131 EL DIOS DESCONOCIDO
131 IMITAR A JESUS ES EL EJEMPLO QUE SALVA
Jesús, con la ayuda de un barquero que lo ha recibido en su pequeña barca, llega al espigón del jardín de Cusa.
Lo ve unjardinero y se apresura a abrirle la verja que intercepta a los extraños la entrada a la propiedad por la parte del lago.
Es una verja alta y resistente, oculta por un seto tupidísimo y también alto de laurel y boj por la parte externa, la que da al lago; de rosas de todos los colores por la parte interna, hacia la casa.
Los espléndidos rosales cubren de flores las frondas broncíneas de los laureles y bojes,
se insinúan entre el ramaje, se asoman al otro lado, por el que rebasan del todo la verde barrera, cuelgan sus florecidas ramas.
Solamente en un punto, a la altura del paseo, la verja se muestra desnuda y se abre para dar paso a quien viene del lago o a él va.
Jesús saluda:
– Paz a esta casa y a ti, Yoanás.
¿Dónde está la señora?
– Allí, con sus amigas.
Voy a llamarla. Hace tres días que te están esperando, porque temían llegar con retraso.
Jesús sonríe.
El sirviente va corriendo a llamar a Juana.
Mientras tanto, Jesús dirige sus pasos lentamente hacia el lugar señalado, admirando el espléndido jardín .
-Se podría decir la espléndida rosaleda, que Cusa ha dispuesto para su mujer.
Rosas de todos los olores, tamaños y formas, en esta ensenada del lago protegida, ríen ya, precoces y magníficas.
Hay también otras flores, pero todavía no se han abierto y su presencia es mínima, comparada con la abundancia de rosales.
Acude Juana.
Ni siquiera se detiene a posar en el suelo un cestillo que tenía lleno de rosas hasta la mitad, ni a dejar las tijeras con las que estaba cortando.
Corre así, ligera y graciosa con su rico vestido de sutil lana de un rosa tenuísimo, cuyos repliegues están sujetos por pequeños discos y fíbulas de filigrana de plata en que brillan pálidos granates.
Sobre sus cabellos negros y ondulados, tiene una diadema en forma de mitra, también de plata y granates, sujeta un velo de lino cendalí ligerísimo, rosa igualmente,
que cae hacia atrás dejando descubiertas las orejas menudas que soportan el peso de unos pendientes similares a la diadema,
y que deja ver también la cara risueña y el esbelto cuello, en cuya base brilla un collar del mismo trabajo que los otros ornatos preciosos.
Deja caer su cesto a los pies de Jesús y se arrodilla a besarle la túnica entre las rosas desparramadas.
Jesús dice:
– Paz a ti, Juana. Como ves, he venido.
Juana responde:
– Y yo me alegro de ello.
También mis amigas han venido. Pero ahora tengo la impresión de que he actuado mal haciéndolo.
¡Cómo vais a poder entenderos! ¡Son completamente paganas!
Juana esta un poco turbada.
Jesús sonríe.
Le pone una mano sobre la cabeza,
y dice:
Nos entenderemos muy bien. Has actuado muy bien “haciéndolo”. El encuentro abundará en bienes, como tu jardín en rosas.
Recoge ahora estas pobres flores que has dejado caer y vamos a donde tus amigas.
– ¡Rosas hay muchas!
Lo hacía por pasar el tiempo y también porque esas amigas son muy… voluptuosas… Les gustan las
flores como si fueran… no sé…
– ¡A mí también me gustan!
Fíjate, ya hemos encontrado un tema para entenderme con ellas. ¡Venga, recojamos estas espléndidas rosas!
Jesús se agacha para dar ejemplo.
– ¡Tú no, Tú no, Señor!
Si es tu deseo… Mira… ya está.
Caminan hasta una pequeña pérgola hecha de un trenzado multicolor de rosas.
A la entrada hay tres romanas, mirando de hito en hito; son Plautina, Valeria y Lidia.
La primera y la última permanecen quietas, pero Valeria se echa a correr y llegando a la altura de Jesús,
– ¡Salve, Salvador de mi pequeña Fausta!
Jesús contesta sonriendo:
– ¡Paz y luz a ti y a tus amigas!
Las amigas se inclinan sin decir nada.
A Plautina la conocemos ya.
Es alta, majestuosa; sus ojos negros son espléndidos, un poco imperiosos; su nariz, bajo una frente lisa y blanquísima, es recta, perfecta; boca bien dibujada, aunque un poco túmida…
El mentón, redondeado y marcado: me recuerda a ciertas bellísimas estatuas de emperatrices romanas.
Gruesos anillos lucen en sus preciosas manos; anchos brazaletes ciñen sus brazos, en las muñecas y por encima de los codos, brazos verdaderamente estatuarios,
que bajo la corta manga drapeada, aparecen blanco-rosados, lisos, perfectos.
Lidia, por el contrario, es rubia, más delgada y joven.
Su belleza no es majestuosa como la de Plautina, pero tiene toda la gracia de una juventud femenil aún un poco inmadura.
Bueno, dado que estamos en tema pagano, podría decir que si Plautina parece la estatua de una emperatriz,
Lidia podría ser una Diana o una ninfa de gentil y púdico aspecto.
Valeria, ahora que ha superado la desesperación de cuando la vimos en Cesárea,
se presenta en su belleza de joven madre, de formas llenas aunque todavía muy juveniles.
De mirada serena, propia de una madre que se siente feliz de poder amantar a su hijo y verlo crecer alimentado con su leche.
De tez rosada y pelo castaño, tiene una sonrisa plácida y muy dulce.
Me da la impresión de que son damas de rango inferior al de Plautina, a la que, incluso con la mirada, veneran como a una reina.
Jesús dice:
– ¿Estabais recogiendo flores?
Seguid, seguid. Podemos hablar mientras cogéis estas maravillosas obras del Creador que son las flores,
Mientras las colocáis en estas copas preciosas con la habilidad de que Roma es maestra, para alargarles la vida – ¡Ay, demasiado breve! -…
Si admiramos este capullo, que apenas si abre la sonrisa de sus pétalos amarillo-rosas,
¿Cómo podremos no lamentar el verlo morir?
¡Ah, cuán asombrados se quedarían los hebreos si me oyeran decir esto!…
Y es que también en esta criatura, en la flor, sentimos un algo que tiene vida.
Y nos duele presenciar su fin.
Pero la planta es más sabia que nosotros:
Sabe que en el lugar en que se ha producido cada una de las heridas de un tallo cortado, nacerá un rebrote que dará origen a una nueva rosa.
Así pues, nuestra mente debe aprehender esta enseñanza y hacer del amor un poco sensual hacia la flor, estímulo para un pensamiento más alto.
Plautina ha escuchado atenta.
Y seducida por el pensamiento elegante del Maestro hebreo,
pregunta:
– ¿Cuál, Maestro?
– Éste: que de la misma forma que la planta,
mientras su raíz reciba alimento del suelo, no muere porque se le mueran algunos tallos,
Así la humanidad tampoco muere porque un ser se cierre al vivir terreno, sino que siempre germinan nuevas flores.
Además, mientras que la flor -y éste es un pensamiento más alto aún, que nos mueve a bendecir al Creador – una vez muerta no revive –
lo cual es motivo de tristeza.
El hombre cuando duerme el último sueño no está muerto,
sino que posee una vida aún más fúlgida, pues recibe, en lo que constituye su parte mejor, de su Creador que lo formó, eterna vida y esplendor.
Por eso, Valeria, aunque tu hija hubiera muerto, no habrías perdido su caricia:
Tu criatura – separada, pero no olvidada de tu amor – siempre habría besado tu alma.
¿Te das cuenta de que es dulce creer en la vida eterna?
– Tapada en aquella cuna.
Nunca me habría separado de ella, porque el amor por mi marido y mi hija eran los dos motivos de mi vida;
pero ahora, que sé lo que es verla morir, no la dejo ni por un instante.
Jesús se dirige hacia un asiento sobre el que ha sido colocada una especie de cunita de madera.
Levanta la rica colcha que por entero la cubre, para mirar a la pequeñuela durmiente,
la cual, dulcemente se despierta al llegarle aire más puro.
Sus ojillos se abren sorprendidos.
Una sonrisa angélica despega su boca, mientras sus manitas, antes cerradas, se abren ávidas de aferrar los ondeantes cabellos de Jesús.
Un gorjeo de gorrioncillo signa el discurrir de un contenido en su pensamiento; en fin emite como un trino, la grande y universal palabra:
– ¡Mamá!
Jesús dice:
– Tómala, tómala.
Apartándose, para permitir que Valeria se incline hacia la cuna.
Valeria dice:
– ¡Te va a molestar!…
Voy a llamar a una esclava para que le dé un paseo por el jardín.
– ¿Molestarme?
¡No! Nunca me molestan los niños. Son siempre mis amigos.
