EL SANTO ROSARIO
CÓMO ORAR EL SANTO ROSARIO CON PODER.
EL ROSARIO ES EL ARMA PERFECTA Y LETAL.
Porque cuando lo ORAS, CON PERFECTA ENTREGA Y DEVOCIÓN…
CON EL SANTO ROSARIO, MAMITA MARÍA NOS TOMA DE LA MANO Y NOS CONDUCE HASTA JESÚS…
Jesús CONOCE muy bien el Poder de Intercesión de María y por eso antes de ir al Getsemaní, FUE A PEDIRLE a su Madre Santísima que Orara por Él…
Pues Él sabía que estaba a punto de Iniciar su Pasión Dolorosísima…Y así fue.
Aún con el Cielo Cerrado, María le consiguió al Ángel del Getsemaní.
ROSARIUM Signum Crucis
Per signum Crucis de inimicis nostris libera nos, Deus noster. In nomine Patris, et Filii, et Spiritus Sancti. Amen.
Desde que te arrodillas ante un Crucifijo, te persignas y haces la TRIPLE Invocación:
AVE MARÍA PURÍSIMA, SIN PECADO CONCEBIDA.
AVE MARÍA PURÍSIMA, SIN PECADO CONCEBIDA.
AVE MARÍA PURÍSIMA, SIN PECADO CONCEBIDA.
(María llega inmediatamente y se arrodilla a orar junto contigo)
OFRENDA:
Yo me Uno con todos los ángeles y santos del Cielo, las pobres almas del Purgatorio y todos los justos de la Tierra; con todas las Misas y oraciones de Alabanza a Dios Uno y Trino que se hayan orado o que se vayan a orar.
Todas las lágrimas, gozos, sacrificios y sufrimientos de cada alma, que alguna vez haya vivido o que vaya a vivir, en la Tierra o en el Universo.
Lo uno todo al Corazón Adolorido de María Santísima a los pies de la Cruz y ofrezco con él a toda la Creación y el Sufrimiento de la Creación a Jesús, por la Conversión de los Pecadores.
Por el Círculo Dorado de la Perfección, la liberación de las almas del Purgatorio, la santificación de los sacerdotes y religiosos, los Deseos de los Dos Corazones de Jesús y de María, la paz en el Mundo y en el Universo…
Y mis intenciones…(mencionarlas aquí)
LAS TRES ORACIONES
NOVENA DE CONFIANZA AL SAGRADO CORAZÓN DE JESÚS
Oh Señor Jesucristo, yo confío… (Hacer la petición)
Mírame solamente Jesús, y luego haz lo que Tu Sacratísimo Corazón te inspire. Que tu Sagrado Corazón decida. ¡Yo cuento con Él! ¡Yo confío en él! ¡Yo me entrego a Su Misericordia! Señor Jesús, Tu no me defraudarás. Sagrado Corazón de Jesús, yo confío en Ti. Sagrado Corazón de Jesús, yo creo en Tu Amor por mí. Sagrado Corazón de Jesús, que venga tu reino.
¡Oh! Sagrado Corazón de Jesús, yo te he pedido muchas gracias, pero imploro ardientemente esta. Tómala, ponla en Tu Sagrado Corazón. Cuando El Padre Eterno la vea, cubierta con Tu Preciosa Sangre, no la rechazará. Ya no será mi plegaria, sino la tuya, oh Jesús. Oh Sagrado Corazón de Jesús, yo pongo mi confianza en Tí. Que jamás sea confundido. Amén.
ACORDAOS (De San Bernardo)
Acordaos, oh piadosísima Virgen María, que jamás se ha oído decir que ninguno de los que han acudido a vuestra protección, implorando vuestro auxilio y reclamando vuestro socorro, haya sido abandonado de Vos. Animado por esa confianza a Vos también acudo, oh Madre, Virgen de las vírgenes y aunque gimiendo bajo el peso de mis pecados, me atrevo a comparecer ante vuestra presencia soberana. No desechéis, oh Madre de Dios, mis humildes súplicas, antes bien escuchadlas y acogedlas benignamente. Amén.
INVOCACIÓN A SAN MIGUEL ARCÁNGEL
San Miguel Arcángel, defiéndenos en el combate; sé nuestro auxilio contra la perversidad y las asechanzas del demonio. Reprímale Dios, pedimos suplicantes y Tú, Príncipe de la milicia Celestial, lanza al infierno con el divino Poder, a Satanás y a los demás espíritus malignos, que vagan por el mundo para la perdición de las almas. Amén.
CREDO in Deum Patrem omnipotentem, Creatorem caeli et terrae. Et in Iesum Christum, Filium eius unicum, Dominum nostrum, qui conceptus est de Spiritu Sancto, natus ex Maria Virgine, passus sub Pontio Pilato, crucifixus, mortuus, et sepultus, descendit ad inferos, tertia die resurrexit a mortuis, ascendit ad caelos, sedet ad dexteram Dei Patris omnipotentis, inde venturus est iudicare vivos et mortuos. Credo in Spiritum Sanctum, sanctam Ecclesiam catholicam, sanctorum communionem, remissionem peccatorum, carnis resurrectionem, vitam aeternam. AmenPATER NOSTER, qui es in caelis, sanctificetur nomen tuum. Adveniat regnum tuum. Fiat voluntas tua, sicut in caelo et in terra. Panem nostrum quotidianum da nobis hodie, et dimitte nobis debita nostra sicut et nos dimittimus debitoribus nostris. Et ne nos inducas in tentationem, sed libera nos a malo. Amen.
Ave María, gratia plena, Dominus tecum. Benedicta tu in mulieribus, et benedictus fructus ventris tui, Iesus. Sancta Maria, Mater Dei et Mater Nostra, ora pro nobis peccatoribus, nunc, et in hora mortis nostrae. Amen. (3 veces)
GLORIA Patri, et Filio, et Spiritui Sancto. Sicut erat in principio, et nunc, et semper, et in saecula saeculorum. Amen
Escuchas la Enunciación del Misterio y lees la Palabra de Dios…
Contemplas el Misterio:
Te imaginas la escena del Evangelio y te metes dentro de ella como si fueras un personaje más: – un pastor que adora al Niño y le lleva una bota de vino; – un caminante que asiste al Bautismo de Jesús; – un invitado de las Bodas de Caná; – un discípulo que le mira desde lejos, cobarde, llorando al verle morir, sólo, junto a su Madre, en la Cruz, – uno que se asombra viendo a Pedro hablar muchas lenguas el día de Pentecostés,
Guardas unos segundos de silencio:
DIOS HABLA BAJITO.
Déjale que te hable en el silencio de tu corazón. A lo mejor te quiere decir algo y si NO lo dejas, ¿Cómo vas a escucharlo?
Luego, en cada Misterio, mientras procuras seguir contemplando la escena y rezas:
PRIMER MISTERIO
OFRECIMIENTO…
PATER NOSTER, qui es in caelis, sanctificetur nomen tuum. Adveniat regnum tuum. Fiat voluntas tua, sicut in caelo et in terra. Panem nostrum quotidianum da nobis hodie, et dimitte nobis debita nostra sicut et nos dimittimus debitoribus nostris. Et ne nos inducas in tentationem, sed libera nos a malo. Amen.
Ave María, gratia plena, Dominus tecum. Benedicta tu in mulieribus, et benedictus fructus ventris tui, Iesus. Sancta Maria, Mater Dei et Mater Nostra, ora pro nobis peccatoribus, nunc, et in hora mortis nostrae. Amen. (10 veces)
GLORIA Patri, et Filio, et Spiritui Sancto. Sicut erat in principio, et nunc, et semper, et in saecula saeculorum. Amen
JACULATORIA
Oh María Madre mía, sé nuestro amparo y protección en estos días de Purificación. Corazones de Jesús, María y José, dadnos la salvación y llevadnos a la gloria del Padre. Amén.
INVOCACIÓN DE FÁTIMA
Jesús, es por tu amor, por la conversión de los pecadores, por el Santo Padre y en reparación de las injurias hechas al Inmaculado Corazón de maría. Jesús, perdónanos nuestras culpas, presérvanos del fuego del infierno. Lleva al cielo a todas las almas y socorre especialmente a las más necesitadas de tu misericordia. Amén
Dios mío yo creo, adoro, espero y os amo y os pido perdón por los que no creen, no adoran, no esperan y no os aman. Santísima Trinidad: Padre, Hijo y Espíritu Santo, os adoro profundamente, os ofrezco el Preciosísimo Cuerpo, Sangre, Alma y Divinidad de Nuestro Señor Jesucristo presente en todos los Tabernáculos del mundo, en reparación de los ultrajes, de los sacrilegios y de las indiferencias con los cuales es ofendido; por los méritos infinitos del Sagrado Corazón de Jesús y del Corazón Inmaculado de María os pido por la conversión de los pobres pecadores.Y así sucesivamente con los siguientes Misterios…
Culminación (Cuando regresamos a la Cruz y recorremos una vez más las primeras cuentas)
PATER NOSTER, qui es in caelis, sanctificetur nomen tuum. Adveniat regnum tuum. Fiat voluntas tua, sicut in caelo et in terra. Panem nostrum quotidianum da nobis hodie, et dimitte nobis debita nostra sicut et nos dimittimus debitoribus nostris. Et ne nos inducas in tentationem, sed libera nos a malo. Amen.
Dios te salve María Santísima, Hija de Dios Padre, virgen purísima antes del Parto; en tus manos encomendamos nuestra FE para que la ilumines… Llena eres de gracia, el Señor es contigo, bendita Tú eres entre todas las mujeres y bendito es el fruto de tu vientre Jesús. Santa María, Madre de Dios y Madre nuestra ruega por nosotros pecadores, ahora y en la hora de nuestra muerte. Amén.
Dios te salve María Santísima, Madre de Dios Hijo, virgen purísima en el Parto; en tus manos encomendamos nuestra Caridad, para que la inflames… Llena eres de gracia, el Señor es contigo, bendita Tú eres entre todas las mujeres y bendito es el fruto de tu vientre Jesús. Santa María, Madre de Dios y Madre nuestra ruega por nosotros pecadores, ahora y en la hora de nuestra muerte. Amén.
Dios te salve María Santísima, Esposa de Dios Espíritu Santo, virgen purísima después del Parto; en tus manos encomendamos nuestra Esperanza para que la alientes… Llena eres de gracia, el Señor es contigo, bendita Tú eres entre todas las mujeres y bendito es el fruto de tu vientre Jesús. Santa María, Madre de Dios y Madre nuestra ruega por nosotros pecadores, ahora y en la hora de nuestra muerte. Amén.
Dios te salve María Santísima, Templo y Sagrario de la Santísima Trinidad. Virgen Concebida sin la Culpa Original. Dios te salve, Reina y Madre de misericordia; vida, dulzura y esperanza nuestra, Dios te salve. A ti clamamos los desterrados hijos de Eva. A ti suspiramos gimiendo y llorando, en este Valle de Lágrimas. ¡Ea! pues Señora, Abogada nuestra, vuelve a nosotros esos tus ojos misericordiosos y muéstranos a Jesús, Fruto Bendito de tu Vientre, ¡Oh Clemente, oh Piadosa, Oh Dulce Virgen María!¡Ruega por nosotros Santa Madre de Dios, para que seamos dignos de alcanzar las Divinas Gracias y Promesas de Nuestro señor Jesucristo. Amén
SALVE Regina, mater misericordiae, vita, dulcedo, et spes nostra, salve. Ad te clamamus exsules filii Hevae. Ad te suspiramus, gementes et flentes in hac lacrimarum valle. Eia, ergo, advocata nostra, illos tuos misericordes oculos ad nos converte. Et Iesus, benedictum fructum ventris tui, nobis post hoc exsilium ostende. O clemens, O pia, O dulcis Virgo Maria. Amen.
¡Oh Soberano Santuario! Madre del Verbo Eterno, libra Virgen del Infierno a los que rezan tu Rosario. Emperatriz Poderosa, de los mortales Consuelo; ¡Ábrenos Virgen el Cielo, con una muerte dichosa y dános pureza de alma; ya que eres tan Poderosa.
Mi corazón en amarte, eternamente se ocupe y mi lengua en alabarte Madre mía de Guadalupe.
GLORIA Patri, et Filio, et Spiritui Sancto. Sicut erat in principio, et nunc, et semper, et in saecula saeculorum. AmenLAS LETANÍAS LAURETANAS
(En las letanías podemos encontrar alguna Advocación especial según nuestra necesidad particular, por ejemplo Consoladora de los Afligidos y pedirle que nos ayude con el Dolor o la pena que está abrumando nuestro corazón. Y así sucesivamente…)
Señor, ten piedad R. Ten piedad de nosotros
Cristo, ten piedad
Señor, ten piedad.
Cristo, óyenos. R. Ten piedad de nosotros.
Cristo, escúchanos.
Dios, Padre celestial, R. Ten piedad de nosotros.
Dios, Hijo, Redentor del mundo,
Dios, Espíritu Santo,
Santísima Trinidad, un solo Dios, R. Ten piedad de nosotros.
Santa María, R. Ruega por nosotros.
Santa Madre de Dios,
Santa Virgen de las Vírgenes,
Madre de Cristo,
Madre de la Iglesia,
Madre de la divina gracia,
Madre purísima,
Madre castísima,
Madre siempre virgen, R. Ruega por nosotros
Madre inmaculada,
Madre amable,
Madre admirable,
Madre del buen consejo,Madre del Creador, R. Ruega por nosotros
Madre del Salvador,
Madre de misericordia,
Virgen prudentísima,
Virgen digna de veneración,
Virgen digna de alabanza,
Virgen poderosa,
Virgen clemente, R. Ruega por nosotros.
Virgen fiel,
Espejo de justicia,
Trono de la Sabiduría,
Vaso espiritual,
Vaso digno de honor,
Vaso de insigne devoción,
Rosa mística, R. Ruega por nosotros
Torre de David,
Torre de marfil,
Casa de oro,
Arca de la Alianza,Puerta del Cielo, R. Ruega por nosotros.
Estrella de la mañana,
Salud de los enfermos,
Refugio de los pecadores,
Consoladora de los afligidos,
Auxilio de los cristianos,
Reina de los Ángeles,
Reina de los Patriarcas, R. Ruega por nosotros.
Reina de los Profetas,
Reina de los Apóstoles,
Reina de los Mártires,
Reina de los Confesores,
Reina de las Vírgenes,
Reina de todos los Santos,Reina concebida sin pecado original,
Reina asunta a los Cielos,
Reina del Santísimo Rosario,
Reina de la familia,
Reina de la paz.
Cordero de Dios, que quitas el pecado del mundo, perdónanos, Señor.
Cordero de Dios, que quitas el pecado del mundo, escúchanos, Señor.
Cordero de Dios, que quitas el pecado del mundo, ten misericordia de nosotros.
Ruega por nosotros, Santa Madre de Dios. Para que seamos dignos de las promesas de Cristo.
ORACIÓN FINAL
Te rogamos nos concedas, Señor Dios nuestro, gozar de continua salud de alma y cuerpo. Y por la gloriosa Intercesión de la bienaventurada siempre Virgen María, vernos libres de las tristezas de la vida presente y disfrutar de las alegrías eternas. Por Cristo nuestro Señor. Amén.
EL SANTO ROSARIO 3
CÓMO ORAR EL SANTO ROSARIO CON PODER.
EL ROSARIO ES EL ARMA PERFECTA Y LETAL.
Porque cuando lo ORAS, CON PERFECTA ENTREGA Y DEVOCIÓN…
Orando juntamente con María, nuestra petición se potencializa con la Intercesión de Ella Y DIOS CONCEDE LO QUE LE ESTAMOS PIDIENDO…
Por más imposible que parezca.
De acuerdo a nuestro crecimiento espiritual, la Intercesión lo refleja en nuestras oraciones y con la ayuda del Espíritu Santo, nos llenamos de sabiduría para actuar y para pedir.
MARÍA NOS PROPORCIONA LA PROTECCIÓN NECESARIA Y EL CAMINO SEGURO PARA REGRESAR AL CIELO…
Con el Rosario fortaleces las defensas de tu alma y las de los que amas… Superando todos los obstáculos que Satanás pone en nuestro camino, para impedir que nos reunamos con nuestro Padre Celestial.
Con el Amor y las Gracias que Dios derrama en nuestra alma, vamos sanando nuestras heridas del corazón y SALTAMOS sobre las trampas puestas por el León Rugiente, para matarnos espiritualmente:
Tentaciones que tocan astutamente nuestro ‘ego’ y el NO querer soltar las piedras y resentimientos de nuestra carga emocional. Así como los apegos fortísimos, materiales y emocionales, por las cosas y las personas de este mundo.
Sabiendo todo esto; Cuando te dispones a Orar, hay una Conmoción en el mundo espiritual que es verdaderamente impresionante. Primero, todas las Huestes Infernales ponen en movimiento sus tácticas, para que NO lo hagas y te surgen interrupciones y obstáculos, que de NO ser tan trágicos; serían casi cómicos.
Si les haces caso, ellos conseguirán su objetivo y tú te pondrás a hacer otra cosa, en lugar de Orar.
PERO CUANDO LO DECIDES, te aíslas para Orar y con la práctica, aprendes a lanzarle misiles devastadores al Reino de las Tinieblas… aún enmedio de tu trajinar diario.
Y también el Cielo se Alerta para actuar inmediatamente…
Jesús CONOCE muy bien el Poder de Intercesión de María y por eso antes de ir al Getsemaní, FUE A PEDIRLE a su Madre Santísima que Orara por Él…Pues Él sabía que estaba a punto de Iniciar su Pasión Dolorosísima…Y así fue.
Aún con el Cielo Cerrado, María le consiguió al Ángel del Getsemaní.
GUERREROS EN ACCIÓN
ROSARIUM Signum Crucis
Per signum Crucis de inimicis nostris libera nos, Deus noster. In nomine Patris, et Filii, et Spiritus Sancti. Amen.
- En el nombre del Padre, y del Hijo, y del Espíritu Santo.
R.Amén. - Dios mío, ven en mi auxilio.
R. Señor, date prisa en socorrerme. - Gloria al Padre, Gloria al Hijo y Gloria al Espíritu Santo
R. Como era en el principio, ahora y siempre por los siglos de los siglos. Amén
Derrama, Señor, tu gracia sobre nosotros, que por el anuncio del ángel, hemos conocido la Encarnación de tu Hijo, para que lleguemos, por su Pasión y su Cruz, a la gloria de la resurrección. Por Jesucristo, nuestro Señor. Amén.
Y haces la TRIPLE Invocación:
AVE MARÍA PURÍSIMA, SIN PECADO CONCEBIDA.
AVE MARÍA PURÍSIMA, SIN PECADO CONCEBIDA.
AVE MARÍA PURÍSIMA, SIN PECADO CONCEBIDA.
(María llega inmediatamente y se arrodilla a orar junto contigo)
Acto de Contrición…
Dios y Hombre verdadero, Creador, Padre y Redentor mío,
por ser Vos quién sois y porque os amo sobre todas las cosas, me pesa de todo corazón haberos ofendido; porque eres infinitamente bueno y digno de ser amado.
Propongo firmemente nunca más pecar,
apartarme de todas las ocasiones de ofenderos,
confesarme y, cumplir la penitencia que me fuera impuesta.
Ofrezco, Señor, mi vida, obras y trabajos,
en satisfacción de todos mis pecados, y, así como lo suplico, así confío en vuestra bondad y misericordia infinita,
que los perdonareis, por los méritos de vuestra preciosísima sangre, pasión y muerte, y me dareis gracia para enmendarme, y perseverar en vuestro santo amor y servicio,
hasta el fin de mi vida.
Amén.
OFRENDA:
Yo me Uno con todos los ángeles y santos del Cielo, las pobres almas del Purgatorio y todos los justos de la Tierra; con todas las Misas y oraciones de Alabanza a Dios Uno y Trino que se hayan orado o que se vayan a orar.
Todas las lágrimas, gozos, sacrificios y sufrimientos de cada alma, que alguna vez haya vivido o que vaya a vivir, en la Tierra o en el Universo.
Lo uno todo al Corazón Adolorido de María Santísima a los pies de la Cruz y ofrezco con él a toda la Creación y el Sufrimiento de la Creación a Jesús, por la Conversión de los Pecadores.
Por el Círculo Dorado de la Perfección, la liberación de las almas del Purgatorio, la santificación de los sacerdotes y religiosos, los Deseos de los Dos Corazones de Jesús y de María, la paz en el Mundo y en el Universo…
Y mis intenciones…(mencionarlas aquí)
LAS TRES ORACIONES
NOVENA DE CONFIANZA AL SAGRADO CORAZÓN DE JESÚS
Oh Señor Jesucristo, yo confío… (Hacer la petición)
Mírame solamente Jesús, y luego haz lo que Tu Sacratísimo Corazón te inspire. Que tu Sagrado Corazón decida. ¡Yo cuento con Él! ¡Yo confío en él! ¡Yo me entrego a Su Misericordia! Señor Jesús, Tu no me defraudarás. Sagrado Corazón de Jesús, yo confío en Ti. Sagrado Corazón de Jesús, yo creo en Tu Amor por mí. Sagrado Corazón de Jesús, que venga tu reino.
¡Oh! Sagrado Corazón de Jesús, yo te he pedido muchas gracias, pero imploro ardientemente esta. Tómala, ponla en Tu Sagrado Corazón. Cuando El Padre Eterno la vea, cubierta con Tu Preciosa Sangre, no la rechazará. Ya no será mi plegaria, sino la tuya, oh Jesús. Oh Sagrado Corazón de Jesús, yo pongo mi confianza en Tí. Que jamás sea confundido. Amén.
ACORDAOS (De San Bernardo)
Acordaos, oh piadosísima Virgen María, que jamás se ha oído decir que ninguno de los que han acudido a vuestra protección, implorando vuestro auxilio y reclamando vuestro socorro, haya sido abandonado de Vos. Animado por esa confianza a Vos también acudo, oh Madre, Virgen de las vírgenes y aunque gimiendo bajo el peso de mis pecados, me atrevo a comparecer ante vuestra presencia soberana. No desechéis, oh Madre de Dios, mis humildes súplicas, antes bien escuchadlas y acogedlas benignamente. Amén.
INVOCACIÓN A SAN MIGUEL ARCÁNGEL
San Miguel Arcángel, defiéndenos en el combate; sé nuestro auxilio contra la perversidad y las asechanzas del demonio. Reprímale Dios, pedimos suplicantes y Tú, Príncipe de la milicia Celestial, lanza al infierno con el divino Poder, a Satanás y a los demás espíritus malignos, que vagan por el mundo para la perdición de las almas. Amén.
CREDO in Deum Patrem omnipotentem,
Creatorem caeli et terrae. Et in Iesum Christum, Filium eius unicum, Dominum nostrum, qui conceptus est de Spiritu Sancto, natus ex Maria Virgine, passus sub Pontio Pilato, crucifixus, mortuus, et sepultus, descendit ad inferos, tertia die resurrexit a mortuis, ascendit ad caelos, sedet ad dexteram Dei Patris omnipotentis, inde venturus est iudicare vivos et mortuos. Credo in Spiritum Sanctum, sanctam Ecclesiam catholicam, sanctorum communionem, remissionem peccatorum, carnis resurrectionem, vitam aeternam. AmenPATER NOSTER, qui es in caelis, sanctificetur nomen tuum. Adveniat regnum tuum. Fiat voluntas tua, sicut in caelo et in terra. Panem nostrum quotidianum da nobis hodie, et dimitte nobis debita nostra sicut et nos dimittimus debitoribus nostris. Et ne nos inducas in tentationem, sed libera nos a malo. Amen.
Ave María, gratia plena, Dominus tecum. Benedicta tu in mulieribus, et benedictus fructus ventris tui, Iesus. Sancta Maria, Mater Dei et Mater Nostra, ora pro nobis peccatoribus, nunc, et in hora mortis nostrae. Amen. (3 veces)
GLORIA Patri, et Filio, et Spiritui Sancto. Sicut erat in principio, et nunc, et semper, et in saecula saeculorum. Amen
¿QUÉ ES LO QUE SUCEDE CUANDO REZAMOS EL ROSARIO,
MEDITÁNDOLO CON EL EVANGELIO?
