATÉ CON MI SANGRE.
Aliméntense de Mi Cuerpo en la Eucaristía debidamente preparados.
Acompáñenme en el Sagrario y luchen para que la vida sea un constante acto de amor en ustedes y hacia sus hermanos.
DESEO HOGARES QUE VIVAN EN MI AMOR, EN PAZ, EN MI UNIDAD.
Cuando en los hogares no existe la paz o esta es alejada por instantes, los espíritus del Mal se apoderan del hogar y crean rebelión, llevando a que unos miren mal el actuar de los demás, logrando que alguno del hogar sea intolerante de los actos de los otros miembros de la familia y así las pequeñeces lleguen a ser grandes tormentas destructoras.
Hijos, el Demonio ataca al hombre, ataca la unidad, ataca la familia, siembra discordia y vacía el amor del corazón del hombre, para que el hombre no sienta la necesidad de ser Templo de Mi Amor hacia el prójimo.
La Batalla de Satanás es contra Mi Amor, contra la Unidad, por ende contra la Familia, contra la Moral, contra Mi Madre. Porque conoce que Mi Madre en unión a San Miguel Arcángel y a las Legiones Celestiales,
LE APLASTARÁ Y LE ARROJARÁ A LOS ABISMOS DEL INFIERNO.
Pueblo Mío NO desprecien Mis Llamados, que Satanás y los espíritus del Mal esparcidos sobre la Humanidad se mantienen activos, en busca de presas para tomarles.
NO deben luchar Mis hijos contra Mis hijos, esa lucha fortalece al Mal.
NO me defiendan, que lo que no es Mío cae y lo que es Mío prevalece. NO confundan a Mi Pueblo más de lo que el Mal lo tiene confundido. EN SU LUGAR OREN Y HAGAN PENITENCIA.
Oren hijos, oren por Italia, padecerá hasta el hartazgo. La Naturaleza se lanza contra Italia. Será duramente atacada por quienes no Me aman, se abalanzarán contra el Vaticano. (2)
Oren hijos Míos, oren por Francia, ha perdido la paz, convivirá con la insistencia del Terror. (3)
Oren, hijos Míos, por Nicaragua, será azotada por la Naturaleza, se estremecerá. Padecerá por sus volcanes.
Oren por Costa Rica, será estremecida.
Oren por Venezuela, la Naturaleza se hará presente con fuerza.
Oren por Colombia, será estremecida con fuerza.
CONTINÚEN CON LA PURIFICACIÓN DE LOS SENTIDOS. (Iniciada el 14 de Septiembre*)
Y esta semana, unido a la purificación de la vista, prosigan purificando el sentido del oído; ya que éste lleva cuanto escucha al pensamiento, a la memoria y les enferma.
“Acuérdate de lo que has recibido y oíste; ponlo en práctica y arrepiéntete, porque si no te mantienes despierto, vendré como ladrón, sin que sepas a qué hora te sorprenderé.” (Ap 3, 3)
Al escuchar que les llamo a no pecar, tienen que saber que Mi deseo es guiarles para que limpien la Memoria y encuentren Libertad.
Pueblo Mío, es imprescindible que cada uno de mis hijos continúe Purificando el sentido del Oído.
Los sentidos físicos del hombre tienen que llegar a compenetrarse con el espíritu.
Continuarán con el sentido del oído, con el sentido de la audición, por una semana.
Cada instante se dedicarán a limpiar el sentido del oído, hasta que este sea entregado para agradar a Nuestra Voluntad y para mayor bien del alma.
PRIMER DÍA DE LA SEGUNDA SEMANA:
Ofrezco el Don de la audición en este día, a los Sacratísimos Corazones de Jesús y de María Santísima.
Les ofrezco este Don de la audición en este instante para la Gloria Divina y por el bien de las almas.
En cada acto presente, mi memoria y mi pensamiento se mantendrán atentos, alertas,
para no acumular lo que mi oído escucha y lleva a retener el pecado,
ofendiendo a los Sacratísimos Corazones.
Dame la fuerza para escuchar únicamente lo que sea para el bien de mi alma y de mi hermano.
Clamo a Ti, Madre Santísima, para que me tomes como Tu discípulo,
guíes mi vida y mi senda sea dirigida al encuentro con Tu Hijo.
AL DESPERTAR OFREZCO:
Tengo oídos y con estos escucho el bien y el mal.
Desde este instante ofrezco mi esfuerzo constante para que este Don sea llevado a ser más espiritual,
priorizando el deseo Divino de mi salvación personal.
Propongo librar mi oído de las ocasiones de pecado,
buscando en todo cuanto oigo, el propósito Divino,
recordando el bien que me brindó cada hermano
y escuchando en la Creación la grandeza del Padre Eterno.
No deseo pecar más con el sentido del oído,
lo entrego a los Sagrados Corazones para que, siendo criatura Tuya, mi Señor,
me levantes del pecado.
No deseo que lo que he escuchado continúe provocando malos pensamientos ni desestime yo las bondades Divinas que me llevan a permanecer en estado de Gracia.
Sagrados Corazones, sean sostén de mi memoria y mi pensamiento
para que mi oído me lleve a retener solo el bien.
Detengo mi libre albedrío y le sujeto de inmediato y lo entrego a los Sagrados Corazones,
para que me libren de las ocasiones de culpa,
y así moldeen mi oído para que lleve a mi memoria únicamente lo que es para bien de mi alma y para que yo haga el bien a mis hermanos.
Mis oídos se limpien en el Agua Purificadora del Amor proveniente de los Sagrados Corazones. Amén.
MEDIODÍA:
Repaso con nuestra Madre los esfuerzos de la mañana y anoto las debilidades.
ANTES DE DORMIR:
Gracias doy a los Sagrados Corazones de Jesús y María Santísima, a quienes ruego me socorran en este propósito, para ser mejor hijo de Dios.
Padre Nuestro, Tres Ave Marías y Gloria.
Hijos, vengan a Mí y entréguenme su vida.
Les Bendigo. Les amo.
Su Jesús.
*https://cronicadeunatraicion.com/2016/09/14/p172-la-tierra-se-estremecera/
(1) El gran Aviso de Dios a la humanidad, leer…
(2) Profecías sobre Italia, leer…
(3) Profecías sobre Francia, leer…
Comentario del Instrumento
Hermanos (as):
En este instante Cristo nos indica la trascendencia de ser hijos de nuestra Madre y confiar a Ella nuestra vida.
Nuestra Madre fue elegida para dar la última batalla contra Satanás y sus hijos. Tenemos que mantenernos seguros, pues junto a Ella encontramos la Fuerza para continuar en pie.
Cristo nos insiste para que no olvidemos. Y nos muestra la importancia de mantener la memoria sujeta a Él. En algunas ocasiones, la memoria nos traiciona trayendo al presente algún acontecimiento que tiene moho. Pero al mantenernos prestos a la Palabra Divina, tenemos que alejarlo antes de que haga nido en nuestra mente.
Los sentidos son bendición, pero tenemos que colocarlos en las Manos Divinas para que estos sean utilizados para bien de todos y para la Gloria de Dios. Amén.
D38 EL SÉPTIMO SELLO
2.Vi entonces a los siete Angeles que están en pie delante de Dios; les fueron entregadas siete trompetas.
3.Otro Angel vino y se puso junto al altar con un badil de oro. Se le dieron muchos perfumes para que, con las oraciones de todos los santos, los ofreciera sobre el altar de oro colocado delante del trono.
4.Y por mano del Angel subió delante de Dios la humareda de los perfumes con las oraciones de los santos.
5.Y el Angel tomó el badil y lo llenó con brasas del altar y las arrojó sobre la tierra. Entonces hubo truenos, fragor, relámpagos y temblor de tierra.
6.Los siete Angeles de las siete trompetas se dispusieron a tocar.
7.Tocó el primero… Hubo entonces pedrisco y fuego mezclados con sangre, que fueron arrojados sobre la tierra: la tercera parte de los árboles quedó abrasada, toda hierba verde quedó abrasada.
8.Tocó el segundo Angel… Entonces fue arrojado al mar algo como una enorme montaña ardiendo, y la tercera parte del mar se convirtió en sangre.
9.Pereció la tercera parte de las criaturas del mar que tienen vida, y la tercera parte de las naves fue destruida.
10.Tocó el tercer Angel… Entonces cayó del cielo una estrella grande, ardiendo como una antorcha. Cayó sobre la tercera parte de los ríos y sobre las manantiales de agua.
11.La estrella se llama Ajenjo. La tercera parte de las aguas se convirtió en ajenjo, y mucha gente murió por las aguas, que se habían vuelto amargas.
12.Tocó el cuarto Angel… Entonces fue herida la tercera parte del sol, la tercera parte de la luna y la tercera parte de las estrellas; quedó en sombra la tercera parte de ellos; el día perdió una tercera parte de su claridad y lo mismo la noche.
13.Y seguí viendo: Oí un Aguila que volaba por lo alto del cielo y decía con fuerte voz: «¡Ay, ay, ay de los habitantes de la tierra, cuando suenen las voces que quedan de las trompetas de los tres Angeles que van a tocar!» (Biblia de Jerusalén)
Hijitos Míos, las trompetas, tocando están. El Séptimo Sello se ha roto, los Desastres como os he anunciado, YA COMENZARON.
Mis pequeños, Me molesta anunciaros todo esto. Ciertamente, avisados ya estabais, porque tenéis en las Escrituras todo esto, que es el Preámbulo a lo que ya os he venido anunciando que será la Purificación del Mundo y del Universo entero.
Os repito, Me molesta anunciaros todo esto, porque Yo Soy un Dios de Amor. Pero Mi Justicia también conlleva Amor. Mis pequeños, además de que os he venido explicando que la Justicia, Mi Justicia que se ha de dar, va primeramente contra el Mal que Satanás ha sembrado por todas partes.
Mi Justicia aplastará la cabeza de Satanás a través de Mi Hija, la Siempre Virgen María. Mi Justicia os quitará tanto dolor, tanta pena, tanta maldad que veis a vuestro alrededor. Y Mi Justicia también Me regresará vuestro corazón a Mi Corazón.
Porque vosotros os habéis olvidado de Mí. YA NO FORMO PARTE de vuestros intereses de vida.
Me blasfemáis, Me ignoráis, no cumplís con lo que Yo os he pedido en Mis Mandamientos, Sacramentos, Leyes. Muchos de vosotros os burláis de todo lo que viene de Mí y de ésta forma, vosotros habéis hecho vuestra vida sin Mi Presencia.
Si a vosotros os duele lo que vendrá, que será por corto tiempo; a Mí Me ha venido doliendo vuestra actitud por MUCHOS, muchos años…
Y esto no es justo, Mis pequeños. Porque Yo Soy vuestro Padre, Soy vuestro Dios, Soy todo Amor. Vosotros ciertamente estáis envueltos en Pecado, pero no habéis querido mejorar al menos un poco en vuestra vida espiritual. Y por eso Yo he de permitir ésta Purificación, que será para que vuestro corazón se una nuevamente a Mi Corazón.
Muchos no lo veréis así, como un bien que se viene. Os duele que empecéis a perder todo con lo que estáis acostumbrados a vivir, especialmente en vuestra economía, en vuestra comodidad. Os pregunto, ¿Acaso vivís cómodamente con un corazón lleno de pecado y de maldad?
Vosotros no meditáis en ello y seguís viviendo con ése tipo de corazón, lleno de pecado y de maldad. Y Me seguís atormentando a Mí vuestro Creador, vuestro Dios, que Soy todo Amor. En eso no pensáis, solamente pensáis en lo vuestro.
Todo esto que voy a permitir que venga, os hará recapacitar y os hará ver la realidad en la que habéis vivido y la realidad en la cual debisteis haber vivido. Habéis vivido en el Pecado y debisteis haber vivido en la virtud y en el amor.
Por eso antes de que Me blasfeméis nuevamente por lo que he de permitir en vuestra vida, agradecedMe de corazón que ya ponga fin en vuestra vida, a toda ésta Maldad que os rodea y que habéis hecho parte de vuestra vida.
Vosotros no pertenecéis al Mal, no pertenecéis a Satanás. Me pertenecéis a Mí que Soy vuestro Creador y Yo no puedo permitir que vosotros os perdáis eternamente.
Os he de rescatar de las garras de Satanás y ciertamente os dolerá; porque os habéis hecho fuertes con su Maldad y no os habéis querido someter en humildad, a Mi Bondad que es la que os da verdaderamente Vida.
Dejad que Mi Santo Espíritu os guíe y os ayude a entender el Bien que va a hacer ésta Purificación para toda la humanidad y al Universo entero. TODO cambiará para vuestro Bien. Agradecedlo Mis pequeños.
El Pecado Original Me desmembró, Mi Cuerpo Místico quedó separado, quedó en partes. Vosotros, estáis llamados a ser parte de Mi Cuerpo Místico. Pero primeramente, es a través de la familia. Vosotros fuisteis llamados a ser Familia con el Cielo.
Mi Hijo os vino a enseñar cómo se vive en el Cielo, para que os unierais todos de toda raza, de toda lengua, pero con un solo corazón. O sea, viviendo en el Amor. Y no habéis hecho gran cosa por unir el Cuerpo Místico de Mi Hijo, sigue desmembrado.
Los países siguen separados por fronteras y no solamente por idiomas, sino por ideologías, cada vez estáis peor. Ya no os unís, las guerras persisten, las injusticias os separan cada vez más, el Odio va tomando cada vez más fuerza en los corazones de toda la humanidad y ya no se habla de amor, de Mi Amor. El Cuerpo Místico de Mi Hijo sigue desmembrado.
La humanidad tuvo a Mi Hijo, Presente entre ellos y ¿Qué tomasteis de Él?
Se Le asesinó porque les hacía ver sus pecados, porque los ponía en evidencia ante el pueblo, porque los que se sentían superiores ante el pueblo no daban ejemplo bueno, ejemplo santo; siendo que ellos eran los que podían leer las Escrituras, porque el pueblo no sabía leer.
Os seguís aprovechando, Escribas y Fariseos de toda la humanidad. Seguís asesinando a Mi Hijo. Habéis tomado todos los poderes de la Tierra para seguir desuniendo a Mis hijos.
Fuerte será vuestro castigo porque os volvisteis arma de Satanás. ¡Cuánta maldad hay en vuestro corazón! Os molestaba que Mi Hijo os dijera “sepulcros blanqueados” y os molestaba escuchar verdades que iban en vuestra contra, porque aparentabais ser grandes hombres ante el pueblo, cuando en realidad, erais putrefacción.
Preparaos jefes de los pueblos. Preparaos escribas y fariseos, porque Me veréis frente a frente.
Veréis Mi Cólera ante vosotros y no soportaréis ver el Fuego que os fundirá. Os querréis esconder ante la Ira de Mis Ojos y no podréis.
¡Cuánta Maldad ha salido de vosotros! No quisisteis escuchar a Mi Hijo, no os quisisteis llenar de Sabiduría Divina y preferisteis atacarLe, porque Él os había llamado la atención y en lugar de dejar entrar humildad en vuestro corazón, cambiar y servirMe debidamente; vuestra soberbia os ganó y os opusisteis a las Verdades de Mi Hijo, seguisteis la falsedad de Satanás y la Maldad entró en vuestro corazón.
Esa Maldad os condenará, porque pudisteis haber sido grandes ante Mis Ojos, pero vuestra soberbia ganó y os condenará vuestra soberbia.
De esto Mis pequeños Humanidad entera, también de éstos escribas y fariseos seréis salvados. Eliminaré toda ésta estirpe maldita que ha causado tanto Mal primeramente al Cielo, al asesinar a Mi Hijo.
Y por haber asesinado a Mi Hijo, también vosotros os perdisteis de mucho, Mis pequeños.
Volveréis al Bien, se os mostrará y los que queráis venir a Mí, lo seguiréis. Seguiréis éste Bien que os enseñó Mi Hijo, que lo vivió ante vosotros y que lo viviréis cuando regreséis a Mí.
Ved Mis pequeños cómo os amo, cómo iré eliminando todo aquello y a todos aquellos que os han esclavizado por tanto tiempo. Mi Amor es Infinito y vosotros sois Mi Amor, sois Mis creaturas. Y por eso os consiento tanto. No quiero seguir viéndoos sufrir, como ahora estáis sufriendo.
Ciertamente os ayudaré a éste cambio tan bello que tendréis, pero también necesito de vuestra parte. Vosotros debéis poner de vuestra parte y cambiar de corazón. Sacar de vuestro ser todo aquello que vaya en contra de Mis Enseñanzas y de Mi Amor.
Tenéis el libre albedrío, si queréis venir en pos de Mí, debéis también purificar vuestro interior. Ciertamente con Mi ayuda, pero pidiéndoMelo de todo corazón. Si vosotros NO queréis estar Conmigo, también seréis eliminados como ésta estirpe maldita será eliminada.
Disculpen Mis pequeños que os hable así, pero éstos hermanos vuestros que se volcaron hacia el Mal, mucho daño han hecho a Mi Corazón, a Mi Amor; al dañaros a vosotros y al impedir que Mis Leyes y Decretos se dieran en todo el Mundo.
MI JUSTICIA SERÁ SEVERA CONTRA ESTOS ESBIRROS DE SATANÁS.
Os he dicho Mis pequeños, que el Universo entero se convulsionará, a tal grado será que vosotros no sabréis qué hacer. Y esto os lo digo Mis pequeños, porque si no estáis preparados desde ahora, a enfrentar todos estos acontecimientos en estado de Gracia, difícilmente podréis tener algún sacerdote a la mano, que os perdone vuestros pecados mortales.