Plautina observa con qué sonrisas, Jesús provoca a la niña para que se ría…
Y pregunta:
– ¿Tienes hijos, o sobrinos, Maestro?
– No tengo ni hijos ni sobrinos.
Pero amo a los niños, al igual que aprecio las flores, porque son puros y sin malicia.
Trae, mujer, déjame a tu pequeñuela, que me resulta muy dulce apretar contra mi corazón a un angelito.
Y se sienta con la niñita.
Ella lo observa y despeina la barba de Jesús. lLuego encuentra más interés en las franjas del manto y en el cordón de la túnica, a los cuales dedica un largo y misterioso discurso.
Plautina dice:
– Nuestra buena y sabia amiga,,,
Una de las pocas que no se desdeña de tratar con nosotras y que, al mismo tiempo, no se corrompe con nosotras,
te habrá dicho que nuestro deseo era verte y oírte para juzgarte por lo que eres,
porque Roma no cree en fábulas…
¿Por qué sonríes, Maestro?
– Después te lo digo.
Prosigue.
– Porque Roma no cree en fábulas…
Y quiere juzgar con ciencia y con conciencia antes de condenar o exaltar.
Tu pueblo te exalta y te calumnia con igual medida.
Las palabras de muchos hebreos, a creerte poco menos que un delincuente.
Tus palabras son solemnes y sabias como las de un filósofo. Roma se siente muy atraída por las doctrinas filosóficas.
Aunque reconozco que nuestros actuales filósofos no poseen una doctrina satisfactoria, incluso porque su forma de vivir no está en consonancia con la doctrina.
– No pueden vivir en consonancia con su doctrina.
– Porque son paganos,
¿No es cierto?
– No.
Porque son ateos.
– ¿Ateos?
– Ya ni siquiera esos, mujer.
Te recuerdo a los antiguos filósofos, a los más grandes. También eran paganos…
Y a pesar de todo, ¡Fíjate qué noble fue su vida!:
A pesar de convivir con el error – porque el hombre gravita hacia el error -,
cuando se encontraron frente a los misterios más grandes, la vida y la muerte,
cuando fueron puestos ante el dilema honestidad o deshonestidad, virtud o vicio, heroísmo o cobardía.
Y vieron que si se volvían al mal sería en perjuicio de su patria y de los ciudadanos;
entonces, con voluntad de gigante, se deshicieron de los tentáculos de los nefastos pulpos…
Y libres y santos, supieron querer el Bien a costa de cualquier cosa, este Bien que no es sino Dios.
– Se dice que eres Dios.
– Yo soy el Hijo del verdadero Dios, hecho Carne sin dejar de ser Dios.
– Pero, ¿Qué es Dios?
A juzgar por ti, el mayor de los maestros.
– Dios es mucho más que un maestro.
No rebajéis la idea sublime de la Divinidad encerrándola en los límites de la sabiduría.
– La sabiduría es una divinidad.
Nosotros tenemos a Minerva, que es la diosa del saber.
– También a Venus, diosa del placer.
¿Cómo podéis pensar que un dios, o sea, un ser superior a los mortales, tenga en grado perfecto todos los aspectos denigrantes de los mortales?
¿Cómo podéis pensar que un ser eterno tenga eternamente esos pequeños, mezquinos, humillantes placeres de quien tiene una hora de tiempo?
¿Y que a ello reduzca la finalidad de su vida?
¿No pensáis en lo sucio que es ese Cielo al que llamáis Olimpo, donde fermentan los más acerbos extractos de la humanidad?
Si miráis a vuestro Cielo, ¿Qué veis?:
Lujuria, delitos, odios, guerras, robos, crápula, celadas, venganzas.
¿Qué hacéis para celebrar las fiestas de vuestros dioses?: Orgías.
¿Qué culto les dais?
¿Dónde está la verdadera castidad de las consagradas a Vesta?
¿En qué código divino se basan vuestros pontífices para juzgar?
¿Qué palabras pueden leer vuestros augures en el vuelo de las aves o en el fragor del trueno?
¿Qué respuestas pueden dar a vuestros arúspices las sangrantes entrañas de los animales sacrificados?
Me acabas de decir hace un momento: “Roma no cree en historietas”.
Y entonces, ¿Por qué creéis que doce pobres hombres, haciendo dar una vuelta en torno a los campos a un cerdo, una oveja y un toro…
e inmolándolos después, pueden atraerse a Ceres.
Si tenéis infinitas deidades, que se odian entre sí, y además vengativas, según creéis?
No. Dios es muy distinto de eso. Es eterno, Único y espiritual.
– Pero Tú dices ser Dios…
Y eres carne.
– Hay un altar sin dios en la patria de los dioses.

22. Pablo, de pie en medio del Areópago, dijo: «Atenienses, veo que vosotros sois, por todos los conceptos, los más respetuosos de la divinidad. 23. Pues al pasar y contemplar vuestros monumentos sagrados, he encontrado también un altar en el que estaba grabada esta inscripción: «Al Dios desconocido.» Pues bien, lo que adoráis sin conocer, eso os vengo yo a anunciar. HECHOS 17
La sabiduría humana lo ha dedicado al Dios Desconocido,
porque los sabios, los verdaderos filósofos, intuyeron que había algo más,
detrás del escenario historiado producido por esos eternos niños que son los hombres cuyos espíritus están fajados por el error.
Ahora bien, si esos sabios – que intuyeron que tras el engañoso escenario había algo más, algo verdaderamente sublime y divino que ha hecho todo cuanto existe;
de quien procede todo lo quede bueno hay en el mundo -,
Si esos sabios quisieron un altar para el Dios Desconocido, sentido por ellos como el verdadero Dios,
¿Cómo es que vosotros llamáis dioses a lo que no es dios, y afirmáis saber lo que en realidad no sabéis?
Sabed pues, lo que es Dios, para poderlo conocer y honrar.
‘Dios es Aquel que con su pensamiento ha hecho de la Nada el Todo.
¿Tiene poder persuasivo para vosotros la fábula de las piedras que se transforman en hombres?, ¿Os satisface?
En verdad, hay hombres más duros y malos que una piedra y piedras más útiles que ciertos hombres.
Valeria, ¿Qué te resulta más dulce, mirando a esta hijita tuya, pensar:
“Es un deseo de Dios hecho vida, creado y formado por Él, dotado por Él de una segunda vida imperecedera – de forma que seguiré teniendo a mi pequeña Fausta.
Y además para toda la eternidad, si creo en el Dios verdadero”,
En vez de decir: “Esta carne de rosa, estos cabellos más sutiles que hilo de araña, estas pupilas serenas proceden de una piedra”.
O pensar:
“Soy semejante en todo a la loba o a la yegua; me uno carnalmente como los animales, animalescamente engendro y crío;
esta hija mía es fruto de mi instinto animalesco y es un animal como yo…
Y mañana, muerta ella y muerta yo, seremos dos cadáveres que habrán de descomponerse y oler,
y que nunca jamás se habrán de volver a ver”?
Dime, tu corazón de madre, ¿Cuál de los dos razonamientos elegiría?
Valeria responde con firmeza:
– Desde luego, el segundo no, Señor.
Si hubiera sabido que Fausta no podía corromperse para siempre, mi dolor frente a su agonía habría sido menos cruel,
porque habría pensado:
“He perdido una perla, pero sigue existiendo y la encontraré”
– Tú lo has dicho.
Cuando he llegado aquí, vuestra amiga me ha manifestado su perplejidad ante vuestra gran pasión por las flores.
Y temía que Yo me pudiera incomodar por ello…
Pero la he tranquilizado diciéndole:
¡A mí también me gustan, así que nos entenderemos muy bien”.
Es más, quisiera elevar vuestra estima de las flores como hago con Valeria respecto a su hija,
a quien – estoy seguro – otorgará aún mayores atenciones ahora que sabe que tiene alma,
que es un soplo de Dios que está dentro de la carne generada por su madre.
Un alma que no muere, y que su madre, si cree en el Dios verdadero, volverá a encontrar en el Cielo.
Pues de la misma forma ahora vosotras observad esta magnífica rosa:
la púrpura que embellece las vestiduras imperiales no es tan espléndida como este pétalo, que deleita no sólo los ojos, por su color,
sino también el tacto, por su suavidad, y el olfato por su perfume.
Observad también esa otra… y ésa… y esa otra…:
la primera es sangre emanada de un corazón; la segunda, nieve reciente; la tercera, pálido oro;
la última parece como si reflejase esta dulce cara infantil que me sonríe apoyada sobre mi pecho.
Se podría decir aún más: la primera se yergue rígida sobre un grueso tallo exento casi de espinas, rojizas sus hojas, como salpicadas de sangre.
La segunda tiene a lo largo del tallo raras espinas en forma de gancho y opacas y pálidas hojas.
La tercera es flexible como un junco, sus hojas son pequeñas y brillantes como si de cera verde se tratase.