NO hay que olvidar que estamos viviendo una Guerra Espiritual encarnizada y mortal…
Escuchas la Enunciación del Misterio y lees la Palabra de Dios… Contemplas el Misterio:
Te imaginas la escena del Evangelio y te metes dentro de ella como si fueras un personaje más: – un pastor que adora al Niño y le lleva una bota de vino; – un caminante que asiste al Bautismo de Jesús; – un invitado de las Bodas de Caná; – un discípulo que le mira desde lejos, cobarde, llorando al verle morir, sólo, junto a su Madre, en la Cruz, – uno que se asombra viendo a Pedro hablar muchas lenguas el día de Pentecostés,
Guardas unos segundos de silencio:
DIOS HABLA BAJITO. Déjale que te hable en el silencio de tu corazón. A lo mejor te quiere decir algo y si NO lo dejas, ¿Cómo vas a escucharlo?
Luego, en cada Misterio, mientras procuras seguir contemplando la escena y rezas:
PRIMER MISTERIO
OFRECIMIENTO…
PATER NOSTER, qui es in caelis, sanctificetur nomen tuum. Adveniat regnum tuum. Fiat voluntas tua, sicut in caelo et in terra. Panem nostrum quotidianum da nobis hodie, et dimitte nobis debita nostra sicut et nos dimittimus debitoribus nostris. Et ne nos inducas in tentationem, sed libera nos a malo. Amen.
Ave María, gratia plena, Dominus tecum. Benedicta tu in mulieribus, et benedictus fructus ventris tui, Iesus. Sancta Maria, Mater Dei et Mater Nostra, ora pro nobis peccatoribus, nunc, et in hora mortis nostrae. Amen. (10 veces)
GLORIA Patri, et Filio, et Spiritui Sancto. Sicut erat in principio, et nunc, et semper, et in saecula saeculorum. Amen
JACULATORIA
Oh María Madre mía, sé nuestro amparo y protección en estos días de Purificación. Corazones de Jesús, María y José, dadnos la salvación y llevadnos a la gloria del Padre. Amén.
INVOCACIÓN DE FÁTIMA
Jesús, es por tu amor, por la conversión de los pecadores, por el Santo Padre y en reparación de las injurias hechas al Inmaculado Corazón de maría. Jesús, perdónanos nuestras culpas, presérvanos del fuego del infierno. Lleva al cielo a todas las almas y socorre especialmente a las más necesitadas de tu misericordia. Amén
Dios mío yo creo, adoro, espero y os amo y os pido perdón por los que no creen, no adoran, no esperan y no os aman. Santísima Trinidad: Padre, Hijo y Espíritu Santo, os adoro profundamente, os ofrezco el Preciosísimo Cuerpo, Sangre, Alma y Divinidad de Nuestro Señor Jesucristo presente en todos los Tabernáculos del mundo, en reparación de los ultrajes, de los sacrilegios y de las indiferencias con los cuales es ofendido; por los méritos infinitos del Sagrado Corazón de Jesús y del Corazón Inmaculado de María os pido por la conversión de los pobres pecadores.Y así sucesivamente con los siguientes Misterios…
Culminación (Cuando regresamos a la Cruz y recorremos una vez más las primeras cuentas)
PATER NOSTER, qui es in caelis, sanctificetur nomen tuum. Adveniat regnum tuum. Fiat voluntas tua, sicut in caelo et in terra. Panem nostrum quotidianum da nobis hodie, et dimitte nobis debita nostra sicut et nos dimittimus debitoribus nostris. Et ne nos inducas in tentationem, sed libera nos a malo. Amen.
Dios te salve María Santísima, Hija de Dios Padre, virgen purísima antes del Parto; en tus manos encomendamos nuestra FE para que la ilumines… Llena eres de gracia, el Señor es contigo, bendita Tú eres entre todas las mujeres y bendito es el fruto de tu vientre Jesús. Santa María, Madre de Dios y Madre nuestra ruega por nosotros pecadores, ahora y en la hora de nuestra muerte. Amén.
Dios te salve María Santísima, Madre de Dios Hijo, virgen purísima en el Parto; en tus manos encomendamos nuestra Caridad, para que la inflames… Llena eres de gracia, el Señor es contigo, bendita Tú eres entre todas las mujeres y bendito es el fruto de tu vientre Jesús. Santa María, Madre de Dios y Madre nuestra ruega por nosotros pecadores, ahora y en la hora de nuestra muerte. Amén.
Dios te salve María Santísima, Esposa de Dios Espíritu Santo, virgen purísima después del Parto; en tus manos encomendamos nuestra Esperanza para que la alientes… Llena eres de gracia, el Señor es contigo, bendita Tú eres entre todas las mujeres y bendito es el fruto de tu vientre Jesús. Santa María, Madre de Dios y Madre nuestra ruega por nosotros pecadores, ahora y en la hora de nuestra muerte. Amén.
Dios te salve María Santísima, Templo y Sagrario de la Santísima Trinidad. Virgen Concebida sin la Culpa Original. Dios te salve, Reina y Madre de misericordia; vida, dulzura y esperanza nuestra, Dios te salve. A ti clamamos los desterrados hijos de Eva. A ti suspiramos gimiendo y llorando, en este Valle de Lágrimas. ¡Ea! pues Señora, Abogada nuestra, vuelve a nosotros esos tus ojos misericordiosos y muéstranos a Jesús, Fruto Bendito de tu Vientre, ¡Oh Clemente, oh Piadosa, Oh Dulce Virgen María!¡Ruega por nosotros Santa Madre de Dios, para que seamos dignos de alcanzar las Divinas Gracias y Promesas de Nuestro señor Jesucristo. Amén
SALVE Regina, mater misericordiae, vita, dulcedo, et spes nostra, salve. Ad te clamamus exsules filii Hevae. Ad te suspiramus, gementes et flentes in hac lacrimarum valle. Eia, ergo, advocata nostra, illos tuos misericordes oculos ad nos converte. Et Iesus, benedictum fructum ventris tui, nobis post hoc exsilium ostende. O clemens, O pia, O dulcis Virgo Maria. Amen.
¡Oh Soberano Santuario! Madre del Verbo Eterno, libra Virgen del Infierno a los que rezan tu Rosario. Emperatriz Poderosa, de los mortales Consuelo; ¡Ábrenos Virgen el Cielo, con una muerte dichosa y dános pureza de alma; ya que eres tan Poderosa.
Mi corazón en amarte, eternamente se ocupe y mi lengua en alabarte Madre mía de Guadalupe.
GLORIA Patri, et Filio, et Spiritui Sancto. Sicut erat in principio, et nunc, et semper, et in saecula saeculorum. AmenLAS LETANÍAS LAURETANAS
(En las letanías podemos encontrar alguna Advocación especial según nuestra necesidad particular, por ejemplo Consoladora de los Afligidos y pedirle que nos ayude con el Dolor o la pena que está abrumando nuestro corazón. Y así sucesivamente…)
Señor, ten piedad R. Ten piedad de nosotros
Cristo, ten piedad
Señor, ten piedad.
Cristo, óyenos. R. Ten piedad de nosotros.
Cristo, escúchanos.
Dios, Padre celestial, R. Ten piedad de nosotros.
Dios, Hijo, Redentor del mundo,
Dios, Espíritu Santo,
Santísima Trinidad, un solo Dios, R. Ten piedad de nosotros.
Santa María, R. Ruega por nosotros.
Santa Madre de Dios,
Santa Virgen de las Vírgenes,
Madre de Cristo,
Madre de la Iglesia,
Madre de la divina gracia,
Madre purísima,
Madre castísima,
Madre siempre virgen, R. Ruega por nosotros
Madre inmaculada,
Madre amable,
Madre admirable,
Madre del buen consejo,
Madre del Creador, R. Ruega por nosotros
Madre del Salvador,
Madre de misericordia,
Virgen prudentísima,
Virgen digna de veneración,
Virgen digna de alabanza,
Virgen poderosa,
Virgen clemente, R. Ruega por nosotros.
Virgen fiel,
Espejo de justicia,
Trono de la Sabiduría,
Causa de nuestra alegría,
Vaso espiritual,
Vaso digno de honor,
Vaso de insigne devoción,
Rosa mística, R. Ruega por nosotros
Torre de David,
Torre de marfil,
Casa de oro,
Arca de la Alianza,Puerta del Cielo, R. Ruega por nosotros.
Estrella de la mañana,
Salud de los enfermos,
Refugio de los pecadores,
Consoladora de los afligidos,
Auxilio de los cristianos,
Reina de los Ángeles,
Reina de los Patriarcas, R. Ruega por nosotros.
Reina de los Profetas,
Reina de los Apóstoles,
Reina de los Mártires,
Reina de los Confesores,
Reina de las Vírgenes,
Reina de todos los Santos,Reina concebida sin pecado original,
Reina asunta a los Cielos,
Reina del Santísimo Rosario,
Reina de la familia,
Reina de la paz.
Cordero de Dios, que quitas el pecado del mundo, perdónanos, Señor.
Cordero de Dios, que quitas el pecado del mundo, escúchanos, Señor.
Cordero de Dios, que quitas el pecado del mundo, ten misericordia de nosotros.
Ruega por nosotros, Santa Madre de Dios. Para que seamos dignos de las promesas de Cristo.
ORACIÓN FINAL
Te rogamos nos concedas, Señor Dios nuestro, gozar de continua salud de alma y cuerpo. Y por la gloriosa Intercesión de la bienaventurada siempre Virgen María, vernos libres de las tristezas de la vida presente y disfrutar de las alegrías eternas. Por Cristo nuestro Señor. Amén
Oración Intercesora, Ejemplo:
“Amadísimo Padre Celestial, Tú que Eres infinitamente Bueno, Infinitamente Poderoso, Infinitamente Misericordioso, escucha la oración que te presento a través del Inmaculado Corazón de María y por el Poder de la Sangre Preciosísima de Jesús:
En este momento me uno a tu Hijo Jesucristo en el momento cuando te dijo “Padre Perdónalos porque no saben lo que hacen”. A La Iglesia Purgante, a la Iglesia Triunfante y a todos mis hermanitos mártires que están derramando su sangre en el mundo entero y sufriendo Persecución por amarte.
Te entrego TODA MI ABSOLUTA MISERIA y por favor Llénala con tu Santidad. Uno mi pobre FE a la de todos ellos y REALIZO en el Nombre Santísimo de Jesús…
Un Bautismo de Deseo Y DE SANGRE sobre TODAS las almas que están siendo llamadas ante Tu Presencia por los efectos de la Gran Tribulación, EN… (Nombra el lugar)
Y EN EL UNIVERSO ENTERO…
(También puede ser UN MILAGRO, UNA SANACIÓN o cualquier otra cosa que te haya inspirado el Espíritu Santo. Las palabras variarán de acuerdo a las instrucciones que recibas del Señor)
Te pones de pie, adoptas una postura de crucificado y dices con autoridad…
Todo esto LO DIGO Y LO HAGO en el Nombre de Jesús
(mientras bendices en el aire y piensas en lo que sea por lo que estás intercediendo)
Y con el +Poder del Padre, +del Hijo y +del Espíritu Santo… AMÉN
Te vuelves a arrodillar, te postras y continúas…
Y te las entrego ABBA SANTÍSIMO bañadas con la Sangre Preciosísima de Nuestro Redentor Santísimo para que alcancen Tu Misericordia y se salven, al Paso de tu Justicia sobre la Nación de…
Te doy las Gracias porque sé que me haz escuchado y las almas que acabas de recibir, se acuerden de mí en sus oraciones y me alcancen de Tí la Fortaleza y todo lo que me hace falta, en los embates con que nuestros Enemigos pretenderán exterminarme.
YO TE ADORO Y CONFÍO CIEGAMENTE EN TÍ. Y me abandono totalmente en tus brazos, porque sé que Tú me AMAS, me Proteges y me Guías.
Te Bendigo por TODO LO QUE PERMITES EN MI VIDA…
Gracias ABBA… POR ESCUCHARME Y CONCEDERLOGracias Mamita María por prestarne Tu Vida de Oración, Ayuno y Penitencia, mientras me acostumbro a caminar con tu Virtud y aprendo a ADORAR a nuestro Dios, como tú lo haces.
Gracias Jesús por sostenerme en la Premura de estos Últimos Tiempos, ayudarme a comportarme como tu verdadero hermano y AYUDARME A ORAR COMO TÚ LO HACES.
Gracias Espíritu Santo por estar en mí y EDUCARME, para ser un digno hijo de Dios.
POR AYUDARME A SENTIR UN AMOR APASIONADO
POR TU SANTÍSIMA TRINIDAD Y ENSEÑARME A SER
UN VERDADERO GUERRERO CELESTIAL
“Hágase tu Voluntad en la Tierra y en todo el Universo, como en el Cielo… AMÉN”
(Esta Oración de Poder la insertas, al principio del Misterio que el Señor te indique…)
Lunes y Sábados:
LOS MISTERIOS GOZOSOS
Te pedimos, Señor, que nosotros, tus siervos, gocemos siempre de salud de alma y cuerpo; y por la intercesión de santa María, la Virgen, líbranos de las tristezas de este mundo y concédenos las alegrías del cielo. Por Jesucristo, nuestro Señor. Amén.
Primer misterio:La Anunciación y Encarnación del Hijo de Dios en las purísimas entrañas de la Virgen María.
Un Padrenuestro, diez Avemarías y Gloria.
[Al final de cada misterio suele decirse:]
Dios te salve, María, Hija de Dios Padre; Dios te salve, María, Madre de Dios Hijo; Dios te salve María, Esposa del Espíritu Santo. Templo y sagrario de la santísima Trinidad, no permitáis, Señora, que ningún cristiano viva ni muera en pecado mortal ni venial. Amén.
Segundo misterio: La Visitación de María Santísima a su prima Santa Isabel
Un Padrenuestro, diez Avemarías y Gloria.
Tercer misterio: El nacimiento del Niño Jesús en el pobre y humilde portal de Belén.
Un Padrenuestro, diez Avemarías y Gloria.
Cuarto misterio: La Purificación de la Virgen María y Presentación del Niño Jesús en el Templo.
Un Padrenuestro, diez Avemarías y Gloria.
Quinto misterio: El Niño Jesús perdido y hallado en el Templo.
Un Padrenuestro, diez Avemarías y Gloria.
Jueves:
LOS MISTERIOS LUMINOSOS
Dios todopoderoso y eterno, luz de los que en ti creen, que la tierra se llene de tu gloria y que te reconozcan los pueblos por el esplendor de tu luz. Por Jesucristo, nuestro Señor. Amén.
Primer misterio: El bautismo de Jesús en el río Jordán.
Un Padrenuestro, diez Avemarías y Gloria.
Segundo misterio: Jesús y María en las bodas de Caná.
Un Padrenuestro, diez Avemarías y Gloria.
Tercer misterio: Jesús anuncia el Reino de Dios e invita a la conversión.
Un Padrenuestro, diez Avemarías y Gloria.
Cuarto misterio: La transfiguración de Jesús en el monte Tabor.
Un Padrenuestro, diez Avemarías y Gloria.
Quinto misterio: La institución de la Eucaristía.
Un Padrenuestro, diez Avemarías y Gloria.
Martes y Viernes:
LOS MISTERIOS DOLOROSOS
Señor, tú has querido que la Madre compartiera los dolores de tu Hijo al pie de la cruz; haz que la Iglesia, asociándose con María a la pasión de Cristo, merezca participar de su Resurrección. Por Jesucristo, nuestro Señor. Amén
Primer misterio: La oración de Jesús en el huerto de Getsemaní.
Un Padrenuestro, diez Avemarías y Gloria.
Segundo misterio: La flagelación de Jesús, atado a la columna.
Un Padrenuestro, diez Avemarías y Gloria.
Tercer misterio: Jesús es coronado de espinas.
Un Padrenuestro, diez Avemarías y Gloria.
Cuarto misterio: Jesús con la cruz a cuestas, camino del Calvario.
Un Padrenuestro, diez Avemarías y Gloria.
Quinto misterio: La crucifixión y muerte de Jesús.
Un Padrenuestro, diez Avemarías y Gloria.
Miércoles y Domingos:
LOS MISTERIOS GLORIOSOS
Oh Dios, que por la resurrección de tu Hijo, nuestro Señor Jesucristo, has llenado el mundo de alegría, concédenos, por intercesión de su Madre, la Virgen María, llegar a alcanzar los gozos eternos. Por el mismo Jesucristo, nuestro Señor. Amén
Primer misterio: La Resurrección del Señor.
Un Padrenuestro, diez Avemarías y Gloria.
Segundo misterio: La Ascensión del Señor al cielo.
Un Padrenuestro, diez Avemarías y Gloria.
Tercer misterio: La venida del Espíritu Santo sobre el Colegio apostólico.
Un Padrenuestro, diez Avemarías y Gloria.
Cuarto misterio: La Asunción de Nuestra Señora al cielo.
Un Padrenuestro, diez Avemarías y Gloria.
Quinto misterio: La coronación de la Virgen María como Reina del universo.
Un Padrenuestro, diez Avemarías y Gloria.
GUERREROS EN ACCIÓN
CÓMO ORAR EL SANTO ROSARIO CON PODER.
EL ROSARIO ES EL ARMA PERFECTA Y LETAL.
Porque cuando lo ORAS, CON PERFECTA ENTREGA Y DEVOCIÓN…
CON EL SANTO ROSARIO, MAMITA MARÍA NOS TOMA DE LA MANO Y NOS CONDUCE HASTA JESÚS…
San Pablo NOS hace esta advertencia:
NO tenemos aquí una morada estable, sino que buscamos una que hemos de poseer algún día (Hebr. 12, 14).
MARÍA NOS PROPORCIONA LA PROTECCIÓN NECESARIA
Y EL CAMINO SEGURO PARA REGRESAR AL CIELO…
Con el Rosario fortaleces las defensas de tu alma y las de los que amas… Superando todos los obstáculos que Satanás pone en nuestro camino, para impedir que nos reunamos con nuestro Padre Celestial.
Con el Amor y las Gracias que Dios derrama en nuestra alma, vamos sanando nuestras heridas del corazón y SALTAMOS sobre las trampas puestas por el León Rugiente, para matarnos espiritualmente:
Tentaciones que tocan astutamente nuestro ‘ego’ y el NO querer soltar las piedras y resentimientos de nuestra carga emocional. Así como los apegos fortísimos, materiales y emocionales, por las cosas y las personas de este mundo.
Sabiendo todo esto; Cuando te dispones a Orar, hay una Conmoción en el mundo espiritual que es verdaderamente impresionante. Primero, todas las Huestes Infernales ponen en movimiento sus tácticas, para que NO lo hagas y te surgen interrupciones y obstáculos, que de NO ser tan trágicos; serían casi cómicos.
Si les haces caso, ellos conseguirán su objetivo y tú te pondrás a hacer otra cosa, en lugar de Orar.
PERO CUANDO LO DECIDES, te aíslas para Orar y lanzarle misiles devastadores al Reino de las Tinieblas…
También el Cielo se Alerta para actuar inmediatamente…
Jesús CONOCE muy bien el Poder de Intercesión de María y por eso antes de ir al Getsemaní, FUE A PEDIRLE a su Madre Santísima que Orara por Él…
Pues Él sabía que estaba a punto de Iniciar su Pasión Dolorosísima…Y así fue.
Aún con el Cielo Cerrado, María le consiguió al Ángel del Getsemaní.
ROSARIUM Signum Crucis
Per signum Crucis de inimicis nostris libera nos, Deus noster. In nomine Patris, et Filii, et Spiritus Sancti. Amen.
Desde que te arrodillas ante un Crucifijo, te persignas y haces la TRIPLE Invocación:
AVE MARÍA PURÍSIMA, SIN PECADO CONCEBIDA.
AVE MARÍA PURÍSIMA, SIN PECADO CONCEBIDA.
AVE MARÍA PURÍSIMA, SIN PECADO CONCEBIDA.
(María llega inmediatamente y se arrodilla a orar junto contigo)
OFRENDA:
Yo me Uno con todos los ángeles y santos del Cielo, las pobres almas del Purgatorio y todos los justos de la Tierra; con todas las Misas y oraciones de Alabanza a Dios Uno y Trino que se hayan orado o que se vayan a orar.
Todas las lágrimas, gozos, sacrificios y sufrimientos de cada alma, que alguna vez haya vivido o que vaya a vivir, en la Tierra o en el Universo.
Lo uno todo al Corazón Adolorido de María Santísima a los pies de la Cruz y ofrezco con él a toda la Creación y el Sufrimiento de la Creación a Jesús, por la Conversión de los Pecadores.
Por el Círculo Dorado de la Perfección, la liberación de las almas del Purgatorio, la santificación de los sacerdotes y religiosos, los Deseos de los Dos Corazones de Jesús y de María, la paz en el Mundo y en el Universo…
Y mis intenciones…(mencionarlas aquí)
LAS TRES ORACIONES
NOVENA DE CONFIANZA AL SAGRADO CORAZÓN DE JESÚS
Oh Señor Jesucristo, yo confío… (Hacer la petición)
Mírame solamente Jesús, y luego haz lo que Tu Sacratísimo Corazón te inspire. Que tu Sagrado Corazón decida. ¡Yo cuento con Él! ¡Yo confío en él! ¡Yo me entrego a Su Misericordia! Señor Jesús, Tu no me defraudarás. Sagrado Corazón de Jesús, yo confío en Ti. Sagrado Corazón de Jesús, yo creo en Tu Amor por mí. Sagrado Corazón de Jesús, que venga tu reino.
¡Oh! Sagrado Corazón de Jesús, yo te he pedido muchas gracias, pero imploro ardientemente esta. Tómala, ponla en Tu Sagrado Corazón. Cuando El Padre Eterno la vea, cubierta con Tu Preciosa Sangre, no la rechazará. Ya no será mi plegaria, sino la tuya, oh Jesús. Oh Sagrado Corazón de Jesús, yo pongo mi confianza en Tí. Que jamás sea confundido. Amén.
ACORDAOS (De San Bernardo)
Acordaos, oh piadosísima Virgen María, que jamás se ha oído decir que ninguno de los que han acudido a vuestra protección, implorando vuestro auxilio y reclamando vuestro socorro, haya sido abandonado de Vos. Animado por esa confianza a Vos también acudo, oh Madre, Virgen de las vírgenes y aunque gimiendo bajo el peso de mis pecados, me atrevo a comparecer ante vuestra presencia soberana. No desechéis, oh Madre de Dios, mis humildes súplicas, antes bien escuchadlas y acogedlas benignamente. Amén.
INVOCACIÓN A SAN MIGUEL ARCÁNGEL
San Miguel Arcángel, defiéndenos en el combate; sé nuestro auxilio contra la perversidad y las asechanzas del demonio. Reprímale Dios, pedimos suplicantes y Tú, Príncipe de la milicia Celestial, lanza al infierno con el divino Poder, a Satanás y a los demás espíritus malignos, que vagan por el mundo para la perdición de las almas. Amén.CREDO in Deum Patrem omnipotentem, Creatorem caeli et terrae. Et in Iesum Christum, Filium eius unicum, Dominum nostrum, qui conceptus est de Spiritu Sancto, natus ex Maria Virgine, passus sub Pontio Pilato, crucifixus, mortuus, et sepultus, descendit ad inferos, tertia die resurrexit a mortuis, ascendit ad caelos, sedet ad dexteram Dei Patris omnipotentis, inde venturus est iudicare vivos et mortuos. Credo in Spiritum Sanctum, sanctam Ecclesiam catholicam, sanctorum communionem, remissionem peccatorum, carnis resurrectionem, vitam aeternam. Amen
PATER NOSTER, qui es in caelis, sanctificetur nomen tuum. Adveniat regnum tuum. Fiat voluntas tua, sicut in caelo et in terra. Panem nostrum quotidianum da nobis hodie, et dimitte nobis debita nostra sicut et nos dimittimus debitoribus nostris. Et ne nos inducas in tentationem, sed libera nos a malo. Amen.