Os vuelvo a repetir esto Mis pequeños, porque lo tenéis anunciado en las Escrituras. Cuando me refiero a aquellos tiempos, cuando el pueblo judío era atacado y se hablaba que el mismo pueblo caminaba de un lado a otro sin saber a dónde ir y los mismos sacerdotes tampoco sabían qué hacer porque eran tiempos difíciles, porque eran tiempos de castigo. Ahora tendréis algo similar, Mis pequeños. ¿Cómo estaréis en ésos momentos?
Os he dicho que aquellos que estéis Conmigo, YO OS IRÉ PROTEGIENDO y sabréis entender los acontecimientos que os rodearán.
No así aquellos que no están preparados, porque muchos se desesperarán y hasta su vida querrán quitarse. Los que estéis Conmigo, conservaréis la calma. Estaréis en paz, conoceréis Mis Designios y ayudaréis a vuestros hermanos que desesperados estarán, a que recuperen ésa paz.
Ciertamente muchas tragedias veréis, pero deberéis conservar la paz en todo momento. Mis santos ángeles que estarán junto a vosotros, os estarán protegiendo en todo momento. Por eso también os he pedido que tengáis ésa devoción grande a los santos ángeles, porque ellos os están protegiendo y están preparados ya para la Gran Batalla.
Recordad que estáis en el campo de batalla en donde el Príncipe de éste Mundo, os ha venido atacando desde vuestro nacimiento. Mis santos ángeles también os han venido protegiendo desde vuestra concepción.
Espiritualmente hablando Mis pequeños, estáis en un campo de batalla que no soportaríais ver. Realmente estáis viviendo en forma y en un lugar muy diferente a lo que vuestros ojos humanos pueden ver. La realidad espiritual es otra y os espantaríais de verla, aunque fuera por unos pocos momentos.
Debéis creerMe Mis pequeños, que necesitáis una protección muy grande de parte Mía. Y debéis estar unidos en todo momento a Mí, vuestro Dios. Vuestra Oración y vuestra donación, son importantísimas en estos momentos de cambio y de prueba.
El Cielo, unido está con las almas de la Tierra que quieren unirse a Mi Voluntad. Si NO os acercáis a Mí Mis pequeños podréis dudar, os podréis llenar de temores y hasta Me podréis fallar.
PASE LO QUE PASE a vuestro alrededor, venid a Mí y pedid Mi protección, Mi ayuda, Mi Sabiduría, para saber qué hacer en ésos momentos.
Recordad que Soy vuestro Creador y conozco vuestra pequeñez y hasta podría decir vuestra nulidad. Y Mi Amor no os puede abandonar en estos momentos de gran prueba espiritual, de eso deberéis estar completamente seguros.
Yo estaré a vuestro lado ayudándoos en todo momento, pero necesito vuestra total donación a Mí vuestro Dios. Ya no son momentos de dudar, son momentos para estar completamente seguros en Mi Omnipotencia.
Satanás no puede contra vosotros si vosotros estáis totalmente sumergidos en Mi Amor y en Mi Voluntad.
No dudéis en ningún momento, porque la duda Me ofende, Yo Soy Omnipotente. Confiad en que éste cambio va a ser benéfico para todos vosotros. Y las almas que queden serán premiadas grandemente y serán premiadas principalmente, por su fidelidad a Mi Voluntad.
Así que empezad Mis pequeños, a hacer éstos ejercicios de fidelidad. Mi Hijo os decía: “sean como niños” y eso es lo que quiero que seáis en éstos momentos, niños y muy pequeños que necesiten totalmente de su padre o de su madre que los protejan, que los ayuden, que los salven de todo Mal.
Dejaos consentir por Mí vuestro Dios. Os he pedido que os donéis perfectamente a Mi Voluntad.
Cuando vosotros os donáis a Mí, a Mi Voluntad, ya sois parte del Cuerpo Místico de Mi Hijo y ¿Puede alguien dañar a su propio cuerpo? No, Mis pequeños.
Cuando estáis Conmigo, cuando vivís Conmigo, cuando vivís en Mi Amor, no puede salir maldad de vuestro corazón; porque además, vuestro corazón Me pertenece.
Ciertamente cuando vivís en el pecado, Satanás os lleva al vicio y a la Maldad. Y entonces sí dañáis vuestro cuerpo. Pero cuando estáis así, no pertenecéis al Cuerpo Místico de Mi Hijo.
Cuando estáis en contra Mía y de Mis Mandatos, sois como una enfermedad al Cuerpo Místico, al Cuerpo Sano, al Cuerpo Santo.
Y a la enfermedad se le ataca, se le elimina, no se le permite estar en el cuerpo sano. Por eso os hablo tanto de vivir Conmigo, de ser parte del Cuerpo Místico de Mi Hijo, porque quiero unir a todas las almas.
Pero ciertamente no se dará todavía en éste tiempo, porque siguen prefiriendo vivir para ellas mismas, vivir en el pecado, vivir en la maldad.
Por eso os vuelvo a repetir Mi Promesa, de que si sois almas llamadas a vivir ya en Mi Cuerpo Místico, que es el Cuerpo de Mi Hijo.
Protegidas seréis. Me habéis costado mucho, Mis pequeños. Mucho Dolor y mucho Amor. ¿Cómo puedo despreciar a las almas buenas, a las almas que se han dejado mover plenamente por Mí?
Por eso debéis confiar plenamente en que Yo os protegeré, porque no puedo permitir que se siga dañando el Cuerpo Místico de Mi Hijo y que las celulitas que sois vosotros, sean apartadas de Él y sigan siendo dañadas por el Mal de Satanás.
Os digo todo esto Mis pequeños, para que tengáis una plena confianza en Mí vuestro Dios, en que si realmente os sentís ya de Mi parte; si os sentís que sois parte del Cuerpo Místico, NO DEBERÉIS TEMER A LOS ACONTECIMIENTOS.
Porque no os separaré ya más del Cuerpo Místico de Mi Hijo. Estoy recuperando celulitas, estoy recuperando almas. Y todo esto que se va a dar, será para ello. Así que no temáis.
Os repito, vosotros mismos sabéis en vuestro interior, cómo estáis ante Mis Ojos. Cómo Mi Amor os protege, os guía, cómo Mi Amor ama el amor que ya vosotros habéis hecho crecer y protegéis en vuestro interior.
¿Cómo creéis pues Mis pequeños, que Yo no os proteja, que Yo no os cuide en estos momentos, cuando se irá recuperando el Cuerpo Místico de Mi Hijo?
Tened confianza en Mí vuestro Dios, los que ya sois parte del Cuerpo Místico de Mi Hijo.
Confiad en Mí hijitos Míos, Yo no Me separaré de vosotros en ningún momento. Os daré fuerza física y espiritual para vencer en ésta prueba. Prueba que os hará alcanzar vida de Amor en ésta Nueva Era de Mi Santo Espíritu que ya está aquí.
Confiad que Yo estoy a vuestro lado, para guiaros y en vuestro corazón para amaros y daros fuerza, fuerza que ha de vencer a las fuerzas del Mal.
Yo os amo y os bendigo en Mi Santo Nombre, en el de Mi Hijo y en el del Amor de Mi Santo Espíritu QUE YA ESTÁ AQUÍ… ¡INVOCADLO! ¡Llamadlo, hijitos Míos, llamadlo.
Yo os Bendigo, Mis pequeños. Os llevo en Mi Corazón. Amaos los unos a los otros, os lo pidió Mi Hijo. Bendecid estos momentos en vuestra vida y agradecedMelos… Son momentos de Gloria. Os amo, os amo, Mis pequeños. Y dejadMe ser vuestro Dios en vuestra vida en total libertad. Os amo, Mis pequeños y os Bendigo en Mi Santísima Trinidad.
Reflexionad y aceptad que Mí Santo Espíritu de Amor os guíe hacia la Verdad y a la Luz Verdadera de Mí Camino al Reino Celestial.
Os amo y bendigo en Mí Santo Nombre en el de Mí Hijo Jesucristo y en el del Paráclito de Amor. Recibid todo el Amor de Mí Hija la Siempre Virgen María.
N146 LA ESENCIA DIVINA
Hijitos Míos, en las Escrituras, tenéis que, estos cielos y estas tierras pasarán pero, Mis Palabras, nunca pasarán. Mis Palabras son eternas, Mis Palabras son de Amor, de Sabiduría, de Esperanza y, en Mis Palabras, con el Conocimiento que se os ha dado desde antiguo, tenéis Mi Sabiduría Divina y el hombre debiera estar feliz por ello.
¡Cuántas veces no estáis buscando cosas misteriosas! O cosas diferentes a lo que sabéis, porque queréis conocer más y son cosas de hombres. Os gustan, os interesan y eso es bueno, porque vosotros también tenéis que buscar vuestro conocimiento intelectual.
Si buscáis lo bueno, NO lo misterioso, NO lo satánico en donde os engaña Satanás y os desvía.
Cuando buscáis cosas nuevas para aprender algo que os interesa, os va a llevar a crecer culturalmente para ayudar a vuestros hermanos y os gusta eso. Pero Mis pequeños, conocer la Sabiduría Divina os debiera alegrar inmensamente. Es la Sabiduría de todo un Dios que os ha dejado para que vosotros crecierais, compartierais y os prepararais para el paso de la Tierra, al Reino de los Cielos.
Pero, qué tristeza Me da Mis pequeños, saber que a la gran mayoría de vosotros NO os interesa abrir las Sagradas Escrituras, para conocer más de lo que Yo os he dejado…
Y que el Conocimiento de Mis Enseñanzas os van a llevar a la perfección, os van a llevar a que Me entendáis a Mí como vuestro Padre, vuestro Dios, vuestro Creador, vuestro Salvador. Y de esta forma, aprender a agradecerMe y amarMe más.
Que vosotros no podéis amar a alguien si no le conocéis. Pero NO os interesa saber de Mí. NO os interesa crecer en Sabiduría Divina, que esto os llevaría a la perfección.
Mis pequeños, en el Reino se vive la Perfección y vosotros en cierta forma, estáis obligados a conocer de todo esto, porque sois Mis hijos. Y si Yo os voy a pedir perfección en el Reino de los Cielos si tuvierais el interés, abriríais las Sagradas Escrituras más continuamente.
Para aprender de lo que Yo os he dejado ahí. Que esto a la vez os llevaría a una fraternidad no solamente Mundial, sino Universal. Y al estar produciendo amor entre hermanos, el Mal se acabaría.
Tenéis el Tesoro más grande, que son las Sagradas Escrituras entre vosotros.
El Libro Perfecto, el único Libro de entre los millones de libros que existen, éste es el Libro que os debiera interesar para perfeccionaros y no lo hacéis.
Meditad todo esto Mis pequeños. Y sobre todo por lo que os dije: que en el Reino de los Cielos, se vive, se habla, se goza, lo que viene en el Libro Sagrado. Y lo tenéis al alcance de vuestra mano desde ahora en la Tierra, con vosotros y no lo aprovecháis.
De esto también seréis juzgados, por haber desaprovechado el Gran Tesoro que teníais y que Yo os dejé desde antiguo para vuestra perfección y no lo tomasteis.
Ciertamente, el no estar preparados para el Reino de los Cielos con el Conocimiento Divino, os lleva a más tiempo de purificación en el Purgatorio.
Vosotros escogéis, aprender con gusto y con amor desde ahora. O tendréis que pasar más tiempo de preparación y purificación en el Purgatorio, para poder entrar al Reino de los Cielos.
Yo no Soy un Dios difícil, no Soy un Padre que os esté exigiendo lo que debéis hacer. Os pido que hagáis las cosas porque esto es lo que os conviene, pero vosotros escogéis. Meditad, meditad Mis Palabras y ponedlas en práctica.
Hijitos Míos, qué difícil se os hace hacer vida de amor. Si estuvierais más conscientes de vuestro Juicio y de la vida eterna, que puede ser para Bien o para mal, de vuestra alma; pondríais un poco más de cuidado en cómo lleváis vuestra vida en la Tierra.
Vida de amor, es una vida de ejemplo, Mis pequeños. Se os dio el don de la vida para ser ejemplo ante vuestros hermanos. El Pecado afectó todo lo creado, todo el Universo fue afectado por el Pecado Original y vuestra misión es reparar, es mejorar todo lo que la Maldad destruyó.
Estad conscientes de esto que os voy a decir: Yo vuestro Dios, el Perfecto, vuestro Padre; os doy el don de la vida para que bajéis a la Tierra a que compartáis el Bien que viene de Mí. El Bien está en vuestra alma.
Vuestra alma está impregnada de Mi Esencia Divina, que es el Amor. Vuestra misión en la Tierra es simple: es amar.
Bajáis a la Tierra y, ¿Cuántos de vosotros, realmente bajáis a amar? Hay dos opciones, amar u odiar. Hacer crecer vuestra alma o destruirla con la Maldad de Satanás. Vuestra función es la más sencilla, es una función Divina, una tarea Divina que os va a dar inmensidad de gozo y de regalos cuando regreséis al Reino de los Cielos.
Pero durante vuestra vida en la Tierra si estáis llevando a cabo vuestra misión correctamente, que es amando a vuestros hermanos y mejorando todo aquello que está caído en el pecado para llevarlo nuevamente a la Gracia, ya desde vuestra vida en la Tierra vais recibiendo Mis Cuidados, Mis Bendiciones, Mis Gracias, Mi Vida espiritual a través de Mi Santo Espíritu.
El estar Conmigo Mis pequeños, os va a asegurar una vida de muchos cuidados. Ciertamente, también de ataques de Satanás, porque él sabe cuándo Yo estoy cuidando y consintiendo a las almas que están tomando su misión correctamente con amor y sobre todo, con cariño.
Pero siempre seréis cuidados por Mí si estáis haciendo lo correcto. Tenéis todo cuando estáis Conmigo y os vuelvo a preguntar ¿Cuántos de vosotros realmente estáis haciendo lo correcto que es amando, transmitiendo amor, reparando todo aquello que está afectado por el Pecado, otra vez a niveles de Amor?
Pocas, MUY POCAS almas tratan de llevar a cabo esta tarea, que es la que os enseñó Mi Hijo: amar, reparar, unir en el amor, perdonar, saber perdonar al que ha hecho el mal.
Mis pequeños, el Amor lo es todo. Es Mi Esencia, Mi Esencia Divina. Fuisteis creados en Mi Esencia Divina y vuestra finalidad eterna, es vivir en Mi Esencia Divina.
Son tantas y tantas las almas que se condenan porque no quieren amar. Despreciáis el dolor, despreciáis la maldad, la atacáis; pero en buena parte, toda vuestra vida, la compartís con Satanás.
Me duele mucho Mis pequeños, hablaros de esto. Me pertenecéis, pero vosotros escogéis libremente vivir con el Enemigo. O desgraciadamente, morir también con él, para condenaros eternamente.
¡Me hacéis sufrir tanto, Mis pequeños! Por vuestro desamor, por vuestras traiciones, por vuestra falta de Sabiduría. Por eso he de adelantar esta Purificación, para terminar este tiempo de gran Maldad de Satanás y empezar una nueva oportunidad para las almas buenas, para las almas que han buscado santidad en la perfección de sus actos.
Es una oportunidad que le daré a las almas escogidas de este tiempo, para que levanten a una buena cantidad de almas del Universo entero. Ellas saben reparar, saben amarMe, saben agradecerMe, saben humillarse… Saben darse como Mi Hijo se dio en obediencia para salvaros.
Este será un tiempo de Amor, de mucho Amor, en el que estas almas escogidas estarán ante Mí, como lo están los Santos Ángeles en el Reino de los Cielos: totalmente a Mi servicio, con un deseo grande de agradarMe, de amarMe, de servirMe.
Soy vuestro Rey, Soy vuestro Dios, Soy vuestro Padre, ¿Acaso no Me merezco lo mejor, cuando Yo os he dado lo mejor que cada uno de vosotros tenéis?
Aunque ya hace tiempo os dije que estáis viviendo tiempos de Justicia, Mi Misericordia ciertamente no termina porque es un acto de Amor y Yo Soy Todo Amor. La Misericordia ya está entre vosotros y la Justicia también.
La Justicia se irá incrementando, Yo tengo derecho a Mi Justa Justicia, aunque a muchos de vosotros no os guste esta palabra. Y de hecho no debiera de existir Mis pequeños, si vivierais en el Amor.
A la Justicia le temen los que han vivido en el Mal, los que Me han traicionado, los que han traicionado el amor de sus hermanos, los que han vivido para hacer el mal, para aprovecharse de sus hermanos para eliminarlos… Ellos son los que temen a Mi Justa Justicia.
En cambio las almas que tratan de vivir en el Amor, en ellos vive Mi Misericordia. No le temen a Mi Justicia, porque además, saben que tengo derecho a ella. Pero que no les va a tocar a ellos, porque Mi Justicia prácticamente no toca a aquellas almas que han vivido en amor.
¡Cuántas almas ahora temen a Mi Justa Justicia, se han aprovechado de los tiempos de amor! Han vivido en el Pecado, han causado mucho daño a Mi Sacratísimo Corazón y a sus hermanos. Pero ahora, ya os alcanzó el Tiempo…
Estáis ya viviendo el final del Final de los Tiempos y Mi Justicia está a las puertas.
Estas almas malas la intuyen, tiemblan, saben que ya les llegó su momento. Que teman ciertamente, porque no tuvieron temor de Dios cuando hacían el Mal, cuando no veían por el bien de sus hermanos, cuando se aprovechaban del prójimo.