La última, con tantas espinas como tiene, parece estar impidiendo cualquier tipo de asalto a su rósea corola:
parece una lima de agudísimas puntas.
Volved vuestro pensamiento hacia esta realidad, pensad: ¿Quién lo ha hecho?, ¿Cómo?, ¿Cuándo?, ¿Dónde?
¿Qué era este lugar en la noche de los tiempos?
No era nada. Era una agitación informe de elementos.
Y los elementos se separaron para reunirse por familias.
Luego tronó otro “Quiero” y se dispusieron con orden: uno en otro, el agua entre las tierras.
Uno sobre otro e1 aire y la luz sobre el planeta ya ordenado.
Otro “Quiero”, y comenzaron a existir las plantas,
Y luego las estrellas, y los animales, luego el hombre.
Dios donó sin tacañería las flores y los astros, cual espléndidos juguetes, para gozo del hombre, su predilecto.
Y por último le otorgó la alegría de procrear, no algo que muriese, sino algo que sobreviviese a la muerte por el don de Dios que es el alma.
Estas rosas son expresión de otros tantos deseos del Padre:
su infinito poder se despliega en infinidad de bellezas.
El flujo de mi palabra encuentra impedimento al chocar contra el compacto bronce de vuestra creencia.
De todas formas, espero que, para ser éste nuestro primer encuentro, ya algo nos hayamos entendido.
Ahora es vuestra alma la que debe trabajar con cuanto os he dicho.
¿Tenéis alguna pregunta que hacer? Si es así, hacedlas…
Estoy aquí para aclarar las cosas.
La ignorancia no es motivo de vergüenza.
Lo es, sí, el persistir en la ignorancia cuando se tiene a alguien dispuesto a aclarar las dudas.
Dicho esto, Jesús, como si fuera el más experto de los papás, sale de la pequeña pérgola sujetando a la niñita, que está dando sus primeros pasitos…
Y quiere ir hacia un surtidor que ondea bajo el sol.
Las damas permanecen en su sitio hablando entre sí en voz baja.
Juana, en pugna con dos deseos, está en el umbral de la pérgola…
Al final Lidia se decide – y tras ella las otras – y va a donde Jesús.
Que ríe porque la niñita pretende agarrar el espectro solar del agua y lo único que coge es luz.
Y no obstante, insiste.
Insiste con todo un piar de polluelo en sus labios de rosa.
Plautina pregunta:
– Maestro…
No he entendido por qué has dicho que nuestros maestros no pueden conducir formas de vida buenas, siendo ateos.
Creen en un Olimpo, pero creen.
Jesús explica:
– Ese creer suyo no es sino una forma externa.
Mientras han creído verdaderamente, como los verdaderos sabios creyeron en aquel Desconocido de que os he hablado.
En aquel Dios que satisfacía su alma aunque no tuviera nombre, incluso sin conciencia de la voluntad:
mientras han dirigido su pensamiento a este Ente, muy superior…
Muy superior a los pobres dioses llenos de humanidad, de baja humanidad, que el paganismo se ha procurado.
Mientras han hecho esto, necesariamente han reflejado un poco de Dios:
El alma es espejo que refleja, eco que repite.
– ¿Qué, Maestro?
– A Dios.
– ¡Gran palabra es ésa!
– Es una gran verdad.
Valeria, seducida por el pensamiento de la inmortalidad,
pregunta:
– Maestro, explícame dónde está el alma de mi hija.
Besaré ese lugar como a un sagrario; la adoraré, dado que es soplo de Dios.
Jesús explica:
– ¡El alma!
Es como esta luz que tu Faustita quiere coger y no puede, porque es incorpórea.
Pero que está ahí, como podemos ver Yo, tú y tus amigas.
De la misma forma, el alma es visible en todo aquello que diferencia al hombre del animal.
Cuando tu hijita te diga sus primeros pensamientos, piensa que esa inteligencia es su alma que se revela.
Cuando te quiera, no ya con su instinto sino con su razón, piensa que ese amor es su alma.
Cuando crezca a tu lado hermosa, no tanto de cuerpo cuanto de virtud, piensa que esa belleza es su alma.
Y no adores al alma, sino a Dios, que es el Creador del alma.
A Dios, que de toda alma buena quiere hacerse un trono.
– ¿Donde está esta cosa sublime?:
¿En el corazón?, ¿En el cerebro
– Está en el todo que es el hombre.
Os contiene y está en vosotros contenida.
Cuando os deja, sois cadáveres; cuando cae muerta por un delito del hombre contra sí mismo; (con el pecado mortal)
Sois réprobos, estáis separados para siempre de Dios.
Plautina interviene:
– ¿Entonces admites que el filósofo que dijo que éramos inmortales, a pesar de ser pagano, tenía razón?
– No es que lo admita.
Voy más allá. Digo que es un artículo de Fe.
La inmortalidad del alma, o sea, la inmortalidad de la parte superior del hombre, es el misterio más cierto y consolador del acto de creer.
Es el que nos asegura de dónde venimos, a dónde vamos, de quién somos.
Y disuelve en nosotros la amargura de cualquier tipo de separación.
Plautina piensa profundamente.
Jesús la observa, pero guarda silencio.
Y al final pregunta:
– ¿Tú tienes alma?
Jesús responde:
– Sí, ciertamente.
– Pero, ¿Eres, o no, Dios?
– Soy Dios, ya te lo he dicho.
Pero ahora he tomado naturaleza de hombre.
Y, ¿Sabes por qué?
Porque sólo con este sacrificio mío podía resolver los puntos que para vuestra razón son inalcanzables.
Y tras ser abatido el error, liberando el pensamiento, liberar también al alma de una esclavitud que por ahora no te puedo explicar.
Por ello he introducido la Sabiduría en un cuerpo, la Santidad en un cuerpo:
Yo esparzo por la tierra como una semilla la Sabiduría, como polen al viento.
La Santidad se desparramará por el mundo en la hora de la Gracia, como si fuera quebrada la preciosa ánfora que la contenía.
Y santificará a los hombres.
Entonces el Dios Desconocido será conocido.
– Pero si ya eres conocido…
El que pone en duda tu poder y sabiduría es malo o falso.
– Soy conocido, pero es como si fuera sólo un amanecer…
La meridiana habrá plena cognición de Mí.
– ¿Cómo será tu mediodía?
¿Un triunfo? ¿Lo veré yo?
– Verdaderamente será un triunfo.
Y tú lo presenciarás porque sientes náusea de lo que conoces y apetito de lo que desconoces…
Tu alma tiene hambre.
– ¡Es verdad!
Es de verdad de lo que tengo hambre.
– Yo soy la Verdad.
– Date entonces a la hambrienta.
– Basta con que vengas a mi mesa.
Mi palabra es pan hecho con verdad.
Lidia está muy asustada…
Y pregunta:
– ¿Qué dirán nuestros dioses si los abandonamos?
¿No se vengarán de nosotros?
– Mujer: ¿Has visto alguna vez una mañana neblinosa?
Los prados se pierden detrás del vapor que los oculta. Viene el sol y el vapor desaparece. Y los prados resplandecen más hermosos.
Pues vuestro dioses no son sino niebla del pobre pensamiento humano que, ignorando a Dios, pero al mismo tiempo necesitando creer…
La Fe es el estado permanente y necesario del hombre, se ha creado este Olimpo, verdadera fábula sin fundamento alguno.
Vuestros dioses, de la misma forma, cuando salga el Sol, Dios verdadero; desaparecerán de vuestros corazones sin poder causar mal alguno, porque no tienen existencia.
– Tendremos que escucharte todavía mucho.
Nos encontramos completamente ante lo desconocido. Todo lo que dices es nuevo.
– ¿Te causa repulsión?
¿Te es imposible aceptarlo?
Plautina responde con seguridad:
– No.
Me siento más orgullosa de lo poquísimo que ahora sé, y que César no sabe, que de mi nombre.
– Pues persevera.
“Os dejo con mi paz».
– ¿Pero, cómo?
¿No te quedas más tiempo, Señor? –
– No.
Tengo muchas cosas que hacer…
– ¡Yo que quería manifestarte una cosa que me aflige!…
Jesús, que ya se estaba marchando tras el respetuoso saludo de las romanas,
se vuelve y dice:
– Ven hasta la barca, así podrás hablarme de lo que te aflige.
Juana lo acompaña,
y dice:
– Cusa me quiere mandar un tiempo a Jerusalén.
Esto me duele.
Lo hace porque no me quiere seguir viendo relegada, ahora que estoy curada…
– Tú también te creas nieblas inútiles.
Jesús ya ha puesto un pie en la barca.
– Si pensaras que así puedes recibirme en tu casa…
O seguirme con mayor facilidad, estarías contenta.
Y dirías: “La Bondad ha pensado en nosotros”.
– ¡Es verdad, Señor!
No tenía esto en cuenta.
– ¿Ves?