Ave María, gratia plena, Dominus tecum. Benedicta tu in mulieribus, et benedictus fructus ventris tui, Iesus. Sancta Maria, Mater Dei et Mater Nostra, ora pro nobis peccatoribus, nunc, et in hora mortis nostrae. Amen. (3 veces)
GLORIA Patri, et Filio, et Spiritui Sancto. Sicut erat in principio, et nunc, et semper, et in saecula saeculorum. Amen¿QUÉ ES LO QUE SUCEDE CUANDO REZAMOS EL ROSARIO,
MEDITÁNDOLO CON EL EVANGELIO?
NO hay que olvidar que estamos viviendo una Guerra Espiritual encarnizada y mortal…
Escuchas la Enunciación del Misterio y lees la Palabra de Dios… Contemplas el Misterio:
Te imaginas la escena del Evangelio y te metes dentro de ella como si fueras un personaje más: – un pastor que adora al Niño y le lleva una bota de vino; – un caminante que asiste al Bautismo de Jesús; – un invitado de las Bodas de Caná; – un discípulo que le mira desde lejos, cobarde, llorando al verle morir, sólo, junto a su Madre, en la Cruz, – uno que se asombra viendo a Pedro hablar muchas lenguas el día de Pentecostés,
Guardas unos segundos de silencio:
DIOS HABLA BAJITO. Déjale que te hable en el silencio de tu corazón. A lo mejor te quiere decir algo y si NO lo dejas, ¿Cómo vas a escucharlo?
Luego, en cada Misterio, mientras procuras seguir contemplando la escena y rezas:
PRIMER MISTERIO
PATER NOSTER, qui es in caelis, sanctificetur nomen tuum. Adveniat regnum tuum. Fiat voluntas tua, sicut in caelo et in terra. Panem nostrum quotidianum da nobis hodie, et dimitte nobis debita nostra sicut et nos dimittimus debitoribus nostris. Et ne nos inducas in tentationem, sed libera nos a malo. Amen.
Ave María, gratia plena, Dominus tecum. Benedicta tu in mulieribus, et benedictus fructus ventris tui, Iesus. Sancta Maria, Mater Dei et Mater Nostra, ora pro nobis peccatoribus, nunc, et in hora mortis nostrae. Amen. (10 veces)
GLORIA Patri, et Filio, et Spiritui Sancto. Sicut erat in principio, et nunc, et semper, et in saecula saeculorum. Amen
JACULATORIA
Oh María Madre mía, sé nuestro amparo y protección en estos días de Purificación. Corazones de Jesús, María y José, dadnos la salvación y llevadnos a la gloria del Padre. Amén.
INVOCACIÓN DE FÁTIMA
Jesús, es por tu amor, por la conversión de los pecadores, por el Santo Padre y en reparación de las injurias hechas al Inmaculado Corazón de maría. Jesús, perdónanos nuestras culpas, presérvanos del fuego del infierno. Lleva al cielo a todas las almas y socorre especialmente a las más necesitadas de tu misericordia. Amén
Dios mío yo creo, adoro, espero y os amo y os pido perdón por los que no creen, no adoran, no esperan y no os aman. Santísima Trinidad: Padre, Hijo y Espíritu Santo, os adoro profundamente, os ofrezco el Preciosísimo Cuerpo, Sangre, Alma y Divinidad de Nuestro Señor Jesucristo presente en todos los Tabernáculos del mundo, en reparación de los ultrajes, de los sacrilegios y de las indiferencias con los cuales es ofendido; por los méritos infinitos del Sagrado Corazón de Jesús y del Corazón Inmaculado de María os pido por la conversión de los pobres pecadores.Y así sucesivamente con los siguientes Misterios…
Culminación (Cuando regresamos a la Cruz y recorremos una vez más las primeras cuentas)
PATER NOSTER, qui es in caelis, sanctificetur nomen tuum. Adveniat regnum tuum. Fiat voluntas tua, sicut in caelo et in terra. Panem nostrum quotidianum da nobis hodie, et dimitte nobis debita nostra sicut et nos dimittimus debitoribus nostris. Et ne nos inducas in tentationem, sed libera nos a malo. Amen.
Dios te salve María Santísima, Hija de Dios Padre, virgen purísima antes del Parto; en tus manos encomendamos nuestra FE para que la ilumines… Llena eres de gracia, el Señor es contigo, bendita Tú eres entre todas las mujeres y bendito es el fruto de tu vientre Jesús. Santa María, Madre de Dios y Madre nuestra ruega por nosotros pecadores, ahora y en la hora de nuestra muerte. Amén.
Dios te salve María Santísima, Madre de Dios Hijo, virgen purísima en el Parto; en tus manos encomendamos nuestra Caridad, para que la inflames… Llena eres de gracia, el Señor es contigo, bendita Tú eres entre todas las mujeres y bendito es el fruto de tu vientre Jesús. Santa María, Madre de Dios y Madre nuestra ruega por nosotros pecadores, ahora y en la hora de nuestra muerte. Amén.
Dios te salve María Santísima, Esposa de Dios Espíritu Santo, virgen purísima después del Parto; en tus manos encomendamos nuestra Esperanza para que la alientes… Llena eres de gracia, el Señor es contigo, bendita Tú eres entre todas las mujeres y bendito es el fruto de tu vientre Jesús. Santa María, Madre de Dios y Madre nuestra ruega por nosotros pecadores, ahora y en la hora de nuestra muerte. Amén.
Dios te salve María Santísima, Templo y Sagrario de la Santísima Trinidad. Virgen Concebida sin la Culpa Original. Dios te salve, Reina y Madre de misericordia; vida, dulzura y esperanza nuestra, Dios te salve. A ti clamamos los desterrados hijos de Eva. A ti suspiramos gimiendo y llorando, en este Valle de Lágrimas. ¡Ea! pues Señora, Abogada nuestra, vuelve a nosotros esos tus ojos misericordiosos y muéstranos a Jesús, Fruto Bendito de tu Vientre, ¡Oh Clemente, oh Piadosa, Oh Dulce Virgen María!¡Ruega por nosotros Santa Madre de Dios, para que seamos dignos de alcanzar las Divinas Gracias y Promesas de Nuestro señor Jesucristo. Amén
SALVE Regina, mater misericordiae, vita, dulcedo, et spes nostra, salve. Ad te clamamus exsules filii Hevae. Ad te suspiramus, gementes et flentes in hac lacrimarum valle. Eia, ergo, advocata nostra, illos tuos misericordes oculos ad nos converte. Et Iesus, benedictum fructum ventris tui, nobis post hoc exsilium ostende. O clemens, O pia, O dulcis Virgo Maria. Amen.
¡Oh Soberano Santuario! Madre del Verbo Eterno, libra Virgen del Infierno a los que rezan tu Rosario. Emperatriz Poderosa, de los mortales Consuelo; ¡Ábrenos Virgen el Cielo, con una muerte dichosa y dános pureza de alma; ya que eres tan Poderosa.
Mi corazón en amarte, eternamente se ocupe y mi lengua en alabarte Madre mía de Guadalupe.
GLORIA Patri, et Filio, et Spiritui Sancto. Sicut erat in principio, et nunc, et semper, et in saecula saeculorum. AmenLAS LETANÍAS LAURETANAS
(En las letanías podemos encontrar alguna Advocación especial según nuestra necesidad particular, por ejemplo Consoladora de los Afligidos y pedirle que nos ayude con el Dolor o la pena que está abrumando nuestro corazón. Y así sucesivamente…)
Señor, ten piedad R. Ten piedad de nosotros
Cristo, ten piedad
Señor, ten piedad.
Cristo, óyenos. R. Ten piedad de nosotros.
Cristo, escúchanos.
Dios, Padre celestial, R. Ten piedad de nosotros.
Dios, Hijo, Redentor del mundo,
Dios, Espíritu Santo,
Santísima Trinidad, un solo Dios, R. Ten piedad de nosotros.
Santa María, R. Ruega por nosotros.
Santa Madre de Dios,
Santa Virgen de las Vírgenes,
Madre de Cristo,
Madre de la Iglesia,
Madre de la divina gracia,
Madre purísima,
Madre castísima,
Madre siempre virgen, R. Ruega por nosotros
Madre inmaculada,
Madre amable,
Madre admirable,
Madre del buen consejo,Madre del Creador, R. Ruega por nosotros
Madre del Salvador,
Madre de misericordia,
Virgen prudentísima,
Virgen digna de veneración,
Virgen digna de alabanza,
Virgen poderosa,
Virgen clemente, R. Ruega por nosotros.
Virgen fiel,
Espejo de justicia,
Trono de la Sabiduría,
Causa de nuestra alegría,
Vaso espiritual,
Vaso digno de honor,
Vaso de insigne devoción,
Rosa mística, R. Ruega por nosotros
Torre de David,
Torre de marfil,
Casa de oro,
Arca de la Alianza,Puerta del Cielo, R. Ruega por nosotros.
Estrella de la mañana,
Salud de los enfermos,
Refugio de los pecadores,
Consoladora de los afligidos,
Auxilio de los cristianos,
Reina de los Ángeles,
Reina de los Patriarcas, R. Ruega por nosotros.
Reina de los Profetas,
Reina de los Apóstoles,
Reina de los Mártires,
Reina de los Confesores,
Reina de las Vírgenes,
Reina de todos los Santos,Reina concebida sin pecado original,
Reina asunta a los Cielos,
Reina del Santísimo Rosario,
Reina de la familia,
Reina de la paz.
Cordero de Dios, que quitas el pecado del mundo, perdónanos, Señor.
Cordero de Dios, que quitas el pecado del mundo, escúchanos, Señor.
Cordero de Dios, que quitas el pecado del mundo, ten misericordia de nosotros.
Ruega por nosotros, Santa Madre de Dios. Para que seamos dignos de las promesas de Cristo.
ORACIÓN FINAL
Te rogamos nos concedas, Señor Dios nuestro, gozar de continua salud de alma y cuerpo. Y por la gloriosa Intercesión de la bienaventurada siempre Virgen María, vernos libres de las tristezas de la vida presente y disfrutar de las alegrías eternas. Por Cristo nuestro Señor. Amén.
74.- EL INCENDIARIO
Cuando regresó el buen tiempo, se anunció que los Juegos proseguirán.
El día del espectáculo, millares de espectadores llenaron el Circo desde muy temprano.
El César llegó pronto acompañado por sus cortesanos y las vestales.
Para el inicio fue anunciado un combate entre cristianos, a los cuales ataviaron como gladiadores y provistos de toda clase de armas que usan los verdaderos gladiadores, tanto para atacar como para defenderse.
Pero sucedió algo inesperado para los asistentes:
Los cristianos arrojaron al suelo de la arena, escudos, redes, tridentes y espadas. Se arrodillaron a orar y a cantar sus himnos.
Y los del público se indignaron.
Entonces el César ordenó que soltaran los perros molosios y éstos los destrozaron muy rápido.
Cuando los despojos que quedaron, fueron retirados de la arena y los animales saciados, también fueron sacados.
El espectáculo tomó una faceta diferente.
Fue una serie de cuadros mitológicos, idea del propio César.
Y así la concurrencia pudo ver a Hércules cumpliendo con los Doce Trabajos y ardiendo con la túnica de Neso.
Marco Aurelio se estremeció ante el pensamiento de que hubiesen dado el papel de Hércules a Bernabé.
Pero fue evidente que lo tienen reservado para algo más impactante y aún no ha llegado el turno al fiel servidor de Alexandra, porque el que arde en la pira es otro cristiano, desconocido para el joven tribuno.
A Prócoro, el César no le perdonó la asistencia y tuvo que ver a varios conocidos suyos en la siguiente representación.
El anciano que diera a Prócoro el significado del signo del pescado y que le puso sobre la pista de Alexandra, representó a Dédalo y su hijo desempeñó el papel de Ícaro.
Ambos fueron levantados por un ingenioso mecanismo y enseguida lanzados a la arena hasta una gran altura.
El joven cayó tan cerca del pódium del César, que la sangre salpicó no solo los adornos exteriores, sino también la púrpura que cubre el frontis del palco imperial.
Prócoro cerró los ojos y no vio la caída. Pero oyó el sordo golpe del cuerpo al rebotar en el suelo y cuando abrió los ojos, vio que la sangre le había salpicado sus finas vestiduras.
Y estuvo a punto de desmayarse otra vez.
Los cuadros cambian rápidamente: las sacerdotisas de Cibeles, Las Danaides, Dirce, Pasifae, etc.
Son jovencitas muy tiernas todavía y la gente aplaude al verlas partidas por la mitad, destrozadas y descuartizadas por las bestias desbocadas.
La plebe aplaude delirante las nuevas ideas de Nerón, quién se siente muy ufano y feliz, con las aclamaciones que recibe.
Y se recrea en su ingenio y su crueldad, disfrutando aquellas escenas sangrientas y las postreras convulsiones de sus víctimas.
Luego se suceden otros cuadros, tomados de la historia de la ciudad.
Después del martirio de las vírgenes, representaron el espectáculo de Muscio Escévola cuya mano atada a un trípode sobre una hoguera todos vieron achicharrarse…
Pero Sergio permaneció sin dar un solo gemido, con el rostro levantado al cielo y extasiado en la Oración… No se dio cuenta cuando lo degollaron.
Luego arrastraron su cadáver al Spolarium y se dio la señal para el intermedio.
Y empezó el banquete. Bebidas refrescantes, carnes, dulces, vino, queso, aceitunas, pan y fruta.
El pueblo devora y aclama la munificencia del César. Satisfecha el hambre y la sed, dio principio la distribución de billetes de lotería.
Y empezó una verdadera batalla campal.
Entre la plebe se amontonan, se dan golpes y pisotones. Saltan sobre las graderías, se lanzan objetos, hay gritos, maldiciones, insultos y blasfemias.
Lo cual se explica: porque el que resulte ser uno de los afortunados ganadores de un número privilegiado, pronto se convertirá en dueño de una casa con jardín, de un esclavo, de un espléndido y valioso traje, de una joya…
O de una fiera que se puede vender al Anfiteatro y se convierte así en un premio en efectivo.
A veces es tal el motín, que se hace necesaria la intervención de los pretorianos.
Y sucede que tienen que sacar a personas con las piernas o los brazos fracturados.
Y hasta hay quién ha llegado a morir, aplastado en medio de estos tumultos.
Nerón se divierte mucho con estas trifulcas.
Cuando comenzó el intermedio, también él pasó a un salón, donde le esperaba un espléndido banquete y lo disfrutó acompañado de sus cortesanos favoritos.
Mientras tanto una multitud de esclavos, empezó a cavar hoyos en hileras a corta distancia unos de otros, en la mitad de la extensión de la arena.
Y los dispusieron de tal forma, que la última quedó a unos cuantos pasos del pódium imperial.
En la otra mitad de la arena se dispuso que unos grupos de cristianos, fueran arrojados a los leones.
Los preparativos al nuevo suplicio se hacen con gran celeridad.
Terminado el intermedio, se abrieron todas las puertas.
Y hacen entrar a empellones y golpes de flagelo, a otros grupos de cristianos desnudos llevando cruces.
Tanto éstas como las víctimas, están adornados con flores.
Los verdugos extienden a las víctimas y empiezan a clavar manos y pies.
Se oye el resonar de los martillos, que repercuten por todo el Anfiteatro.
Taladrando los maderos, los oídos y los corazones.
Como éste es un martirio lento, en el que la muerte puede durar días, Nerón decretó que les quebrasen las piernas.
Entre las víctimas se encuentra Lautaro.
Los leones no lo mataron la primera vez, así que éste es su segundo martirio: la Crucifixión.
Cuando supo el suplicio que los esperaba, había dicho a los cristianos:
– ¡Demos gracias a nuestro Redentor, que nos ha concedido el privilegio de compartir sus tormentos de una manera total!
¡Alabemos al Padre que con esto nos convierte en sus verdaderos hijos!…
Y mientras los verdugos continúan clavando a sus indefensas víctimas, nuevamente el canto brota de aquellas criaturas martirizadas.
Todos escuchan asombrados el himno que se levanta jubiloso:
¡Aleluya!
Aclamen al Señor, Tierra entera
Sirvan a Jesús con alegría
Lleguen a Él sus cantos de gozo.
Sepan que Jesús es Dios Todopoderoso
Él nos creó. A ÉL pertenecemos.
Somos su pueblo y ovejas de su aprisco.
Entren por sus puertas dando gracias
Avancen por sus atrios entre himnos
Denle gracias y bendigan el Nombre de Jesús.
Porque el señor es Bondadoso
Su amor dura por siempre
Y su fidelidad por todas las generaciones.
Mi alma suspira y se consume
Por estar en los atrios del Señor
Mi corazón y mi carne lanzan gritos
Con anhelo de ver al Dios Viviente.
Felices los que habitan en tu casa
Y te alaban sin cesar
Dichosos los que en Ti encuentran sus fuerzas
Y les gusta subir hasta tu Templo.
Dios es nuestra defensa y fortaleza
Él da Perdón y Gloria
¡Jesús, oh, Dios de los Cielos
Feliz el que en Ti pone su confianza!
Las risas y los gritos de la multitud se fueron callando al escuchar aquel coro insólito que los deja desconcertados y perplejos.
Ellos han venido para contemplar las agonías de una muerte en medio de un suplicio atroz.
Y lo único que se oye además de los martillazos, es aquel himno glorioso…
Cuando todas las cruces han sido levantadas, el canto termina y solo queda un gran silencio.
La gente no sabe cómo reaccionar ante lo que está presenciando.
Hasta el mismo César está un poco descontrolado y juguetea nervioso con su collar de rubíes, mientras su semblante no logra ocultar un aire de inquietud…
El crucificado que está frente a él, es Lautaro, que lo mira fija y severamente…
Mientras dice con voz fuerte y sonora:
– Yo veo los Cielos abiertos, pero también está abierto el profundo Abismo Infernal…
Al que serás arrojado por tu maldad. ¡Oh, Perverso! ¡Ay de ti!…
¡Arrepiéntete de tus crímenes! ¡Matricida! ¡Ay de ti!…
El César se estremeció.
Los augustanos, al escuchar esta injuria lanzada al rostro del ‘divino’ Amo del Mundo, en presencia de millares de espectadores, contuvieron el aliento…
Y el público se paralizó.
Para desgracia de Nerón, Lautaro NO había terminado…
Y su voz aumentó su potencia:
– ¡Ay de ti! ¡Asesino de tu padre, de tu esposa, de tu hermano!
¡Ay de ti, Anticristo! ¡El Abismo y los Infiernos están ya abiertos bajo tus pies! ¡Arrepiéntete!…
Y enseguida pronuncia la tremenda profecía:
¡Ay de ti, porque morirás temblando de terror, por no poder escoger tu propia muerte.
Pues tu propio pueblo te sentenciará con el suplicio de los parricidas y serás condenado por toda la eternidad!…
¡Ay de ti, genocida cruel! ¡Asesino perverso! ¡Has colmado la medida y también para ti ha llegado la hora de tu horrendo castigo!
¡Satanás te espera y pagarás tus crímenes y tu maldad contra los inocentes!
Ya está sobre tu cabeza la espada de la Justicia Divina…
¡Perderás tu imperio más pronto de lo que imaginas!…
Una flecha silva en el aire y se clava en el pecho de Lautaro.
Uno de los arqueros del emperador obedeció la orden de Tigelino, para callar la voz del sacerdote cristiano.
Lautaro dice:
– Señor Jesús… Recibe mi espíritu… te…
Su cabeza cae sobre su pecho y el mártir expira…
Nerón se ha puesto de pie, temblando de indignación.
Hace una señal a Tigelino…
Las fieras son soltadas y empieza una nueva carnicería.
Después de un largo silencio en el Pódium, que nadie se atreve a romper…
Prócoro dice al César:
– Señor. El mar es hermoso y apacible. Vámonos a Acaya. Allí te aguarda la gloria de Apolo.
Las coronas y los triunfos te están esperando. El pueblo te adorará y los dioses te glorificarán como su igual…
Mientras que aquí, ¡Oh, señor!… –sus palabras se vuelven ininteligibles, porque un violento temblor lo invade y le impide continuar.
El emperador contestó:
– Partiremos cuando hayan terminado los Juegos.
Sé que aún hay muchos que piensan que los cristianos son víctimas inocentes y lo dicen.
No puedo alejarme porque después todo mundo repetirá eso. ¿Qué es lo que temes?
Nerón dijo estas palabras frunciendo el ceño y mirando fijamente al griego.
Pero su sangre fría es solo aparente. También a él le infundieron pavor las palabras de Lautaro.
Y al regresar al Palatino, las recordará con vergüenza, con rabia y con miedo.
Babilo que es muy supersticioso y que ha escuchado este diálogo, miró a su alrededor…
Y dijo con voz misteriosa:
– Divinidad, escucha las palabras de este viejo. Hay algo peligroso en esos cristianos.
Sus sacerdotes también son augures y ….
La Deidad que adoran les da una muerte extraordinaria, pero puede ser también una deidad vengativa y…
Nerón replicó al punto:
– No he sido yo quién dispuso los Juegos, sino Tigelino.
Al escuchar la respuesta de Nerón,
Tigelino dijo desafiante:
– ¡Ciertamente! Yo fui. Y también Haloto. Y me río de todos los dioses cristianos.
Babilo es una vejiga llena de supersticiones y este valiente griego, es capaz de morirse de miedo ante una gallina que erice las plumas en defensa de sus polluelos.
Nerón replicó con sequedad:
– Así es en efecto. Pero de ahora en adelante, ordena que les corten la lengua a esos cristianos.
Haloto confirmó:
– El fuego les pondrá restricción, ¡Oh, divinidad!
Prócoro gimió:
– ¡Ay de mí!
Pero el César, a quien la insolente confianza de Tigelino le ha dado nuevos bríos, empezó a reír…
Y dijo señalando al viejo griego:
– ¡Mirad a este descendiente de Aquiles!
Y verdaderamente el aspecto de Prócoro es lamentable.
Sus escasos cabellos se han vuelto completamente blancos. La expresión de su cara es de terror.
Ha perdido el control y está como aturdido y fuera de sí.
Se queda sin contestar a las preguntas que le hacen.
Luego se encoleriza y se vuelve tan insolente, que los augustanos dejan de lanzarle puyas.
Finalmente grita desesperado:
– ¡Haced de mí lo que queráis, pero yo no iré más a los Juegos!
Nerón lo miró un instante…
Y volviéndose hacia Tigelino, le ordenó:
– Cuida de que este estoico, se halle cerca de mí en los jardines. Deseo ver qué impresión causan nuestras antorchas, en su ánimo.
Prócoro se llenó de terror ante la amenaza que palpita en la voz del emperador.
Y dijo con un hilo de voz:
– ¡Oh, señor! No podré observar nada, porque de noche no veo.
Nerón replicó con una sonrisa mordaz:
– No te preocupes. Estará la noche tan clara, como el día.
Y volviéndose hacia los augustanos empezó a hablar de las carreras que piensa organizar cuando terminen los Juegos.
Petronio se acercó a Prócoro y dándole un golpecito en el hombro, con su bastoncito de marfil…
Le preguntó:
– ¿Recuerdas que te dije que no resistirías?
En lugar de contestar, el griego miró al astrólogo…
Y alargando su mano temblorosa hacia un vaso de vino,
Le dijo:
– Quiero beber.
Pero no pudo llevarlo a los labios.
Entonces Babilo le tomó el vaso y mientras lo ayuda a que pueda beber…
Le pregunta al griego con curiosidad y temor:
– ¿Acaso te están persiguiendo las Furias?
Prócoro dijo temblando:
– No. Pero tengo delante de mí a la Noche.
– ¿Qué dices? ¿De qué noche estás hablando?
– De unas Tinieblas impenetrables que me envuelven, me arrastran y me llenan de pavor.
– No te entiendo.
– Jamás pensé que serían castigados con tanta crueldad…
– ¿Lo sientes por ellos?
– ¿Por qué derramar tanta sangre? ¿Acaso no oíste lo que dijo ése desde la Cruz? ¡Ay de nosotros!…
Babilo contestó en voz baja.
– Sí, lo oí. ¡Pero ellos son incendiarios!