Vivieron en la Maldad de Satanás y así como él fue juzgado y eliminado del Reino de los Cielos, todas estas almas que han vivido en el mal, intuyen su futuro eterno. Es tanta su maldad, pero también su soberbia como la de Satanás, que les impide hasta arrepentirse.
El Mal corroe el alma, destruye los buenos sentimientos. No es tierra fértil para el amor. Así que al momento en que estas almas se quieren arrepentir, no saben hacerlo.
A muchas, ni les interesa o sienten que Mi Justicia no vendrá, inventan tantas cosas para tratar de quitarse una realidad de encima… Y eso hace que queden más desprotegidas para el momento de la realidad, en la cual Me Presentaré y tomaré cuentas de sus actos.
Me disgusta tanto ver estas almas, Mis pequeños. Son Mis hijos, pero en muchas de ellas, ya no quedan residuos de amor. Almas que eliminaron prácticamente, todo el amor que pudieron haber tenido y prefirieron vivir en la maldad para llenarse solamente de bienes de la Tierra, que las van a llevar a un mal eterno.
A un castigo justo, porque escogieron un mal camino y no se arrepintieron del mal que hicieron a sus hermanos; pero que primeramente Me lo hicieron a Mí, al darle la espalda a Mi Amor.
Cuánto Me duelen estas almas, porque vuestra alma es parte de Mí. Almas que en lugar de tomar y seguir la Esencia Divina la eliminan a toda costa; a partir de actos malos, pecaminosos, traicioneros, que continuamente hacen.
¡Cuánto Dolor! Y tened entendido Mis pequeños, que Yo no Me alegro de enviar a un alma al Fuego Eterno. Amo a todas las almas y Me duele la condenación de aquellas que se pierden eternamente.
Aún a pesar de sus graves pecados, de la maldad que dejaron entrar en su corazón, NUNCA, nunca Me alegraré aunque se lo merezca, a que se pierda eternamente un alma.
Vosotros todavía no comprendéis lo que es Mi Amor Divino, el Verdadero Amor que aún vosotros no conocéis, porque estáis afectados por el Pecado Original.
Llegará el tiempo en que comprendáis Mi Amor y es cuando entenderéis Mi Dolor. Las lágrimas de Mi Hijo, el sufrimiento de Su Pasión por la salvación de todos vosotros. Pero más, por el Dolor de haberse dado por todas las almas y no se iban a salvar muchas, porque prefirieron o iban a preferir vivir en el mal.
Reparad Mis pequeños, por el Dolor que tantas almas Me causan y aún vosotros mismos, que Me causáis con vuestros pecados, aunque no sean tan graves, como los de aquellos que se condenan eternamente.
AmadMe, Reparad, LlevadMe en vuestro corazón… Y llorad Conmigo el Dolor que Me provocan estas almas que se condenan eternamente.
Hijitos Míos, ser como niños no es solamente una actitud, es una forma de vida. Sois niños, porque sois Mis hijos y de ahí parten todas vuestras obligaciones; hijos Míos, seréis siempre. Ser niños es la forma de vida que debéis llevar ante Mí, principalmente en la Obediencia.
Los niños, desde pequeños, son educados, son guiados, son llevados a la perfección a donde cada familia los quiere llevar. Yo quiero la perfección de todas las perfecciones, porque no solamente fuisteis creados para convivir entre los hombres, fuisteis creados para convivir con toda la Creación visible e invisible, que ésta incluye el Reino de los Cielos, a donde tarde o temprano llegaréis.
Mis pequeños, sois niños y debéis vivir así como niños, obedeciendo, primeramente, lo que Yo os pido, los Mandamientos, que estos os llevan a la perfección de vuestros actos.
Los Mandamientos se os dieron por causa del Pecado. El hombre no estaba programado para vivir en el error y en el pecado. Estabais llamados desde el Principio a la perfección, porque si Yo Soy vuestro Dios y Soy el Perfecto, todas Mis Obras son Perfectas.
El hombre, escogió seguir a Satanás y éste, os llevó a la imperfección, que es el Pecado. La desobediencia es una de las principales causas de que un niño vaya por mal camino, los hijos desobedientes siempre acaban mal. Los padres aman a los hijos y siempre buscan lo mejor para ellos.
Os repito, vosotros no necesitabais los Mandamientos, vuestros Primeros Padres no los necesitaron. En el Amor en la perfección, se vive totalmente en obediencia a Mí, en total sumisión. Pero no en una sumisión esclavizante, sino en una sumisión en donde se sabe que el Padre va a buscar lo mejor para el hijo…
Y si le pide algo o se lo ordena, de ahí siempre surgirá un bien. Pero un bien que lo va a exaltar, que lo va a ser mejor y nunca para esclavizarlo ni disminuirlo.
Sois Mis hijos, Soy vuestro Dios; no habéis meditado ésta categoría espiritual que cada uno de vosotros tenéis, en la que fuisteis Creados. No sois creaturas o cosas, fuisteis creados a Imagen y Semejanza Mía. Vosotros no meditáis las grandes Bendiciones que recibís con vuestra creación. El don de la vida es algo grande, en lo que tampoco meditáis.
Os he dado la tarea inmensa de servirMe. Los Ángeles en el Cielo se alegran inmensamente en el servirMe y vosotros, ni siquiera meditáis en ello.
Postrados debierais estar en agradecimiento de tantas y tantas Bendiciones que recibís de Mí y no lo hacéis. Tenéis un corazón muy duro. PedidMe que os quite el velo que os evita conocer esta realidad Divina, para que os deis cuenta cómo os he amado desde que fuisteis Creados y qué poco Me habéis CORRESPONDIDO.
Si fuerais como niños, lo pediríais de inmediato. El niño siempre está alegre, busca saber más, busca amar, agradar. La presencia del niño alegra, ayuda a que el ambiente en una familia cambie cuando son niños buenos, cuando son niños obedientes y sanos, espiritualmente hablando.
Nuevamente os pido como Mi Hijo os lo pidió, ser como niños. Pero ser verdaderos niños y primeramente como os dije, obedientes y deseosos de agradar a vuestro Padre, que Soy Yo.
Hijitos Míos, Yo no os di el don de la vida para que vinierais a la Tierra a poner piedras en el camino de vuestros hermanos, sino para allanarles su camino y llevarlos a la salvación.
Cada uno de vosotros tiene un tiempo de vida y este tiempo de vida, va a afectar a las almas que vivan en vuestro propio tiempo. Ciertamente vuestra Oración, también puede ayudar a almas pasadas y futuras. Pero principalmente estoy hablando del ejemplo que daréis y con las almas con las que vosotros compartiréis vuestra vida en el tiempo que os permitiré u os he permitido vivir.
La principal afectación a las almas con las que vosotros convivís, es causada con vuestro ejemplo. Cuántas veces distraídamente o a propósito hacéis o decís cosas desde que sois pequeños cuando ya tenéis uso de razón, porque ya habéis convivido con hermanitos vuestros o amiguitos de la escuela o compañeros de los cuales aprendéis de algunos cosas buenas, de otros cosas malas.
Desde pequeñitos vais afectando almas. No os dais cuenta y desde ahí empieza a actuar Mi Justa Justicia.
Para muchos, en este momento brincaréis de la silla y diréis que no os dabais cuenta de lo que hacíais y por eso os dije cuando ya tenéis uso de razón, cuando ya os dais cuenta del mal que hacéis o del bien con el que ayudáis.
Y así vais creciendo Mis pequeños, por un lado dejando estela de buenas cosas que hacéis, que decís o de vuestras oraciones. Que ésas las escucho Yo, las tomo en cuenta y las aplico.
Pero también vais afectando muchas almas con vuestras malas decisiones, con vuestras críticas, con vuestra maldad interior, vuestros malos deseos, blasfemias, maldiciones, malos tratos, robos…
Tantas, tantas imperfecciones a donde os ha llevado Satanás y vosotros, aceptando estas malas acciones en vuestra alma, afectando así a vuestros hermanos con ellas.
Cuántas miles y miles de malas acciones habéis cometido a lo largo de vuestra existencia. Pecáis muchísimas veces al día, con pecados que podéis decir que son veniales, pero ya dañaron a vuestra alma ya afectaron, ya merecen un castigo y una pena.
Y así van pasando los días de vuestra vida. Y si pudierais ver cómo se van amontonando todas estas acciones negativas en vuestro ser, en vuestra alma para vuestro Juicio, entraríais en horror y quizá hasta en pánico; porque si os estoy diciendo que vais a ser juzgados por ello, vuestras buenas obras no alcanzarían para borrar tantos pecados que cometéis.
Y es una realidad, Mis pequeños. El hombre comete más maldad que bondad durante su vida. Muy pocas son las almas que viven realmente sirviendo a sus hermanos para allanarles la vida y ayudarles en su salvación eterna. Preferís criticar que hacer el bien, por poneros un ejemplo.
Y así es toda vuestra vida, Mis pequeños. En lugar de tratar de buscar vuestra perfección, para perfeccionar a vuestros hermanos; al contrario entra la crítica, la envidia, la maldad, el error y no deseáis el bien como debierais desearle a vuestros hermanos.
Sale más maldad de vuestra boca, de vuestros pensamientos, de vuestro corazón, que el bien que debierais vivir y desear.
Por eso os insisto tanto en las Virtudes, en los Sacramentos, en el arrepentimiento. Como os he dicho, prácticamente no hay alma que muera y pueda entrar directamente al Reino de los Cielos, salvo en casos especiales que ya conocéis. Pero en muertes naturales, normales, es prácticamente imposible por tantos errores, maldades, pecados que traéis arrastrando de años y años.
Procurad que cuando os vayáis a confesar ante un ministro Mío, vuestro arrepentimiento sea profundo, verdadero y con un deseo de cambio total.
Ciertamente contáis con Mi Misericordia, pero necesito vuestro arrepentimiento.
Al entender esto Mis pequeños, tras de esta explicación que os doy, reparad vuestro pasado y empezad una nueva vida en la perfección. Y viviendo para allanar el camino de vuestros hermanos a través de una vida de ejemplo, de intercesión, de ayuda.
Y esto es mostrándoles cómo se debe vivir. Y para esto Mi Hijo os lo enseñó: sed los Cristos que Yo quiero que seáis en estos tiempos, para allanar el camino de vuestros hermanos para su salvación eterna.
Reflexionad y aceptad que Mí Santo Espíritu de Amor os guíe hacia la Verdad y a la Luz Verdadera de Mí Camino al Reino Celestial.
Os amo y bendigo en Mí Santo Nombre en el de Mí Hijo Jesucristo y en el del Paráclito de Amor. Recibid todo el Amor de Mí Hija la Siempre Virgen María.
R71 EL ARDID DE SATANÁS
AVISO IMPORTANTE. Anticipándonos a la publicación del Mensaje del 14 de julio de 2016, queremos hacer de su conocimiento que Dios Padre nos instó a hacer uso de la Indulgencia Plenaria que se puede obtener el día 2 de agosto, día de la Porciúncula. Y nos recomendó que la tomáramos en vista de los Acontecimientos próximos.
Para más información sobre la Indulgencia de la Porciúncula:
24 DE JULIO DEL 2016
Amadísimos hijos de Mi Corazón Inmaculado:
Les bendigo y como Madre que soy de la Humanidad, permanecen en Mi Corazón. Que no se turbe el corazón de aquel que vive en la continua búsqueda de la conversión.
EL TRANSITAR HACIA MI HIJO ES UN CAMINO DE PRUEBAS.
Sin embargo cada prueba es una Bendición sin la cual no crecerían aceleradamente, como deben crecer en este Instante, en el que el Pueblo de Mi Hijo tiene que conocer y reconocer la Palabra Divina en la Sagrada Escritura.
Hijos de Mi Corazón Inmaculado, la Humanidad se encuentra en la Confusión. Se preguntan unos a otros qué creer y en qué creer. Este obrar y actuar no es acorde con la Voluntad Divina expuesta en la Ley de Dios: en los Mandamientos, los que son intransferibles, incambiables e inalterables.
Son el Deseo Eterno del Padre para que Sus hijos no entren en confusión y se mantengan claramente dentro del Amor, del cumplimiento y la práctica, acatando la Voluntad Divina.
Ustedes a quienes amo, a ustedes hijos Míos les llamo a permanecer firmes e inamovibles. Sus hermanos necesitan de testimonios que les motiven a continuar en la búsqueda del SÍ a Dios sin desfallecer, sin cansarse, sin dejar de lado el compromiso con el prójimo y con cada uno en particular.
Les había mencionado que la incertidumbre sería la pesadilla del Pueblo de Mi Hijo y así lo viven. Los actos terroristas suceden con mayor frecuencia, el objetivo es atemorizar, crear el caos y llevar al hombre a la impaciencia y al desconcierto.
YO LES INVITO A NO DUDAR,
Sino a fortalecer la Fe en cada explicitación de esta Palabra de Mi Hijo.
¿A quién persigue el Mal?
A los inocentes, a los pobres hijos de esta Madre; pero sobre todo persigue a la juventud para llevarlos a formar parte de ese terror que expanden por doquier, sin ningún temor ni reparo. ¡Cómo Me duelo por estas obras y actos!
El Demonio busca a Mis hijos para hacerles caer y que abandonen a Mi Hijo, transgredan la Ley de Dios y sean los que interrumpan la fraternidad que Mi Hijo les pide y que ha encomendado a cada uno, para que en total armonía avancen en Amor, Caridad, Esperanza y Fe.
A quien no es Amor, le es difícil caminar. Continúen recibiendo a Mi Hijo en la Sagrada Eucaristía. Descubran la Presencia Divina en cada instante de la vida, en todo lo creado; para que al ser conscientes de ello, sean a la vez incansables buscadores de la Verdad.
Amados hijos de Mi Corazón Inmaculado, son conscientes de que el ‘Humo de Satanás’ ha invadido la Iglesia de Mi Hijo y por ende, el Mal se goza en estremecer a los Míos, amenazando la Fe del Pueblo de Mi Hijo.
LA PALABRA DIVINA ES UNA: AYER, HOY Y SIEMPRE, LO ES Y LO SERÁ.
Las amenazas de ideologías y sectas hacia la Iglesia de Mi Hijo han pasado a ser realidad. Desde dentro de la misma Iglesia le atacan, le oprimen y tergiversan la verdadera Palabra Divina, para que el Caos se extienda y los fieles se alejen de la Iglesia que Mi Hijo instituyó.
LA DIVISIÓN SE DA
Y LA IGLESIA DE MI HIJO SERÁ ESTREMECIDA FUERTEMENTE
DESDE SUS CIMIENTOS.
Algunos de Mis hijos Predilectos han dejado de lado la verdadera Enseñanza al Pueblo de Mi Hijo, sirviendo en este instante a intereses ajenos a la Voluntad Divina.
La Masonería ha influenciado fuertemente al Pueblo fiel, le ha brindado una enseñanza condicionada sobre la verdadera Fe y por esta causa, la débil Fe de Mis hijos es como una veleta al viento y hasta DUDA DE LO QUE CREE.
El hombre no ha logrado vencer su Ego, permitiendo que la soberbia y el amor a sí mismo le dobleguen a optar por lo indebido y pecaminoso, ofendiendo gravemente a la Trinidad Sacrosanta.
HIJOS, EMPÉÑENSE EN DOBLEGAR EL EGO HUMANO CON EL AMOR DIVINO PARA QUE NO SE RESISTA.
No olviden que el amor todo lo vence y se mantiene en una constante evolución, pues de cada acto u obra recibe la correspondencia de estos actos y obras para bien o para mal de la criatura humana.
Sean cumplidores de la Voluntad Divina cada instante. Sean verdaderos testimonios del Amor Divino que mora en ustedes. No olviden que no son criaturas vacías, sino que el Espíritu Santo reside en cada uno.
Amados hijos de Mi Corazón Inmaculado:
El Instante, que no es instante; es el Tiempo de Dios en el que cada revelación se va dando a cumplimiento. Ustedes vivan en paz y no se desesperen ni intranquilicen.
La Fe en el Amor y la Misericordia de Mi Hijo por ustedes, tiene que ser mayor y no desesperarles.
Cada instante los actos tienen que sumar ese testimonio de verdaderos cristianos ante sus hermanos y en lo secreto. De esta forma la espera no es tan temida, ni la Justicia Divina les llevará a la desesperanza, ya que son reflejo del obrar y actuar del verdadero hijo de Mi Hijo.
La voluntad humana debe superar todo embate para que con fuerza diga: ¡No! a lo que le puede llevar a separarse de lo Divino y alejarse de la Felicidad Eterna.
Oren hijos, oren por Francia, padece sin descanso. Oren por esta nación.
Oren hijos, oren por Estados Unidos, padece ante la acogida que le dan al Demonio. El mismo Demonio le persigue para que decaiga y no invoque a Dios. El SUFRIMIENTO será causado por las mentes perturbadas por el Mal y la Naturaleza le lleva a padecer.
Oren por Alemania, un evento le estremecerá.
Oren por Brasil, oren. El Terror invadirá esta tierra en instantes.
Oren hijos Míos, en este instante de agitación, la desesperanza y la falta del amor a Dios en que vive la Humanidad, da paso al Dominio del Mal sobre los hombres.
El actuar no es acorde a un hombre hijo de Dios. La Humanidad no mira el Mal en nada: lo incorrecto es correcto y lo correcto está pasado de moda. ESTE ES EL ARDID DE SATANÁS.