Obedece como una buena esposa.
La obediencia te aportará el premio de tenerMe para la próxima Pascua y el honor de ayudarme a evangelizar a tus amigas.
¡La paz sea siempre contigo!
F58 LA NUEVA FAMILIA
Hijitos Míos, Soy como el río caudaloso, que lleva sus aguas limpias, cristalinas, por su caudal. Todo está en orden, todo sigue como debe ser, no se sale de su caudal.
Mis pequeños, estabais llamados a ello, a tomar de estas aguas límpidas que os iban a purificar, os iban a hacer crecer y os iban a llevar hacia la perfección. Pero éstas aguas después se corrompieron, porque no las protegisteis. Cruzasteis por ellas y lo que eran aguas límpidas por no respetarlas, se volvieron lodosas.
Estáis ahora en ésos momentos. No estáis tomando lo que Yo os daba: pureza cristalina. Ahora aún estáis tomando lo que vosotros mismos revolvisteis por descuidados: el Mundo. Descuidasteis lo que Yo os di en la Iglesia, descuidasteis Leyes y Mandamientos…, Se os daba todo.
Mis pequeños, cerrasteis vuestros ojos, tapasteis vuestros oídos, manejasteis a voluntad vuestro corazón, desperdiciasteis el Amor Puro y Santo, habéis hecho un torbellino de todo aquello que antes estaba correctamente en su lugar.
Ahora vuestro mundo se desarrolla así, en turbulencia. Nadie sabe nada, ahora todo está revuelto. Antes todo estaba en su lugar, tenía un orden perfecto…, El mismo hombre que fue creado con perfección, prefirió la basura. Prefirió éste torbellino, que todo lo envuelve, que todo lo distorsiona, que todo lo lleva a la Maldad.
Mis pequeños, estáis en ésos momentos de Tribulación en donde nada tiene pies ni cabeza. Vosotros mismos no sabéis hacia dónde dirigiros, NO hay reflexión en vuestra vida, NO hay santidad, NO hay vida real, ¿Qué estáis haciendo Mis pequeños, con lo que Yo os di? Os encomendé perfección y Me entregáis Mundo.
¿Qué tenéis en vuestro corazón?… Cuando Mi Corazón debiera estar dentro del vuestro.
¡Oh!, ¡Mis pequeños! ¡Oh!, ¡Mis pequeños!, Cómo Sufro al veros y no queréis reaccionar. Por un lado y por otro os Aviso. Por un lado y por otro os trato de encaminar y llevaros de la mano. Busco que estéis Conmigo, pero Me soltáis y escogéis vosotros mismos vuestro camino.
Camino errado que os lleva al sufrimiento, a distraeros, a distraer vuestra alma, a distraer Mi tiempo, a destruir lo que era perfecto.
¡Oh!, Mis pequeños. Debo de retomar vuestro camino, debo de llevaros nuevamente a ésos caminos de perfección y santidad y NO queréis. NO QUERÉIS, Mis pequeños, ¡Qué tercos sois!, NO queréis tomar Mi Mano, NO queréis volver a Mis Leyes, NO queréis retomar Mi camino. ¿Hacia dónde queréis ir, Mis pequeños?
¡Oh!, ¡Cuánta Maldad encierra vuestro corazón!, Cuánta maldad envuelve a vuestra mente, vuestras acciones son negativas, pocos son los que se mantienen a la orilla. Pero aún así, a ratos coquetean con el Mal, luego se regresan hacia el Bien, porque no están en perfección.
Y ciertamente ven el mal tras de la cerca y los atrae el Mal y NO reconocen Mi Bien y NO se quieren soltar totalmente a Mi Bien y apartarse del Mal.
Mis pequeños, lo único que estáis haciendo es atraeros más mal y Yo os digo que debéis decir “SÍ” a lo que es bueno y “NO” a lo que es malo. NO estéis coqueteando, sois TIBIOS para Mi Gracia. Con esto estáis acelerando el Tiempo para que caiga sobre vosotros:
TODA ÉSA BÁRBARA CRUELDAD QUE EL DEMONIO YA EMPEZÓ A DERRAMAR SOBRE VUESTRAS CABEZAS….
Por la Maldad NO vivís, NO gozáis y os atraéis mal sobre mal.
Ved Mis pequeños vuestro interior, ¿Acaso estoy Yo realmente ahí, como Dueño y Señor de vuestro corazón, en vuestros intereses, en vuestra familia, en todo lo que hacéis? ¡NO!, Mis pequeños, NO estoy Yo. Me buscáis solamente cuando Me necesitáis y Me necesitáis para obtener vuestros mezquinos intereses,
¿Dónde está vuestro dios?, Yo NO Soy vuestro Dios de ésos momentos, Soy el Verdadero Dios de vuestros intereses, pero Me habéis hecho a un lado. Ciertamente os da vergüenza hablar de Mí, estar Conmigo, llevarMe a vuestros hermanos.
Ciertamente YA NO valgo lo que debiera valer Yo, vuestro Dios y Creador de vuestra vida. La Maldad, anida ya en vuestro corazón: tibieza, lujuria, mezquindad, ¿A dónde queréis llegar?
Entended ya Mis pequeños. ENTENDED QUE ESTÁIS EN LAS MANOS DEL ENEMIGO, quién NO os va a cuidar, quién NO os va a proteger, quién NO velará vuestro sueño, quién NO velará por vuestros intereses.
Que os coquetea, os gana y ya que os tiene en su mano, desenvaina la espada de destrucción sobre vuestro ser y sobre los vuestros.
Yo como Padre amoroso sigo impidiendo que esto se realice en totalidad, pero eso vosotros NO lo queréis ver. No queréis ver que Yo estoy apartándoos de ése mal para que NO os destruya, para que NO actúe en totalidad en vuestra vida y ni eso agradecéis.
¡Cuánta Maldad!, ¡Cuánta distracción del hombre!, ¡Cuánta necedad del género humano!
Tendré que soltar un poco la Mano, para que empecéis a sentir la Maldad de Satanás, a ver si reaccionáis. Vosotros estáis atrayendo el Mal a vuestra vida.
SOIS VOSOTROS, NO YO, QUIENES OS ATRAÉIS EL MAL. El Mal os rodea y vosotros os estáis soltando al Mal.
Entended, Mis pequeños. Entended esto que ya estaba escrito en las Escrituras. Se os ha profetizado cientos de veces y ¿Qué hacéis?:
¡OLVIDÁSTEIS QUE LA ORACIÓN PUEDE CAMBIAR PROFECÍAS!
NEGÁIS TODO ESTE CUIDADO QUE YO TENGO POR VOSOTROS.
No le hacéis caso, os sentís seguros con vuestras capacidades, con vuestro propio empeño en crecimiento, ¡Sois tontos, estáis ciegos, estáis sordos!.
La Gracia, Mi Gracia que os podía proteger, de hacer crecer, no la queréis ya. La Maldad, la Crueldad la aceptáis. La Maldad, os destruirá.
Entended ya, Mis pequeños, NADIE os va a amar como os amo Yo. Nadie os va a proteger como os protejo Yo. Nadie os cuidará como os cuido Yo. Yo Soy vuestro Dios.
¡Oh!, Humanidad perversa, que adoráis ahora a ídolos falsos y os habéis alejado de vuestro Dios. ¡Oh!, Humanidad perversa, que habéis hecho ídolos de vosotros mismos, llenándoos de Maldad y de Soberbia, ¡Oh!, Humanidad perversa, que enseñáis ahora vuestras leyes y vuestros principios erróneos a vuestros hijos y los apartáis de Mí, de Mi Amor, de Mis Leyes de Mi Vida, de Mi Sabiduría y de Mi Amor.
¡Oh!, Humanidad Perversa, ¡Qué ciegos estáis!, Por lo que os habéis atraído por vuestra separación de Mí, de vuestro Dios. Me habéis dado la espalda y queréis bienestar, cuando lo que habéis atraído a vuestra vida no os lo va a dar. La única Paz, el único Amor, la única Vida Real que vuestra alma añora, solamente puede venir de Mí, de vuestro Dios.
Habéis permitido que el Error se diseminara a vuestro alrededor. Le disteis alas, le disteis poder y ahora él se cobrará haciéndoos el mal, a cambio del bien que le disteis. Así es de traicionero el Mal. Satanás os paga el bien con mal. Fuisteis sus instrumentos y él os castigará por ello.
¡Qué tontos sois, Mis pequeños!, Quisisteis buscar un bien a vuestro pecado y a vuestro libertinaje apoyándoos en el Mal y el Mal solamente os puede dar mal, nunca os dará bien.
Ved a vuestro alrededor. Ved realmente si con el mal que buscasteis os estáis atrayendo algún bien. NO, Mis pequeños, dejasteis cundir el Mal y estáis en una degradación total.