– ¡No es verdad!
– Y enemigos de la raza humana.
– ¡No es verdad!
– Y envenenadores del agua.
– ¡No es verdad!
– Y asesinos de infantes.
– ¡No es verdad!
Babilo lo miró con asombro y exclamó:
– ¿Cómo? ¡Tú mismo lo dijiste delante de todos! Los acusaste y los entregaste en manos de Tigelino.
– Por eso es que ahora la noche me rodea y la muerte viene hacia mí.
¡MENTÍ! Por momentos creo que en realidad ya he muerto… Y también vosotros moriréis.
– ¡No! Son ellos los que están muriendo. Nosotros estamos vivos. Pero dime ¿Qué es lo que ven al morir?
– Ven a Cristo y ven el Cielo donde Él Reina.
– Su Dios. ¿Cómo es su Dios?
Prócoro, en vez de contestar…
Le pregunta a su vez:
– ¿Oíste las palabras del César? ¿Qué clase de antorchas van a arder en los jardines?
– Esas antorchas se preparan envolviendo a las víctimas en ‘túnicas dolorosas’ empapadas en pez y atándolas a los postes a los cuales les prenden fuego.
¡Son antorchas humanas! Quiera el Dios de los cristianos no mandar nuevas desventuras sobre la ciudad.
– ¡Oh, no! Es una pena terrible.
– Oye. ¿Pero en dónde estabas tú?… Hicieron eso el primer día de los Juegos.
– Estuve enfermo. Prefiero presenciar ese castigo, pues en él parece que no hay tanta sangre.
Y Prócoro se estremece con violencia al recordar…
Mientras tanto, los demás augustanos también hablan de los cristianos…
Haloto dijo:
– Son tantos, que bien podrían promover una guerra civil, si se llegaran a armar… Pero mueren como ovejas.
Tigelino replicó mordaz:
– ¡Que intenten morir de otra manera!
Petronio replicó:
– Os estáis engañando a vosotros mismos. Ellos están armados.
Haloto y Tigelino dijeron al mismo tiempo:
– ¡Qué locura!
– ¿De qué?
Petronio contestó:
– De Paciencia.
Lucano preguntó:
– ¿Es una nueva clase se arma?
Petronio los miró a todos y sentenció:
– Ciertamente. Más ¿Podéis decir vosotros, que los cristianos mueren como vulgares delincuentes?
¡NO! Mueren como si los criminales no fueran ellos, sino quienes los han condenado a muerte.
Es decir: nosotros y todo el pueblo romano.
Tigelino respondió con desprecio.
– ¡Qué desvarío!
Petronio le replicó:
– ¡Hic Abdera! (El más tonto de los tontos)
Pero muchos, sorprendidos ante la justicia de esta observación, se miraron unos a otros con asombro…
– ¡Es verdad! ¡Petronio lo ha precisado perfectamente!
Trhaseas dijo:
– ¡Hay algo tan maravilloso en su muerte! Todo es tan original…
Babilo exclamó:
– ¡Os digo que ven a su Divinidad!
Entonces algunos augustanos se volvieron hacia Prócoro…
Y le dijeron:
– ¡Eh viejo, tú que los conoces bien!
– Dinos ¿Qué es lo que ven?…
El griego derramó el vino en su túnica, pues el vaso se le soltó.
Y respondió azorado:
– ¡La Resurrección!
Y comenzó a temblar de tal manera, que todos los que le rodean, soltaron la carcajada…
No había oscurecido aun cuando la gente empezó a acudir a los jardines.
Después de que terminó el espectáculo del Circo, el César llegó hasta la Gran Fuente que está en la entrada de los jardines…
Bajó de su carro con Tigelino de un lado y Prócoro del otro.
Y haciendo una señal a toda su comitiva, se mezcló entre la multitud.
Fue acogido con aplausos y aclamaciones.
Los pretorianos lo rodearon inmediatamente, formando en torno a él un círculo que se llenó de animación, con sus cortesanos y con el pueblo.
El César decidió hacer su recorrido a pie y avanzó hacia donde ya habían empezado a arder, las antorchas humanas de ese día.
Deteniéndose delante de cada una de ellas, empezó a hacer algunas observaciones acerca de las víctimas.
Y a burlarse del griego en cuyo semblante se refleja una desesperación sin límites.
Por último se detuvo frente a un poste decorado con hiedras, mirtos, rosas rojas y blancas.
Las llamaradas envuelven a la víctima y ondean con el suave viento de la noche…
Luego, éste se hace más fuerte y deja al descubierto a un hombre de barba entrecana.
Al verlo, Prócoro lanza una exclamación de sorpresa…
Cae al suelo y se retuerce como una serpiente herida y luego se hace un ovillo.
Finalmente escapa de su boca un grito desgarrador, que está lleno de terror y angustia…
Las palabras brotan incontenibles:
– ¡Mauro! ¡Mauro!…
El hombre parece como si despertase de un ensueño…
Es Mauro el médico.
Quién al oírle le mira con infinita compasión, desde lo alto del mástil flameante.
Frente a él está su verdugo: el hombre que le traicionó, le robó a su familia y le entregó en manos de sus asesinos.
Y al que después de haberle perdonado todo esto, también lo entregó en manos de sus perseguidores.
La víctima arde en aquel poste embetunado.
El culpable de todos sus agravios y su verdugo, está a sus pies, llamándolo…
Prócoro volvió a gritar:
– ¡Mauro! En el Nombre de Jesús, por favor te lo suplico: ¡Perdóname!
Se hizo el silencio alrededor.
Y un estremecimiento recorrió a todos los espectadores de esta dramática escena.
Y todos los ojos se clavan expectantes en el mártir.
Mauro movió su cabeza asintiendo…
Y dijo con voz resonante y fuerte:
– Sí, Nicias. Yo te perdono… y te bendigo…
Y ruego a Dios que Él también te perdone… y te bendiga… Y te lleve a la Luz…
‘Pater Noster’…
Mauro regresa a su éxtasis, mientras repite la Oración Sublime…
Y su rostro vuelto hacia el cielo se vuelve radiante, con una luz más luminosa que la del fuego que lo rodea…
Y las llamaradas lo envuelven nuevamente, escondiéndolo a las miradas fascinadas…
Prócoro cayó con el rostro en tierra y lloró con un llanto inconsolable.
Después de unos momentos se levantó y su semblante se ha transformado.
Alza su mano derecha y grita con una voz tan potente…
Que casi todos los reunidos en aquel parque lo escuchan:
– ¡Pueblo Romano! ¡Os juro por mi muerte!…
¡Que están pereciendo aquí, víctimas inocentes!
¡AHÍ TENÉIS AL INCENDIARIO!
Y señaló a Nerón…
Sobrevino un silencio sepulcral y los cortesanos quedaron paralizados.
Prócoro siguió parado, firme y acusador…
Todos los ojos se clavaron en el augustano erguido, con el brazo extendido y tembloroso.
Y el dedo señalando al César…
Inmediatamente se sucedió un tumulto.
El pueblo con el ímpetu de un huracán, se precipitó hacia el viejo queriéndolo tocar…
Y se oyeron distintos gritos simultáneos:
– ¡Arréstenlo!
– ¡Ay de nosotros!
– ¡El Dios de los cristianos se vengará!
– ¡Matricida!
– ¡Asesino!
– ¡Incendiario!
– ¡Que los dioses te castiguen!
Todo esto entre una tempestad de silbidos, gritos y maldiciones.
Y airadas injurias repetidas y dirigidas al César.
Inmediatamente los pretorianos se apretuaron, formando una valla protectora alrededor de Nerón.
Mientras la multitud se precipitó sobre los demás integrantes del séquito imperial…
El desorden creció y todos corrieron hacia diferentes lados.
Algunos de los postes que ya se habían quemado por completo, empezaron a caer esparciendo chispas alrededor.
Y aumentando más la confusión…
Un turbión del pueblo arrastró a Prócoro hasta el fondo del jardín.
Los postes consumidos siguieron cayendo en medio de humo, chispas y olor a madera y a carne quemados.
Hasta que todo quedó sumido en la oscuridad.
La multitud alarmada, intranquila y sombría, empezó a retirarse.
Y la noticia corrió como reguero de pólvora, retorcida y exagerada…
Decían algunos que el César se había desmayado.
Otros, que había confirmado la acusación del griego, cayendo en contradicciones y confesando todo.
Otros más, que cayó gravemente enfermo.
Y otros, que lo habían sacado custodiado de los jardines, en carro y que estaba como muerto.
Y aquí y allá, empezó a haber voces de simpatía a favor de los cristianos:
– Si no fueron ellos los incendiarios de Roma,
– ¿Por qué desplegaron en su contra, tanta injusticia y tanta crueldad?
– ¿Por qué hacerlos víctimas de tan horrendas torturas y derramar tanta sangre?
– ¿No se encargarán los dioses de vengar a los inocentes?
– ¡Y cómo apaciguar la justa cólera del Dios de los cristianos!…
La compasión se desbordó hacia los niños que todos vieron morir con tan bárbara ferocidad.
Y esta compasión se transformó en ultrajes al César, a Haloto y a Tigelino….
Los más crueles agentes de Nerón.
Y también se desató otra ola de interrogantes:
– ¿Quién es esa Divinidad que les da esa fortaleza tan increíble?
– ¿Cómo es ese Dios, que los hace enfrentar los tormentos de la forma que lo hacen?
– Y ¿Cómo le hacen para morir así?
– ¿De dónde sacan esa serenidad y esa alegría?
Y volvieron a sus casas sumergidos en una profunda reflexión…
HERMANO EN CRISTO JESUS:
ANTES DE HABLAR MAL DE LA IGLESIA CATOLICA, – CONÓCELA
67.- LOS VERDADEROS DIOSES…
El espectáculo está finalizando. En los locales situados bajo las gradas del Circo y que sirven para albergar a los gladiadores y a los condenados a muerte, se oye un rumor sordo como de un mar en tempestad y variable en intensidad.
Es un rumor extraño formado por voces humanas y potentes sonidos que no son humanos y sobresalen de los demás.
El lugar se encuentra vacío y en el suelo de granito, en gruesas piedras que sirven de asiento, hay desparramadas diversas prendas de vestir.
De pronto se ilumina vivamente el amplio corredor elíptico.
Y junto con el rumor de muchos pasos, se oyen ayes débiles, de personas que sufren…
Después, he aquí la escena pavorosa…
Precedidos por dos hombres gigantescos y semidesnudos; portando teas encendidas, avanza un grupo de personas sangrantes; parte de ellas sostenidas, otras sosteniéndose y otras más, transportadas del todo.
Aquellos cuerpos destrozados, mutilados, abiertos. Aquellos rostros con mejillas marcadas por heridas atroces, que han dilatado las bocas hasta la oreja.
Han rasgado la mejilla hasta poner al descubierto, los dientes fijados en las mandíbulas; arrancado un ojo que cuelga fuera de su órbita, desprovisto del párpado que ya no existe, como por obra de una brutal ablación.
Aquellas cabezas desprovistas de cuero cabelludo, cual si un instrumento cruel las hubiera descortezado, no tienen ya la apariencia de personas. Constituyen una visión macabra. Una desatinada pesadilla…
Son el testimonio de que en el hombre se oculta la fiera pronta a aparecer y a desfogar sus instintos. Una bestia sedienta de sangre que aprovecha cualquier pretexto que justifique su ferocidad. Aquí el pretexto es la religión y la razón de estado.
La acusación: Incendiarios de Roma. Una calumnia que protege a los verdaderos culpables.
Los cristianos han sido declarados enemigos de Roma y del divino César. Son los que ofenden a los dioses y por ello deben ser torturados.
¡Y vaya que lo han sido! ¡Qué espectáculo!…
Hombres, mujeres, ancianos, chiquillos y jovencitas, yacen ahí hacinados a la espera de morir por las heridas o mediante un nuevo suplicio…
Con todo, a excepción del lamento inconsciente, de aquellos a quienes la gravedad de sus heridas les priva de conocimiento, NO se oye ni una voz de queja.
Los que les han conducido se retiran dejándolos a su suerte…
Y es entonces cuando se ve como los menos heridos, tratan de socorrer a los más graves.
Cómo aquel que a duras penas se tiene en pie, acude a atender a los que mueren. Y el que no puede pararse, se arrastra sobre sus rodillas o se desliza sobre el suelo, en busca del que para él es el más querido o sabe que es más débil en la carne o en el espíritu.
Y quién todavía puede servirse de las manos, procura atender a los que están desnudos, en posturas impropias; cubriéndoles con los vestidos desparramados por el suelo o bien acomodando los miembros de los que están desfallecidos.
Algunas mujeres toman en su regazo a los niños moribundos que lloran de dolor y de miedo.
Otras, se arrastran junto a las jovencitas cubiertas tan solo con sus cabellos sueltos y tratan de cubrir sus cuerpos virginales, con los blancos vestidos que se empapan inmediatamente de sangre…
Y el aire de la estancia se satura de ese olor, que se mezcla con el humo pesado de las antorchas y las lámparas de aceite.
Y en voz baja se intercalan diálogos piadosos y santos.
– ¿Sufres mucho, Clhoe hija mía? –pregunta el anciano Paúl con el cráneo desprovisto de piel, la cual le cuelga por la nuca como una cofia y que ya no puede ver, porque sus ojos son tan solo dos heridas sangrantes.
Le habla a la que fuera una florida esposa y que ahora no es más que un bulto sanguinolento que estrecha contra su pecho desgarrado, con el único brazo que le queda…
En un desesperado gesto de amor, al hijito que succiona la sangre materna, en lugar de la leche que ya no le pueden dar sus pechos lacerados. Pero la madre sonríe con dulzura…
Y Clhoe contesta:
– No, padre mío… El Señor me ayuda… el niño no llora, tal vez no está herido… siento que me busca el pecho… ¿Me encuentro muy herida? Ya no siento una mano y no puedo… no puedo mirar porque no tengo fuerzas para ver… La vida… se me va con la sangre… ¿Estoy tapada, padre mío?…
Paúl responde:
– No sé hija, porque ya no tengo ojos…
Más allá, hay una mujer que se arrastra sobre su vientre y por un desgarro en la base de las costillas, se ve como respiran sus pulmones…
Es Valentina y murmura:
– ¿Me sientes aún, Grace? –pregunta inclinándose sobre una jovencita desnuda y sin heridas; pero con el color de la muerte en su rostro.
Una corona de rosas ciñe todavía su frente, sobre los rubios y largos cabellos desatados. Está semidesmayada… Pero se recobra con la voz y las caricias maternales…
Y hace acopio de todas sus fuerzas para decir:
– ¡Mamá! –Su voz es apenas un murmullo- ¡Mamá! La serpiente me ha apretado tanto… que ya no puedo… abrazarte. Pero la serpiente… nada importa… ¡La vergüenza!... estaba desnuda… todos me miraban… ¡Mamá! ¿Soy virgen todavía?… Aunque los hombres me han visto… ¿Así?… ¿Le agrado aún… a Jesús?…
Valentina le dice con dulzura:
– Estás vestida con tu martirio, hija mía. Yo te lo digo: le agradas aún más que antes…
Grace suplica:
– Sí. Pero… Cúbreme, mamá… Ya no quiero que me vean más… Un vestido, por piedad…
– No te inquietes, mi gozo… Mira, tu mamá se pone aquí y te esconde… ya no puedo buscarte el vestido… porque me muero… sea alabado Jesu…
Y la mujer cae desplomada sobre el cuerpo de su hija, con un borbotón de sangre. Y después de lanzar un gemido, con la postrer respiración se queda inmóvil.
Grace invoca:
– Mi madre se muere… ¿No hay algún sacerdote vivo, para darle la paz?… –Finaliza la jovencita esforzando aún más su voz.
Desde un rincón se escucha una voz:
– Yo estoy vivo todavía. Si me lleváis… –dice el anciano Jonathan con el vientre totalmente abierto.
Varias voces responden desde diferentes puntos, en aquel semioscuro lugar:
– ¿Quién puede transportar a Jonathan a donde están Grace y Valentina?
Nathan un joven moreno alto y vigoroso, contesta:
– Tal vez yo que tengo buenas las manos y aún estoy fuerte. Pero me tendrán que conducir, porque el león me ha arrancado los ojos.
Un jovencito que aún está coronado con rosas, vestido con una toga ensangrentada y poco herido. Es Axel uno de los más ilesos…
Y responde:
– Nathan, yo te ayudo a caminar.
Sean y Dylan, dos hermanos atléticos, en la flor de su virilidad y que también están poco heridos…
Se acercan a Axel y dicen:
– Mi hermano y yo te ayudaremos a transportar a Jonathan.
El anciano sacerdote desventrado, mientras lo transportan con mucho cuidado…
Con agradecimiento, dice:
– Dios os recompense a todos.
Una vez que lo trasladan junto a la mártir, ora sobre ella.
Y aun así agonizante como está, aprovecha la ocasión para encomendar el alma de Leoncio, un hombre que con las piernas descarnadas muere desangrado a su vera… Ora por él…
Y pregunta al ciego que le ha transportado:
– ¿No sabes nada de Riley?
– Ha muerto a mi lado. La pantera, fue al primero que le destrozó el cuello.
Olivia, una jovencita que se desangra lentamente un poco más allá…
Comenta:
– Las fieras actúan con gran celeridad al principio. Pero después, una vez saciadas se limitan a jugar.
Le contesta un anciano como de cincuenta años:
– Demasiados cristianos para tan pocas fieras. –Y Alexander se tapa con un trapo la herida que le dejó abierto el costado, sin lesionarle el corazón.
Santiago, un joven como de veinte años agrega:
– Lo hacen a propósito para gozar después con un nuevo espectáculo.
Gael es un hombre que sostiene con su mano derecha su brazo izquierdo casi desprendido, como resultado de la dentellada de un tigre…
Y moviendo la cabeza continúa:
– Con seguridad que ya lo están planeando ahora…
Un escalofrío sacude a los cristianos…
Y mentalmente oran entregando a Dios todos sus dolores y sus sufrimientos…
Marianne, una mujer que tiene laceraciones por todo el cuerpo, pero que sólo Dios sabe porqué se mantiene con vida y energías, pues el león la arrastró, tomándola y dejándola como los gatos domésticos cuando atrapan su presa y sólo juegan con ella, sin devorarla…
Es una matrona con sus ropas hechas jirones ensangrentados…
Con los que se cubre pudorosamente y está sentada en el piso recargada contra el murallón, pues todo su torso tiene las huellas de las poderosas mandíbulas que la apresaron, fracturándole las costillas y dejando algunos órganos vitales expuestos…
Alaba al Señor enmedio de sus lágrimas y hay gozo y alegría en su voz, cuando manifiesta:
– ¡Bendito sea nuestro Abba Santísimo! Siempre cumple sus Promesas y NO nos abandonó… Desde que nos sacaron a la arena, ví al Espíritu Santo, junto con María siempre presentes… ÉL como Supremo Sacerdote del Calvario y Ella como Corredentora; fueron quienes entregaron a Jesús al Padre…
Y de nuevo ahora… Entregan a las nuevas víctimas, en los sótanos del Circo… Y en la arena…Que es el nuevo Altar consagrado con nuestro sacrificio… Y las unen al Sacrificio Infinito y Perpetuo del Calvario… Bendigamos al Padre y entreguemos al Mundo, para que Dios Único y Trino, recupere a todos sus hijos…
Nuestras oraciones pueden hacerlo, pues hemos unido nuestra donación a la de Jesús y podemos saciar la sed de almas de nuestro Redentor Santísimo… Demos esa alegría a nuestro Padre Celestial y que se consuele su Corazón…
Que Él vea que agradecemos todo lo que ha hecho por nosotros… ¡Ya lo vísteis! Es hasta este momento que empezamos a tener conciencia de la masacre que han hecho con nosotros y sin embargo…
¡Dichosos los que ya regresaron! Pero más dichosos nosotros… porque… todavía podemos seguir sirviéndoLe.
Preguntémosle que más podemos hacer por Él, para demostrarle que con nuestro pobre amor, también queremos ser absolutos y alegrarlo haciendo lo que su santa Voluntad requiere todavía, de nuestras miserables capacidades…
Correspondamos a su maravillosa Ternura Paternal y pidámosle fuerzas, para el siguiente Martirio. Su Amor nos sostiene y Él lo merece todo, TODO,TODO TODO…
Y sus lágrimas enrojecidas por la sangre, se deslizan por sus mejillas desgarradas por los arañazos de las garras del rey de la selva; pero que están envueltas en el júbilo de la Presencia Divina que la impulsa a orar cantando en una lengua celestial, donada por el Espíritu Santo.
¡La Cruz sigue venciendo!…
Satanás a su pesar, sigue glorificando a Dios… Con su infinito Odio decidido a exterminar el cristianismo y a destruir a los verdaderos dioses…
Hijos de Dios por el Amor que palpita en ellos y que no dejan lugar a la más mínima duda; porque están perdonando y amando, como Jesús amó y perdonó… Y eso ES lo que los convierte en dioses inmortales…
La Oración rinde sus frutos sobrenaturales…
El Padre Celestial las recibe…
Y los ángeles glorifican a Dios en aquella hecatombe que ha sido ofrecida por el mismo Satanás y por su infinito Odio y Envidia, a través de un César desquiciado por la megalomanía…
Y Dios recibe a aquellas creaturas torturadas que Él ama con locura…
Que están siendo ofrecidas a través del Inmaculado Corazón de la Virgen santísima, su Hija Predilecta y el Sacratísimo Corazón de su Amadísimo y Unigénito Hijo…
Y la Santísima Trinidad responde…
Inmediatamente los cristianos sienten dentro de su ser, que los invade una fortaleza sobrenatural…
Y continúan comentando…
La jovencita Jazmín gime:
– ¡Las serpientes, no! ¡Es demasiado atroz!…
Salma confirma:
– Es verdad. Ella se ha deslizado sobre mí, corriéndome sobre el rostro con su lengua viscosa… ¡Oh! He preferido el zarpazo que me ha abierto el pecho, pero matando a la serpiente, al hielo de la misma.
– ¡Oh, no! –y la mujer se lleva sus manos temblorosas y ensangrentadas al rostro.
Mohamed, un hombre al que le falta un brazo y parte del otro, dice:
– Con todo, tú eres anciana. Y las serpientes estaban reservadas para las vírgenes.
Julián, otro herido moribundo agrega:
– Han satirizado nuestros Misterios. Primero Eva seducida por la serpiente y después los primeros días del mundo. Todos los animales…
Gabriel, un joven que está poco herido, agrega:
– Ya. La pantomima del Paraíso Terrenal… Al director del Circo le habrán premiado por ella.
Logan, otro joven que también está poco herido, le contesta:
– La serpiente, después de haber triturado a muchos… se lanzó sobre nosotros hasta que soltaron a las fieras y se ha entablado el combate…
Isadora, una jovencita que es poco más que una niña, gime:
– Nos rociaron con ese aceite y las serpientes huyeron tomándonos por presas de cebo… ¿Qué será ahora de nosotras? Yo solo pienso en la desnudez… Y siento que me muero de vergüenza…
Camila con voz temblorosa, exclama:
– ¡Ayúdame señor, mi corazón vacila!…
Abigail contesta serenamente:
– Yo confío en Él.
Constanza, preocupada comenta:
– Yo quisiera que Kyle viniese por el niño…
Una madre muy joven, que llora sobre lo que fue su hijo y que ahora es solo un puñado informe de carne: un pequeño tronco. Únicamente tronco, sin cabeza ni miembros…
Es Isabella y pregunta:
– ¿Está vivo tu hijo?
Constanza replica:
– Está vivo y sin heridas. Me lo puse detrás de la espalda. Y la fiera me desgarró a mí… ¿Y el tuyo?…
Isabella contesta entre sollozos:
– Su cabecita llena de rizos. Sus ojitos de cielo, sus manitas tan hermosas; sus pequeños pies que apenas estaban aprendiendo a caminar, están ahora en el vientre de una leona… ¡Ah, que era hembra! ¡Y aun sabiendo lo que es ser madre, no supo tener compasión de mí!…
Martín grita:
– ¡Quiero a mi mamá! ¡Quiero a mi mamá! Se ha quedado tirada con mi padre allá en la arena… y yo estoy mal. Mamá me curaría la tripita… –Llora el niño como de cuatro años al que un mordisco o un zarpazo, le han abierto la pared abdominal y agoniza por momentos.