Eso que no desean reconocer y que les lleva hacia el Fuego Eterno, si no se arrepienten y se convierten.
La Guerra será reconocida como tal y los que luchan por la supremacía mundial, no se hacen esperar. La Humanidad será tomada por sorpresa en medio del temor.
Hijos de Mi Corazón Inmaculado:
El Demonio insta al hombre a entregarse a él. La Tecnología mal empleada continúa atrapando las mentes de la niñez y de la juventud.
Las novedades no son novedades, los juegos que practican son Trampas de Satanás. No acepten estas Trampas del Mal.
No se introduzcan en los nuevos juegos, estos son trampas que les inducen a involucrarse con el Mal ¡Detengan a la Tecnología Manipuladora que asecha y arruina a la niñez y a la juventud, para robarles el alma!
Hijos, estos instantes son instantes fuertes. A la vez el hijo de Dios sabe que no será vencido si permanece en el camino correcto.
Yo les protejo como Madre amante de Sus hijos, no decaigan.
La Naturaleza se altera en extremo.
Ustedes sean adoradores de Mi Hijo. Y con el Amor de Mi Hijo, esparzan bendiciones para toda la Creación. Les amo a TODOS, les Bendigo. Les beso el corazón para que continúen hacia delante, sin titubear.
EL PUEBLO DE MI HIJO NO CAMINA SOLO, SINO BAJO EL AMPARO DE SU DIOS.
En cada instante eleven este Pedido:
En los instantes de llenura espiritual:
Sagrados Corazones de Jesús y María, sean mi Fortaleza y la de mis hermanos.
En cada instante de unidad:
Sagrados Corazones de Jesús y María, sean mi Fortaleza y la de mis hermanos.
En cada instante de soledad:
Sagrados Corazones de Jesús y María, sean mi Fortaleza y la de mis hermanos.
En cada prueba:
Sagrados Corazones de Jesús y María, sean mi Fortaleza y la de mis hermanos.
En la Fe, Esperanza y Caridad:
Sagrados Corazones de Jesús y María, sean mi Fortaleza y la de mis hermanos.
En la bendición para la familia:
Sagrados Corazones de Jesús y María, sean mi Fortaleza y la de mis hermanos.
En la prueba y la agonía:
Sagrados Corazones de Jesús y María, sean mi Fortaleza y la de mis hermanos.
Les Bendigo.
Mamá María.
Comentario del Instrumento
Hermanos (as):
Nuestra Madre nos llama a la CONVERSIÓN TOTAL. Nos detalla los Acontecimientos a los que nos vamos a enfrentar, que no se pueden dejar de lado. Pero ante todo, cada Palabra de nuestra Madre nos llama a ir más allá de los Acontecimientos. Es un constante reforzar la Fe, con la praxis de la Palabra Divina que está escrita, pero no se profundiza para hacerla vida.
“SALVAR EL ALMA”: para algunos esta frase no significa nada o poco. Pero es tan profunda, porque el hombre encasilla el alma en sí mismo. Por ello es necesario que cada uno logre trazar un puente entre la criatura y su Creador para que el alma tienda más hacia Dios.
Somos libres, pero encontraremos la verdadera libertad haciendo y viviendo en el Bien. Pero esto no se logra sino es con la gracia de la Iluminación del Espíritu Santo, para que el mal que se aloja en la mente, el pensamiento y en la memoria, sea vencido y el corazón sea todo para el bien y la criatura “TODA DE DIOS”.
Pidamos que nuestro Dios libere el alma de cada uno. LA LIBERE DE LA ESCLAVITUD DEL PECADO. Porque se quiere escuchar lo que se desea, NO la verdad del obrar y actuar personal.
Descubramos a Dios en la Oración, pero no en la que hablamos nosotros sino en la que permitimos que Dios nos hable, para escuchar lo que verdaderamente nos tiene que decir Cristo o nuestra Madre.
Mantengámonos atentos a cuanto acontece y descubramos al Mal en la sutileza, en lo pequeño desde donde ataca al Cuerpo Mistico. Amén.
R67 LAS CRUCES DESPEDAZADAS
¿Por qué la Gospa nos habla hoy en día de cruces despedazadas que debemos recoger?
«Muchos nos han preguntado sobre el sentido de la frase: “los invito, hijos míos, a mirar bien los Signos de los Tiempos… A ‘recoger las cruces despedazadas’ y a ser Apóstoles de la Revelación”.
Mirjana pidió que “recoger las cruces despedazadas” estuviera entre comillas, lo que significa que la Virgen hace referencia a otra realidad previa ya conocida. Podemos encontrarle una explicación en las apariciones que tuvo Bruno Cornachiola en 1947 en Tre Fontane, en la periferia de Roma, donde San Pablo fuera decapitado.
Remontémonos a 1947:
Bruno Cornacchiola nace el 9 de mayo de 1913, en Porta Metronia, Roma. El ambiente en que vivía con sus padres y cuatro hermanos era de muy mal ejemplo y de una pobreza miserable. Su padre era alcohólico y pasaba temporadas en la cárcel. Su madre lavaba ropa para sostener su familia, pero algunas veces seguía la misma conducta que su esposo.
Bruno tuvo muy poca instrucción académica, únicamente la enseñanza elemental. A los catorce años hizo su primera comunión, pero luego de recibirla cayó por muy mal camino. Años mas tarde, el 7 de mayo de 1936, contrajo matrimonio con Yolanda Lo Gatto, por la Iglesia Católica. Poco después de su boda, estando ya en el partido de acción izquierda, sus amigos le convencieron que fuese a luchar en la guerra civil de España (1936-1939) al lado de los rojos (comunistas). Atrás quedó su esposa Yolanda que estaba próxima a dar a luz.
Bruno fue a parar a Zaragoza, España. Los rojos estaban encendidos de odio contra la Iglesia y la perseguían brutalmente. Allí conoció a un alemán protestante quien empezó a instruirle. Este lo puso en contra de la Virgen, de la Eucaristía. Y creó en él un odio férreo a la Iglesia Católica y al Santo Padre.
Le decía que el Papa era la Bestia del Apocalipsis y también le inculcó odio hacia los sacerdotes, religiosos y religiosas. Llegó a tener un odio tan grande hacia todo lo que era la Iglesia Católica, que cuando terminó la guerra de España se dirigió a Roma. Y con la intención de matar al Santo Padre, compró un puñal y gravó sobre él: “Muerte al Papa”.
Al regresar a su casa no tenía deseos de ver a su esposa ni a su niña a la que aún no conocía. Cegado por su odio contra la Iglesia, lo único que deseaba era decirle a su esposa que debía repudiar a la Iglesia Católica. Su esposa no se dejaba convencer y eso provocaba que Bruno la maltratase. Llegó un tiempo de tantos abusos que finalmente Yolanda accedió al cambio de religión; pero antes le hizo prometer que comulgaría con ella los nueve primeros viernes de mes, a lo cual el accedió. Terminados los nueve primeros viernes se hicieron adventistas. El mantenía el hogar como tranviario.
En abril del año 1947, Bruno tenía 34 años. Los superiores de la asociación de la juventud misionera de Lacio, informaron que todos los líderes debían prepararse porque iban a tener una audiencia pública. Bruno, siendo uno de los líderes, le tocaba hacer su presentación el trece de Abril. Así que el sábado 12 de abril, decidió llevar a su familia a un campo donde le permitiría estudiar la Biblia y para que los niños pudieran jugar.
Su esposa se había quedado en casa pues estaba esperando otro hijo. De camino decidió quedarse en un campo aledaño a la abadía de Tre Fontane, Iglesia sobre el lugar donde fue decapitado San Pablo y, donde según la tradición, al caer la cabeza al suelo rebotó tres veces en el suelo e hizo tres fuentes.
Al bajar del autobús buscó un lugar para que jugasen los niños mientras el se asentó a la sombra de un eucaliptus, para preparar su discurso para el día siguiente.
Mientras sus tres hijos: Juan Franco, Carlo e Isla, de cuatro, siete y diez años respectivamente, juegan a la pelota. Bruno busca en la Biblia de los protestantes, pruebas que confirmen la parte de su conferencia que piensa dedicar a rebatir los Dogmas referidos a la Madre de Jesús.
Son las tres y media de la tarde. Los niños, que han perdido el balón y no consiguen encontrarlo, recurren al padre. Bruno interrumpe sus anotaciones, deja el cuaderno de los apuntes en el suelo bajo el eucalipto. Y va ayudar a sus hijos. El cuaderno quedará en el suelo.
Encontrada la pelota se puso a jugar con ellos y en uno de los tiros que hizo; la pelota extrañamente se elevó alto y desapareció. Antes de salir a buscarla, encargó a Carlos que recogiera todo. La niña fue a recoger flores para su mamá y a Juan Franco el mas pequeño, lo dejó sentado. Cada cierto tiempo gritaba para ver si Juan Franco todavía estaba adonde lo había dejado.
A la cuarta vez el niño no respondió entonces salió a buscarlo y lo encontró de rodillas con las manitas juntas y con sus ojos fijos en la gruta. Sonreía y como que conversaba. Entonces se acercó y oyó que decía: “Bella Señora, Bella Señora” Le habló pero el niño no reaccionó.
Buscó a Isla. Y al llegar ella junto a la gruta cayó también de rodillas con las manos juntas y exclamó. “Bella Señora, Bella Señora”. El se enojó pensando que se trataba de una broma; llamó a Carlos y él, al llegar junto a la gruta cayó de rodillas también y exclamó lo mismo.
Pensando que se trataba de un juego trató de levantarlos… Pero no podía porque estaban muy pesados. Aterrado levantó sus ojos al cielo y gritó: “Dios mío sálvanos”. Apenas pronunció ese grito, todo en su alrededor se volvió oscuro y sintió un dolor agudo en sus ojos. Luego dos manos blancas se apoyaron sobre sus ojos quitando de ellos como un velo.
Cayó de rodillas y una luz muy grande iluminó la gruta y luego se formó la figura de una mujer de apariencia humana, vestida con una túnica blanca y ceñida en la cintura con un cinto rozado. Los cabellos eran negros y ligeramente recogidos por una cinta verde esmeralda que llegaba al igual que la túnica, hasta los pies descalzos. En su mano derecha sostenía un libro de pasta color ceniza (El libro de la Revelación: LA BIBLIA…
La Virgen extendió el brazo izquierdo y le mostró una sotana negra y un crucifijo roto, los mismos que él un día había roto. Y con una voz muy dulce le dijo:
“Soy la que está en la Trinidad Divina. Soy la Virgen de la Revelación. Tú me has perseguido, ¡ Ya basta! Entra en el Redil. El Juramento de Dios es santo. Los Nueve Viernes que hiciste antes de entrar en el redil de la Mentira, son los que te han salvado. Obedece a la autoridad del Santo Padre.”
Bruno contaba que la Virgen hizo un gesto con su brazo derecho, señalando el piso con su dedo índice. Y él vio que a sus pies había una cruz rota, un trozo de tela negra y una sotana tirada en el suelo. La Virgen le dijo entonces: “La Iglesia será perseguida, quebrada.Éste es el signo que mis hijos dejarán de llevar… ¡Tú, sé fuerte en la Fe!” (Con la palabra “hijos” María hace referencia a los miembros del clero).
Luego la Virgen le reveló lo que sucedería. En particular lo referente al abandono del ministerio de tantos sacerdotes y le mostró cuánto debía amar y servir a la Iglesia a pesar de todo lo que acaecería en Ella. Esta cruz rota significa el martirio de los sacerdotes que permanecen fieles a Cristo en la Persecución”
“Los sacerdotes, aun cuando se encuentren envueltos en un torbellino infernal, me son muy queridos” le dijo María. “Serán pisoteados y liquidados.” Es por eso que la Cruz quebrada se encuentra cerca de la sotana, signo del despojamiento sacerdotal.
En síntesis: la sotana tirada en tierra significa el abandono del sacerdocio por tantos sacerdotes. La tela negra significa que la Iglesia quedará viuda y será entregada a la merced del mundo.”
La Virgen habla bastante rato esa tarde de Abril. Entre otras cosas, le habla de su Asunción al cielo (en aquel momento aun no había sido declarado el dogma). Le dice «Mi cuerpo no podía marchitarse y no se marchitó»
Entonces le indica al vidente cómo podrá reconocer después a los dos sacerdotes que lo ayudarán a reconciliarse con Dios y con el Papa, a quien tenía intenciones serias de asesinar con un puñal.
En esta primera aparición, la Virgen le reveló toda la doctrina Católica. Le pidió que se confesara y se reconciliara con la Iglesia. De una manera infusa recibió todos los conocimientos de nuestra fe Católica. Le pidió que rezara mucho por la conversión de los pecadores, específicamente el rezo del Santo Rosario; ya que cada Avemaría, son flechas de oro que penetran en el Corazón de Jesús. Le prometió que obraría grandes milagros para la conversión de los incrédulos.
Le confió mensajes específicos para los sacerdotes, invitándolos a una vida de mayor obediencia al Magisterio, Fe intensa a las verdades reveladas, mayor Oración. Acoger una forma propia de vestir y un estilo de vida puro y digno de lo que son.
Al regresar a su casa contó todo a su mujer. Y los dos, después de buscar la ayuda indicada por la Virgen; volvieron a la Iglesia Católica. El 7 de mayo de 1947 abjuraron sus errores.
Hubieron otras tres apariciones: el 6 de mayo, el 23 de mayo y el 30 de mayo.
En la aparición del 23 de mayo, Bruno fue con un sacerdote y un muchacho comunista a la gruta; éste, sin saber nada de las apariciones, al entrar en la gruta cae de rodillas, confiesa sus pecados, pide perdón y se convierte.
El día 30 de mayo la Virgen le pide a Bruno que vaya al convento de las hermanas Maestras Pías Filipenses y les diga que recen por los incrédulos y por la incredulidad del barrio.
Las Apariciones no son todavía aprobadas formalmente por la Iglesia pero recibieron la bendición del Papa Pío XII transmitida por la Secretaría del Estado. El mismo Papa Pío XII, bendijo la estatua llevada hasta la gruta en procesión el 5 de octubre con la asistencia de mas de 500,000 personas.
El día 9 de diciembre de 1949 Bruno visitó al Papa, entregándole en sus propias manos la Biblia protestante con la que había dado muerte a muchas almas infundiéndoles su errónea interpretación y el puñal con el que había pretendido matarlo. Pidió perdón al Santo Padre y le contó todo.
El Papa le respondió que el arrepentimiento es el mayor perdón y le dio la bendición, aprobando que el fuera a predicar la Misericordia de Dios transmitida por medio de la Santísima Virgen.
Hechos y curaciones sorprendentes se han dado desde que la gente comenzó a visitar la gruta. Además del sorprendente aroma a rosas y a lirios, al igual que la tierra del lugar donde se apareció la Virgen al ponerla en lugares donde las personas sufren alguna enfermedad son sanados milagrosamente.
Muchas conversiones; específicamente de dignatarios de la masonería, incrédulos, pecadores e incluso judíos que entran a la Iglesia Católica. Cambios radicales en la vida y la fe de aquellos que por toda su vida vivieron réprobamente.
El 12 de abril de 1980, (sábado de la semana de Pascua) a las seis de la tarde, comenzó una Misa concelebrada por ocho sacerdotes en la Gruta de la Aparición, junto a la famosa Abadía de Tre Fontane. La concurrencia era numerosa: más de 3.000 personas que conmemoraban la aparición allí de la Virgen el 12 de abril de 1947, también aquel año Sábado de la Semana de Pascua.
El vidente Bruno Cornacchiola ya había anunciado según le había manifestado la Virgen el 7 de noviembre de 1979, que en esa Misa iba a suceder algo extraordinario. Efectivamente al momento de la Consagración, de pronto se hizo posible mirar al sol de frente.
Pietro Santiángelo, capellán de la Pía Asociación fundada por Bruno, relata los fenómenos prodigiosos que a continuación vio toda la multitud:
«El sol se levantó hasta el cenit, dando vueltas alrededor de su propio eje y despidiendo rayos de todos los colores y hacia todas partes. Todo el mundo quedó asustado. Unos lloraban, otros gritaban, otros suplicaban en voz alta a la Virgen.
Otro aspecto maravilloso fue la imagen de la Virgen; que se puso en el momento de la consagración, de color rojo intenso, despidiendo rayos que atravesaban el techo de la gruta para unirse con los rayos que procedían del sol. Fue un espectáculo grandioso; jamás visto e inolvidable. Y no duró unos segundos, sino media hora, hasta el final de la Misa.
Todos vieron lo mismo. En el disco del sol, cuya vista no hacía daño a los ojos, empezaron a formarse símbolos bien definidos: primero una M, que después fue transformándose en un corazón y a continuación en una Hostia grande, en cuya superficie se formaron las siglas de la Eucaristía: JHS.
Después de la Misa los fenómenos del sol fueron desapareciendo y aquél volvió a su lugar ya en el horizonte. La luz de la Virgen duró toda la noche».
Bruno explicaba algo las razones de este prodigio:
«En los 33 años que han pasado desde la primera aparición y desde mi conversión, he recorrido todo el mundo para hablar de la Virgen. He dado más de 7.000 conferencias. Ahora tengo sesenta y siete años y no sé cuánto tiempo me queda. Por tanto, en el mes de noviembre pasado al pensar sobre mí vida, sentí el deseo de abandonar mi intensa actividad y dedicarme a la vida de contemplación y de oración.