Igual es el bien que creéis haber ganado al haberos apartado de Mis Leyes y de Mi Amor. Buscasteis vuestras propias leyes, buscasteis vuestro propio amor, leyes y amores humanos que NO son perfectos. Vuestra lógica humana errónea, destruida por el pecado, no puede llevaros a un bien.
Entendedlo, el bien que busquéis tiene que ser Mío porque Soy Perfecto, porque Yo os he dado la perfección, porque conozco la perfección, porque Yo Soy la Perfección, Soy vuestro Dios. Si Me seguís a Mí, tendréis perfección en todo.
Pero permitisteis en vuestra vida vivir al que NO es perfecto, al que negó la perfección, al que negó el Amor, ¿Qué os puede dar él?, ¡NO! Mis pequeños, habéis dejado que os guiara el Traicionero y ahora estáis viendo a vuestro alrededor lo que el Traicionero, lo que el Malvado, os da por seguirlo.
¿Acaso os sentís a gusto con vuestra vida actual, con lo que os rodea, con los problemas que tenéis en lo particular, sociales y mundiales?. ¿Eso es lo que queréis por vida para vosotros y para vuestros hijos?
Atrajisteis el Mal y NO QUERÉIS LUCHAR CONTRA ÉL porque no dejáis que Yo viva en vuestro corazón, que os guíe y que os llene de Mi Vida.
Maldad pura es lo que os rodea ya. Si NO buscáis la Bondad Pura, NO podréis salir adelante Mis pequeños. Hasta que veáis ésta realidad, hasta que la humildad os haga arrodillaros, hasta que entendáis que solamente Yo puedo vencer toda ésa Maldad suelta ya.
SI NO RECAPACITÁIS, la Maldad os va a hacer destruir vuestra libertad, os va a encaminar hacia el Mal, SERÉIS ESCLAVOS de ésa Maldad, si NO reaccionáis a tiempo. Segundos os quedan ya Mis pequeños, antes de que ésa Maldad os cubra completamente.
Ciertamente Yo estaré ahí, esperando vuestro arrepentimiento. Nunca Me separaré de vosotros, porque Soy vuestro Dios. Pero Sufro, sufro al veros destruidos y por vuestra tontería, por vuestra necedad. Habéis cerrado vuestro corazón al Verdadero Amor y vuestra mente a la Verdadera Sabiduría.
Arrepentíos Mis pequeños, todavía os puedo rescatar. Todavía os puedo levantar, todavía os puedo llevar hacia la Luz, todavía os puedo hacer sentir el Verdadero Amor. No se ha perdido todo, Yo puedo rescataros. OS PUEDO HACER RENACER, a pesar de que estéis ya en las cenizas.
Levantad vuestro rostro, pedid con el corazón Mi ayuda, implorad por vuestro perdón. Aquí estoy Yo Mis pequeños esperando, esperando vuestra respuesta, entendedlo ya.
Yo vuestro Dios y como Padre amorosísimo, siempre os estoy cuidando. Agradeced de corazón por todos Mis cuidados, por toda Mi protección porque no estáis completamente en manos de Satanás. Él no tiene libertad absoluta, Yo limito su poder destructivo…
Pero él quiere destruir lo que estáis viendo, todo lo físico, lo material, la Creación que podéis ver y tocar y también lo espiritual.
Él quisiera destruir todo, porque Yo Creé todo por amor a vosotros. Él os tiene una gran Envidia, porque vosotros vivís en el Amor y fuisteis creados para vivirlo. Él despreció el Amor y todo aquello que se llame Amor, está invadido de Mi Amor, está protegido por Mi Amor.
Todo lo que sea creado en el Amor, él lo quiere destruir. La soberbia lo hizo separarse de Mi Amor y ésa es vuestra protección, Mis pequeños: el Amor. Envolved todo en Mi Amor, para que quede protegido.
Cuidad Mi Amor, cuidad todo lo que os rodea con Mi Amor. Agradeced por vosotros mismos y por vuestros hermanos, ésos cuidados que Yo tengo para protegeros. Sois ésos niños distraídos que no os dais cuenta de cómo el Padre os va quitando de vuestro camino las piedras, los obstáculos, todo aquello que os pueda hacer caer y dañaros.
Yo siempre voy delante de vosotros y os trato de proteger como un padre haría, pero llevado más perfectamente en vuestro interior y en vuestro exterior.
Ved todo esto Mis pequeños, lo que hago por cada uno de vosotros. Agradeced de corazón, pedidMe más. Sed sencillos pero sed amorosos, con eso atraeréis Mi Amor hacia vosotros y hacia los vuestros.
El Amor vivido y aceptado en vuestro corazón os hace crecer, os da vida, hace que vosotros estéis junto a Mí, vuestro Dios y así ser satisfechos con Mis Bondades. ¡Cuánto Bien tengo para vosotros!. Si vosotros no Me buscáis, os estáis perdiendo de Mis riquezas porque no queréis conocerMe, ni vivir lo que tengo para vosotros.
Los que estéis Conmigo, pedid para vosotros y para los vuestros; para levantar a vuestros hermanos, aunque ellos al principio no quieran. Muchos, muchos de vuestros hermanos NO han sabido reconocer en su vida, que las bendiciones que les rodean, son Mías.
Hacedles ver todas éstas bendiciones. Tan pronto ellos las reconozcan y las agradezcan, recibirán más. Yo quiero atraer a todas las almas hacia Mí, son vuestros hermanos y quiero unir a todas las almas en una sola. VENID, venid todos a Mí Mis pequeños y os uniremos en un solo ser y entonces sabréis quien es vuestro Dios y gozaréis de Mis bondades.
Hijitos Míos, se puede caer en el error, ya sea por necedad o por negligencia. La necedad os lleva también a la traición; por la soberbia, por la maldad que hay en vuestro corazón.
En lo espiritual y en lo humano tenéis Leyes que cumplir, podéis ser dirigentes y no hacer caso a las Leyes. Pero LOS MANDAMIENTOS, MI LEY DIVINA, os van a llevar al perfeccionamiento de vuestro ser. Si vosotros por negligencia, NO las queréis seguir, fallaréis.
Ahora, ¿Qué será peor? ¿Aquéllos que conociendo la Ley, la traicionan? O ¿Aquéllos que NO la quieren conocer y quieren vivir según lo que ellos quieran hacer en su necedad? Los dos caerán. El resultado será nefasto en los dos casos, los dos casos NO están aceptando las Leyes.
Meditad bien esto, Mis pequeños. El fin es destructivo en ambos casos. NO será bueno para vuestro desarrollo espiritual, hablando de lo que a Mi Me interesa: vuestra alma.
MUCHOS de vuestros hermanos NO han sido educados bajo Mis Leyes, bajo Mi Amor. Pero ellos ya almas adultas, por Negligencia NO buscan el bien que ya se os ha dado.
Sufrirán por su Negligencia y se estarán perdiendo de innumerables bendiciones que podrían tener por estar bajo Mis Leyes de Amor y de perfección.
Aquellos que fueron educados bajo Mis Leyes, bajo Mi Amor y LO TRAICIONAN Y NO QUIEREN SEGUIRLOS, quizá causen un mal mayor, ya que conocen y niegan… Y a veces hasta atacan. Como os dije, en ambas situaciones ésa terquedad os llevará hacia ése Obscurecimiento del alma y dará malos frutos: actuarán en el mal, vivirán en el mal y darán mal ejemplo.
Sabéis cómo trabaja Satanás y ésta época que os ha tocado vivir, ESTÁ LLENA DE LA MALDAD DE SATANÁS:
Ahora sus Mentiras son más refinadas. Y si no estáis realmente dejándoos guiar por la Luz del Espíritu Santo que vive en vuestro interior, Satanás con sus Mentiras, os hará perder posiblemente el Reino de los Cielos y una Eternidad de Salvación.
Mis pequeños, mucha Maldad os está rodeando y vosotros deberéis tener una vida fuerte en lo espiritual, para poder vencer toda ésa Maldad que os está rodeando y que habéis aceptado ya en vuestra vida. Un modo de vida incorrecto, pero ya prácticamente aceptado por todos.
Desgraciadamente estáis viviendo una vida de error y Mi Santo espíritu os debe llevar a la vida correcta, la vida que se vive en la Gracia y de acuerdo a las Enseñanzas que Yo vuestro Dios, os he dado y que tenéis en las Sagradas Escrituras. Pero que NO buscáis, porque ya se os hacen obsoletas estas Enseñanzas, que os llevan precisamente a la perfección.
Vosotros mismos os debéis dar cuenta del estado de vida que estáis llevando. ¿Vuestra vida está de acuerdo al Evangelio que se os ha enseñado? o ¿Estáis haciendo vuestra propia vida de acuerdo a lo que vuestra carnalidad y vuestros deseos pecaminosos permiten y buscan?
Mis pequeños, ser un verdadero hijo Mío un hijo de Dios, ES DIFÍCIL. Porque os tenéis que vencer a vosotros mismos y debéis llevar la frente en alto ante vuestros hermanos que están viviendo en el error.