Daniela, una jovencita se sienta a su lado y lo conforta acariciándole con la mano menos herida:
– Ahora irás donde la mamá y te llevarán pequeño Martín, los ángeles del Cielo con tus hermanitos. No llores así.
Pero el niño está tembloroso sobre el duro pavimento…
La joven ayudada por Noha, un hombre que también está poco herido, le toma sobre sus rodillas y lo acuna con ternura hasta que el niño sonríe…
Y ella le dice dulcemente:
– ¿Ves que ya puedes mirar a tu ángel que te espera, para llevarte con Jesús y con mamá?…
Y el niño con júbilo infantil confirma:
– ¡Sí! ¡Jesús me está llamando!… -Y su alegría le hace olvidar el dolor de su atroz herida…
Luego intenta levantarse y extiende los brazos diciendo:
– ¡Mamá! ¡Papá!… ¡Ya voy!… –mientras se dibuja en su rostro una sonrisa radiante…
Y se desploma muerto sobre los brazos de Daniela…
Pero ha quedado con los ojos abiertos y su sonrisa iluminada por una alegría sobrenatural…
Que los que están a su alrededor contemplan con comprensión, sintiendo que su Fe se hace más sólida y firme…
Noha le cierra los ojos y cruza sus bracitos sobre su pecho ensangrentado…
Mientras dice:
– ¡Paz al pequeño Martin!
Todos los cristianos responden:
– ¡Paz!
Jonathan, el sacerdote que está siendo transportado por los dos hermanos que junto con Nathan el que ha quedado ciego y le han trasladado hasta donde está Grace…
Pregunta:
– ¿Dónde está vuestro padre?
Dylan contesta:
– Ha sido pasto del león. Ante nuestros ojos y mientras la fiera le mordía la nuca, nos dijo: ‘¡Perseverad!’…
No dijo nada más, porque su cabeza cayó desprendida.
Sean, el otro hermano le insta:
– Háblanos ahora del Cielo, Jonathan bendito.
El sacerdote sonríe y se yergue lo más que puede:
– ¡Hermanos bienaventurados, rogad por nosotros! ¡Para la última batalla! -¡Para la última perseverancia! ¡Por nuestro amor, hermanos! No temáis. Los que nos precedieron, perfectos ya en el Amor; tanto, que el Señor los quiso en el primer martirio. Son ahora perfectísimos, porque al vivir en el Cielo, conocen y reflejan la Perfección del Señor Altísimo.
Sus despojos que dejamos sobre la arena, son solo eso: despojos. Como los vestidos de los que nos han despojado…
Más ellos están en el Cielo. Sus despojos están inertes acá, pero ellos están vivos. Vivos y activos. Ellos están con nosotros a través de la Comunión de los Santos. No temáis. No os preocupéis de cómo moriréis, ni tampoco de las cosas de la Tierra. Desechad los miedos.
Abrid vuestro corazón a la confianza absoluta y decid: ‘Nuestro Padre que está en el Cielo nos dará nuestro pan diario de Fortaleza, porque sabe que nosotros queremos su Reino y morimos por Él, perdonando a nuestros enemigos…
NO. He pronunciado una palabra pecaminosa.
Nuestros verdugos, NO son enemigos para los cristianos: QUIEN NOS TORTURA ES NUESTRO MEJOR AMIGO; como el que nos ama. O mejor, nos es doblemente amigo, porque nos sirve haciendo que demos testimonio de nuestra Fe en la Tierra y nos cubre con el vestido nupcial para el Banquete Eterno.
Roguemos por nuestros amigos. Por estos amigos nuestros que no saben cuánto les amamos. ¡Oh! ¡En este momento nos asemejamos verdaderamente a Cristo, porque amamos a nuestro prójimo, hasta el punto de morir por Él! Nosotros amamos.
¡Oh, palabra! Nosotros hemos aprendido a ser dioses, porque el amor es Dios y quién ama, es semejante a Dios y verdadero hijo de Dios.
Nosotros amamos evangélicamente, no a aquellos de los que esperamos satisfacciones y recompensas; sino a quienes nos hieren y despojan hasta de la vida. Nosotros amamos con Cristo, diciendo: ‘Padre, perdónales porque no saben lo que hacen. Y decimos con Cristo: ‘Es justo que se cumpla el Sacrificio, ya que para eso hemos venido y queremos que se cumpla.’
Y con Cristo decimos a nuestros supervivientes: ahora vosotros estáis doloridos, más vuestro dolor se transformará en gozo, cuando sepáis que estamos en el Cielo. Nosotros os traeremos del Cielo, la Paz en que estaremos.
Digamos pues con Cristo: Cuando hayamos marchado enviaremos al Paráclito, para que realice su misteriosa labor en los corazones de aquellos que no nos han comprendido. Con Cristo confiamos nuestro espíritu no a los hombres, sino al Padre, para que lo sostenga en la nueva Prueba. Amén.
El anciano Jonathan desventrado ha hablado con una voz tan fuerte, tan segura y resonante, que un sano no lo haría así. Y ha trasfundido a todos, su espíritu heroico…
De tal suerte que un cántico dulce, se eleva de aquellas criaturas destrozadas…
HERMANO EN CRISTO JESUS:
ANTES DE HABLAR MAL DE LA IGLESIA CATOLICA, – CONÓCELA
P148 VIVIR EL AMOR
Os doy una de las últimas oportunidades que tendréis, de conversión
Hijitos Míos, así como vosotros ahorráis moneditas de diferentes tamaños y de diferentes valores, así, también, podéis ayudar con vuestras oraciones, dirigidas al Reino de los Cielos, para que éstas se derramen hacia vuestros hermanos, después de que Yo las haya recibido.
Mis pequeños os he explicado antes, que lo que importa en la oración, es la intencionalidad.
Toda oración, lleva una intención. Si vosotros oráis con el corazón, con una intención muy buena y ayudando fuertemente a vuestros hermanos, estad seguros de que Yo la escucharé y que recibirán vuestros hermanos, lo que vosotros estáis pidiendo.
Hay otros que desperdician su tiempo, creen que deben hacer cosas muy grandes para ser escuchados. Y con ese pretexto no hacen nada, no dan nada. No dan fruto porque no oran, porque no interceden; en resumen, porque no aman.
Vosotros tenéis a diario alrededor del Mundo, infinidad de ocasiones para orar por vuestros hermanos. Que no necesariamente, sean los que viven en vuestro hogar o los que vosotros veis a vuestro alrededor, que os ayudan o que recibís sus servicios.
Como ir a comprar al súper, ir a la escuela, cuando os subís a un camión. Vosotros estáis en contacto continuamente con hermanos vuestros y de muchos de ellos quizá, conocéis sus necesidades.
Veis en noticieros, periódicos, medios de comunicación, lo que hermanos vuestros están padeciendo alrededor del Mundo.
Si realmente vosotros orarais de corazón y usarais vuestro tiempo para ayudar a vuestros hermanos; tened por cierto que no terminaríais en un solo día, en pedir por todos vuestros hermanos que necesitan de Mi Ayuda y eso ciertamente, os atraería infinidad de Bendiciones, a vosotros y a los vuestros.
No dudéis en pedir cosas grandes o cosas pequeñas, Yo puedo ayudar a vuestros hermanos con lo que necesitan. Y aunque variadas sean sus necesidades, Yo como Creador, puedo ayudarles en lo que se necesite para que salgan adelante en sus problemas.
Os he dicho que vosotros deis el primer paso y Yo haré lo demás. Que vuestro amor hacia vuestros hermanos os haga dar el primer paso, para que intercedáis por ellos y veréis que no os fallaré.
CONFIAD. Confiad plenamente en Mi Amor hacia vosotros, Yo nunca Me taparé Mis Oídos para no escuchar por vuestras necesidades.
¡Os amo tanto, Mis pequeños! Que os daré lo que necesitéis. Y como os dije antes, si vuestra oración viene de lo profundo de vuestro corazón, seguramente, obtendréis lo que necesitáis.
Hijitos Míos, la acción del Espíritu Santo, será muy fuerte en estos tiempos. PedidMe que estéis vosotros bajo Su Amparo, bajo Su Protección, bajo Su Sabiduría.
La Tribulación, cada vez se irá acrecentando más. Vosotros mismos estáis viendo cómo se van haciendo bandos, aún dentro de la Iglesia y en la sociedad. Unos pensáis de una forma, otros, de otra. Unos preferís algunos guías o gobernantes, otros los atacan.
Hay mucha diversidad de opiniones. Pero no buscáis lo más valioso, que es la Sabiduría Santa, que solamente puede venir de Mí y es la que os va a unificar a todos vosotros.
Satanás va causando toda esta Tribulación y vosotros os enfrascáis en ella y os olvidáis de Mí. No buscáis lo que sólo puede venir de Mí, que es la Sabiduría Divina.
Cada quien desea hacer su propia voluntad y seguir a quien le conviene, de acuerdo a sus intereses personales; que en la mayoría de los casos están errados, porque buscáis nada más por lo vuestro y no por las multitudes.
Os falta tanta Caridad, Mis pequeños. Tanto amor por el prójimo, tanto amor hacia Mí, vuestro Dios y Creador.
Satanás sabe bien cómo convenceros a todos para que os apartéis de Mí y que viváis en la Mentira; porque todo lo que os rodea, es pura mentira.
La Tribulación que lleváis en vuestro interior, es lo que está causando que vosotros no marquéis en vuestra vida una línea recta que os lleve hacia Mí. Y si lo hacéis, Satanás se encarga de distraeros y os olvidáis de llevar a cabo vuestra misión, por estar viendo por las cosas del Mundo.
Que muchas hay que os distraen de vuestra principal atención, que es el llegar a Mí y llevar a otros también, al Reino de los Cielos.
Mis pequeños, estáis en una GUERRA REAL CONTRA SATANÁS, contra sus potencias. Vuestra guerra es espiritual, pero Satanás os desvía a que lo veáis todo dentro de lo material y así no os protegéis con Mi Sabiduría y vosotros os desviáis fácilmente.
La maldad es mucha, muy fuerte y vosotros estáis muy desprotegidos. Por ejemplo, por estar viendo lo material, a donde os lleva Satanás; porque él con sus compinches alrededor del Mundo, hace que se eleven o caigan los valores del Mundo…
Y con tan poca cosa, vosotros os distraéis, porque estáis viendo cómo vuestro dinero, vuestros ahorros, se van para abajo o se mejoran un poco. Y ahí, simplemente con eso que es una tontería, vosotros vais perdiendo vuestro tiempo y os enfrascáis nada más, en buscar cómo cuidar vuestro dinero y vuestras pertenencias…
Y lo que, realmente debéis buscar y cuidar, que es vuestra alma, no le hacéis caso.
Os he pedido tanto que Me pidáis el Don de Discernimiento, que Le pidáis a Mi Santo Espíritu, que os guíe por los caminos de la Verdad y dejéis los caminos que van debilitando vuestra espiritualidad.
Meditad esto, Mis pequeños. Entrad en vuestro corazón y siendo honestos, haced un análisis de vuestra espiritualidad y veréis que dejáis mucho qué desear. Por estar solamente protegiendo vuestros intereses materiales y no estáis protegiendo lo que más vale en vosotros, que es vuestra alma y lo que podáis hacer con ella.
Satanás conoce perfectamente vuestras debilidades y os desvía por ahí. Sois tan frágiles que con tan pocas cosas con que os desvía Satanás, os olvidáis completamente de lo Mío y lo que puedo hacer por vosotros en vuestra alma.
Protegeos, pues, en la Oración. Meditad el valor de vuestra alma y todo lo que podéis hacer con ella en la salvación de las almas. DejadMe a Mí, vuestro Dios, velar por lo que necesitáis en lo material.
Yo os di el don de la vida, os di un cuerpo físico y os puse en un lugar físico, que es la Tierra, para que os desarrollarais aquí y os prometí velar por vuestros intereses. Y vosotros debéis velar por Mis intereses, que es la salvación de vuestra propia alma y la de vuestros hermanos.
Yo conozco perfectamente cómo actúa Satanás y si Me lo pedís y si confiáis plenamente en Mí, Yo puedo velar, perfectamente bien y mejor, mucho mejor que vosotros, de vuestras necesidades materiales, físicas.
Vosotros, os repito, debéis velar por vuestra espiritualidad y la de vuestros hermanos. Esto es importantísimo que lo entendáis, Mis pequeños.
Vuestro cuerpo, vuestra envoltura terrena, junto con todo lo terreno que tenéis a vuestro alrededor y que habéis usado para vivir en este Mundo, desaparecerá cuando regreséis a Mí, al Reino de los Cielos.
Vuestra alma llegará ante Mí, sin nada de lo físico o de lo que consideráis valioso en estos momentos, dentro de lo material. Estaréis ante Mí, dándoMe cuentas de lo que hicisteis en el ámbito de lo espiritual.
Meditad y buscad realmente el valor de vuestra misión y de vuestra existencia aquí en la Tierra y veréis que lo que os estoy diciendo, es realmente lo que debéis vosotros buscar y en lo que os debéis de concentrar.
Dejad que Mi Santo Espíritu, que está en vosotros y que habita en estos momentos ya, en vosotros; os mueva hacia la Verdad.
Nada os faltará, de lo que vuestro cuerpo necesita para vivir y de hecho, Yo estoy más interesado en ello, puesto que si vuestro cuerpo muere, vuestra alma ya no puede misionar aquí en la Tierra. Así que, Yo busco vuestra salud de cuerpo.
Vosotros buscad vuestra salud de alma y ayudad a vuestros hermanos, a que mantengan esa salud de alma, con la ayuda que les deis en lo espiritual.
En las Escrituras podéis leer que si los días no fueran acortados, hasta los justos se condenarían.
Mis pequeños, os he hablado muchas veces del poder de Satanás. Para vuestras capacidades, él es muy superior a vosotros, si no estáis Conmigo. Pero estando Conmigo, lo podréis vencer fácilmente.
Pero cuántos de vosotros, de Mis hijos a los que os he concedido el don de la vida, realmente estáis Conmigo.
Por eso estáis viendo tanta tribulación en todo el Mundo, tanta maldad, tanto error, tanto pecado. Porque la gran mayoría de vosotros, de vuestros hermanos, no estáis Conmigo. No estáis pidiendo Mi Protección contra las Fuerzas de Satanás.
Estáis queriendo luchar solos. Es más, ni siquiera pensáis que hay una lucha espiritual que existe en realidad, en vuestro Mundo.
También podéis leer en las Escrituras, que la lucha es contra espíritus, no tanto contra hombres. Ciertamente, la Maldad de Satanás, entra en el hombre y se manifiesta a través de él. Pero es el espíritu inmundo (generado por el pecado) el que entra en el hombre y hace que os ataquéis los unos a los otros…
Que perdáis la forma en que actuáis o debierais actuar, viviendo en el amor y en las Virtudes. Y caéis en la maldad y en los vicios. Y por eso, ahora se desarrolla en toda la humanidad esta Maldad que ya se os había profetizado, en donde os atacaríais los unos a los otros.
En donde vuestro Mundo, no tendría ya autoridades y se vendría la ley de la selva.
Estáis a punto de eso y en algunos lugares, se está dando ya, Mis pequeños. Ya no se confía en las autoridades, porque las autoridades ya han hecho pacto con el Enemigo.
La única forma en que podéis vosotros protegeros, es estando Conmigo, ya no podéis acudir a las autoridades, porque ellas no os van a defender de aquel al que ellos protegen, que es al mismísimo Satanás.
Mis pequeños, os he dicho que debéis acentuar la Oración, la vida en la Gracia, las Virtudes. Si vosotros no estáis en estado de Gracia, por más que hagáis cosas buenas, no entraré en vosotros, porque Yo no puedo convivir en el mismo lugar donde está el Enemigo.
Si vosotros no estáis en estado de Gracia, todo lo que hagáis bueno, se desperdicia o se queda detenido, hasta que vosotros os arrepentís y recibís la absolución de parte de un ministro Mío.
Cuántas cosas os he enseñado, Mis pequeños y las habéis pasado por alto, no os interesan. No queréis buscar perfección de vuestra espiritualidad. Y al ver Yo esto, ciertamente no os tomaré como buena semilla, para que vosotros empecéis un Nuevo Mundo.
Aquellos que han hecho méritos, que Me han buscado, que Me han respetado, que se han dejado guiar por Mis Leyes y Mi Amor y que han sido hasta blasfemados, atacados, despreciados, porque Me habéis buscado y que vivís para Mí; seréis tomados para iniciar una nueva generación de almas que Me aman, que Me viven, que Me han buscado. Y
ciertamente, que han recibido Mis Bendiciones, porque Yo cuido a aquellos que están Conmigo. Os agradezco Mis pequeños, vuestro pequeño amor que ciertamente, lo aprecio infinitamente y lo engrandezco por los Méritos de Mi Hijo Jesucristo.
Seguid orando, Mis pequeños, ya el tiempo es breve. Muy, muy pronto se empezarán a ver ya los Acontecimientos que enmarcarán el inicio de la Gran Purificación. No os preocupéis, os he dicho y gozad, gozad este cambio porque será para bien.
Hijitos Míos, hace tiempo os dije que, de todos los libros que hay en el Mundo, la Santa Biblia es el más importante de todos y debiera decir el único que os va a llevar a encontrarMe y os va a llevar a vuestra salvación eterna.
Os pido Mis pequeños, que si no leéis y tomáis seguido de Ella vuestro alimento espiritual, lo empecéis a hacer. Tal va a ser la Confusión, que si no estáis vosotros preparados por Mi Santo Espíritu, el Gran Engañador os llevará por caminos de error.
Pero lo más importante, es que vosotros debéis ayudar a aquellos que serán apartados de la Verdad, que he dejado plasmada en las Sagradas Escrituras.
La boca habla de lo que están llenos el corazón y vuestra mente. Vuestros hermanos, muchos de ellos buscarán alimento espiritual después de los Acontecimientos que se darán.
Y por eso, os pido que estéis aprendiendo de las Enseñanzas, de las Palabras, Meditaciones y de tanto Alimento que os he dejado en las Sagradas Escrituras, para que lo deis a vuestros hermanos.
Haced vuestras Mis Palabras y Mis Enseñanzas de las Sagradas Escrituras. Seréis un solo Pueblo, un solo Rebaño, un solo Pastor y con las mismas Enseñanzas, todos vosotros.
Los que no habéis tomado Mis Enseñanzas de las Sagradas Escrituras, no os podéis dar cuenta del Alimento tan rico que de ahí podéis sacar; máxime si sois ayudados por Mi Santo Espíritu a quien le deberéis pedir ésa ayuda, para que podáis entender y sacar el mayor provecho posible de lo que Yo os he dejado y que Mi Hijo vivió para vosotros.
En las Sagradas Escrituras tenéis un Alimento Santo, Divino, profuso y profundo y a la vez sencillo para los que estáis Conmigo.
Yo le doy a los que Me buscan, la Luz del Espíritu Santo, para que podáis entender todo lo que se os dejó en el Libro Sagrado.
Desperdiciáis vuestro tiempo cuando leéis otras cosas que no os servirán para vuestro crecimiento espiritual y sobre todo, para que os preparéis para el Gran Cambio que se os avecina.
Mientras más cercanos estéis a Mí, con Mis Conocimientos, con Mi Amor, con todo lo que podáis sacar de Sabiduría Divina de las Sagradas Escrituras… Y si estáis llamados para empezar a formar parte del Nuevo Mundo, pondréis en práctica lo que ahí se os detalla, es Sabiduría Divina.
Actuar, vivir lo que en las Escrituras está… Y sobre todo, cuando en grupos lo viváis, es cuando empezaréis a gozar el Cielo en la Tierra.
Apropiaos de Mis Palabras, vividlas, Transmitidlas, ésa es vuestra tarea en estos tiempos, tiempos de cambio, tiempos de una Nueva Vida. Tiempos en los cuales, Mi Amor deberá purificar todo lo Creado, porque todo fue afectado por Satanás.
Vivid pues como hermanos, compartíos las Enseñanzas que cada uno de vosotros obtendréis de las Sagradas Escrituras.
Cada uno de vosotros sois células del Cuerpo Místico de Mi Hijo y cada quien entenderá los diferentes pasajes que leáis, en una forma muy profunda y bella.
Algunos de vuestros hermanos no entenderán todo. Y así, os iréis compartiendo lo que Mi Santo Espíritu os permita entender, para que lo compartáis con vuestros hermanos.
Os dije alguna vez, que no a todos o prácticamente a ninguno, os he dado las capacidades para entender Mi Obra, Mi Sabiduría y Mi Amor. A muy pocos se os ha concedido esto, para que podáis explicar Mi Palabra y vivirla en obras como Mi Hijo lo hizo….
Y así, podáis ayudar a vuestros hermanos a vivir profundamente, la parte que os corresponda a cada quien, por ser células del Cuerpo Místico de Mi Hijo.
Eso va a ser el regalo que tendréis también, cuando seáis juzgados y os ganéis el Reino de los Cielos. No os imagináis la dicha tan grande de las almas en el Reino de los Cielos, del compartir lo que Mi Santo Espíritu permita que entendáis profundamente, de los diferentes pasajes de las Sagradas Escrituras.
Vuestra vida en lo particular ha sido diferente, en cada uno de vosotros. Y Yo os tomaré, a pesar de que actuabais y vivíais en formas muy diversas. Y así será en este tiempo, Tiempo Inminente de Cambio.
AgradecedMe Mis pequeños, el que hayáis sido escogidos para este tiempo de cambio. AgradecedLe a Mi Santo Espíritu, las Enseñanzas que os ha dado en particular, a cada uno de vosotros. AgradecedLe a Mi Hijo, que derramó hasta la última gota de Su Sangre para vuestra salvación.
Vivid como hermanos, gozad de las Enseñanzas que os doy y pedidLe a Mi Santo Espíritu que os dé a manos llenas de Mi Conocimiento, de Mi Amor; para que viváis ya el Cielo sobre la Tierra, en estos Cielos Nuevos y Tierras Nuevas que os daré.
Os he dicho que los Mandamientos que os di, son para evitar vuestra caída natural al pecado. Os he dicho también que Satanás aumentará su fuerza de ataque contra vosotros.
Revisad y meditad cada uno de los Mandamientos. PedidLe a Mi Santo Espíritu, que os haga conocer todas las formas en que podríais vosotros errar y que eso os lleve a perder el estado de Gracia de vuestra alma.
Satanás es muy astuto y os lleva por caminos del mal donde vosotros podréis creer que estáis en el Bien y vivís en un pecado grave sin siquiera daros cuenta.
Esto es muy grave Mis pequeños, porque en cualquier momento, podríais morir y os podríais condenar eternamente.
Os he pedido también varias veces, que hagáis todas las noches antes de que os acostéis, un recuento de todo lo que hicisteis en el día.
Que pongáis vosotros mismos en la balanza, vuestras obras buenas y las malas como si estuvierais ante Mí, vuestro Dios. Que con toda honestidad, pongáis frente a Mí la balanza, entre Yo y vosotros. Y así, humildemente os pongáis de rodillas ante Mí, Me entreguéis lo bueno y lo malo del día.
Y si lo malo sobrepasa a lo bueno, no dejéis ni un segundo más para arrepentiros de vuestros pecados.
Y Yo, tome en cuenta vuestro arrepentimiento, por si ésa fuera vuestra última noche y os mandara llamar ante Mi Presencia y ser Juzgados. Vosotros no conocéis ni el día ni la hora de vuestro regreso a Mi Presencia.
Debéis cuidar vuestra alma, como lo más preciado que tenéis. Os he dicho que prácticamente ningún alma, pasa directamente al Reino de los Cielos, viviendo una vida normal.