Mi confesor aprobaba esta idea. Así, el 7 de noviembre del año pasado me fui a la gruta para dar gracias a la Virgen. Al rezar el Rosario se me apareció Ella en su figura acostumbrada, tal como la vi en 1947 y 22 veces en años posteriores. Sentía una gran alegría.
La Virgen me habló de la conversión de los pecadores, de la situación espiritual de la humanidad y de otros temas de que ahora no puedo hablar. Al final me dijo: “El próximo 12 de abril aniversario del primer encuentro, caerá en el mismo día que en 1947: un sábado antes del primer Domingo después de Pascua.
En ese día quiero manifestarme con gracias espirituales y materiales. Además haré algo maravilloso en el sol, para despertar a los dormidos que han perdido la fe… Y aún no creen en lo que Yo he hecho aquí”».
Pero la Virgen, no contenta con esta llamada de atención, que sin duda quiere que meditemos, volvió a intervenir dos años más tarde en la misma fecha:
El 12 de abril de 1982, lunes de Pascua lunes del Ángel, en el lenguaje romano-, tuvo lugar la acostumbrada celebración anual de la aparición de la Virgen en Tre Fontane.
Durante la Misa a las 18 horas, comenzó la comunión de los fieles -más de los que se había previsto, hasta faltar formas. Y a esta misma hora comenzaron los fenómenos en el sol, que duraron más de una hora: Todos vieron, mientras muchos aplaudían gozosos: el centro del sol verde esmeralda, rodeado de un halo rosa anaranjado en el que brillaban multitud de estrellas, como llamas.
El sol giraba, cambiaba de colores, parecía aproximarse aumentando de volumen, lanzaba ráfagas de luz que iluminaban a la gente y el paisaje de diversos colores. Fue evidente e indiscutible la realidad del suceso milagroso (imposible atribuirlo a leyes naturales) percibido por toda la muchedumbre presente, entre ellos numerosos enfermos en sillas de rueda.
Esta aparición nos muestra la gran misericordia de Dios hacia el hombre y el papel corredentor de la Santísima Virgen. Cómo por su intervención logra convertir a uno de sus hijos quizás mas alejados del Corazón de Jesús. Y también el papel que cada uno de nosotros debemos tomar, de darla a conocer para que muchos se conviertan.
“Virgen de la Revelación, Ruega por nosotros.”
Bruno se convirtió de inmediato y se transformó en un ferviente apóstol y un gran defensor de la Iglesia hasta su muerte en 2001. (Se ha abierto en Roma su causa de beatificación). Durante todos esos años recibió alocuciones de la Virgen, sobre todo por medio de sueños, al igual que Don Bosco. Mensajes proféticos que conciernen el futuro mediato inmediato de la Iglesia y los dramas internos por los que atraviesa.
¿Por qué la Gospa nos habla hoy en día de cruces despedazadas que debemos recoger? Podríamos ver en sus palabras un poco la figura de un faro que emite su luz como una señal para quienes queremos servir a Cristo y a su Iglesia en el seno de una gran confusión espiritual y de un profundo dolor.
Nuestro mundo nada en aguas turbias. ¡Y ya no se trata de una sola cruz rota (como en 1947) sino de muchas (las de 2016)! De esta manera Maria nos está manifestando su inmenso Dolor ante la deserción de tantos cristianos, sacerdotes y laicos; con las traiciones en el mismo seno de la Iglesia y la apostasía generalizada de nuestra época.
María le revela a Bruno el nombre por el cual será invocada en aquel lugar: “Soy la Virgen de la Revelación”. Tiene en sus manos un pequeño libro: el Apocalipsis de san Juan, también llamado “el Libro de la Revelación”.
¡La Virgen de la Revelación nos invita hoy a ser “los Apóstoles de la Revelación”! Nos indica las características de estos apóstoles que deberán permanecer fieles en el seno de la Tribulación. Características que le eran propias durante su vida terrenal: “No se lamentarán, callarán y no se rebelarán”.
El Libro del Apocalipsis es un texto sagrado, en parte sellado; que anuncia el porvenir de la humanidad y la victoria de Dios sobre el Dragón y la Bestia, después de una terrible batalla. ¿Cómo no abrir los ojos y constatar que efectivamente hoy en día, como nunca antes, el combate contra la Bestia se presenta violento, decisivo?
Satanás sabe que sus días están contados y juega sus últimas cartas ante la furia de la desesperación. ¿La Gospa quiere indicarnos que estamos en un punto de inflexión, en un momento crítico sumamente decisivo de la vida de la Iglesia? ¿Un tiempo donde se avecina la realización del Apocalipsis, donde cada uno deberá tomar partido: a favor o contra Cristo?
Creo que sí, porque nunca había hecho alusión en sus mensajes a otro lugar de aparición, a excepción de Fátima en agosto de 1991. ¿Por qué vuelve a retomar este mes los puntos fundamentales de Tre Fontane?
También es importante captar, en la intimidad de una oración ferviente con el corazón; cuánta reparación Ella espera que hagamos por tantos atropellos a Jesús Eucaristía y al Sacerdocio que Él ha confiado a los hombres.
“Mi Corazón Inmaculado sangra” nos dijo el 25 de abril. NO nos pide que “recojamos las cruces despedazadas” para criticar o emitir consideraciones negativas contra ciertos sacerdotes o prelados o para hundirnos en el desánimo. ¡No!
Nos invita por el contrario a que hagamos todo lo que esté a nuestro alcance para ayudar y sostener a nuestros sacerdotes por medio de nuestra oración y nuestros sacrificios. ¡Qué consuelo podemos darle, uniendo nuestro corazón a su Corazón Inmaculado que sangra por cierto, pero que ya ve la victoria final!
Es por ello que María busca almas que quieran ser una sola cosa con la suya.
La esposa de Bruno Cornachiola, Yolanda, nos da un ejemplo admirable que será una pista de santidad para muchos consortes que padecen dificultades en su matrimonio. A pesar de las reiteradas infidelidades de Bruno antes de su conversión, Yolanda permaneció fiel en su puesto, orando con fervor. ¡A tal punto que la misma Virgen la ha elogiado! “Las promesas de Dios son y permanecerán inamovibles, le dijo a Bruno.
Los Nueve Viernes al Sagrado Corazón que has hecho, por las instancias amorosas de tu fiel esposa antes que tomaras el camino del error, te han salvado!” ¡Esta simple práctica salvó a Bruno de la perdición! (Ver PS 3) La Virgen no tuvo que enfrentar este tipo de problemas con su esposo José.
Pero ella defendió a Yolanda, afirmándole a Bruno que ella le había permanecido fiel y que nunca había cometido las faltas de las que él la acusaba. Efectivamente él le pegaba; sin duda para descargar sobre ella el remordimiento de sus propias infidelidades. Y lo había hecho la noche misma que precedió la aparición…
La Virgen también nos dice: “Las Avemarías rezadas con fe y amor son otras tantas flechas de oro que alcanzan el Corazón de Jesús”»
© Children of Medjugorje del mes de mayo de 2016
Hijitos Míos, Soy vuestra Madre, la Siempre Virgen María y estoy con vosotros porque el Padre así Me lo ha pedido y éste es el Mi tiempo, de Mi Presencia, en la humanidad entera.
Os he dicho que aún de aquellos que no Me conocen, que no Me aman, no por eso Yo Me aparto de ellos. Yo os busco en todo momento, porque Mi Hijo así Me lo pidió en la Cruz.
Soy la Madre de todo el género humano y vengo en estos momentos, a luchar más fuertemente contra la Maldad de Satanás, que se ha desatado, porque vosotros mismos no habéis hecho lo necesario para detenerlo.
Yo como Madre vuestra, por ser Arca de Salvación para infinidad de almas que se acerquen a Mí, muchas almas serán salvadas, a pesar de que estaban prácticamente condenadas. Porque Yo las atraeré al Corazón de Mi Hijo y Sus méritos las purificarán.
Son Mis Tiempos, porque así lo ha permitido Nuestro Dios, Nuestro Creador, Mi Señor. Son tiempos de Su Misericordia, en donde Me ha permitido a Mí, como Madre de la Misericordia, salvar a aquellas almas que están alejadas de Su Amor.
Voy buscando alrededor del Mundo ésas almas que están equivocadas, pero que todavía hay duda en su corazón, si seguir en la maldad o regresar al Bien, que alguna vez se les enseñó.
Estas almas todavía pueden salvarse, porque todavía tienen en su corazón remanentes del Amor de Nuestro Dios. Todavía la Gracia de Nuestro Dios puede penetrar a ellas y salvarles eternamente.
No dudéis, Mis pequeños, de la gran Misericordia de Nuestro Dios. Confiad y orad, pero con una seguridad tal de que podéis salvar almas para Nuestro Dios. Por eso habéis sido preparados por años, para que vosotros confiarais en Su Amor, en Su Misericordia.
Sabiendo que aún a pesar de que Su Justicia caiga ya sobre la Tierra, Yo puedo todavía tomar Su Misericordia Infinita para éstas almas que se puedan salvar. Aunque vosotros tenéis también que ayudarMe con vuestra Oración…
Pero que sea una oración profunda, unida a la Mía. Sois Mis hijos, Soy vuestra Madre y así juntos, debemos salvar a tantas, tantas almas engañadas pero que todavía llevan una pequeña Luz en su corazón.
Porque Yo, como Madre vuestra vengo en estos tiempos a rescataros contra las fuerzas de Satanás. Mi Hijo Me dio la Gracia de ser vuestra Madre y Yo voy buscando, con el Amor de Mi Hijo, a todas las almas alrededor de la Tierra.
Veo cómo el hombre se ha dejado seducir con los engaños de Satanás. Habéis preferido la inmundicia, la impureza, la inmoralidad, el desamor a todas las Bondades y Enseñanzas que tanto le costaron a Mi Hijo para la perfección humana.
No habéis sabido controlar vuestras pasiones, no habéis sabido apreciar lo que Mi Hijo os dio, que fue puro Amor.
Ciertamente vuestra humanidad afectada por el pecado, tiende a buscar el Mal, con las pasiones desordenadas. Pero Mi Hijo os dio Alimento Divino, Su propio Cuerpo y Sangre para que os alimentarais…
Y vuestra alma se llenara de vida y de Poder Divino y así pudierais vencer fácilmente las pasiones de la carne…
Pero Satanás os ha sabido engañar y vosotros, tragasteis el anzuelo. Él sabe que vosotros, sin Alimento Divino, fácilmente caéis en sus redes y os debilitáis y de ésa forma no le podéis vencer.
Habéis aceptado sus errores y mentiras en vuestra vida. No pedisteis discernimiento Divino, que os podía dar Mi Esposo, el Santo Espíritu de Amor y quedasteis totalmente a merced de vuestra humanidad, debilitada, impura y en muchos casos, perversa.
Porque os llenasteis con tanto pecado de Satanás, que así como él os ha pervertido, ahora vosotros pervertís y destrozáis el alma de otros de vuestros hermanos en muchas formas.
Satanás no utiliza solamente un camino para venceros. Es muy hábil y si vosotros no sabéis cómo vencerle; si no os preparáis para vencerle llenándoos de Sabiduría Divina y alimentándoos con el Amor de Mi Hijo, entonces os volvéis fácil presa de Satanás.
Y lo peor de todo, os volvéis instrumentos de su Maldad y por eso se ha diseminado tanto su maldad en el mundo. Porque muchos de vosotros, muchos de vuestros hermanos no solamente se dejaron vencer por su Maldad, sino que ahora sois vosotros instrumentos de su Maldad.
Sois Mis hijos y Yo os cuido también, Mis pequeños. Pero debéis poner mucho de vuestra parte y sobre todo en estos tiempos de tanta maldad que se ha desatado sobre la Tierra.
Para poder vencer tanta maldad os debéis llenar de mucha Bondad y debéis buscarla. Venid a Mí Mis pequeños, con humildad, con amor, viviendo en pureza y buscando la santidad. Porque si no estáis vosotros deseosos de perfección, no podréis mejorar ni vencer al que ha querido destruir al Amor por los siglos.
Venid pues, con ese deseo de lucha y de mejora. Y pedidMe lo que deseéis para vencer a Satanás en vuestra vida y en la de vuestros hermanos. Su poder es grande, pero ante la Presencia de Mi Hijo, nada puede.
DejadMe, Mis pequeños, que Yo os guíe y os proteja. Que os anime a seguir cuando os sintáis vencidos y debilitados.
Venid, que Yo os puedo levantar, puedo curar vuestras heridas, os puedo alimentar y así seguir ayudando a Mi Hijo en la sanación de éste mundo que vosotros mismos descuidasteis.
Ahora es vuestro tiempo, tiempo para volver a ganar lo que Mi Hijo os dio. Él venció a Satanás en el tiempo en el que vivió y ahora vosotros, permitiendo que Él viva en vosotros, deberéis vencerle también y así preparar el Reinado de Mi Hijo sobre la Tierra.
Venid pues a Mí, Mis pequeños, que Yo os ayudaré a conseguir el triunfo final, no claudiquéis, Yo estoy con vosotros y os amo de todo Corazón.
Se os ha pedido tanto un cambio de corazón, vivir más en la Oración, en la pureza de vida y no lo habéis hecho, Mis pequeños. Y estáis viendo ahora las consecuencias de vuestra negligencia y de vuestro olvido a la Leyes y peticiones de Nuestro Padre Dios.
Pero estoy aquí Mis pequeños, con vosotros y alrededor del mundo. Estoy en el corazón de todos aquellos que Me aman, que Me invocan, que piden Mi ayuda. Yo no desoigo ninguna de vuestras peticiones y necesidades.
Pero también tiene que haber un cambio en el corazón del hombre, para que regrese al camino que os va a dignificar nuevamente como hijos de Dios.
Ved a vuestro alrededor y aunque se os ha pedido no juzgar, ¿Podríais vosotros en muchos de vuestros hermanos, pensar que ellos son realmente hijos de Dios?
Desgraciadamente el Mal se ha posesionado de muchas almas y un hijo de Dios, no puede vivir en la Maldad. No puede dar ejemplo de que está en contra del Amor y de la Bondad de Nuestro Dios.
Las almas que no buscan ésa forma de vida que Mi Hijo os enseñó, no pueden ser llamados hijos de Dios, porque un hijo de Dios tiene que transmitir lo que Mi Hijo transmitió, que es vida espiritual, ejemplo de Perfección, ejemplo de Amor, ejemplo de Virtud…
Y éstos hermanos vuestros están muy lejos de todo ello, pero no por eso los debéis odiar o hacer a un lado de vuestra vida, porque Mi Hijo os lo dijo claramente: ‘Vengo por los enfermos, no por los sanos’ y si vosotros vais a seguir el camino de Mi Hijo, debéis buscar por vuestros hermanos enfermos.
Debéis aliviarlos de su pecado, de su maldad y todo eso a través de la Oración, de vuestra donación, como Mi Hijo lo hizo por vosotros. Él se donó, Él Evangelizó, sufrió por vosotros en múltiples formas…
Y todo para dejar Ejemplo de Vida, de Amor, de Sabiduría Divina, para que vosotros los tomarais e hicierais la parte que a vosotros, en éste tiempo, os toca.
Es el momento de Cambio, es el momento del Triunfo de Mi Hijo sobre el Mal. Pero es el momento grande de la salvación de las almas…
Y vosotros tenéis ésa tarea grande y Divina de salvar almas, de dárselas a Mi Hijo, como Mi Hijo se dio para salvar vuestra propia alma.
Estáis llenos de Bendiciones de Nuestro Dios, estáis llenos de Bendiciones de parte Mía, pero no veáis solamente por vuestra propia salvación y la de los vuestros, hay un mundo entero por salvar.
Una gran cantidad de hermanos vuestros no están preparados para su salvación eterna. Y solamente a través de vuestra oración y vuestra donación, siendo otros Cristos en estos momentos de la humanidad, muchas, MUCHAS almas podrán salvarse.
Se os ha insistido en estos últimos momentos, que hagáis esto por vuestros hermanos, porque el tiempo ya es Inminente. Es muy breve Mis pequeños, por los grandes desastres que se llevarán a muchas almas de vuestros hermanos.
Miles y millones de almas podrán morir en segundos y deben estar ellas salvadas por vuestra intercesión.
Mis pequeños, se os ha explicado ya mucho que la Oración de corazón y en unión en la Comunión de los Santos, puede hacer grandes milagros…
Y es cuando ahora se necesita, Mis pequeños… que se logre el milagro a través de vuestra oración y sobre todo, del amor que pongáis en vuestra oración. Bien podríais estar vosotros en la situación en la que están muchísimos de vuestros hermanos y por Gracia Divina, estáis con vuestro Dios en éstos momentos.
Por agradecimiento a Nuestro Dios y Creador, os pido Mis pequeños os unáis a Mis oraciones de Madre. Y Madre que quiere la salvación de todo el género humano, porque así Me pidió Mi Hijo.
Uníos Conmigo en todo momento, día y noche pedid ésa Gracia Mis pequeños, para la salvación de vuestros hermanos que necesitan ser salvados; que Satanás los tiene encadenados en su Maldad y solo el amor y la oración podrán desencadenarlos y salvarlos.
Os lo pido Mis pequeños, estad Conmigo con vuestra Madre y ayudadMe a salvar muchas almas para Mi Hijo. Para que vaya creciendo el Redil para los nuevos tiempos, para la nueva vida, para el Amor en pleno.
Os amo, Mis pequeños, os amo con Corazón de Madre, os amo por el Amor de Nuestro Dios. Gracias, Mis pequeños.