Y llevar la frente en alto quiere decir que Me estáis llevando a Mí, que estáis siendo ejemplo de todas las Enseñanzas que se os han dado, de una vida de ejemplo, de Gracia, de amor, de Virtudes. Pero ciertamente, esto ya se os hace muy difícil y no queréis llevarlo, para que no seáis señalados ante vuestros hermanos.
Pero recordad una cosa: ciertamente no seréis señalados aquí, pero seréis señalados en vuestro Juicio, porque no quisisteis vivir de acuerdo a lo que se os enseñó. Y por NO querer ser señalados en la Tierra, sufriréis más en vuestro Juicio, ante todas las almas que os estarán viendo…
Y vuestro dolor será mucho más grande, porque será un dolor espiritual el que os estará señalando y el que estaréis vosotros sufriendo.
En las Escrituras se os ha dicho que aquél que Me niegue en la Tierra, será negado en el Reino de los Cielos. Si vosotros Me estáis negando, si vosotros estáis prefiriendo llevar una vida de acuerdo a lo que Satanás os está enseñando, recordad pues estas palabras: “seréis negados en el Reino de los Cielos”
Porque si permitisteis que sus palabras entraran en vosotros y vosotros las vivierais, esto quiere decir que todo lo Mío lo sacasteis de vuestro corazón y preferisteis ésa Maldad a todo lo bueno que debierais vivir para ser llamados hijos de Dios.
Entonces seréis llamados hijos de Satanás. Y un hijo de Satanás NO puede vivir en el Reino de los Cielos.
Tened cuidado Mis pequeños, porque si NO sois buen ejemplo aquí en la Tierra, entonces se os negará la entrada en el Reino de los Cielos.
Hijitos Míos, gran alegría tendréis vosotros los que con Fe y con amor Me habéis seguido, a pesar de que pudisteis haber desviado vuestro camino y no lo hicisteis. Tuvisteis también las oportunidades que tuvieron TODOS vuestros hermanos, de llevar un camino de error, de maldad, de pecado y escogisteis el buen camino.
Ciertamente habréis caído muchas veces a lo largo de vuestra vida, pero os levantasteis, siempre buscando Mi Presencia en vuestra vida, siempre buscando la perfección, siempre buscando el bien que dar a vuestros hermanos. Siempre buscando el quitar los errores que a lo largo de vuestra vida vais tomando aquí y allá, creyendo que es lo correcto; pero que gracias a Mi Santo Espíritu, os vais dando cuenta de que no era el camino que debíais seguir.
Os alegraréis inmensamente Mis pequeños, cuando os deis cuenta de lo que es el Verdadero Amor que vosotros seguisteis y que os llenará plenamente. Esto es lo que os he dicho que viviréis en los Cielos Nuevos y las Tierras Nuevas.
El Verdadero Amor de vuestro Dios en vuestros corazones, en el corazón de vuestros hermanos, en la Nueva Familia que se dará en ése Tiempo y viviréis así, como verdaderos hermanos que estarán llenos todos de Mi Amor.
Alegraos Mis pequeños, de que vuestro regalo pronto llegará. Que está ya a las puertas, que solamente faltan unos breves pasos que dar, para que se manifieste este Regalo tan grande que se os dará.
Aguantad Mis pequeños un poco más, así como Mi Hijo tuvo que aguantar ésos últimos pasos antes de ser Crucificado y darse por todos vosotros. También deberéis pasar momentos difíciles y luego, la belleza Divina, el Regalo Celestial que Yo os daré.
Confiad Mis pequeños como habéis confiado toda vuestra vida, que falta ya poco y que se os dará lo que tanto os he prometido.
Hijitos Míos, también os podríais preguntar cómo será ésa Tribulación que tendréis y que de hecho ya estáis teniendo alrededor del Mundo. Yo como Padre vuestro, os di los Diez Mandamientos.
LOS DIEZ MANDAMIENTOS ES UNA FORMA DE VIDA...
Los Diez Mandamientos os están previniendo en lo que podéis caer, en lo que podéis fallar.
Si vosotros los tomáis para protegeros contra todos ésos ataques de Satanás, os estaréis cuidando de caer en los pecados a donde os quiera llevar Satanás. Esa es la mayor Tribulación que pueda tener un hijo Mío, cualquiera de vosotros, Mis pequeños.
Si vosotros repasáis cada uno de los Mandamientos que Yo os di, os daréis cuenta que sois débiles y que podéis caer fácilmente en cualquiera o en muchos de ellos.
Con ellos os estoy recordando vuestra debilidad, os estoy dando a entender que debéis estar siempre buscándoMe, buscando Mi Gracia, buscando Fuerza en los Sacramentos, en las Virtudes, en el Amor.
Podéis caer fácilmente y de hecho caéis en ellos por vuestra falta de espiritualidad, porque buscáis más lo del Mundo y NO aquello que os puede hacer crecer espiritualmente.
Recordad que para Mí, ES TRIBULACIÓN EL ESTADO DE VUESTRA ALMA
NO lo que sucede a nivel físico y material que os rodea, porque así lo veis vosotros. Veis lo que se está acabando de lo de vuestro Mundo, pero no os dais cuenta de lo que se está acabando en vuestro interior, que es vuestra alma.
Porque vosotros vais a perder vuestro cuerpo, ciertamente lo vais a tener que dejar aquí y que polvo se volverá. Pero lo que sigue Vital y Eterno es vuestra Alma…
Y estar en pecado grave, eso es Tribulación. Porque eso es lo que os llevará a la Muerte Eterna si vosotros os mantenéis en ésa tribulación, que es el pecado mortal. El pecado que sí os lleva a la Muerte y a la separación total de Mí, vuestro Dios.
Vosotros y Yo vuestro Dios, hablamos con dos diferentes conceptos, porque vosotros le dais mucho valor a lo material y sufrís por lo que os falta en lo material. Pero os vuelvo a repetir: lo que vale en vosotros son los actos espirituales, porque ésos se quedan en vuestra alma y que de ellos vais a tener que darMe cuentas ya que vuestro Juicio particular va a ser sobre vuestra espiritualidad y NO sobre vuestro cuerpo.
Mucho os he hablado de esto Mis pequeños, pero se os olvida fácilmente. Por eso os pido nuevamente, que en estos Tiempos de Tribulación espiritual, Satanás va a tratar de destruir fuertemente los valores de vuestra alma, los valores espirituales que os pueden dar Vida Eterna.
Él tratará de destruir ésa espiritualidad, para que viváis con él eternamente en los Infiernos, junto con su Maldad. Llevándoos al error, en donde están cayendo infinidad de almas. porque estáis viendo solamente lo superficial, lo carnal, lo mundano y NO lo que vale realmente en vosotros, que es vuestra alma.
No confundáis pues los conceptos. El concepto correcto es el Mío Mis pequeños, que es la salvación de vuestra alma, la que vivirá o morirá eternamente.
Hijitos Míos, NO despreciéis lo que Yo permita en vuestra vida. Sabéis que nada se da por casualidad, porque Yo estoy guiando la vida de cada uno de vosotros.
Muchos de vuestros hermanos hablan y hasta creen que se viene a gozar en la Tierra y que hay que hacer lo que vuestras pasiones y sentidos desean y NO ES ASÍ, Mis pequeños.
Vinisteis a dejar una estela de Amor, vinisteis a ser otros Cristos, vinisteis por la salvación de las almas de vuestros hermanos. Vinisteis a trabajar para destruir el Reino de Maldad que Satanás ya había implantado aquí sobre la Tierra.
Y que Mi Amor que os vino a enseñar Mi Hijo, debía ir destruyendo todo lo malo, para que se implantara Mi Amor a través de cada uno de vosotros.
Cuando vosotros traéis ideas de ésa índole, como en la que creéis que debéis darle gusto a vuestros sentidos, estáis viviendo precisamente en el error a donde os ha llevado Satanás. Porque él quiere que vosotros viváis en los sentidos y Mi Hijo os vino a dar toda una Evangelización espiritual. ¿Veis que son dos cosas muy diferentes, Mis pequeños?
Satanás llevándoos solamente hacia la carne. Mi Hijo llevándoos hacia vuestro espíritu, hacia el crecimiento de vuestra alma. En sentido espiritual, un crecimiento sano y santo. Mientras que Satanás os quiere destruir, llevándoos solamente a una vida carnal y destruyendo vuestra espiritualidad.
Tarde o temprano tendréis que dejar vuestro cuerpo aquí, vuestra carne. Y ¿Qué quedará después de ello?: vuestra alma y lo que conlleva vuestra alma, que van a ser todos los actos espirituales buenos y malos, que vosotros hicisteis a lo largo de vuestra vida.