Pecáis muchas veces, sin que os deis cuenta y por eso, el que Yo os pida que todas las noches hagáis un recuento de todas vuestras obras, eso va a hacer que con la ayuda de Mi Santo Espíritu, repacéis lo que hicisteis en el día y que no os disteis cuenta y Yo os ayudaré a que los reconozcáis, para que no los volváis a repetir.
Hay vicios o maldad también, en vuestro corazón. Y a veces, actuáis bajo ciertas circunstancias de una forma que no es buena para vuestra alma.
Quizá para vosotros, se ha vuelto ya normal; actuáis así, sin pensar. Y no debéis nunca actuar así, Mis pequeños. Debéis actuar conscientes de lo que estáis diciendo y haciendo…
Para que primeramente, no Me dañéis a Mí. Y luego, no dañéis a vuestros hermanos con lo que digáis y hagáis.
Tened mucho cuidado de vuestra alma, llevadla a la pureza, a la santidad, que es el resultado de la perfección de vuestros actos. Y ayudaos los unos a los otros, para que cuando veáis que vuestro hermano esté errando o haya cometido alguna falta, ayudadle a crecer.
Decidlo con cuidado, con amor; porque muchos de vosotros sois rudos para hablar con vuestros hermanos.
Ved la Figura de Mi Hijo Jesucristo, para eso Lo mandé, Mis pequeños. Para que tomarais de Él Su Presencia, Su Vida, la forma de Enseñar, la forma de convivir entre vuestros hermanos; como los de aquél tiempo, que ciertamente eran de carácter rudo, sin mucha educación.
Vosotros debéis ser como Mi Hijo, delicado en Sus acciones, en Sus Palabras en Su forma de Enseñar, Paciente, Bueno, Caritativo, Amable aún con aquellos que Lo atacaban y sobre todo, llenos de Mi Santo Espíritu.
Buscad llevar la Paz a vuestros hermanos que ciertamente, en estos tiempos muchos de ellos la necesitan.
Vosotros, todos vosotros, necesitáis de Mi Sabiduría, de Mi Amor y especialmente, aquellos que enseñaréis y que tendréis como tarea convertir a las almas. No impongáis nunca. Enseñad, pero enseñad con amor.
Recibid Mis Bendiciones Mis pequeños y todo lo que necesitéis y que vaya para el Bien de vuestros hermanos y para el Bien de vosotros mismos, pedídMelo, que Yo os lo daré.
Os amo, Mis pequeños. Sois Mis Cristos en estos tiempos, sois corredentores y es una Gracia muy especial, no la desperdiciéis, en lo absoluto.
Os amo, recibid Mis Bendiciones para el engrandecimiento de vuestra misión y para el buen cumplimiento de ella.
Yo os Bendigo, Mis pequeños. Os llevo en Mi Corazón. Amaos los unos a los otros, os lo pidió Mi Hijo. Bendecid estos momentos en vuestra vida y agradecedMelos, son momentos de Gloria. Os amo, os amo, Mis pequeños. Y dejadMe ser vuestro Dios en vuestra vida, en total libertad.
Gracias y os bendigo en Mi Santo Nombre y en Mi Santísima Trinidad
P144 INSTRUMENTOS DE LUZ
Los errores en los que habéis vivido toda vuestra vida, han causado asco en el Cielo.
Vosotros habéis sido preparados para ayudar a vuestros hermanos, Mi Santo Espíritu os dará las palabras, os dará el trato bello, con el que vosotros llegaréis al corazón de vuestros hermanos para que cambien. Ayudad a todos. No os preguntéis si lo que dijisteis les habrá ayudado o no.
Lo que salga de vuestros labios irá impregnado de Mi Santo Espíritu y dejará una Luz interior; que si hay un ambiente benigno, se aumentará en ésa alma y le ayudará a que regrese a Mí.
Vosotros, sois instrumentos y seréis tomados por Mi Santo Espíritu, que ya habita entre vosotros. No preparéis nada, como dice en la Sagradas Escrituras. Vosotros iréis a donde Yo os lleve. Y las palabras que saldrán de vuestros labios, serán las Nuestras, las de Nuestra Santísima Trinidad.
Vuestra tarea es llevar Nuestra Palabra y Nuestra Presencia, a todos los lugares a donde queremos que vosotros vayáis. Ya os había dicho Yo, vuestro Hermano Jesucristo vuestro Dios, vuestro Salvador; que NO iba a bajar a Evangelizar en estos momentos, porque vosotros sois Mis Evangelizadores, vosotros sois Mis Apóstoles de estos Tiempos y Yo estaré en vosotros.
En un principio, os asombraréis de las palabras que saldrán de vuestros labios. Ciertamente, os daréis cuenta que no son vuestras palabras, que no son vuestros pensamientos, que no es vuestra forma de ser…
Y así, os iréis dando cuenta de que Soy Yo vuestro Dios, el que estaré moviendo corazones a través de vosotros. ¿No se os hace esto una tarea bellísima?….
Pero sobre todo, el que Yo os haya tomado como Mis instrumentos. Para vosotros, deberá ser como una Gracia muy grande. Y de hecho es, porque el que hayáis sido escogidos por vuestro Dios, el Creador del Universo, vuestro Salvador, vuestro Guía, en Mi Santo Espíritu.
Esto os debe llevar a una alegría santa, inimaginable… Saber que sois pocos los escogidos para esta misión y que fuisteis preparados por años, para servir a vuestro Dios y Creador.
Esto os debe de llenar de gran alegría. PORQUE CIERTAMENTE HARÉIS GRANDES OBRAS, A LOS OJOS DE VUESTROS HERMANOS… Pero también,deberéis actuar con gran humildad. Porque si entra en vosotros la Soberbia, si vosotros os apropiáis en algún momento de las palabras que salgan de vuestros labios o de los Milagros que podáis hacer o de todo lo extraordinario que pueda salir de vosotros…
Que sois instrumentos Celestiales. Si os apropiáis de ello y caéis en Soberbia, podréis echar a perder Mi Obra en vosotros y desperdiciaréis años de guía espiritual, cayendo a la Soberbia a donde os puede llevar Satanás.
Mucha humildad deberéis vivir. Estad siempre conscientes en que sin Mí, sois nada. Obraréis todo esto que os he dicho… Porque Yo estaré trabajando en vosotros. Pero si dejáis entrar soberbia en vuestro ser, PERDERÉIS TODO… Perderéis todo y Me perderéis a Mí, vuestro Dios.
Tened cuidado, Mis pequeños. Manteneos siempre sencillos, humildes y donados totalmente a la causa por la que fuisteis enviados a la Tierra: que es la salvación de las almas y llevar Mi Amor a los hombres.
Habla Dios Padre.
A vosotros Mis pequeños, los que he escogido para ser Luz en estos Tiempos. Cuando todo empiece a darse, cuando los acontecimientos os anuncien que os estoy llevando ya a la Purificación; os he dicho que vuestro signo determinante ante vuestros hermanos va a ser la Paz que emanaréis hacia ellos.
En estos momentos, vosotros elucubráis mucho de cómo sucederá todo lo que os he anunciado. Y os vuelvo a repetir: que no os imagináis,siquiera, de cómo va a ser esta Purificación de toda la humanidad.
Vosotros los que estáis Conmigo, los que habéis sido evangelizados ya por años, Mi Santo Espíritu os irá moviendo, os irá indicando qué hacer.
Manteneos en Paz. Y así, vosotros podréis manejar muy bien vuestro discernimiento y la Sabiduría que Mi Santo Espíritu acrecentará en vosotros, para que podáis guiar a muchos de vuestros hermanos.
El estar en Paz, va a hacer que vosotros podáis ayudar a vuestros hermanos a que se tranquilicen. El estar en Paz, va a ser un signo inequívoco de que Yo estoy con vosotros. El estar en paz va a ayudar a muchos de vuestros hermanos a que entiendan que Yo Existo, que Yo Vivo en vuestro corazón, que Yo voy a estar guiando los Acontecimientos…
Y que ellos deben también mantener una posición tranquila, de paz. Además, seguros de que Yo vuestro Dios, estoy manejando estos Acontecimientos para vuestro bien. Y por eso, os debe llevar a vosotros a la seguridad de que todo va a salir bien; a pesar de que quizá, no os podáis explicar los acontecimientos que estaréis viviendo…
Pero si confiados estáis en Mí, no os deberéis preocupar en lo absoluto, ni perder la Paz; que muchos de vuestros hermanos estarán observando… Y preguntándose por qué vosotros estáis con ésa Paz; mientras que ellos, no saben qué hacer.
Vosotros, los que habéis sido escogidos de tiempo atrás y que habéis seguido toda la Evangelización que os he dado, daréis un gran ejemplo ante vuestros hermanos en muchos lugares del Mundo, por no decir todos. UNIRÉIS A LAS MUCHEDUMBRES.
AYUDARÉIS A BIEN MORIR A MUCHOS, que heridos estarán por las catástrofes naturales. Ayudaréis a otros a que perseveren y sigan adelante.
Dejaos mover por Mi Santo Espíritu, para que vosotros os deis cuenta que estáis siendo guiados por caminos seguros y hacia un Bien necesario para vuestra alma… Pero a la vez, con la Sabiduría que estaréis recibiendo de Él, ayudaréis a vuestros hermanos a que abran su corazón a Mi Amor.
A que se dejen también guiar y que puedan ver un camino nuevo, seguro y santo, como nunca antes habían imaginado poder ver.
Vosotros gozaréis lo que haréis en ésos momentos, porque es cuando viviréis palpablemente Mis Enseñanzas que os di por años. Gozaréis en servirMe en ésos tiempos. Muchas cosas bellas y santas podréis hacer… Y aún milagros, entre vuestros hermanos.
No claudiquéis, Mis pequeños. Porque si se os cierra una puerta, cinco o diez más se os abrirán, Yo estoy con vosotros y os estaré cuidando para que no erréis ni caigáis. A pesar de que Satanás os quiera hacer caer, no lo logrará.
Os Bendigo, Mis pequeños y en ningún momento Me he de apartar de vosotros… Y así lo espero también, de vosotros mismos. Quiero que os mantengáis en todo momento junto a Mí, para que caminemos juntos, ya desde ahora y por toda la Eternidad.
Vuestro Dios os ama infinitamente, ¡Agradecédselo! Yo os bendigo en el Santísimo Nombre de Mi Padre. En Mi Santísimo Nombre y en el Santísimo Nombre de Mi Santo Espíritu. Mi Madre os protege, os guarda y os llena de Su Amor y de Sus Bendiciones.
Habla Dios Padre
Hijitos Míos, empezad a gozar ya desde ahora, los Cielos Nuevos y las Tierras Nuevas que os daré. A vuestros ojos humanos, a vuestro entendimiento pequeño, se os va a hacer extraordinario. Y de hecho lo es, el vivir como se vive en el Cielo; que es lo opuesto de lo que estáis viviendo ahora.
Satanás os fue llevando poco a poco, a ir destruyendo Mi Obra en vosotros. A vosotros se os ha hecho natural vivir en la Maldad de Satanás todos los días.
Y de repente, cuando Yo os dé a los que os habéis ganado ésas Tierras Nuevas que viviréis; no entenderéis, si no sois preparados antes por Mi Santo Espíritu, el cómo es posible que no os dierais cuenta en los errores que vivíais todos los días.
Os digo nuevamente, Satanás os fue llevando a una degradación espiritual y aún humana, que habéis vivido como algo normal en vuestra existencia; cuando realmente, estáis viviendo cosas abominables a Mis Ojos.
Cuando vosotros tengáis la experiencia de la Iluminación de vuestras conciencias, empezará el cambio fuerte de vuestra vida. Os enseñaré ahí, lo que debisteis haber vivido, cómo os debisteis de haber comportado:
Primeramente Conmigo, en Mi Santísima Trinidad. Cómo debisteis haber respetado a Mi Hija, la Siempre Virgen María, al Señor San José, a los Santos Ángeles. Cómo convivir con el Cielo, con los Santos. Os daréis cuenta cómo desperdiciasteis vuestro tiempo…
Tiempo de vida que Me pertenece, porque Yo os di el Don de la vida y vosotros desperdiciasteis tantas oportunidades para vuestra perfección y para el bien de vuestros hermanos, ayudándoles en su crecimiento espiritual.
Lloraréis todo lo que hicisteis. Si realmente en vuestro corazón hay arrepentimiento y el reconocimiento de vuestros errores, ésta iluminación de vuestras conciencias, os darán la pauta de cómo os deberéis ir mejorando…
Porque el error o los errores en los que habéis vivido toda vuestra vida, han causado asco en el Cielo…
Y perdón que lo diga así, Mis pequeños; pero vuestra forma de actuar día a día, viviendo en vicios, en Maldad, en la Podredumbre; no puede causar otra cosa que eso, Mis pequeños.
Y os daréis cuenta de ello cuando Yo os deje ver cómo se vive en el Reino de los Cielos.
No vivís en la Bondad, en las Virtudes, en el Amor, en el cuidado de unos para con los otros. En el recrearse en todo momento en las Palabras que Yo os dejé en las Sagradas Escrituras. En los Ejemplos, en la Vida que os dejó Mi Hijo en Su paso por la Tierra.
Ahora no gozáis los momentos de la Vida de Mi Hijo, que Se dio por vosotros, por vuestra salvación. Hay tantas Delicias, tanta Sabiduría, tanto Amor en lo que os heMos dejado en las Sagradas Escrituras y vosotros…
Ni siquiera abrís el Libro para tomar de él, la Sabiduría Celestial que se os ha dejado.
No os tomáis el tiempo cuando menos, de leer algún pasaje todos los días y meditarlo. Mi Santo Espíritu, os ilumina, cada vez que lo abrís con el deseo de perfeccionaros.
En el mejor de los casos, le tenéis un lugar reservado al Libro, a las Sagradas Escrituras, a la Santa Biblia, en vuestro hogar. Pero ahí está, en un lugar muy importante en vuestro hogar; pero solo sin abrirlo, sin tomar de él la riqueza espiritual que desde el Cielo, os heMos enviado.
Tenéis tanto qué aprender… Creéis que sabéis mucho, pero os he dicho que estáis en párvulos y que sois malos estudiantes. Os conformáis con tan poco, no queréis ser de los mejores estudiantes. No queréis ser de Mis mejores hijos, que hayáis leído las Sagradas Escrituras y que lo toméis como un Libro de consulta continua… Para sacar de él su gran Sabiduría, Sabiduría Divina que he puesto en la Sagrada Biblia.
De esto y de muchas otras cosas os daréis cuenta cuando venga la Iluminación de vuestras conciencias. De cómo habéis desperdiciado el tiempo del Cielo en la Tierra.
Ciertamente, lloraréis vuestros errores y se os dará una oportunidad más para que os mejoréis, pero ¿Realmente aprovecharéis esta otra oportunidad para mejoraros?
Imaginad Mis pequeños por un momento, que vosotros entráis a un cuarto y hay muchos estantes con infinidad de regalos, de cosas bellas y que podéis tomar lo que queráis… Luego, abriendo otra puerta, hay una escalera vertical con muchos escalones…
Ciertamente, se ve pesado el subir; pero ésta os llevará a un gran salón, con muchos más regalos y sorpresas. Pero por flojera, no subís esa escalera con tantos escalones porque no os queréis cansar. No queréis hacer un esfuerzo mayor y os conformáis con lo que veis en el primer cuarto…
Así estáis la gran mayoría de vosotros.
Ciertamente, cada uno de vosotros baja a la Tierra con dones que Yo os doy, para que llevéis a cabo vuestra misión en la Tierra. Os he pedido tanto que os perfeccionéis, porque Soy vuestro Padre y a Mí Me gusta la perfección.
Pero ciertamente, tenéis que trabajar mucho. Y especialmente, contra vosotros mismos. Como os he explicado antes: os debéis negar. Debéis ir quitando toda maldad, vicios. Todo aquello negativo que no os deja crecer.
Pero ¡NO! os da flojera eliminar lo que traéis y que ya os habéis acostumbrado a vuestra parte negativa y vivís en la mediocridad.
A ratos hacéis cosas buenas, pero a ratos también hacéis cosas malas. No sois constantes en lo bueno y desperdiciáis mucho las cualidades que Yo os he dado, porque no os queréis perfeccionar.
Ésas escaleras verticales altas, de muchos escalones, el solo pensar en ellas, os da flojera.
Ciertamente, será pesada la subida. Pero pocos son los que toman el riesgo. Y el premio estará allá arriba esperándoos… Y así es a lo largo de vuestra existencia.
Los mejores regalos, la mejor vida espiritual; la obtienen aquellas almas valientes, intrépidas, sabias, inteligentes; que saben sacarles provecho a los dones que Yo os he dado.
Cada uno de vosotros tenéis un potencial muy grande. TODOS vosotros podéis llegar a la perfección…
Y decir perfección, es poder alcanzar capacidades espirituales y aún físicas extraordinarias… Pero os da flojera trabajar en ello.
¡Cuánto desperdicio de Dones! Y luego Me echáis la culpa a Mí, vuestro Dios de que no avanzáis. No podéis hacer muchas cosas, porque os faltan capacidades o porque los otros sí tienen y vosotros no…
Cuando os estoy diciendo que TODOS vosotros podéis llegar a grados altísimos en vuestras capacidades espirituales y aún físicas.
También os he dicho que vosotros deis el primer paso y Yo os ayudaré con el resto de vuestro esfuerzo. Pero cuánto, ¡Cuánto trabajo os causa dar el primer paso! Ponéis tantos pretextos para dar un primer paso y no os dais cuenta, que aún ése primer paso recibirá ayuda de Mi parte…
Y cuando empecéis a dar los demás pasos, todo se irá aliviando. No será ya pesada la carga. Iréis mejorando sin tanto sufrimiento, porque Yo estaré con vosotros.
Siempre, el triunfo en cualquier cosa que vosotros queráis lograr, exigirá un esfuerzo. Un primer esfuerzo. El resto es más fácil. Pero son pocas, muy pocas las almas que se vencen a sí mismas y que llevan a cabo ése primer esfuerzo.
El éxito es para los triunfadores. Para los que saben trabajar, para los que saben vencerse a sí mismos, para los que realmente quieren ser Mis hijos.
Ved la Vida de Mi Hijo sobre la Tierra, Sus Sufrimientos, Dolores, persecuciones. Aunque sí tenía momentos también bellos, todo lo hizo por vosotros. SE VENCIÓ A SÍ MISMO…
O sea, aceptó Mis Órdenes de Padre, para vuestra ayuda. Para que os pudiera abrir nuevamente las Puertas del Cielo. Aceptó en obediencia, lo que Yo Le pedí… Y LLEGÓ EL TRIUNFO…
Y vosotros estáis gozando Su Triunfo, pero Le dolió mucho. Y ¿Cuándo realmente Le habéis dado las gracias a Mi Hijo por lo que hizo por vosotros? ¿Cuántas veces Lo habéis acompañado en Sus momentos de Dolor, en Sus momentos de cansancio?
O ¿Cuántas veces Lo habéis acompañado, en Sus momentos de Oración en donde platicaba Conmigo? que Me pedía Fortaleza para seguir adelante, porque la lucha era tremenda, ya que Satanás se había apropiado de una gran cantidad de almas.
A vosotros os ha tocado ser Luz, en estos momentos de obscuridad. Sois Luz y Guía para tantas almas que van caminando por el Mundo; que se tropiezan y caen muy seguido, porque no hay una Luz, una guía, que las lleve por caminos seguros y que las traiga a Mi Presencia.
Sois ésa Luz, Mis pequeños. TraedMe almas. Llevadlas por un camino seguro. Guiadlas para que Me Conozcan. Convenced a aquellas almas que están caminando en el error, que le han abierto su mente y su corazón a Satanás.
¡Tenéis tanto qué hacer por Mí, en la Tierra, mientras tengáis vida!
AyudadMe, Mis pequeños y alcanzadMe la salvación de tantos hermanos vuestros como podáis. Ciertamente, os haré conocer el valor de vuestra existencia y el gusto que Me estáis dando al trabajar para Mí, vuestro Dios.
Ahora no lo entendéis ni lo valoráis como realmente es. Pero cuando os deis cuenta de la Tarea que Yo os permití tener, lo gozaréis inmensamente.
En cierta forma, ahora no permito que conozcáis plenamente el valor de vuestra misión, para que no caigáis en soberbia. Pero vuestra tarea, en estos momentos de cambio, de lucha, es grandísima.
Es bellísima vuestra misión. Un alma, vale muchísimo. Seguid adelante. Dejaos llevar por Mí, Soy vuestro Dios y estáis llamados a hacer grandes cosas para el Reino de los Cielos. No os desaniméis, Mis pequeños; grandes cosas os esperan.
Muchos de vuestros hermanos se preguntan, cómo es posible que algunos puedan entender las Palabras que os digo y otros no. Leen exactamente lo mismo, pero su entendimiento es diferente… Y os he dicho que cuando se vive en estado de Gracia, vuestras potencias espirituales están abiertas.
No hay nada que impida que Mi Santo Espíritu trabaje en vosotros, que os explique muchas cosas que no conocéis, que os enseñe cosas que verdaderamente conocían vuestros Primeros Padres, pero que se perdieron por el Pecado Original.
Es como si tuvieran un velo delante de sus ojos. Un velo que no permite que su mente entienda todo. Un velo que impide que escuchéis muchas cosas que hay a vuestro alrededor, que os pueden hacer crecer en todos sentidos.
Pero al tener ése impedimento con que el pecado os limita, no crecéis ni entendéis Mis Misterios, Mi Sabiduría… Y no aprovecháis plenamente Mi Amor.
Muchos de vosotros os enojáis Conmigo porque os sentís tontos, al no entender pasajes de las Sagradas Escrituras o el Conocimiento que estoy dando en estos Tiempos, para que os preparéis ante los acontecimientos que ya están sobre vosotros. Pero no es Mi culpa Mis pequeños, que no entendáis.
Os vuelvo a repetir, es vuestra vida en pecado lo que impide que entendáis lo que Yo os quiero dar. Y que Me interesa a Mí mucho que lo tengáis, pero os he dicho que vosotros sois libres.
Vosotros os podéis mantener en estado de Gracia. Y el estado de Gracia, es como una llave que abre todas vuestras capacidades físicas y espirituales; para todos los regalos que Yo os quiero dar. Pero si vosotros preferís vivir en el Mal, vivir en el error, Yo no os puedo forzar.
¿Queréis escuchar a Satanás en lugar de escucharMe a Mí?… Yo Me hago a un lado y os dejo con el Enemigo.
Si queréis estar plenamente Conmigo, no Me invitéis a vuestro corazón cuando esté sucio, con pecados graves y la Presencia del Enemigo esté ahí, en vuestro corazón.
Si vais a invitarMe a entrar en vuestro corazón, hacedlo. Pero debéis estar limpios y Satanás no debe estar presente en vuestro corazón, en ningún momento.
Yo no os estoy castigando, es vuestra necedad y soberbia que el mismo Maligno suscita en vosotros, quien os castiga.
Escoged, Mi Paraíso o vuestro mundo actual. En vosotros está la decisión. De Mí sólo puede salir Bien, Paz, Verdad y Amor.
Os bendigo entrañablemente hijitos Míos de Mi Corazón. Os Amo y Os espero al final del camino, a las puertas de Mí Reino Celestial, ya de Nuevo en Nuestro Mundo. Ahí estaré como Padre Amoroso os estrecharé junto a Mí Corazón, para gozar en vosotros Mí Amor.
Os amo y deseo sólo vuestro bien. Yo os bendigo en Mi Santísima Trinidad, Padre, Hijo y Espíritu Santo
N116 LA TRAICIÓN
Hijitos Míos, hoy os quiero hablar sobre la Traición. Es un tema fuerte pero real. Es un hecho que se ha venido dando desde antes de la Creación con el primero que Me traicionó, el Arcángel más bello que Yo había creado, hasta éstos días.
Hijitos Míos, ¿En qué consiste una traición? Es la negación y ataque a la persona que se ha dado en la totalidad de su amor y confianza por alguien a quién consideraba un verdadero amigo… O aun más, alguien que ocupaba un lugar muy profundo dentro de su corazón.
El primer traicionado fui Yo, Vuestro Padre, por el arcángel Luzbell, quién traicionó Mí Confianza y Mí Amor puestos en él.