Mí Dios y Señor, Padre de todo lo creado, os Bendiga; que Mí Hijo, Bendición de Mí Dios y Señor a Mí Corazón y a Mí Vientre Virginal, os bendiga y que Mí Esposo, el Santo Espíritu del Amor, la Sabiduría, la Palabra, el Amor, también os Bendiga.
Y recibíd también de Mí Vuestra Madre Celestial, Mis Bendiciones y Mí Ternura.
Y preparád vuestra voluntad a una libre donación para ser guiados al triunfo de la Verdad y del Amor.
P148 VIVIR EL AMOR
Os doy una de las últimas oportunidades que tendréis, de conversión
Hijitos Míos, así como vosotros ahorráis moneditas de diferentes tamaños y de diferentes valores, así, también, podéis ayudar con vuestras oraciones, dirigidas al Reino de los Cielos, para que éstas se derramen hacia vuestros hermanos, después de que Yo las haya recibido.
Mis pequeños os he explicado antes, que lo que importa en la oración, es la intencionalidad.
Toda oración, lleva una intención. Si vosotros oráis con el corazón, con una intención muy buena y ayudando fuertemente a vuestros hermanos, estad seguros de que Yo la escucharé y que recibirán vuestros hermanos, lo que vosotros estáis pidiendo.
Hay otros que desperdician su tiempo, creen que deben hacer cosas muy grandes para ser escuchados. Y con ese pretexto no hacen nada, no dan nada. No dan fruto porque no oran, porque no interceden; en resumen, porque no aman.
Vosotros tenéis a diario alrededor del Mundo, infinidad de ocasiones para orar por vuestros hermanos. Que no necesariamente, sean los que viven en vuestro hogar o los que vosotros veis a vuestro alrededor, que os ayudan o que recibís sus servicios.
Como ir a comprar al súper, ir a la escuela, cuando os subís a un camión. Vosotros estáis en contacto continuamente con hermanos vuestros y de muchos de ellos quizá, conocéis sus necesidades.
Veis en noticieros, periódicos, medios de comunicación, lo que hermanos vuestros están padeciendo alrededor del Mundo.
Si realmente vosotros orarais de corazón y usarais vuestro tiempo para ayudar a vuestros hermanos; tened por cierto que no terminaríais en un solo día, en pedir por todos vuestros hermanos que necesitan de Mi Ayuda y eso ciertamente, os atraería infinidad de Bendiciones, a vosotros y a los vuestros.
No dudéis en pedir cosas grandes o cosas pequeñas, Yo puedo ayudar a vuestros hermanos con lo que necesitan. Y aunque variadas sean sus necesidades, Yo como Creador, puedo ayudarles en lo que se necesite para que salgan adelante en sus problemas.
Os he dicho que vosotros deis el primer paso y Yo haré lo demás. Que vuestro amor hacia vuestros hermanos os haga dar el primer paso, para que intercedáis por ellos y veréis que no os fallaré.
CONFIAD. Confiad plenamente en Mi Amor hacia vosotros, Yo nunca Me taparé Mis Oídos para no escuchar por vuestras necesidades.
¡Os amo tanto, Mis pequeños! Que os daré lo que necesitéis. Y como os dije antes, si vuestra oración viene de lo profundo de vuestro corazón, seguramente, obtendréis lo que necesitáis.
Hijitos Míos, la acción del Espíritu Santo, será muy fuerte en estos tiempos. PedidMe que estéis vosotros bajo Su Amparo, bajo Su Protección, bajo Su Sabiduría.
La Tribulación, cada vez se irá acrecentando más. Vosotros mismos estáis viendo cómo se van haciendo bandos, aún dentro de la Iglesia y en la sociedad. Unos pensáis de una forma, otros, de otra. Unos preferís algunos guías o gobernantes, otros los atacan.
Hay mucha diversidad de opiniones. Pero no buscáis lo más valioso, que es la Sabiduría Santa, que solamente puede venir de Mí y es la que os va a unificar a todos vosotros.
Satanás va causando toda esta Tribulación y vosotros os enfrascáis en ella y os olvidáis de Mí. No buscáis lo que sólo puede venir de Mí, que es la Sabiduría Divina.
Cada quien desea hacer su propia voluntad y seguir a quien le conviene, de acuerdo a sus intereses personales; que en la mayoría de los casos están errados, porque buscáis nada más por lo vuestro y no por las multitudes.
Os falta tanta Caridad, Mis pequeños. Tanto amor por el prójimo, tanto amor hacia Mí, vuestro Dios y Creador.
Satanás sabe bien cómo convenceros a todos para que os apartéis de Mí y que viváis en la Mentira; porque todo lo que os rodea, es pura mentira.
La Tribulación que lleváis en vuestro interior, es lo que está causando que vosotros no marquéis en vuestra vida una línea recta que os lleve hacia Mí. Y si lo hacéis, Satanás se encarga de distraeros y os olvidáis de llevar a cabo vuestra misión, por estar viendo por las cosas del Mundo.
Que muchas hay que os distraen de vuestra principal atención, que es el llegar a Mí y llevar a otros también, al Reino de los Cielos.
Mis pequeños, estáis en una GUERRA REAL CONTRA SATANÁS, contra sus potencias. Vuestra guerra es espiritual, pero Satanás os desvía a que lo veáis todo dentro de lo material y así no os protegéis con Mi Sabiduría y vosotros os desviáis fácilmente.
La maldad es mucha, muy fuerte y vosotros estáis muy desprotegidos. Por ejemplo, por estar viendo lo material, a donde os lleva Satanás; porque él con sus compinches alrededor del Mundo, hace que se eleven o caigan los valores del Mundo…
Y con tan poca cosa, vosotros os distraéis, porque estáis viendo cómo vuestro dinero, vuestros ahorros, se van para abajo o se mejoran un poco. Y ahí, simplemente con eso que es una tontería, vosotros vais perdiendo vuestro tiempo y os enfrascáis nada más, en buscar cómo cuidar vuestro dinero y vuestras pertenencias…
Y lo que, realmente debéis buscar y cuidar, que es vuestra alma, no le hacéis caso.
Os he pedido tanto que Me pidáis el Don de Discernimiento, que Le pidáis a Mi Santo Espíritu, que os guíe por los caminos de la Verdad y dejéis los caminos que van debilitando vuestra espiritualidad.
Meditad esto, Mis pequeños. Entrad en vuestro corazón y siendo honestos, haced un análisis de vuestra espiritualidad y veréis que dejáis mucho qué desear. Por estar solamente protegiendo vuestros intereses materiales y no estáis protegiendo lo que más vale en vosotros, que es vuestra alma y lo que podáis hacer con ella.
Satanás conoce perfectamente vuestras debilidades y os desvía por ahí. Sois tan frágiles que con tan pocas cosas con que os desvía Satanás, os olvidáis completamente de lo Mío y lo que puedo hacer por vosotros en vuestra alma.
Protegeos, pues, en la Oración. Meditad el valor de vuestra alma y todo lo que podéis hacer con ella en la salvación de las almas. DejadMe a Mí, vuestro Dios, velar por lo que necesitáis en lo material.
Yo os di el don de la vida, os di un cuerpo físico y os puse en un lugar físico, que es la Tierra, para que os desarrollarais aquí y os prometí velar por vuestros intereses. Y vosotros debéis velar por Mis intereses, que es la salvación de vuestra propia alma y la de vuestros hermanos.
Yo conozco perfectamente cómo actúa Satanás y si Me lo pedís y si confiáis plenamente en Mí, Yo puedo velar, perfectamente bien y mejor, mucho mejor que vosotros, de vuestras necesidades materiales, físicas.
Vosotros, os repito, debéis velar por vuestra espiritualidad y la de vuestros hermanos. Esto es importantísimo que lo entendáis, Mis pequeños.
Vuestro cuerpo, vuestra envoltura terrena, junto con todo lo terreno que tenéis a vuestro alrededor y que habéis usado para vivir en este Mundo, desaparecerá cuando regreséis a Mí, al Reino de los Cielos.
Vuestra alma llegará ante Mí, sin nada de lo físico o de lo que consideráis valioso en estos momentos, dentro de lo material. Estaréis ante Mí, dándoMe cuentas de lo que hicisteis en el ámbito de lo espiritual.
Meditad y buscad realmente el valor de vuestra misión y de vuestra existencia aquí en la Tierra y veréis que lo que os estoy diciendo, es realmente lo que debéis vosotros buscar y en lo que os debéis de concentrar.
Dejad que Mi Santo Espíritu, que está en vosotros y que habita en estos momentos ya, en vosotros; os mueva hacia la Verdad.
Nada os faltará, de lo que vuestro cuerpo necesita para vivir y de hecho, Yo estoy más interesado en ello, puesto que si vuestro cuerpo muere, vuestra alma ya no puede misionar aquí en la Tierra. Así que, Yo busco vuestra salud de cuerpo.
Vosotros buscad vuestra salud de alma y ayudad a vuestros hermanos, a que mantengan esa salud de alma, con la ayuda que les deis en lo espiritual.
En las Escrituras podéis leer que si los días no fueran acortados, hasta los justos se condenarían.
Mis pequeños, os he hablado muchas veces del poder de Satanás. Para vuestras capacidades, él es muy superior a vosotros, si no estáis Conmigo. Pero estando Conmigo, lo podréis vencer fácilmente.
Pero cuántos de vosotros, de Mis hijos a los que os he concedido el don de la vida, realmente estáis Conmigo.
Por eso estáis viendo tanta tribulación en todo el Mundo, tanta maldad, tanto error, tanto pecado. Porque la gran mayoría de vosotros, de vuestros hermanos, no estáis Conmigo. No estáis pidiendo Mi Protección contra las Fuerzas de Satanás.
Estáis queriendo luchar solos. Es más, ni siquiera pensáis que hay una lucha espiritual que existe en realidad, en vuestro Mundo.
También podéis leer en las Escrituras, que la lucha es contra espíritus, no tanto contra hombres. Ciertamente, la Maldad de Satanás, entra en el hombre y se manifiesta a través de él. Pero es el espíritu inmundo (generado por el pecado) el que entra en el hombre y hace que os ataquéis los unos a los otros…
Que perdáis la forma en que actuáis o debierais actuar, viviendo en el amor y en las Virtudes. Y caéis en la maldad y en los vicios. Y por eso, ahora se desarrolla en toda la humanidad esta Maldad que ya se os había profetizado, en donde os atacaríais los unos a los otros.
En donde vuestro Mundo, no tendría ya autoridades y se vendría la ley de la selva.
Estáis a punto de eso y en algunos lugares, se está dando ya, Mis pequeños. Ya no se confía en las autoridades, porque las autoridades ya han hecho pacto con el Enemigo.
La única forma en que podéis vosotros protegeros, es estando Conmigo, ya no podéis acudir a las autoridades, porque ellas no os van a defender de aquel al que ellos protegen, que es al mismísimo Satanás.
Mis pequeños, os he dicho que debéis acentuar la Oración, la vida en la Gracia, las Virtudes. Si vosotros no estáis en estado de Gracia, por más que hagáis cosas buenas, no entraré en vosotros, porque Yo no puedo convivir en el mismo lugar donde está el Enemigo.
Si vosotros no estáis en estado de Gracia, todo lo que hagáis bueno, se desperdicia o se queda detenido, hasta que vosotros os arrepentís y recibís la absolución de parte de un ministro Mío.
Cuántas cosas os he enseñado, Mis pequeños y las habéis pasado por alto, no os interesan. No queréis buscar perfección de vuestra espiritualidad. Y al ver Yo esto, ciertamente no os tomaré como buena semilla, para que vosotros empecéis un Nuevo Mundo.
Aquellos que han hecho méritos, que Me han buscado, que Me han respetado, que se han dejado guiar por Mis Leyes y Mi Amor y que han sido hasta blasfemados, atacados, despreciados, porque Me habéis buscado y que vivís para Mí; seréis tomados para iniciar una nueva generación de almas que Me aman, que Me viven, que Me han buscado. Y
ciertamente, que han recibido Mis Bendiciones, porque Yo cuido a aquellos que están Conmigo. Os agradezco Mis pequeños, vuestro pequeño amor que ciertamente, lo aprecio infinitamente y lo engrandezco por los Méritos de Mi Hijo Jesucristo.
Seguid orando, Mis pequeños, ya el tiempo es breve. Muy, muy pronto se empezarán a ver ya los Acontecimientos que enmarcarán el inicio de la Gran Purificación. No os preocupéis, os he dicho y gozad, gozad este cambio porque será para bien.
Hijitos Míos, hace tiempo os dije que, de todos los libros que hay en el Mundo, la Santa Biblia es el más importante de todos y debiera decir el único que os va a llevar a encontrarMe y os va a llevar a vuestra salvación eterna.
Os pido Mis pequeños, que si no leéis y tomáis seguido de Ella vuestro alimento espiritual, lo empecéis a hacer. Tal va a ser la Confusión, que si no estáis vosotros preparados por Mi Santo Espíritu, el Gran Engañador os llevará por caminos de error.
Pero lo más importante, es que vosotros debéis ayudar a aquellos que serán apartados de la Verdad, que he dejado plasmada en las Sagradas Escrituras.
La boca habla de lo que están llenos el corazón y vuestra mente. Vuestros hermanos, muchos de ellos buscarán alimento espiritual después de los Acontecimientos que se darán.
Y por eso, os pido que estéis aprendiendo de las Enseñanzas, de las Palabras, Meditaciones y de tanto Alimento que os he dejado en las Sagradas Escrituras, para que lo deis a vuestros hermanos.
Haced vuestras Mis Palabras y Mis Enseñanzas de las Sagradas Escrituras. Seréis un solo Pueblo, un solo Rebaño, un solo Pastor y con las mismas Enseñanzas, todos vosotros.
Los que no habéis tomado Mis Enseñanzas de las Sagradas Escrituras, no os podéis dar cuenta del Alimento tan rico que de ahí podéis sacar; máxime si sois ayudados por Mi Santo Espíritu a quien le deberéis pedir ésa ayuda, para que podáis entender y sacar el mayor provecho posible de lo que Yo os he dejado y que Mi Hijo vivió para vosotros.
En las Sagradas Escrituras tenéis un Alimento Santo, Divino, profuso y profundo y a la vez sencillo para los que estáis Conmigo.
Yo le doy a los que Me buscan, la Luz del Espíritu Santo, para que podáis entender todo lo que se os dejó en el Libro Sagrado.
Desperdiciáis vuestro tiempo cuando leéis otras cosas que no os servirán para vuestro crecimiento espiritual y sobre todo, para que os preparéis para el Gran Cambio que se os avecina.
Mientras más cercanos estéis a Mí, con Mis Conocimientos, con Mi Amor, con todo lo que podáis sacar de Sabiduría Divina de las Sagradas Escrituras… Y si estáis llamados para empezar a formar parte del Nuevo Mundo, pondréis en práctica lo que ahí se os detalla, es Sabiduría Divina.
Actuar, vivir lo que en las Escrituras está… Y sobre todo, cuando en grupos lo viváis, es cuando empezaréis a gozar el Cielo en la Tierra.
Apropiaos de Mis Palabras, vividlas, Transmitidlas, ésa es vuestra tarea en estos tiempos, tiempos de cambio, tiempos de una Nueva Vida. Tiempos en los cuales, Mi Amor deberá purificar todo lo Creado, porque todo fue afectado por Satanás.
Vivid pues como hermanos, compartíos las Enseñanzas que cada uno de vosotros obtendréis de las Sagradas Escrituras.
Cada uno de vosotros sois células del Cuerpo Místico de Mi Hijo y cada quien entenderá los diferentes pasajes que leáis, en una forma muy profunda y bella.
Algunos de vuestros hermanos no entenderán todo. Y así, os iréis compartiendo lo que Mi Santo Espíritu os permita entender, para que lo compartáis con vuestros hermanos.
Os dije alguna vez, que no a todos o prácticamente a ninguno, os he dado las capacidades para entender Mi Obra, Mi Sabiduría y Mi Amor. A muy pocos se os ha concedido esto, para que podáis explicar Mi Palabra y vivirla en obras como Mi Hijo lo hizo….
Y así, podáis ayudar a vuestros hermanos a vivir profundamente, la parte que os corresponda a cada quien, por ser células del Cuerpo Místico de Mi Hijo.
Eso va a ser el regalo que tendréis también, cuando seáis juzgados y os ganéis el Reino de los Cielos. No os imagináis la dicha tan grande de las almas en el Reino de los Cielos, del compartir lo que Mi Santo Espíritu permita que entendáis profundamente, de los diferentes pasajes de las Sagradas Escrituras.
Vuestra vida en lo particular ha sido diferente, en cada uno de vosotros. Y Yo os tomaré, a pesar de que actuabais y vivíais en formas muy diversas. Y así será en este tiempo, Tiempo Inminente de Cambio.
AgradecedMe Mis pequeños, el que hayáis sido escogidos para este tiempo de cambio. AgradecedLe a Mi Santo Espíritu, las Enseñanzas que os ha dado en particular, a cada uno de vosotros. AgradecedLe a Mi Hijo, que derramó hasta la última gota de Su Sangre para vuestra salvación.
Vivid como hermanos, gozad de las Enseñanzas que os doy y pedidLe a Mi Santo Espíritu que os dé a manos llenas de Mi Conocimiento, de Mi Amor; para que viváis ya el Cielo sobre la Tierra, en estos Cielos Nuevos y Tierras Nuevas que os daré.
Os he dicho que los Mandamientos que os di, son para evitar vuestra caída natural al pecado. Os he dicho también que Satanás aumentará su fuerza de ataque contra vosotros.