Entonces sí debéis darle alimento espiritual a vuestra alma. Y con esto os daréis cuenta que os estaba engañando Satanás, que NO os dejaba ver que tenéis un alma espiritual y que la tenéis que alimentar con alimento espiritual.
Tened cuidado Mis pequeños, si creéis todavía que debéis darle gozo al máximo a vuestro cuerpo y que NO os importa vuestra alma, porque la realidad es otra…
Y OS VAIS A TENER QUE ENFRENTAR A ELLA MUY PRONTO.
Cuidaos de esto, Mis pequeños. NO despreciéis toda la bondad que se os ha dado y que es Bondad Divina, son Leyes Divinas y tendréis que dar cuenta de ello, Mis pequeños. Meditadlo, os amo.
Ayudádme todos, hijitos Míos, a construir el Reino del Amor y sabed que Yo estaré con vosotros por toda la Eternidad.
Yo NO os estoy castigando. Es vuestra necedad y soberbia que el mismo Maligno suscita en vosotros, quien os castiga.
Reflexionad y aceptad que Mí Santo Espíritu de Amor os guíe hacia la Verdad y a la Luz Verdadera de Mí Camino al Reino Celestial.
Escoged, Mi Paraíso o vuestro mundo actual. En vosotros está la decisión. De Mí sólo puede salir Bien, Paz, Verdad y Amor.
Os Bendigo entrañablemente hijitos Míos de Mi Sacratísimo Corazón. Yo os Bendigo con el Amor Verdadero que sólo Yo, Vuestro Padre, en Sus Tres Divinas Personas, os puede dar. Os amo y Bendigo en Mí Santo Nombre en el de Mí Hijo Jesucristo y en el del Paráclito de Amor. Recibid todo el Amor de Mí Hija la Siempre Virgen María
P177 LA PREGUNTA CRUCIAL
Aprovechad que tenéis sacerdotes todavía, porque pronto habrá grandes problemas mundiales.
Hijitos Míos, a lo largo de vuestra vida habéis tenido problemas a veces delicados, a veces problemas de la infancia, de la adolescencia, que os van haciendo madurar y os ayudan a entender mejor la vida y cómo os debéis vosotros comprometeros con vuestros hermanos. Cómo tratarles, cómo servirles, cómo vivir entre hermanos.
Ciertamente algunas veces, no podréis salir del problema si no es con la ayuda de los adultos y sobre todo, de los adultos que vivan Conmigo, que vivan sabiamente, que vivan en Mi Amor, que vivan rectamente.
Todos vosotros habéis caído varias veces a lo largo de vuestra existencia, en problemas de la escuela, de vuestro trabajo, sociales… A veces con las autoridades, pero también a veces Conmigo, con problemas de vuestra alma.
Y como algunos de vuestros problemas del alma se llaman pecados y vienen directamente hacia Mí, Yo os pido que os acerquéis a Mí, a través de Mis ministros sacerdotes; para que os den un buen consejo, para que os ayuden a salir adelante, para que perdonen vuestros pecados y os den una nueva vida espiritual.
Pero muchos de vosotros ya no os acercáis a Mis representantes en la Iglesia.
Ya os he hablado varias veces acerca de su posición, de su Ministerio en la Tierra. El Ministerio Sacerdotal, se les concedió por Mi Gracia, para que ellos os pudieran ayudar; pero sobre todo para que pudieran limpiaros de vuestros pecados y que os pudieran ayudar a crecer espiritualmente.
Os he dicho que a pesar de que ellos sean pecadores como vosotros y quizá hasta peor que vosotros, TIENEN EL SACRAMENTO SACERDOTAL y ellos pueden impartir los Sacramentos, a pesar de estar en pecado mortal.
Pero es algo que a vosotros no os atañe. Vosotros no sabéis lo que ellos tienen en su corazón, Yo sí. Vosotros debéis acudir a ellos, para que os puedan dejar en buen estado espiritual, ante Mis Ojos.
Y vosotros no debéis juzgar cómo están ellos, a pesar de que supierais con toda exactitud, que ellos estuvieran en pecado grave.
Por el Sacramento del Sacerdocio, ellos os pueden impartir los Sacramentos, YO ME ENCARGARÉ DEL RESTO…
Ellos son Mis representantes. Debéis orar fuertemente por ellos, porque os he dicho que Satanás los ataca muy fuertemente, para que vosotros NO tengáis las Gracias, que Yo puedo administraros a través de ellos.
Debéis aprovechar, Mis pequeños, que los tenéis todavía, porque pronto habrá grandes problemas mundiales y todo será un caos.
Manteneos en estado de Gracia, manteneos en buena vida espiritual.
TODO LO QUE VOY A PERMITIR EN VUESTRA VIDA A NIVEL MUNDIAL
SERÁ PARA UN BIEN…|
Vosotros, todos vosotros en mayor o en menor grado, os habéis apartado de Mí. Habéis cometido muchas faltas, habéis Dañado Mi Corazón.
Os he dicho que esto que sucederá será como una Purificación, para vuestros pecados y para que os podáis presentar ante Mí, limpios y podáis entrar al Reino de los Cielos.
Pero aun así, hay muchos hermanos vuestros que no están preparados, ni se quieren preparar.
Orad por ellos para que la Luz de Mi Santo Espíritu, toque su corazón y puedan tener ése deseo de acercarse a Mí.
Mi Amor es Infinito por todos vosotros. Es demasiado grande Mi Amor, como para que vosotros lo podáis comprender.
Cada uno de vosotros, para Mí sois lo más precioso, lo más preciado y por eso mandé a Mi Hijo Jesucristo; para que se diera por cada uno de vosotros, para recuperar vuestra alma.
Pero vosotros seguís insensibles, NO agradecéis, seguís pecando. Os seguís dejando llevar por las manipulaciones y mentiras de Satanás y de esta forma, os vais alejando cada vez más de Mi Gracia y de Mi Amor.
Pero de vuestro amor hacia Mí; porque Mi Amor hacia vosotros, sigue siendo inmenso.
Aún a pesar de vuestros pecados, os amo. Pero, vosotros os ganáis el Infierno, NO porque Yo os mande ahí; sino porque vosotros no queréis venir a Mí. Y esto lo deberéis entender muy bien.
Al estar apartados de Mí, de Mi Gracia, de Mi Amor; os alejáis y no queréis saber nada de Mí, a pesar de que de muchas formas os trato de atraer nuevamente hacia la Gracia y hacia Mi Presencia en vosotros.
Pero vosotros sois los que escogéis y no queréis estar Conmigo… Y así ES como las almas se ganan la Condenación Eterna, porque no Me aman.
Ciertamente las almas escogidas están marcadas, están Conmigo. Saben que Vivo en su corazón, Me cuidan, Me aman, Reparan, Oran, Viven para Mí. Aunque se distraigan mucho, están Conmigo.
Manteneos pues Mis pequeños, aunque sea con ésa pobreza espiritual que tenéis para Conmigo; pero al menos dais bastante más, que las almas que no Me quieren, que se alejan de Mí, que no Me aman y que Me causan Mucho Dolor, porque Yo sí las amo.
DadMe alegría Mis pequeños, sed buenos hijos. Reparad por vuestros pecados y por los de vuestros hermanos y Yo traeré de regreso, a muchas almas hacia Mí.
Os amo, Mis pequeños, seguid adelante, falta poco.
Hijitos Míos, si alguien os anunciara que os queda poco tiempo de vida… ¿Qué haríais?
SI OS DIJERAN QUE OS QUEDAN DIEZ DÍAS, ¿Qué haríais?
Ciertamente, hablando según vuestra vida espiritual y aún de la humana, cada quien reaccionaría en forma diferente, PERO REACCIONARÍAIS, dependiendo del grado de vuestra vida espiritual.
Algunos, los que están más en el Mundo, verían inmediatamente por sus bienes materiales. Quizá irían al banco a checar sus cuentas. Irían con el notario para ver a quién dejarían sus bienes. Otros con más vida espiritual, se prepararían a bien morir. Se acercarían a sus parientes y darían sus últimos momentos de amor hacia ellos. Así, cada uno de vosotros, iríais reaccionando en forma diferente.
Esto os lo digo porque ciertamente, os queda poco tiempo. Vosotros no sabéis quiénes seréis premiados para pasar a los Cielos Nuevos, las Tierras Nuevas, al regalo que os tengo prometido porque fuisteis fieles a Mí.
Tampoco sabéis si seréis tomados para el Cielo, pasando primeramente una purificación necesaria en el Purgatorio.
A otros, ni siquiera les preocupa eso. Simplemente, os dirán que estáis elucubrando o inventando y seguirían su vida normal, sin hacer caso a lo que pueda suceder. Y esto ha sido de toda la vida Mis pequeños, las almas seguís actuando según vuestros propios intereses.
Si no estáis Conmigo, no sabréis entender los Signos de los Tiempos. Y eso, le pasa a muchos de vuestros hermanos. Simplemente, hablan de los Signos de los Tiempos como algo cíclico, que ha sucedido y volverá a suceder, porque así ha sido siempre y seguirá.