Posteriormente fueron vuestros primeros Padres, Adán y Eva, a quienes creé en total santidad y a quienes les dí la soberanía sobre todo lo creado.
Y Mí Corazón y Todo Mí Ser estaban volcados en ellos y aún así, Me traicionaron.
Inmediatamente después su hijo Caín Me traiciona y empieza a traicionar a sus hermanos, al género humano incipiente. Y su descendencia sigue traicionando a sus semejantes y sobretodo a Mí, Vuestro Dios.
Traición al Amor, que se ha venido dando a través de los siglos. Traición a la donación eterna de un Padre que os ama infinitamente y que sólo busca vuestro bien y vuestra Gloria. Traición a Sus Enseñanzas y a Su Vida, en cada uno de vosotros.
Traicionan Mí Palabra dada a través de los Profetas, despreciando Mis Consejos dados a través de ellos, eliminándolos y aún asesinándolos, al mostrarles abiertamente sus errores. Prefieren vivir en la mentira que el primero que Me traicionó, os inculca en vuestros corazones.
Se os hace más fácil TraicionarMe que ProtegerMe. Preferís negarMe como Pedro lo hizo y que luego se arrepintió, a seguirMe hasta el patíbulo como Mí Madre y Juan.
El Amor es atacado por muchos de vuestros hermanos a los que se les hace más fácil seguir nuevas ideologías propuestas por el Demonio, el Gran Traicionero.
Y así llevaros a una vida, aparentemente sin grandes responsabilidades ni compromisos. A una vida fácil y regalada, Traicionando así las Enseñanzas que Mí Hijo Jesucristo os compartió para vuestro seguro crecimiento espiritual y segura salvación de vuestras almas.
Envío a la Tierra Mí Hijo Jesucristo y Sus Palabras y Sus Enseñanzas también son traicionadas. Y como ya sabéis, hasta uno de Sus discípulos Lo traiciona a muerte, vendiéndolo con un beso y otro lo traiciona con la negación, por tres veces dolorosa, a Su Corazón.
¡Cuántos hijos Míos, actualmente, Me traicionan! Os he dado todo Mí Amor en la Creación, Mis Palabras con el Espíritu Santo, Mí Vida con Mí Hijo. Podéis constatar fácilmente que todo lo que ha salido de Mí, ha sido dado con un verdadero Amor hacia vosotros, buscando siempre que gocéis de todo lo que os rodea y de lo que vive dentro de vuestro corazón.
He tratado de llevaros hacia el Bien y que viváis Mí Cielo y Mí Ser junto con vosotros… Y ¿Qué es lo que obtengo de la gran mayoría de vosotros, Mis hijos?…
¡Traicionan al Amor! Desprecio, ataque, falsedad de vuestro corazón hacia Mí y hacia vuestros hermanos. No hijitos Míos, no miento, porque conozco el actuar de los corazones.
Es difícil aceptar la realidad que vivís para Conmigo, para con Mí Amor hacia vosotros. Si realmente sóis honestos con vosotros mismos, podréis recapacitar y reflexionad de ésta realidad. No invento, os muestro la realidad que se ha venido dando en el género humano desde el principio de los siglos.
Os enfrento a vuestra realidad hacia Conmigo porque os amo y deseo vuestro regreso a Mí Amor, a Mí Corazón. Os reprendo como un padre lo hace con sus hijos, siempre buscando vuestra mejora espiritual, espero vuestro arrepentimiento de corazón, conociendo de antemano vuestra pequeñez y vuestra fragilidad.
Os pongo a vuestro alcance Mí Gracia para que reforcéis vuestras almas con Mis Gracias, Dones y Virtudes. Os doy el Alimento de Vida con el Sacramento de la Reconciliación y la Sagrada Eucaristía. Os amo, hijitos Míos y busco vuestro regreso a Mí Amor.
Tan no busco vuestro mal, que os doy la libertad de actuación. Os muestro la realidad pero no os presiono a tomarla. Os muestro Mí Grandeza y Me humillo al mostraros vuestra realidad para Conmigo, pero no os guardo ningún rencor ni pido por vuestra condenación.
Sino al contrario, os doy a diario miles de veces a Mí Hijo en cada Santa Misa que se celebra alrededor del Mundo, para que Su Sacrificio Perene, os alcance vuestra salvación.
Hijitos Míos, os lo suplico en vuestra libertad; ya no traicionéis al Amor. Me duele tanto ver vuestros corazones tan apartados de Mí, cuando Yo os tengo tan dentro del Mío.
Permitidle a Mí Gracia Santificante que toque vuestros corazones y los alivie del mal antiguo, del mal que vosotros, con vuestras acciones y con vuestra aceptación, permitís que siga creciendo y actuando en Mí contra y en la vuestra.
Sobre todo, tened cuidado en estos tiempos, cuando el pecado se ha vuelto aceptado mundialmente. Cuando el pecado ya no se ve como pecado, sino que ya es algo normal en la vida de los hombres. Se han perdido Mis Leyes, se ha perdido el respeto a lo que Yo os he pedido.
Habéis hecho vuestra propia vida, pero porque le abristeis las puertas a Satanás y os convenció de que lo que hacéis, no es tan malo y peor aún, es aceptado porque ya lo veis como natural entre los hombres.
Este es tiempo en que debéis ser verdaderos hijos Mío, que debéis dar el ejemplo debido. El ejemplo que ya se perdió, que no debéis ser piedra de escándalo ante los ojos de los hombres, que vuestro corazón y vuestra mente todavía permanezcan Conmigo y no con Satanás.
Tened cuidado, Mis pequeños, porque cuando al hombre le falta algo, fácilmente se puede vender al pecado y puede perder la Primogenitura al vender su alma por un plato de lentejas.
Sí, Mis pequeños, os está esperando un mundo maravilloso, un universo de Bendiciones y os estáis simplemente, acomodando a lo que tenéis ahora. Aceptáis lo poco que tenéis de la Tierra y estáis perdiendo el Universo entero que Yo os daré.
Ciertamente en estos tiempos venideros, después de que paséis la Purificación, os he dicho que entraréis en contacto con el Universo entero y con todas las maravillas y regalos que tienen otros planetas y estrellas en el Universo.
La Tierra es un granito perdido en las playas del Universo y estáis queriendo cambiar ése granito por todas las arenas de la playa terrena y aún todas ésas arenas no alcanzan para comparar las maravillas que Yo os daré en lo futuro.
No seáis tontos, Mis pequeños. No desperdiciéis éste regalo inmenso que Yo os doy. Por dejaros llevar por simples engaños de Satanás, os harán perder éste derecho que tenéis por ser hijos Míos.
Traicionáis Mis Mandamientos y luego queréis ser consentidos y esto no puede ser así, Mis pequeños. Aquél que está Conmigo tiene derecho a Mis regalos; aquél que está en contra Mía, merece el castigo que le corresponda.
Entended Mi Amor, Mis pequeños. Entended lo que os perderéis si Me traicionáis… Y sobre todo, si Me dais la espalda en éstos tiempos tan importantes en la Historia de la Humanidad.
No perdáis éstos regalos infinitos que os quiero dar, por hacer vuestra voluntad y seguir a Satanás.
Hijitos Míos, vosotros contáis al estar Conmigo, con el arma más poderosa con la que un alma puede contar… Y es el Amor. Habéis oído, a lo largo de vuestra vida, cómo se habla del Amor; pero Satanás ha tergiversado lo que es el Verdadero Amor y os ha llevado a nombrar al pecado también como “amor”.
Mis pequeños, realmente la lucha que se va a desencadenar, que ya se está dando entre vosotros y que llegará a algo muy fuerte; se podría resumir como la lucha entre el odio y el Amor. Así de simple, pero también complejo. El Odio, Satanás, tratando de eliminar el Amor de los corazones.
Mis pequeños, todo fue creado en el Amor y Satanás quiere destruir la Creación entera, junto con vosotros. Porque, todo lo Creado, está rubricado con el Amor.
Cuando vosotros habláis de Creación, inmediatamente pensáis en Mí, vuestro Dios y Yo Soy todo Amor. Todo lo he creado en el Amor para vosotros, para que todos vosotros gozarais de Mi Beneplácito.
Por eso Satanás no quiere dejar trazas de Amor. TODO, todo lo quiere destruir para que sea el Odio el que reine; para que sea el odio el que aplaste al Amor y él se pueda sentar en su trono.
Pero no será así, Mis pequeños, porque el Amor es creativo, el Amor es Omnipotente, el Amor es Infinito…
El Amor Soy Yo y a Mí no Me puede vencer una creatura…
Y menos, una creatura que ya no tiene Amor.
Por eso son momentos Mis pequeños, en que practicaréis el Amor, al compartir unos con otros de lo que tengáis, el protegeros los unos a los otros y aún con vuestra propia vida, al dar alojo y habitación a vuestros hermanos necesitados ó perseguidos.
Son tiempos de manifestación de Mi Amor en vuestro corazón. Y por eso, os he dicho que lejos de ver todo con malos ojos, con temor y con duda, debéis de ver todo envuelto en Amor.
Porque Yo, cuando permito algo, Yo Mismo lo estoy guiando, Yo Mismo estoy cuidando que no se salga de toda medida que vosotros podáis soportar.
Por eso os pido que confiéis en lo que Yo permita en vuestra vida.
Mi Amor se debe derramar sobre toda la Tierra y se dará en el Universo entero. No dudéis Mis pequeños, de que Mi Amor vencerá.
Y si hay duda en vuestro corazón venid a Mí, para que Yo os dé todo lo necesario, ése soporte espiritual que necesitáis para que ya no haya duda en vuestro corazón.
Confiad, confiad en Mí, vuestro Dios, que Yo os llevaré a las alturas del Amor y podréis fácilmente Vencer el Odio de Satanás.
Hijitos Míos, cuando os he pedido que os olvidéis de vuestro propio “yo”, es porque Yo tengo que entrar en vosotros y vosotros Me debéis transmitir a vuestros hermanos. Muchas, muchas personas se acercarán a vosotros, en estos tiempos de Tribulación y no os pueden ver temerosos ni dudosos ni faltos de espiritualidad; porque vosotros seréis ésas columnas que les darán fuerza a vuestros hermanos en éstos tiempos de debilidad espiritual.
Os deben ver fuertes y seguros en lo que estáis haciendo, en lo que estéis diciendo, cómo les estéis guiando, Yo a través de vosotros. Por eso, si vosotros dudáis, si vosotros no estáis llenos de Mí, si vosotros también estáis atribulados; eso se transmite, Mis pequeños. Vosotros debéis estar seguros con Quien, estáis. Si vosotros sois auténticos, si vosotros estáis parados, firmes en vuestros dos pies, la gente sabrá hacia dónde dirigirse.
Os he dicho que deberéis ser Luz para guiar a vuestros hermanos, a través de la Obscuridad, que ya tenéis a vuestro alrededor. Os he dicho que vosotros mismos no podréis lograr lo que os estoy pidiendo, si quisierais hacerlo por vosotros mismos.
Por eso Mi Santo Espíritu YA ESTÁ entre los hombres y os debéis tomar de Él y pedirLe a Él que os invada; que os dé lo necesario para ser ésas columnas y antorchas en éstos tiempos, en que vuestros hermanos necesitarán de Mí, a través de vosotros.
Si estáis Conmigo, Bendiciones muy grandes se derramarán sobre vosotros. Dones que no conocéis. Tendréis capacidades nuevas que aún no se conocen, estarán con vosotros y todo será para servir a vuestros hermanos, para guiarles, para ayudarles a ver el paso hacia los Cielos Nuevos y las Tierras Nuevas o para su salvación eterna.
Si sois escogidos como mártires de estos tiempos, HAY TANTO, tanto que podréis hacer por Mí vuestro Dios, pero siempre y cuando os dejéis mover por Mí.
Sois muy débiles, muy incultos; sois ésas basuritas del mundo que Yo necesito porque a través de los débiles e inservibles del mundo, es como Yo Me manifiesto mejor.
Porque precisamente las almas que se sienten así, pequeñas e inservibles, saben que no pueden dar prácticamente nada y entran en una humildad natural; porque son sinceras consigo mismas, porque se conocen y se saben ineptas para poder hacer grandes cosas que Yo les pido.
Y al no poderlas hacer, acuden a Mí y Me piden ésa ayuda, para dar lo que deben de dar a sus hermanos.
No así las almas soberbias, que son las que más cometen errores; se sienten autosuficientes, se sienten sabias, se sienten sabelotodo y son las que más fallan. Saben de sabiduría humana, pero les falla tremendamente la Sabiduría Divina, que ésa la doy a los pequeñitos, inservibles, pero dóciles y gustosos de servirMe a Mí, vuestro Dios.
Os estoy preparando, para que os llenéis de Mi Amor y al estar Conmigo en Mi Amor, tengais ésa confianza plena, como Mi Hijo la tuvo en Mí; en ésa docilidad total, en ése Amor Infinito por Mí.
Entended Mis pequeños, que esto que se va a dar alrededor del mundo, va a ser para que vosotros tengáis un nuevo hogar. Por favor NO veáis como malo lo que sucederá. Vosotros mismos, cuando veis que vuestro alrededor está siendo afectado negativamente, tratáis de quitar todo aquello que os afecta u os puede poner en peligro.
Elimináis todo lo malo que esté a vuestro alrededor, para que podáis vivir en paz y en armonía en vuestra familia, con las familias que os rodean, en el pueblo en el que viváis, en la ciudad en la que pertenezcáis.
A nadie le gusta vivir bajo el temor, bajo los ataques de otros semejantes vuestros, bajo la duda de qué os pueda pasar si salís a determinada hora del día ó de la noche. A todos vosotros os gusta la paz, la tranquilidad, la seguridad.
Si, Yo os voy a dar un nuevo hogar, que son los Nuevos Cielos y las Nuevas Tierras. Ciertamente tendréis que padecer un poco, porque es una lucha fuerte, en la que el Mal se va a defender para no ser erradicado.
Y el Bien, pondrá sus fuerzas también para erradicar al Mal que le puede afectar a la larga.
Es la lucha entre el Bien y el Mal, entre las Potencias Divinas contra las satánicas. Si estáis Conmigo, venceréis y gozaréis posteriormente.
Los engaños de Satanás os hacen caer en las tonterías que luego defendéis como si fueran verdaderas. Creéis que lo que estáis siguiendo o habéis aprendido en libros falsos, es lo que debéis seguir y defender a toda costa y podéis estar defendiendo un error sin que os deis cuenta… Y hasta quizá deis vuestra vida por defender ése error.
Por eso es necesario que Me pidáis el Espíritu de Entendimiento y Discernimiento, para que os guiéis en lo correcto y en lo Verdadero, que no porque muchos crean y defiendan algo, tiene que ser necesariamente lo Verdadero.
No, Mis pequeños. A veces lo que sigan las mayorías va a ser lo falso y de eso deberéis tener cuidado en el futuro cercano, porque Satanás os tratará de engañar con su representante en la Tierra, él os tratará de engañar con su fascinación, la misma fascinación con que fueron engañados vuestros Primeros Padres.
Si vosotros entendéis estas Palabras, os podréis defender de los Engaños de Satanás. Si no estáis pendientes a través de la Oración, Satanás os podrá engañar fácilmente y moriríais eternamente.
Tened cuidado en lo que suceda a vuestro alrededor y lo que suceda alrededor del mundo. Que vuestra Oración no se aparte de vosotros, que vuestra Oración sea continua y que además, en vuestra Oración personal que vuestros deseos, apoyen a las oraciones de vuestros hermanos alrededor de la Tierra.
No estáis solos en ésta Guerra Espiritual y aún física. Deberéis luchar contra las Fuerzas de Satanás y para eso os estoy preparando.
Confiad en Mí, en las capacidades que os daré en lo futuro, que ciertamente gozaréis. Confiad en Mí cuando seáis juzgados por el bien que disteis a vuestros hermanos, porque os dejasteis guiar por Mí, porque os dejasteis llenar de Mí; porque os hicisteis pequeñitos como Mi Hijo Se hizo, en docilidad a Mí, vuestro Dios.
Y porque aceptasteis Mi Amor en vuestro corazón y lo quisisteis donar a vuestros hermanos.
Hijitos Míos, se habla de tribulaciones y os llenáis de temores, pero os quiero también hablar de las bellezas de éste tiempo. Os he dicho que el Mal se manifiesta en forma perversa y os asusta; pero el Amor es muchísimo más grande que el Mal y por eso también el Amor se va a manifestar más fuertemente en éstos tiempos.
Milagros grandes veréis, manifestaciones Divinas tendréis y así como satanás se muestra y os propone que le sigáis y que grandes gozos tendréis si le seguís; Yo también Me he de manifestar y también os llevaré a entender qué es lo que podréis conseguir si Me seguís.
Y Mis Milagros se darán a vuestro alrededor, para que entendáis Mi Poder; pero sobre todo, para que viváis el Amor con que Yo os concebí. POCO, poco meditáis sobre Mi Amor. Os dejáis llevar más por las cosas del Mal, porque os asustan u os atraen…
Pero si penetrarais en Mi Amor, conoceríais el por qué el Amor no tiene fronteras, porque el Amor tiene capacidades infinitas, porque el Amor va a aplastar a Satanás y a todas sus manifestaciones.
Así entenderéis que no vale la pena seguir al Mal, que estáis perdiendo vuestro tiempo al seguir a Satanás y a sus manifestaciones; porque veréis que al estar Conmigo, estaréis gozando de un poder infinito que se manifestará en vosotros y a través de vosotros.
Es más, el simple hecho de tenerMe plenamente en vuestro corazón, ya va a ser un regalo infinito que gozaréis vosotros. Os he dicho que ahora estáis muy limitados y que no Me habéis tenido en pleno todavía en vuestro corazón; pero cuando Me viváis más en pleno, es cuando entenderéis del por qué os digo Yo que las cosas del mundo y todo aquello con que Satanás os quiere enamorar, no valen la pena.
Lo Mío es lo único que vale la pena en vuestra vida, porque además os dará un gusto eterno, no solamente empezaréis a gozar de lo Mío mientras estéis en la Tierra; sino que seguirá en la Eternidad y además se irá aumentando a más CONTINUAMENTE…
Porque el Amor es así, es dinámico y va cambiando siempre… Y se va mejorando, para que el alma lo goce.
Es Mi Amor el que se dará a todos vosotros y Yo quiero que ya lo empecéis a gozar, que ya Me lo pidáis, que ya seáis ésos testigos de Mi Amor aquí en la Tierra. Porque Mi Amor evitará que flaqueéis en la Prueba.
Evitará que Me traicionéis en los momentos críticos que pasaréis y además, Mi Amor os vivificará…
Y si antes fuisteis hasta grandes pecadores, conversiones grandes se darán y gozaréis, Mis pequeños, de éstos Milagros de Mi Amor.
Algunos de vosotros os preocupáis, porque al aceptar vuestras obligaciones de vida, vuestras obligaciones de estado, sufrís porque sabéis que tenéis que cumplir con las cosas del mundo, con las obligaciones en el hogar, con las obligaciones en el trabajo. También tenéis que cumplir con vuestras obligaciones espirituales y Yo lo único que pido es que os deis a Mí vuestro Dios, que confiéis plenamente en que Yo no os voy a abandonar.
Os quiero facilitar las cosas. Yo Me voy a hacer cargo de vuestras obligaciones y preocupaciones, pero vosotros sois los que dudáis. Si vosotros atendéis lo Mío, Yo atenderé lo vuestro.
Yo os necesito para que Me transmitáis al mundo, para que llevéis Mis Palabras, Mi Presencia al mundo, con vuestra VOLUNTAD UNIDA A LA MÍA, transportándome en vuestra persona.
Ésa es vuestra obligación, Mis pequeños. Y ante la situación de lo que está sucediendo ahora en el mundo y todavía la que se vendrá, vosotros debéis mantener una posición de paz; porque si creéis en Mí, si creéis en Mis Palabras, si creéis en que Yo estoy ayudándoos, protegiéndoos y apoyándoos en todo lo que necesitaréis, ¿De qué os podéis preocupar?
Si no os preocupáis, si confiáis en Mí; deberéis mantener ésa posición de paz ante vuestros hermanos, porque al permanecer así, Mis pequeños, cuando os vean vuestros hermanos en ésa situación de paz; es como ellos vendrán a vosotros y os preguntarán “¿Por qué estáis así, si estáis padeciendo?”…
Y vuestra respuesta será “Porque confío en mi Padre, que es Mi Dios”. Eso es lo que Yo quiero que vosotros deis a vuestros hermanos a vuestro alrededor; ésa paz de confianza en Mí, ésa paz de amor en Mí, ésa paz de docilidad en Mí.
Es difícil para vosotros, porque vuestra humanidad no se aparta de vuestro ser y le estáis dando mucho más valor a vuestra humanidad.
Mis pequeños, pedidMe, pedid Mi Sabiduría, Fortaleza, Amor, para que podáis confiar y entender vuestra misión aquí en la Tierra. Os la estoy explicando y eso es lo que necesito de vosotros en estos tiempos, que vosotros seáis Mis testigos ante vuestros hermanos, sois los escogidos de Mi pueblo.
Así como a los primeros Cristianos se les reconocía que eran Cristianos por su forma de ser y de actuar. En estos tiempos, también vuestros hermanos deberán ver una diferencia entre vosotros y entre todos los demás… Que sepan que vosotros sois los escogidos de éste tiempo, que sois Mis predilectos, que sois los locos de Amor.
Y así os quiero, Mis pequeños, diferentes al mundo, locos en Mi Amor, Mis pequeños Cristos, actuantes en estos momentos de la humanidad.
DadMe vuestras preocupaciones, dadMe todo aquello que os está sacando de balance emocional, porque os preocupáis demasiado. Porque no Me estáis dejando vuestras preocupaciones a Mí, vuestro Dios. Yo todo lo puedo, Mis pequeños y podría prescindir de vosotros para hacer la tarea que debéis hacer; pero quiero que vosotros seáis ésos pequeños hijos Míos que actúen en éstos momentos de la humanidad.
Os quiero consentir, os quiero llevar a un puesto muy especial, tanto en la Tierra como en los Cielos, porque seréis ejemplo ante las generaciones futuras.
Eso es lo que son los santos, ejemplo ante sus hermanos, porque son almas que escuchan Mi Llamado y que a pesar de todo, se mantienen en ése llamado… Que pase lo que pase, se mantienen Conmigo y siguen dando vida por el ejemplo que dan.
Para eso os necesito, Mis pequeños; para que seáis ejemplo ante vuestros hermanos, para que vuestros hermanos se den cuenta que Yo estoy Vivo entre vosotros.
No Soy un Dios de las alturas, que desconozco a Mi creatura, que no Me hago cargo de su bienestar y de sus preocupaciones. Soy un Dios actuante y eso es lo que quiero que vean vuestros hermanos, Mi Presencia en vosotros y por eso os necesito. Para que vuestros hermanos vean que Mi Pueblo, el ueblo de Dios está vivo y seguirá vivo, porque Yo estoy con vosotros.
En vosotros está el remedio para evitar todos los males que os aquejan ¡amádMe en verdad y Yo os rescataré! Luchad para que Mí Amor se desarrolle perfectamente en vuestros corazones.
Que de vosotros sólo salgan acciones, pensamientos y palabras llenas de amor, de paz y de crecimiento espiritual y así lograréis llevar Mí Triunfo a toda la humanidad.
Porque, cuando lo que está sucediendo con mis hijitos en Medio Oriente se haya generalizado y llegue a donde vosotros estáis, SOLOS NO PODRÉIS RESISTIR LA PERSECUCIÓN.
NECESITÁIS PREPARAROS, YO LUCHARÉ POR VOSOTROS Y EN VOSOTROS
Y SERÁ MI PRESENCIA EN VOSOTROS Y VUESTRO AMOR DE FUSIÓN,
LO QUE ASOMBRARÁ AL MUNDO
De otra forma Me estaréis nuevamente Traicionando y traicionando la obra por la que habéis venido a la Tierra y que es la transmisión del Amor. De Mí Amor, a todos vuestros hermanos y a la salvación, santificación y glorificación de todas las almas en Mí Amor.