Revisad y meditad cada uno de los Mandamientos. PedidLe a Mi Santo Espíritu, que os haga conocer todas las formas en que podríais vosotros errar y que eso os lleve a perder el estado de Gracia de vuestra alma.
Satanás es muy astuto y os lleva por caminos del mal donde vosotros podréis creer que estáis en el Bien y vivís en un pecado grave sin siquiera daros cuenta.
Esto es muy grave Mis pequeños, porque en cualquier momento, podríais morir y os podríais condenar eternamente.
Os he pedido también varias veces, que hagáis todas las noches antes de que os acostéis, un recuento de todo lo que hicisteis en el día.
Que pongáis vosotros mismos en la balanza, vuestras obras buenas y las malas como si estuvierais ante Mí, vuestro Dios. Que con toda honestidad, pongáis frente a Mí la balanza, entre Yo y vosotros. Y así, humildemente os pongáis de rodillas ante Mí, Me entreguéis lo bueno y lo malo del día.
Y si lo malo sobrepasa a lo bueno, no dejéis ni un segundo más para arrepentiros de vuestros pecados.
Y Yo, tome en cuenta vuestro arrepentimiento, por si ésa fuera vuestra última noche y os mandara llamar ante Mi Presencia y ser Juzgados. Vosotros no conocéis ni el día ni la hora de vuestro regreso a Mi Presencia.
Debéis cuidar vuestra alma, como lo más preciado que tenéis. Os he dicho que prácticamente ningún alma, pasa directamente al Reino de los Cielos, viviendo una vida normal.
Pecáis muchas veces, sin que os deis cuenta y por eso, el que Yo os pida que todas las noches hagáis un recuento de todas vuestras obras, eso va a hacer que con la ayuda de Mi Santo Espíritu, repacéis lo que hicisteis en el día y que no os disteis cuenta y Yo os ayudaré a que los reconozcáis, para que no los volváis a repetir.
Hay vicios o maldad también, en vuestro corazón. Y a veces, actuáis bajo ciertas circunstancias de una forma que no es buena para vuestra alma.
Quizá para vosotros, se ha vuelto ya normal; actuáis así, sin pensar. Y no debéis nunca actuar así, Mis pequeños. Debéis actuar conscientes de lo que estáis diciendo y haciendo…
Para que primeramente, no Me dañéis a Mí. Y luego, no dañéis a vuestros hermanos con lo que digáis y hagáis.
Tened mucho cuidado de vuestra alma, llevadla a la pureza, a la santidad, que es el resultado de la perfección de vuestros actos. Y ayudaos los unos a los otros, para que cuando veáis que vuestro hermano esté errando o haya cometido alguna falta, ayudadle a crecer.
Decidlo con cuidado, con amor; porque muchos de vosotros sois rudos para hablar con vuestros hermanos.
Ved la Figura de Mi Hijo Jesucristo, para eso Lo mandé, Mis pequeños. Para que tomarais de Él Su Presencia, Su Vida, la forma de Enseñar, la forma de convivir entre vuestros hermanos; como los de aquél tiempo, que ciertamente eran de carácter rudo, sin mucha educación.
Vosotros debéis ser como Mi Hijo, delicado en Sus acciones, en Sus Palabras en Su forma de Enseñar, Paciente, Bueno, Caritativo, Amable aún con aquellos que Lo atacaban y sobre todo, llenos de Mi Santo Espíritu.
Buscad llevar la Paz a vuestros hermanos que ciertamente, en estos tiempos muchos de ellos la necesitan.
Vosotros, todos vosotros, necesitáis de Mi Sabiduría, de Mi Amor y especialmente, aquellos que enseñaréis y que tendréis como tarea convertir a las almas. No impongáis nunca. Enseñad, pero enseñad con amor.
Recibid Mis Bendiciones Mis pequeños y todo lo que necesitéis y que vaya para el Bien de vuestros hermanos y para el Bien de vosotros mismos, pedídMelo, que Yo os lo daré.
Os amo, Mis pequeños. Sois Mis Cristos en estos tiempos, sois corredentores y es una Gracia muy especial, no la desperdiciéis, en lo absoluto.
Os amo, recibid Mis Bendiciones para el engrandecimiento de vuestra misión y para el buen cumplimiento de ella.
Yo os Bendigo, Mis pequeños. Os llevo en Mi Corazón. Amaos los unos a los otros, os lo pidió Mi Hijo. Bendecid estos momentos en vuestra vida y agradecedMelos, son momentos de Gloria. Os amo, os amo, Mis pequeños. Y dejadMe ser vuestro Dios en vuestra vida, en total libertad.
Gracias y os bendigo en Mi Santo Nombre y en Mi Santísima Trinidad
P144 INSTRUMENTOS DE LUZ
Los errores en los que habéis vivido toda vuestra vida, han causado asco en el Cielo.
Vosotros habéis sido preparados para ayudar a vuestros hermanos, Mi Santo Espíritu os dará las palabras, os dará el trato bello, con el que vosotros llegaréis al corazón de vuestros hermanos para que cambien. Ayudad a todos. No os preguntéis si lo que dijisteis les habrá ayudado o no.
Lo que salga de vuestros labios irá impregnado de Mi Santo Espíritu y dejará una Luz interior; que si hay un ambiente benigno, se aumentará en ésa alma y le ayudará a que regrese a Mí.
Vosotros, sois instrumentos y seréis tomados por Mi Santo Espíritu, que ya habita entre vosotros. No preparéis nada, como dice en la Sagradas Escrituras. Vosotros iréis a donde Yo os lleve. Y las palabras que saldrán de vuestros labios, serán las Nuestras, las de Nuestra Santísima Trinidad.
Vuestra tarea es llevar Nuestra Palabra y Nuestra Presencia, a todos los lugares a donde queremos que vosotros vayáis. Ya os había dicho Yo, vuestro Hermano Jesucristo vuestro Dios, vuestro Salvador; que NO iba a bajar a Evangelizar en estos momentos, porque vosotros sois Mis Evangelizadores, vosotros sois Mis Apóstoles de estos Tiempos y Yo estaré en vosotros.
En un principio, os asombraréis de las palabras que saldrán de vuestros labios. Ciertamente, os daréis cuenta que no son vuestras palabras, que no son vuestros pensamientos, que no es vuestra forma de ser…
Y así, os iréis dando cuenta de que Soy Yo vuestro Dios, el que estaré moviendo corazones a través de vosotros. ¿No se os hace esto una tarea bellísima?….
Pero sobre todo, el que Yo os haya tomado como Mis instrumentos. Para vosotros, deberá ser como una Gracia muy grande. Y de hecho es, porque el que hayáis sido escogidos por vuestro Dios, el Creador del Universo, vuestro Salvador, vuestro Guía, en Mi Santo Espíritu.
Esto os debe llevar a una alegría santa, inimaginable… Saber que sois pocos los escogidos para esta misión y que fuisteis preparados por años, para servir a vuestro Dios y Creador.
Esto os debe de llenar de gran alegría. PORQUE CIERTAMENTE HARÉIS GRANDES OBRAS, A LOS OJOS DE VUESTROS HERMANOS… Pero también,deberéis actuar con gran humildad. Porque si entra en vosotros la Soberbia, si vosotros os apropiáis en algún momento de las palabras que salgan de vuestros labios o de los Milagros que podáis hacer o de todo lo extraordinario que pueda salir de vosotros…
Que sois instrumentos Celestiales. Si os apropiáis de ello y caéis en Soberbia, podréis echar a perder Mi Obra en vosotros y desperdiciaréis años de guía espiritual, cayendo a la Soberbia a donde os puede llevar Satanás.
Mucha humildad deberéis vivir. Estad siempre conscientes en que sin Mí, sois nada. Obraréis todo esto que os he dicho… Porque Yo estaré trabajando en vosotros. Pero si dejáis entrar soberbia en vuestro ser, PERDERÉIS TODO… Perderéis todo y Me perderéis a Mí, vuestro Dios.
Tened cuidado, Mis pequeños. Manteneos siempre sencillos, humildes y donados totalmente a la causa por la que fuisteis enviados a la Tierra: que es la salvación de las almas y llevar Mi Amor a los hombres.
Habla Dios Padre.
A vosotros Mis pequeños, los que he escogido para ser Luz en estos Tiempos. Cuando todo empiece a darse, cuando los acontecimientos os anuncien que os estoy llevando ya a la Purificación; os he dicho que vuestro signo determinante ante vuestros hermanos va a ser la Paz que emanaréis hacia ellos.
En estos momentos, vosotros elucubráis mucho de cómo sucederá todo lo que os he anunciado. Y os vuelvo a repetir: que no os imagináis,siquiera, de cómo va a ser esta Purificación de toda la humanidad.
Vosotros los que estáis Conmigo, los que habéis sido evangelizados ya por años, Mi Santo Espíritu os irá moviendo, os irá indicando qué hacer.
Manteneos en Paz. Y así, vosotros podréis manejar muy bien vuestro discernimiento y la Sabiduría que Mi Santo Espíritu acrecentará en vosotros, para que podáis guiar a muchos de vuestros hermanos.
El estar en Paz, va a hacer que vosotros podáis ayudar a vuestros hermanos a que se tranquilicen. El estar en Paz, va a ser un signo inequívoco de que Yo estoy con vosotros. El estar en paz va a ayudar a muchos de vuestros hermanos a que entiendan que Yo Existo, que Yo Vivo en vuestro corazón, que Yo voy a estar guiando los Acontecimientos…
Y que ellos deben también mantener una posición tranquila, de paz. Además, seguros de que Yo vuestro Dios, estoy manejando estos Acontecimientos para vuestro bien. Y por eso, os debe llevar a vosotros a la seguridad de que todo va a salir bien; a pesar de que quizá, no os podáis explicar los acontecimientos que estaréis viviendo…
Pero si confiados estáis en Mí, no os deberéis preocupar en lo absoluto, ni perder la Paz; que muchos de vuestros hermanos estarán observando… Y preguntándose por qué vosotros estáis con ésa Paz; mientras que ellos, no saben qué hacer.
Vosotros, los que habéis sido escogidos de tiempo atrás y que habéis seguido toda la Evangelización que os he dado, daréis un gran ejemplo ante vuestros hermanos en muchos lugares del Mundo, por no decir todos. UNIRÉIS A LAS MUCHEDUMBRES.
AYUDARÉIS A BIEN MORIR A MUCHOS, que heridos estarán por las catástrofes naturales. Ayudaréis a otros a que perseveren y sigan adelante.
Dejaos mover por Mi Santo Espíritu, para que vosotros os deis cuenta que estáis siendo guiados por caminos seguros y hacia un Bien necesario para vuestra alma… Pero a la vez, con la Sabiduría que estaréis recibiendo de Él, ayudaréis a vuestros hermanos a que abran su corazón a Mi Amor.
A que se dejen también guiar y que puedan ver un camino nuevo, seguro y santo, como nunca antes habían imaginado poder ver.
Vosotros gozaréis lo que haréis en ésos momentos, porque es cuando viviréis palpablemente Mis Enseñanzas que os di por años. Gozaréis en servirMe en ésos tiempos. Muchas cosas bellas y santas podréis hacer… Y aún milagros, entre vuestros hermanos.
No claudiquéis, Mis pequeños. Porque si se os cierra una puerta, cinco o diez más se os abrirán, Yo estoy con vosotros y os estaré cuidando para que no erréis ni caigáis. A pesar de que Satanás os quiera hacer caer, no lo logrará.
Os Bendigo, Mis pequeños y en ningún momento Me he de apartar de vosotros… Y así lo espero también, de vosotros mismos. Quiero que os mantengáis en todo momento junto a Mí, para que caminemos juntos, ya desde ahora y por toda la Eternidad.
Vuestro Dios os ama infinitamente, ¡Agradecédselo! Yo os bendigo en el Santísimo Nombre de Mi Padre. En Mi Santísimo Nombre y en el Santísimo Nombre de Mi Santo Espíritu. Mi Madre os protege, os guarda y os llena de Su Amor y de Sus Bendiciones.
Habla Dios Padre
Hijitos Míos, empezad a gozar ya desde ahora, los Cielos Nuevos y las Tierras Nuevas que os daré. A vuestros ojos humanos, a vuestro entendimiento pequeño, se os va a hacer extraordinario. Y de hecho lo es, el vivir como se vive en el Cielo; que es lo opuesto de lo que estáis viviendo ahora.
Satanás os fue llevando poco a poco, a ir destruyendo Mi Obra en vosotros. A vosotros se os ha hecho natural vivir en la Maldad de Satanás todos los días.
Y de repente, cuando Yo os dé a los que os habéis ganado ésas Tierras Nuevas que viviréis; no entenderéis, si no sois preparados antes por Mi Santo Espíritu, el cómo es posible que no os dierais cuenta en los errores que vivíais todos los días.
Os digo nuevamente, Satanás os fue llevando a una degradación espiritual y aún humana, que habéis vivido como algo normal en vuestra existencia; cuando realmente, estáis viviendo cosas abominables a Mis Ojos.
Cuando vosotros tengáis la experiencia de la Iluminación de vuestras conciencias, empezará el cambio fuerte de vuestra vida. Os enseñaré ahí, lo que debisteis haber vivido, cómo os debisteis de haber comportado:
Primeramente Conmigo, en Mi Santísima Trinidad. Cómo debisteis haber respetado a Mi Hija, la Siempre Virgen María, al Señor San José, a los Santos Ángeles. Cómo convivir con el Cielo, con los Santos. Os daréis cuenta cómo desperdiciasteis vuestro tiempo…
Tiempo de vida que Me pertenece, porque Yo os di el Don de la vida y vosotros desperdiciasteis tantas oportunidades para vuestra perfección y para el bien de vuestros hermanos, ayudándoles en su crecimiento espiritual.
Lloraréis todo lo que hicisteis. Si realmente en vuestro corazón hay arrepentimiento y el reconocimiento de vuestros errores, ésta iluminación de vuestras conciencias, os darán la pauta de cómo os deberéis ir mejorando…
Porque el error o los errores en los que habéis vivido toda vuestra vida, han causado asco en el Cielo…
Y perdón que lo diga así, Mis pequeños; pero vuestra forma de actuar día a día, viviendo en vicios, en Maldad, en la Podredumbre; no puede causar otra cosa que eso, Mis pequeños.
Y os daréis cuenta de ello cuando Yo os deje ver cómo se vive en el Reino de los Cielos.
No vivís en la Bondad, en las Virtudes, en el Amor, en el cuidado de unos para con los otros. En el recrearse en todo momento en las Palabras que Yo os dejé en las Sagradas Escrituras. En los Ejemplos, en la Vida que os dejó Mi Hijo en Su paso por la Tierra.
Ahora no gozáis los momentos de la Vida de Mi Hijo, que Se dio por vosotros, por vuestra salvación. Hay tantas Delicias, tanta Sabiduría, tanto Amor en lo que os heMos dejado en las Sagradas Escrituras y vosotros…
Ni siquiera abrís el Libro para tomar de él, la Sabiduría Celestial que se os ha dejado.
No os tomáis el tiempo cuando menos, de leer algún pasaje todos los días y meditarlo. Mi Santo Espíritu, os ilumina, cada vez que lo abrís con el deseo de perfeccionaros.
En el mejor de los casos, le tenéis un lugar reservado al Libro, a las Sagradas Escrituras, a la Santa Biblia, en vuestro hogar. Pero ahí está, en un lugar muy importante en vuestro hogar; pero solo sin abrirlo, sin tomar de él la riqueza espiritual que desde el Cielo, os heMos enviado.
Tenéis tanto qué aprender… Creéis que sabéis mucho, pero os he dicho que estáis en párvulos y que sois malos estudiantes. Os conformáis con tan poco, no queréis ser de los mejores estudiantes. No queréis ser de Mis mejores hijos, que hayáis leído las Sagradas Escrituras y que lo toméis como un Libro de consulta continua… Para sacar de él su gran Sabiduría, Sabiduría Divina que he puesto en la Sagrada Biblia.
De esto y de muchas otras cosas os daréis cuenta cuando venga la Iluminación de vuestras conciencias. De cómo habéis desperdiciado el tiempo del Cielo en la Tierra.
Ciertamente, lloraréis vuestros errores y se os dará una oportunidad más para que os mejoréis, pero ¿Realmente aprovecharéis esta otra oportunidad para mejoraros?
Imaginad Mis pequeños por un momento, que vosotros entráis a un cuarto y hay muchos estantes con infinidad de regalos, de cosas bellas y que podéis tomar lo que queráis… Luego, abriendo otra puerta, hay una escalera vertical con muchos escalones…
Ciertamente, se ve pesado el subir; pero ésta os llevará a un gran salón, con muchos más regalos y sorpresas. Pero por flojera, no subís esa escalera con tantos escalones porque no os queréis cansar. No queréis hacer un esfuerzo mayor y os conformáis con lo que veis en el primer cuarto…
Así estáis la gran mayoría de vosotros.
Ciertamente, cada uno de vosotros baja a la Tierra con dones que Yo os doy, para que llevéis a cabo vuestra misión en la Tierra. Os he pedido tanto que os perfeccionéis, porque Soy vuestro Padre y a Mí Me gusta la perfección.
Pero ciertamente, tenéis que trabajar mucho. Y especialmente, contra vosotros mismos. Como os he explicado antes: os debéis negar. Debéis ir quitando toda maldad, vicios. Todo aquello negativo que no os deja crecer.
Pero ¡NO! os da flojera eliminar lo que traéis y que ya os habéis acostumbrado a vuestra parte negativa y vivís en la mediocridad.
A ratos hacéis cosas buenas, pero a ratos también hacéis cosas malas. No sois constantes en lo bueno y desperdiciáis mucho las cualidades que Yo os he dado, porque no os queréis perfeccionar.
Ésas escaleras verticales altas, de muchos escalones, el solo pensar en ellas, os da flojera.
Ciertamente, será pesada la subida. Pero pocos son los que toman el riesgo. Y el premio estará allá arriba esperándoos… Y así es a lo largo de vuestra existencia.
Los mejores regalos, la mejor vida espiritual; la obtienen aquellas almas valientes, intrépidas, sabias, inteligentes; que saben sacarles provecho a los dones que Yo os he dado.
Cada uno de vosotros tenéis un potencial muy grande. TODOS vosotros podéis llegar a la perfección…
Y decir perfección, es poder alcanzar capacidades espirituales y aún físicas extraordinarias… Pero os da flojera trabajar en ello.
¡Cuánto desperdicio de Dones! Y luego Me echáis la culpa a Mí, vuestro Dios de que no avanzáis. No podéis hacer muchas cosas, porque os faltan capacidades o porque los otros sí tienen y vosotros no…
Cuando os estoy diciendo que TODOS vosotros podéis llegar a grados altísimos en vuestras capacidades espirituales y aún físicas.
También os he dicho que vosotros deis el primer paso y Yo os ayudaré con el resto de vuestro esfuerzo. Pero cuánto, ¡Cuánto trabajo os causa dar el primer paso! Ponéis tantos pretextos para dar un primer paso y no os dais cuenta, que aún ése primer paso recibirá ayuda de Mi parte…
Y cuando empecéis a dar los demás pasos, todo se irá aliviando. No será ya pesada la carga. Iréis mejorando sin tanto sufrimiento, porque Yo estaré con vosotros.
Siempre, el triunfo en cualquier cosa que vosotros queráis lograr, exigirá un esfuerzo. Un primer esfuerzo. El resto es más fácil. Pero son pocas, muy pocas las almas que se vencen a sí mismas y que llevan a cabo ése primer esfuerzo.
El éxito es para los triunfadores. Para los que saben trabajar, para los que saben vencerse a sí mismos, para los que realmente quieren ser Mis hijos.
Ved la Vida de Mi Hijo sobre la Tierra, Sus Sufrimientos, Dolores, persecuciones. Aunque sí tenía momentos también bellos, todo lo hizo por vosotros. SE VENCIÓ A SÍ MISMO…
O sea, aceptó Mis Órdenes de Padre, para vuestra ayuda. Para que os pudiera abrir nuevamente las Puertas del Cielo. Aceptó en obediencia, lo que Yo Le pedí… Y LLEGÓ EL TRIUNFO…
Y vosotros estáis gozando Su Triunfo, pero Le dolió mucho. Y ¿Cuándo realmente Le habéis dado las gracias a Mi Hijo por lo que hizo por vosotros? ¿Cuántas veces Lo habéis acompañado en Sus momentos de Dolor, en Sus momentos de cansancio?
O ¿Cuántas veces Lo habéis acompañado, en Sus momentos de Oración en donde platicaba Conmigo? que Me pedía Fortaleza para seguir adelante, porque la lucha era tremenda, ya que Satanás se había apropiado de una gran cantidad de almas.
A vosotros os ha tocado ser Luz, en estos momentos de obscuridad. Sois Luz y Guía para tantas almas que van caminando por el Mundo; que se tropiezan y caen muy seguido, porque no hay una Luz, una guía, que las lleve por caminos seguros y que las traiga a Mi Presencia.
Sois ésa Luz, Mis pequeños. TraedMe almas. Llevadlas por un camino seguro. Guiadlas para que Me Conozcan. Convenced a aquellas almas que están caminando en el error, que le han abierto su mente y su corazón a Satanás.
¡Tenéis tanto qué hacer por Mí, en la Tierra, mientras tengáis vida!
AyudadMe, Mis pequeños y alcanzadMe la salvación de tantos hermanos vuestros como podáis. Ciertamente, os haré conocer el valor de vuestra existencia y el gusto que Me estáis dando al trabajar para Mí, vuestro Dios.
Ahora no lo entendéis ni lo valoráis como realmente es. Pero cuando os deis cuenta de la Tarea que Yo os permití tener, lo gozaréis inmensamente.
En cierta forma, ahora no permito que conozcáis plenamente el valor de vuestra misión, para que no caigáis en soberbia. Pero vuestra tarea, en estos momentos de cambio, de lucha, es grandísima.
Es bellísima vuestra misión. Un alma, vale muchísimo. Seguid adelante. Dejaos llevar por Mí, Soy vuestro Dios y estáis llamados a hacer grandes cosas para el Reino de los Cielos. No os desaniméis, Mis pequeños; grandes cosas os esperan.
Muchos de vuestros hermanos se preguntan, cómo es posible que algunos puedan entender las Palabras que os digo y otros no. Leen exactamente lo mismo, pero su entendimiento es diferente… Y os he dicho que cuando se vive en estado de Gracia, vuestras potencias espirituales están abiertas.
No hay nada que impida que Mi Santo Espíritu trabaje en vosotros, que os explique muchas cosas que no conocéis, que os enseñe cosas que verdaderamente conocían vuestros Primeros Padres, pero que se perdieron por el Pecado Original.
Es como si tuvieran un velo delante de sus ojos. Un velo que no permite que su mente entienda todo. Un velo que impide que escuchéis muchas cosas que hay a vuestro alrededor, que os pueden hacer crecer en todos sentidos.
Pero al tener ése impedimento con que el pecado os limita, no crecéis ni entendéis Mis Misterios, Mi Sabiduría… Y no aprovecháis plenamente Mi Amor.
Muchos de vosotros os enojáis Conmigo porque os sentís tontos, al no entender pasajes de las Sagradas Escrituras o el Conocimiento que estoy dando en estos Tiempos, para que os preparéis ante los acontecimientos que ya están sobre vosotros. Pero no es Mi culpa Mis pequeños, que no entendáis.
Os vuelvo a repetir, es vuestra vida en pecado lo que impide que entendáis lo que Yo os quiero dar. Y que Me interesa a Mí mucho que lo tengáis, pero os he dicho que vosotros sois libres.
Vosotros os podéis mantener en estado de Gracia. Y el estado de Gracia, es como una llave que abre todas vuestras capacidades físicas y espirituales; para todos los regalos que Yo os quiero dar. Pero si vosotros preferís vivir en el Mal, vivir en el error, Yo no os puedo forzar.
¿Queréis escuchar a Satanás en lugar de escucharMe a Mí?… Yo Me hago a un lado y os dejo con el Enemigo.
Si queréis estar plenamente Conmigo, no Me invitéis a vuestro corazón cuando esté sucio, con pecados graves y la Presencia del Enemigo esté ahí, en vuestro corazón.
Si vais a invitarMe a entrar en vuestro corazón, hacedlo. Pero debéis estar limpios y Satanás no debe estar presente en vuestro corazón, en ningún momento.
Yo no os estoy castigando, es vuestra necedad y soberbia que el mismo Maligno suscita en vosotros, quien os castiga.
Escoged, Mi Paraíso o vuestro mundo actual. En vosotros está la decisión. De Mí sólo puede salir Bien, Paz, Verdad y Amor.
Os bendigo entrañablemente hijitos Míos de Mi Corazón. Os Amo y Os espero al final del camino, a las puertas de Mí Reino Celestial, ya de Nuevo en Nuestro Mundo. Ahí estaré como Padre Amoroso os estrecharé junto a Mí Corazón, para gozar en vosotros Mí Amor.
Os amo y deseo sólo vuestro bien. Yo os bendigo en Mi Santísima Trinidad, Padre, Hijo y Espíritu Santo
D37 ¡ALERTAS Y PREPARADOS!…
Amado Pueblo Mío, hijos Míos:
Les Bendigo con Mi Amor, el cual derramo sobre todos los sedientos de Mi Voluntad.
Caminan y caminan, dialogan y dialogan, creen comprender y no entienden. Tienen que mantener ese ánimo de desear ser unidad en mi Amor.
No lo perciben, hijos, pero cada uno en su pensamiento y en su memoria va guardando los asuntos que les han impactado en la vida.
Luego de que esos asuntos les han llevado a estremecer y cada uno ha pensado que ha olvidado; en algún instante salta lo que cada uno lleva en el interior para bien o para mal, según el libre albedrío.
Es importante que cada uno de ustedes entre en comunión Conmigo. Y se centren en solicitar a Mi Madre y a mi Santo Espíritu les asistan, para que verdaderamente los pensamientos sean a Mi manera y la Memoria les mantenga centrados en Mí.
En el interior de cada uno de ustedes hijos, fluyen los pensamientos, la intuición personal, los conceptos que cada uno toma como regla de vida.
En este Instante deben ser astutos, ya que los enviados del Mal se mueven por toda la Tierra. Y en la menor indisposición del hombre, entran a provocar una tormenta grave, en donde no debe haber ni una ligera llovizna.
Yo les he llamado a ser fieles y perseverantes.
Los Demonios llegan a provocar inquietud en los que desean vivir cerca de Mí. No se han dado cuenta de que la Lucha no es visible.

Cuando vivimos sin tomar en cuenta a Dios, la mente y los sentimientos por ser elementos espirituales, son controlados TOTALMENTE POR SATANÁS.
El Demonio ataca al hombre en su interior, para causar incomodidad, incomprensión, convulsión, reacciones equivocadas. Les lleva a sacar lo peor del EGO humano, para Dividir.
SEAN ASTUTOS,
NO CAIGAN EN LAS TRAMPAS DE SATANÁS.
Pueblo Mío, les dirijo hacia la Paz interior. El alma en paz deja traslucir una criatura centrada en Mí y una criatura que tiende y se orienta hacia Mí, deja traslucir la Paz del alma.
La voluntad humana tiene que moverse hacia Mí, vivir en Mí y someterse a Mí; para que la criatura se encuentre ordenada hacia Mi Amor y lo que de Mi Amor se deriva.
Hijos míos, viven en constante evaluación ante Mí. Cada obra y acto, forman ese tesoro que presentarán ante Mí.
La pasividad ante Mí, es carencia de ser testimonios de cada una de Mis Palabras. La aparente seguridad del hombre, ante Mí es la mayor de las inseguridades y la señal más clara de que no caminan junto a Mí.
PUEBLO MÍO, NO PUEDEN SEPARARSE DE LAS POTENCIAS DEL ALMA:
MEMORIA con la cual no se permiten alejarse de Mí al mantener la memoria activa. Yo Me encuentro en la memoria de cada uno de Mis hijos.
ENTENDIMIENTO para querer ser parte de Mi Cuerpo Místico. Parte activa, mediante el Amor que les lleva hacia el correcto proceder en cada instante.
VOLUNTAD para que vivan del y en el Bien. La voluntad elije rectamente y orienta a Mis hijos hacia Mí. O les lleva al cansancio espiritual, a la negación, a la desobediencia… Y por ende les aleja de Mi Amor.
Esto es relevante en este Instante para Mi Pueblo, que no puede caminar ante las asechanzas del Mal sin conocer, para resistir.
Quien niega el Mal y mira todo como bueno, no puede librarse del Mal… sino en el Mal vive…
Quien vive sobre sus hermanos para juzgarles, no puede mirar el mal que causa; pues no le parece mal juzgar ya que es parte de su ser y no le han instruido en el correcto caminar de Mis hijos, que es NO JUZGAR…
Quien vive de la envidia, no mira la envidia como un acto contrario al Amor al prójimo, cuando el alma se envenena con lo que la misma criatura produce…
El Mal que corroe a la humanidad es el Desamor, el Egocentrismo.
El Bien al que Yo les llevo, es al bien común en Mi Voluntad.
Eso logra del hombre una comunidad de criaturas afines, que buscan constantemente la misericordia para con sus semejantes.
MI AMOR LLEVA A LA UNIDAD Y ÉSTA A LA UNIÓN,
Y LA UNIÓN AL ORDEN
Y EL ORDEN A LA OBEDIENCIA HACIA MÍ.
El obediente se libra del orgullo, no vive en el amor desordenado en el cual el primer lugar lo tiene la misma criatura, sino en su lugar vive en la caridad que une al alma a Mi Amor.
Tengan presente, hijos Míos: quien Me ama, ama a su hermano con firmeza, en abundancia. En una dimensión tal, que la seguridad de vivir en Mí le lleva a externar Mi Amor presente y gozoso en la criatura humana.
Develando cada instante la grandeza de lo que no es humano y común, sino adquirido por Gracia. Y la permanencia de Mi Espíritu activamente en constante donación al prójimo.
Pueblo Mío, recuérdate que el amor que ustedes poseen es Amor nacido en Mí, siendo quienes obran y actúan en Mi Voluntad, sin rechazarme; sino en una constante evolución para alcanzar mayor posesión de este Don.
La Tierra que les ha acunado se agrieta con mayor frecuencia y estas grietas llevarán a desaparecer territorios. (1)
Oren hijos Míos, oren por Estados Unidos, es purificado; el racismo proliferará logrando que hechos pasados sean nuevamente revividos. Los arrestos serán en masa, sin razón; sino por disposición.
Oren hijos Míos, oren por Italia; el Volcán Vesubio atrae el dolor, despierta con fuerza sin que le esperen. (2)
La tiranía llega a Europa; la traición se dará en esas tierras.
Oren hijos Míos, verán descender la gran luz proveniente del espacio; ésta iluminará con luz propia, causando espanto. Luego caerá en el mar y en pocos instantes, Naciones serán inundadas por el agua.
PUEBLO MÍO, NO ES TEMOR LO QUE LES COMPARTO,
ES LO QUE ENFRENTARÁN
Tienen que detener los grandes pecados que continuamente cometen y con los cuales Me ofenden. Acepten que han permitido a Satanás penetrar en el corazón,
RENUNCIEN A él y VENGAN A RE-ENCONTRARSE CONMIGO, YO NO LES DESPRECIARÉ.
El padecer de Medio Oriente dará gran sorpresa al resto de la humanidad. En pocos días se entregarán a la sangrienta lucha por los territorios. En medio del padecer encontrarán lo que no les pertenece y es de Mi Propiedad,
Encontrando motivo para decretar la Gran Batalla para la que se han preparado por años.
Hijos Míos, no continúen siendo creadores de muerte… Sean hijos obedientes que retornan a Mí… Imploren la Intercesión de Mi Madre que no les deja solos…
Yo miro la Tierra y ésta la miro despoblada. Las almas amantes de Nuestra Trinidad y de Mi Madre son quienes me atraen, pero no son la mayoría.
Amado Pueblo Mío, el Comunismo (3) parece decrecer. Esto es una estrategia del Mal para crear una nueva forma de cautiverio, el que le entregarán a los aliados del Usurpador.
No se muestren confiados, la convulsión se mantendrá sobre el mundo, el Dolor será indecible para quienes lo vivan.
En este instante, el poder en algunas Naciones del mundo reprime con tortura al hombre, en el deseo de someterle ante el Pacto de algunos dirigentes, con la élite que mantiene el dominio sobre la Tierra.
Amado Pueblo Mío, la libertad de Mi Pueblo ha sido vendida a los que preparan la entrada del Carnicero Infernal. No se confundan con nuevos modernismos en Mi Palabra que Escrita está.
Conózcanme, adéntrense en Mí. Será prohibido a Mis hijos predilectos el alertar a Mi Pueblo. Un hecho inusual será anunciado a mis hijos.
Permanezcan atentos, que los grandes poderes de los Illuminati y Masones, impondrán lo que no es Mi Voluntad y
Mi Pueblo será Perseguido.
Oren, entren en comunión con Nuestra Voluntad.
Viven en Mi Bendición, Yo Soy Fiel a Mi Pueblo. Les Bendigo.
Su Jesús.
(1) Sobre el agietamiento de la tierra, leer…
(2) Sobre la actividad volcánica, leer…
Comentario del Instrumento:
Hermanos (as):
En cuanto Cristo me da Su Palabra, me permite mirar con claridad, dos ornamentos que usan los que presiden otras religiones, y yo no preciso a quienes pertenecen, ni Cristo me lo menciona. Los llevan con gran cuidado. Con anterioridad he visto a algunos hombres vestidos de negro entrar al Vaticano por una puerta lateral, sin ser invitados.
Y Cristo me dice: “¡PERSECUCIÓN!”
Miré a dos Enviados del Cielo, poseedores de una luz tan radiante que solo miro la luz que poseen, pues mis ojos parpadean demasiado. Ellos sacan de un lugar santo un libro grande y pesado.
Cristo me dice:
“Rescato lo que es Mío, lo sacaré de la Tierra que no merece este Conocimiento”.
Luego Cristo me dice:
“Que tus hermanos permanezcan en constante Vigilia. No permitan que el Mal nuble Mi Palabra, ni la Injusticia ensangriente a Mi Pueblo.”
Cristo miró la Tierra, tomó la Mano de Su Madre y nuestra y colocó la Tierra en Manos de la Santísima Virgen María. Y con su séquito de Ángeles miraron la Tierra en Manos de tan grande Reina.
De pronto una oscuridad fue avanzando hacia la Tierra, no la cubrió totalmente, pues era el resultado de una guerra y la Madre derramó lágrimas.
Y me dijo:
“Mis hijos tienen que ser preparados… el Aviso…”
Y no miré más.
Esto lo comparto en la Voluntad del Padre, del Hijo y del Espíritu Santo. Amén.