Reflexionad y aceptad que Mí Santo Espíritu de Amor os guíe hacia la Verdad y a la Luz Verdadera de Mí Camino al Reino Celestial.
Os amo y bendigo en Mí Santo Nombre en el de Mí Hijo Jesucristo y en el del Paráclito de Amor. Recibid todo el Amor de Mí Hija la Siempre Virgen maría
F26 CRUZ Y CRUCIFIXIÓN
Hijitos Míos, os voy a hablar hoy sobre la Cruz.
Muchos de Mís hijos y no sólo los de Mí Redil, sino los que viven apartados de él, no les gusta ver Mí Presencia en la Cruz. Prefieren y así lo dicen, recordar al Jesús haciendo milagros… al Jesús Victorioso, al Jesús Niño o al Jesús Vivo entre los hombres. Se espantan de Mí Presencia en la Cruz.
Vuestros Primeros Padres, al aceptar las proposiciones del Enemigo y al ponerse en contra del Amor y Voluntad de Mí Padre; aceptan actuar para él, lo escuchan y caen en el principio del Mal.
De una sola vez caen hasta el fondo del Pecado. Porque todo lo tuvieron y lo obtenían de la Fuente Preciosa del Amor.
Al aceptar lo que el Maligno les proponía, caen en las tinieblas y a la obscuridad del pecado.
Es a través de ellos que el pecado entra al Mundo. Es a través de ellos que se cierran las Puertas del Cielo. Es a través de ellos que el Mal se posesiona y ataca la Obra de Mí Padre en la Creación.
Y todas las fuerzas del Bien quedan atadas por las del Mal. El Dolor entra en el Mundo. El sufrimiento y el hambre; las pestes y la guerra, son consecuencia del Pecado Original.
Mí Padre no creó éstos yugos para el hombre y Su Creación. El demonio los impuso sobre los hombres a causa de la Traición que realizaron vuestros primeros Padres a Dios Amor, a Dios Creador.
La maldad se adueñó de lo que era la Obra Santa de Mí Padre. El Pecado había sido gravísimo; fue la aceptación total del Mal, a la negación voluntaria del Bien. ¡Pobres de Mís hijos que habían sido creados para el bien eterno!
Pero Mí Padre, siempre buscando vuestra salvación y vuestro bien; promete al incipiente género humano en la figura de Adán y Eva, que la salvación y restauración vendrá en un tiempo futuro. Promete también a ellos, que la Serpiente del Mal será aplastada por La Mujer: Mí Madre.
El hombre tiene que pagar su penitencia y así pasan muchos siglos en los que la Mano Amorosa de Mí Padre nunca se apartó de ellos, ni de sus descendientes.
Pero por causa del Pecado y sus consecuencias, ellos mismos las sufrirán en carne propia a través de los siglos y vendrán guerras, hambre, muerte, destrucción, enfermedades y lo peor: injusticias contra los que Mí Padre enviaba para guiarlos en el camino de la Luz y la Verdad.
Obviamente el que se había adueñado de éste mundo, reconocía en aquéllos profetas, las bondades de Mí Eterno Padre. Y moviendo las voluntades humanas tan apartadas de la virtud, conseguía deshacerse de los enviados del Cielo.
Pero aún así, Sus Palabras a través de Sus Profetas, lograban ir guiando a Su Pueblo por el buen camino.
Por fin llego Yo a la historia del hombre. Mí Presencia Viva anunciada por los Profetas, por fin se realizaba…
Y así llegué Yo para guiar Personalmente a Mí Pueblo a la Salvación Eterna.
Pero, ¿Qué sucede?…
Mi Enemigo, percatándose de Mí Presencia sobre la Tierra; consigue deshacerse de Mí a través de convencer a los mismos sacerdotes Míos, a los de Mí Pueblo; a que me claven en una cruz… muerte que se destinaba a los peores criminales de ése tiempo.
Pero, ¿QUÉ SIGNIFICA EN EL TRANSFONDO ÉSA CRUZ?
Esa cruz, que para los habitantes de ése tiempo significaba la peor muerte, SE VUELVE VIDA PARA TODOS.
Se vuelve nuevamente, Luz en el Camino. Se vuelve Llave Sagrada que abre las Puertas del Cielo.
SE VUELVE LA DONACIÓN DEL AMOR DE VUESTRO DIOS, PARA LOS HOMBRES,
¿Por qué?… Os preguntaréis. Yo tenía que vencer al Mal con sus mismas armas.
Por él entra la Muerte al mundo y Yo con Mí Resurrección, vuelvo vida ése aparente crimen en la cruz.
Se vuelve símbolo de Vida, al donar toda Mí Sangre para la Salvación del género humano.
Porque es gracias a Mí Sangre Preciosa derramada hasta la última gota; que se alcanza la sanación de las almas y de los cuerpos.
Es a través de Mís Sufrimientos atroces, que restauro el sufrimiento infringido en el Paraíso, a Mí Padre Celestial.
Es a través de la Humillación a todo un Dios, que destruyo la soberbia de Mí Enemigo.
Es a través de Mí Pobreza aparente y humana; que destruyo el poder y las riquezas de maldad con las que Mí enemigo había contaminado al Mundo.
Es a través de Mí Sufrimiento en la Pasión,
EN DONDE TOMO CADA PASO PECADOR DEL HOMBRE SOBRE EL MUNDO
Para ir derramando Mí Sangre gota a gota, sobre ésas huellas del Mal. Y levantando al hombre y restaurando su alma, ante la Presencia de Mí Padre.
Es en sí, la Cruz la que marca Mí Triunfo sobre las fuerzas del Mal, que se habían posesionado de cuerpos y almas… Y de la Creación de Mí Padre.
Al ser levantado, quedo Yo como el Triunfador sobre todo el mundo y sus pecados.
Es Mí Triunfo Divino, en donde las fuerzas del Mal ya no podrán en lo futuro, tener injerencia sobre los que serán Míos y para el Reino Eterno.
Es a través de Mí Presencia Sufriente en la Cruz, en donde Yo voy a enjugar las lágrimas y sufrimientos de Mís Hijos.
Es en la Cruz, Fuente de Mí Gracia y de Mí Amor hacia vosotros; a la que se acercarán todos aquellos que desearán en lo futuro unirse a Mí Vida de Salvación, para todos sus hermanos.
Como véis hijitos Míos, Mí Sufrimiento en la Cruz, se vuelve Vida y Alegría para Mí Padre y para vosotros.
No es un Cristo Sufriente, ES UN TRIUNFO ALEGRE.
Mí Corazón, por fín lograba el anhelo de Mí Padre… Por fin se restauraba el Reino de Dios sobre la Tierra. Por fín podía Vuestro Dios, vivir nuevamente entre vosotros.
Mí Cuerpo sufría un Sufrimiento Divino y Restaurador. Mí Alma y Mí Espíritu os daban nueva Vida en el Amor.
No es la Cruz la representación de Mí fracaso, como así Me quisieran ver Mís enemigos.
Es y debe ser para los Míos, la representación de vuestro triunfo
del Amor Excelso de Vuestro Dios al darse a Sí Mismo en Mí Presencia Divina para restauraros la Vida Divina que vive en vosotros.
Es Mí Cruz, el símbolo excelso del Amor Donado y Triunfante sobre las fuerzas del Mal.
En resumen: ES MÍ CRUZ, LA PUERTA DE ENTRADA AL PARAÍSO.
Ved hijos Míos, es Mí Cruz vuestra salvación y el Amor de Mí Padre hacia vosotros. Ved el Triunfo de Vuestro Dios sobre las Fuerzas del Mal; las cuales ya no podrán vencer… JAMÁS.
Unid vuestras vidas, vuestras alegrías y sufrimientos a Mís Alegrías y Sufrimientos que tuve en la Cruz… Y salvemos juntos muchas almas.
Devolvamos vida nueva, a aquellos que han muerto por el pecado y sus pasiones. Devolvamos amor y confianza a aquellos que ven en Mí Cruz, sólo el fin de Mí Presencia sobre la Tierra y no el Principio del Reino Eterno.
Vivamos unidos a la Alegría de Mí Padre… Porque así con Mí Cruz, le he devuelto a Sus hijos amantísimos, que sóis todos vosotros.
¡Regocíjense Conmigo, con Mí Triunfo y Mí Alegría, en Nuestro Padre Dios!
¡Regocíjense Conmigo, con Mi Abandono a Dios Padre por vuestra Redención!
La gran mayoría de vosotros os imagináis que La Redención por todo Mi pueblo se realizó solamente en los últimos tres años de Mi Vida Pública, en Mi Vida de enseñanza.
No hijitos Míos,
VUESTRA REDENCIÓN SE LLEVÓ A CABO DESDE MI CONCEPCIÓN EN EL VIENTRE DE MI MADRE: la Santísima Virgen María.
Desde ése preciso momento Mi Abandono a Mi Padre fue total.
Yo tenía que crecer como vosotros. Sufrir penas y privaciones como vosotros. Rechazos y dolores como vosotros. Muerte como vosotros.
¿De qué hubiera servido una redención como la que esperaban los Fariseos?
Ellos esperaban a un Juez poderoso, adulto; que llegara a exterminar al pueblo romano, quienes los tenían sojuzgados.
Mi función hubiera sido sólo de Libertador, usando sólo la fuerza humana y exterminando de la misma forma como todos los pueblos lo hacían y los actuales lo siguen haciendo.
Hubiera pasado a la Historia como el gran libertador del pueblo judío, lo cuál sólo significaba fuerza, poder e inteligencia para la guerra.
¡El Mesías! El Esperado, el Hijo de Dios, tenía que ser como Su Padre ¡Lleno de virtudes¡ Lleno de Gracia, lleno de Amor, lleno de HUMILDAD.
Acatando la voluntad de Mi Padre, Me humillé. Me hice como vosotros. COMO SOIS VOSOTROS, menos en el pecado. Para que fuera realmente un ejemplo a seguir… ya que de una u otra forma con Mi Ejemplo, vuestras vidas se ven asemejadas a la Mía.
De la otra forma no. Como guerrero y libertador sólo sería ejemplo para unos cuantos, un muy limitado número de hombres, hombres de armas.
Yo crecí en perfecto abandono a Mi Padre, aceptando la “cárcel” de Mi Cuerpo, el cuál no debía mostrar Mi verdadera identidad como Dios.
Solamente cuando “Me perdí” de la caravana en Mi Niñez y Me encontraron Mis padres, enseñando a los sacerdotes en el Templo; fue la única vez que mostré Mi identidad como Dios, por Mi Sabiduría y por la respuesta que dí a Mis padres al decirles: ‘¿Por qué Me buscaban, acaso no saben que tengo que hacer las cosas de Mi Padre?’
Palabras que no comprendieron de inmediato, pero que después entendieron muy bien. Después de esto se Me ordena una vida normal y oculta, con sus cruces de cada día.
Con las delicias de los Amores que Mi Padre Celestial Me daba todos los días; con la vida de oración continua y profunda que llevaba con El, pidiéndole en todo momento por vuestra salvación y para todos vuestros hermanos de todos los tiempos.
Yo veía a cada uno de vosotros reflejados en la gente de ése tiempo. No creáis que porque Mi Venida fue hace 2000 años, la condición humana ha cambiado.
No hijitos Míos. Las causas del pecado son las mismas. Lo refinado en el pecar ahora en vuestro tiempo, es peor.
El Demonio ha utilizado las mismas tretas y mentiras para hacer caer al género humano en el pecado, desde que se le quitó la Gracia que tenía… POR SU PECADO. Y SE VOLVIÓ MALO.
El ya no puede crear formas nuevas para hacer caer al género humano, porque por su pecado ya quedó limitado para siempre.
Les puede dar otra cara, otra presentación; pero la esencia del pecado es la misma. Por eso Yo os levantaba de vuestros pecados, ya desde hace 2000 años.
Mi Abandono al Padre fue siempre total. Y la única vez que Le dije algo diferente; fue cuando en Mi Pasión Dolorosa en el Huerto de los Olivos, Le digo: “Si es posible aparte de Mi éste Cáliz, pero no se haga Mi Voluntad sino la Tuya”.
Yo veía los atroces sufrimientos que iba a pasar, en los tormentos recibidos por los verdugos. Verdugos que eran presa del mismo Demonio y que se Vengaban de su Dios, haciéndolo sufrir como Hombre.
Pero mi Dolor más grande era que Mi Redención que duró 33 años; no los 3 que siempre os imagináis, no iba a servir para muchas almas.
Mi Redención para muchos de Mis hijos, iba a quedar totalmente fuera de los intereses de su vida. El haber venido a la Tierra para salvarlos. O EL NO HABER VENIDO, para ellos les iba a dar igual…
¡Cuánta ingratitud! Os creéis dioses, cuando apenas sois pequeñas creaturitas, tratando de empezar a caminar. ¡Pobres hijitos Míos!
TREINTA Y TRES AÑOS SUFRÍ POR VOSOTROS.
Y muchos de vosotros os quejáis de los dolores, ofensas, malos tratos y desprecios que se os dan en vuestras vidas; en vuestra misión que tenéis para salvar almas, por las que bajasteis a la Tierra.
Actualmente vuestra Tierra es un desierto y campo de batalla, en donde el Mal se va posesionando cada vez más de Mi Obra de Creación y de la vida de Amor que Yo puse en cada uno de vosotros. El Malo os quiere destruir porque sois Míos.
Cómo Me quiso destruir a través de los verdugos que Me azotaron y Me rebajaron a piltrafa humana.
MI FUERZA RESIDE EN LO ESPIRITUAL Y LA VUESTRA, TAMBIÉN.
Podrán destruir el cuerpo, pero no el alma; si realmente estáis Conmigo, como Yo lo estaba con Mi Padre.
De ésta forma vuestro “real cuerpo” que es el alma; resucitará gloriosa después de que hayáis aceptado y llevado a cabo con amor y abandono, vuestra misión.
La misión que a cada uno de vosotros se os designó, para salvar una o millares de almas.
No os deis por vencidos, hijitos Míos. El mal se revuelca en Odio por destruir Mi Obra…
Y NO PUEDE NADA, contra aquellos, que permaneciendo en Mí y en Mi Madre; serán la nueva estirpe del Nuevo Pueblo de Dios en la Tierra.
Acercaos a Mí en vuestras tribulaciones y en vuestras cruces. Y sabed que Yo ya antes sufrí por vosotros y conozco vuestro dolor y vuestras debilidades. Y sólo Yo os puedo comprender perfectamente, porque os conozco desde antes de que nacierais.
Mi Vida de Amor y de abandono se va dando perfectamente en aquellas almas que se confían a Mí. Y que toman de Mí la fuerza necesaria para seguir adelante.
Aún cuando sintáis que vuestras fuerzas os abandonan y queráis apartar vuestra cruz de sufrimiento… Recordad Mi subida al Monte Calvario, cuando Yo llevaba la Cruz a cuestas. Mi debilidad era extrema, puesto que había perdido muchísima sangre por la flagelación.
Estaba en ayunas y no Me habían dejado dormir en toda la noche los verdugos. Porque se la pasaron dañándoMe físicamente en forma brutal, de una u otra forma.
La fiebre por la infección tan grande ocasionada por las heridas de la flagelación, era muy alta…
Y aún así tomé Mi Cruz… La abracé con cariño ya que por ella, por Mi muerte en ella; YO os iba a poder dar vida a todos vosotros.
Con esto os quiero dar a entender, Mis hijitos; que no reneguéis a la Cruz que cada uno de vosotros tenéis.
Vuestro sufrimiento se acrecienta según vuestro grado de olvido a Mi Voluntad. A la Voluntad del Padre… Ó se disminuye cuando os abandonáis a Mi Voluntad y tomáis de Mí, Fuerza y Vida Divina para vencer vuestras flaquezas humanas.
No os agobiéis más hijitos Míos, en vuestro abandono. En el aceptar Mi Voluntad y en el interceder y ofrecer con amor verdadero vuestros dolores y sufrimientos espirituales, por aquellos que os causan un mal, encontraréis vuestra paz interior.
Porque entonces estaréis verdaderamente actuando como Yo, vuestro Hermano Mayor que os dio la Luz, el Camino a seguir y la vida Eterna… Gracias al aceptar con amor, el Abandono a la Voluntad de Nuestro Padre Dios.
Venid todos a Mí, corderitos Míos. Que Yo os preparo los pastos verdes y reconfortantes de Mi Reino de Paz, que recibiréis por haberos hecho uno Conmigo.
Ahora os quiero hablar e instruir, sobre lo que es el vivir la vida en un solo corazón.
Fuisteis creados por el Amor de un solo corazón, el de Mi Padre. Vinisteis para servir a un solo corazón, el de Mi Padre. Vinisteis a traer el amor que se desarrolla en un solo corazón, el de Mi Padre.
La vida que tenéis se la debéis a Mi Padre y así debe ser dada de vuelta. Debéis daros a Él como El continuamente se da a vosotros.
Yo vine a servirLe. Mi Vida transcurrió en una total entrega y Donación.
Mi Vida se desarrollaba solamente para Sus Intereses y así se lo hice notar a Mis Padres de la Tierra, cuando después de tres días perdido, Me encuentran en el Templo platicando con los ancianos sacerdotes, “Yo vine a hacer las cosas de Mi Padre”. Yo vine a enseñaros lo que El Me indicó que os dijera, aceptando en todo momento Su Voluntad.
Entre Mi Madre Santísima y Yo, se desarrollaba un vínculo misterioso y santo. Ella conocía Mis Intenciones. Ella conocía Mi Misión. Ella apoyaba Mis Decisiones. Ella Me apoyaba en la oración. Su Vida era de continua donación a Su Hijo, a Su Dios.
Toda Su Vida era donación, oración, sacrificio llevado siempre en lo más íntimo de Su Corazón. Nuestros dos corazones nunca se apartaron de la Voluntad de Nuestro Padre y Creador.
Ella conocía perfectamente lo que yo iba a vivir, a padecer… Y CÓMO IBA A MORIR
Y conocía también, Mi Gran Triunfo sobre la maldad y la muerte. Y no se separaba de Mí. Éramos dos corazones en uno y el Nuestro, uno en el de Nuestro Padre Dios.
Tentaciones, las tuvimos y nunca nos separamos de la Voluntad de Mi Padre.
Quise mostraros que Yo podía caminar por el mundo sin caer en sus pasiones, ni en sus pecados, ni en sus distracciones; a veces aparentemente buenas, pero que os separan del vivir la vida en Nuestro Dios.
Yo pedí a Mi Padre por vosotros durante toda Mi Vida, tanto en la oculta como en la pública. Siempre estuvisteis en Mi Pensamiento y en Mi Corazón; porque también así es la forma en la que estáis con Mi Padre, en Su Pensamiento y en Su Amor.
Yo también Le pedí a Mi Padre por vuestra misión y los acercaba a Su Corazón diciéndoLe: “Padre te pido por ellos, para que seamos uno como Tú y Yo somos Uno”. Yo ya os unía a Su Voluntad y a Su Querer.
Yo ya os estaba dando la fortaleza y las virtudes de antemano para que las tomarais y de ella os alimentarais y así cumplierais, unidos a Nosotros, con vuestra misión de amor y donación que cada uno de vosotros tenéis para con vuestro Padre Celestial.
Vinisteis igual que Yo, a servir y vuestros semejantes, para transmitirles la Vida de Gracia y de Amor que Mi Padre puso en el alma de cada uno de vosotros.
Sois prolongación del Corazón de Mi Padre, como lo Soy Yo. Sois vida de Amor, porque fuisteis creados por el Amor de Su Corazón.
Vuestra misión es grande, es inmensa, a los Ojos de Mi Padre y Míos. En cada uno de vosotros Yo trato de vivir, cuando así Me lo permitís. Y cuando Me lo permitís, es cuando nos volvemos un solo corazón en Mi Padre.
Porque, si hacéis una sola Voluntad Conmigo, vuestro Salvador; Yo hago un solo Corazón, una sola Voluntad con vosotros. Y como Yo vivo unido perfectamente, al Corazón y a la Voluntad de Mi Padre; por consecuencia os volvéis un solo corazón con Mi Padre.
Hijitos Míos, ¿Os dais ahora cuenta de la importancia TAN GRANDE que os reviste el de saberos servidores e hijos de Mi Padre?
¿El de saber que vuestra estancia sobre la Tierra es una misión de amor, igual que la Mía y que eso os concede el vivir en un solo corazón y en una sola voluntad con Mi Padre?
¿Ahora os dais cuenta que al vivir así unidos; tendréis derecho al gozo eterno? ¿A un gozo inmenso de gloria, si lográis llevar a cabo y terminar vuestra misión sobre la Tierra de una manera amorosa y santa como Yo la llevé cuando pasé Mi Vida humana entre vosotros?
La vida en unión. La vida en un solo corazón al servicio del Amor, sólo os va a traer felicidad actual y eterna. Y aunque en la actual, las espinas y las piedras del camino no las vais a poder eliminar…
SÍ, EN CAMBIO, SE VOLVERÁN MÁS LLEVADERAS….
Y aún más, se volverán causa de una mayor santificación al unirlas a Mis Méritos, como os lo he enseñado.
La vida en un sólo corazón debe significar en vuestras vidas, el buscar primero Mis Intereses de salvación, de propagación de Mis Verdades y de Mi Amor entre todos los vuestros.
La finalidad de ésta Intención Divina es la de restaurar el mundo caído en el pecado. Es la de restaurar la Obra de Amor que Dios Nuestro Padre, creó para dar gozo eterno a Sus hijos, que sóis todos vosotros.
El necesita de vuestra entrega. El necesita de vuestra libre donación para ser tomados como instrumentos entre Sus Divinas Manos…
Y así a través de cada uno de vosotros, ir reestructurando lo que el Pecado dañó.
SOIS CORREDENTORES CONMIGO…
Sois Vida Divina cuando os dejáis mover por las Intenciones de Mi Padre, para ir restaurando lo perdido en las almas por causa del pecado.
Sois camino de perfección cuando aprendéis a ser ejemplo de amor al permitirMe ser otros Cristos en vosotros mismos.
Y así, Yo mismo vuelvo a sanar corazones, a resucitar muertos de alma y cuerpo, a dar vida eterna a todos vuestros hermanos a través vuestro; a través de vuestro libre olvido a vuestras humanas intenciones y de la unión de voluntades con vuestro Creador y Redentor.
Daos cuenta que el vivir en la Unión de Corazones va a producir felicidad a vuestro Dios; porque El ahora vivirá el paraíso perdido por vuestros Primeros Padres, en vuestros corazones.
Volverá a hacer en el corazón de cada uno de vosotros, Su Paraíso Terrenal. Y así se podrá tener nuevamente, el Reino de Dios en la Tierra.
O sea, el Reino de Dios en cada uno de Sus hijos que vivan sobre la Tierra; porque vivirán en una sola Voluntad; sumergidos en las intenciones de un solo Corazón, el de Mi Padre.
Hijitos Míos, que vuestras intenciones ya no sean las vuestras. Que vuestro vivir ya no sea el vuestro. Que vuestro caminar ya no sea el vuestro. Que vuestra entrega a los demás ya no sea la vuestra.
Que vuestra presencia sobre la Tierra ya no sea la vuestra. Que vuestra vida TODA, sea la de Mi Padre en vosotros y así seáis como Yo; vida unida íntimamente en un sólo corazón, en una sola voluntad: “Padre, Te pido que ya todos ellos sean uno, como Tú y Yo somos Uno”.
Os envío a Mi Santo Espíritu, por intercesión y gracia de Mi Madre la Siempre Virgen María. Para que os dé luz. La Luz Verdadera, para guiaros por el camino de las Verdades de Mi Padre y de las que Yo os enseñé, que son las de El.
Sed uno Conmigo, para ser Uno con Mi Padre.
Yo os bendigo en el Nombre Santísimo de Mi Padre, en Mi Santísimo Nombre y en el del Espíritu de Amor y Sabiduría. Que Mi Santa Madre, Corazón Santísimo unido al Mío, en perfecta donación, os atraiga al Mío y os volvamos todos Uno como lo Soy con Mi Padre.
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