Vuestro comportamiento dependerá de vuestra vida espiritual. Los que tienen poca vida espiritual, no les interesa saber de éstos Avisos, de éstos cambios; sobre todo, de esta preocupación Divina hacia vosotros, ayudándoos a prepararos para estos momentos de cambio.
Aquellos que están Conmigo o que han estado Conmigo desde antiguo, se han ganado la Vida Eterna de aquellos que Me han rechazado, que no les ha interesado durante su vida humana el acercarse a Mí, muchos han perdido su vida y se han condenado.
Vosotros, ¿De qué lado estáis?, ¿Qué pensáis?,
¿Hacia dónde os moveréis? ¿Estáis Conmigo o estáis contra Mí?
¿CREÉIS LO QUE OS DIGO?
O
¿NO CREÉIS Y SEGUÍS COMO SI NADA, EN VUESTRA VIDA COTIDIANA?
Ya os he dicho que, cuando Yo Me comunico con el hombre,
ES POR ALGO IMPORTANTE.
En el pasado, lo hice a través de los profetas. A través de ellos os anuncié desastres, como el Diluvio, como Nínive, como Sodoma y Gomorra y muchos más.
Me preocupo por vosotros, sois Mis hijos y os trato de Avisar, para que vosotros enmendéis el camino. Pero el mismo hombre no cree y eso es lo que lo pierde.
Satanás siempre va a estar junto a vosotros, tratando de destruiros. En cambio Yo vuestro Dios y Creador, siempre voy a estar también junto a vosotros, tratando de que vosotros recuperéis el camino y volváis a Mí.
Hay una gran diferencia entre el Odio de Satanás hacia vosotros y Mi Amor hacia vosotros, aunque estéis en pecado grave y no queráis volver a Mí.
Muchos que no quieren volver a Mí, han sido engañados por Satanás desde pequeños y por eso, alargo vuestra existencia para que llegue el momento en que reaccionéis.
Os voy siguiendo a lo largo de vuestra vida a cada uno de vosotros y os voy otorgando todas las oportunidades, para que siempre os mantengáis en estado de Gracia…
y que la Muerte no os alcance estando en pecado grave, que os pueda condenar.
Cuando os presentéis ante Mí, tendréis vuestro Juicio Personal. E iréis al Reino de los Cielos, los que tengáis derecho a él y los que no lo tengáis, en ése momento conoceréis cuánto os amé.
Mi Amor es demasiado grande para que lo podáis entender. Os daréis cuenta de cuántas veces os di las oportunidades de regresar a Mí y que no aprovechasteis. O que cuando las aprovechasteis, volvisteis de regreso prácticamente de inmediato, a la vida de pecado.
No os imagináis el valor de vuestra alma, el tesoro que tenéis en vuestro interior. Algunos reaccionan, que son los que están Conmigo; piden la Luz del Espíritu Santo y viven en Oración especialmente, en estado de Gracia.
Les voy educando, les voy enseñando, les permito que vayan teniendo Sabiduría Divina, para que aprecien lo que os he concedido. Si realmente os dierais cuenta Mis pequeños, lo que Yo os he dado; cuidaríais principalmente vuestra alma como lo que es: un gran Tesoro Divino.
¿Por qué Satanás os quiere quitar vuestra alma? ¿Por qué no os quiere quitar lo material, si vosotros lo buscáis tanto? ¿No os habéis hecho ésa pregunta alguna vez?.
Él no os quita vuestros bienes. Es más, os da más si se los pedís. Así os engaña, os distrae, para que luego él pueda arrebataros vuestra alma; él quiere vuestra alma, porque es lo más preciado que tenéis. Y vosotros no os dais cuenta de ello. Le vendéis a veces vuestra alma, por unos mendrugos de pan. Y perdéis vuestra alma eternamente.
Pedid ayuda a Mi Santo Espíritu, para que os haga ver la realidad de vuestra existencia, el valor de vuestra alma, el Futuro Eterno que os espera.
Hay tantas cosas tan bellas, tantos Misterios Divinos que se os pueden ir explicando, si vosotros Me lo pedís.
Pero a la gran mayoría de vosotros, no os interesa conocer más sobre Mí, sobre Mi Reino, sobre Mis Regalos, sobre Mis Promesas. Si os adentrarais y profundizarais en Mis Misterios de Amor, agradeceríais de corazón todo lo que Yo os doy y todo lo que he hecho por vosotros.
Sois muy ingratos todos vosotros, no agradecéis lo que debierais agradecer. Ciertamente, lo hacéis a veces muy a la ligera y volvéis al Mundo nuevamente.
Meditad todo esto, Mis pequeños y podréis alcanzar la santidad, a la que estáis llamados.
A muchos de vosotros os molesta que os hable tanto de Amor. Pero es que, Yo Soy el Amor. Vosotros, por la caída del Pecado Original, perdisteis ésa cercanía a Mi Amor. Vosotros no tenéis punto de comparación entre lo que realmente Soy y lo que ahora estáis viviendo y que le decís “amor”.
Aquellos que viven en Mi Amor, viven embelesados con Mi Verdadero Amor y no con los amores efímeros que tenéis en la Tierra. Y que muchos de ellos, hasta pecaminosos son.
El Verdadero Amor que Yo os doy, os da una libertad absoluta. Os da Conocimientos inimaginables. Vivís una vida profunda en Mí, mística, bellísima. Aprendéis a ver las cosas que os rodean y aun las que tenéis en vuestro corazón, de una forma muy diferente a como ahora las veis.
Cuando vivís en Mi Amor, os hacéis uno con la Creación. Aprendéis a convivir con todo lo que os rodea, porque todo lo que os rodea, está hecho por Mi Amor.
Todo lo que Yo he Creado para vosotros y para vuestros hermanos, fue Creado en el Amor. Pero vosotros le disteis diferentes usos. Y así como un instrumento puede servir para moldear, para crear una figura bellísima, también la puede destruir o crear algo horrible.
Vosotros sois los instrumentos, Mi Amor está con vosotros. Pero lo podéis acrecentar o lo podéis destruir, es vuestra decisión. Pero Mi Amor está con vosotros.
Yo no desprecio a ninguna alma. Todas las almas existentes, han sido creadas por Mí. Pero, cada uno de vosotros decide si os quedáis Conmigo o si Me dais la espalda. Es vuestra total y libre decisión.
No conocéis Mis pequeños, Mi Verdadero Amor. Ciertamente, éste es un Regalo que le hago a las almas escogidas. Y también os puedo decir que TODOS vosotros tenéis derecho a Mi Amor. Pero hay almas escogidas que tienen una Tarea más Importante entre vosotros y ellos os dan ejemplo de Amor.
Ése ejemplo de Amor os mueve también a vosotros, hacia una realidad Divina que todos debéis seguir y a la que todos vosotros estáis llamados. Es vuestro futuro, es un regalo Mío, vuestra vida eterna Conmigo.
Yo Soy vuestro Regalo Eterno, Yo Soy el Amor que os ha creado para que vosotros Me regalarais los actos de vuestra vida. Yo gozo cuando Me ofrecéis vuestra vida y vuestros actos. Cuando lo hacéis, Yo estoy Presente en vuestra vida; NO Soy el Dios Olvidado, Soy el Dios Presente.
El Mundo os atrae y os olvidáis de Mí. Y de esta forma, Me pierdo de vuestros ofrecimientos y de vuestro amor. Por vuestra caída en el Pecado, os atrae el Mundo. Y por eso he puesto en vuestra alma dones especiales a cada quien, para que os deis cuenta que vuestra alma es más valiosa que lo que os ofrece Satanás.
Pero insistís en quedaros con el Mundo y ésa es ya vuestra decisión. Por eso se pierden tantas almas, porque os aburre que os hable de Mi Amor.
Las almas que viven en Fe, que viven esperando ansiosamente unirse a Mí, al final de su existencia en la Tierra son las almas escogidas. Ellas son las que han sufrido humillaciones, ataques, persecuciones.
Y a pesar de todo ello y más, se han mantenido en Mí esperando el momento de la unión Conmigo al final de su existencia, para gozar totalmente de Mi Amor.
Os dije que TODOS vosotros podéis ser almas escogidas, pero NO todas reaccionan igual NI tienen los deseos de unirse a Mí. Por eso consiento a los que Me buscan, a los que Me llaman, a los que Me necesitan; porque sin Mí, no pueden vivir.
Hijitos Míos, alguna vez os dije que si os permitiera ver la vida espiritual tal y como ES a vuestro alrededor y con ello, hablándoos de los seres espirituales, tanto buenos como malos que os rodean, caeríais como fulminados en ése preciso momento.
Vosotros veis cosas bellas con vuestros ojos humanos. Yo Creé a los Mundos bellos para que vosotros ya con vuestro cuerpo, pudierais gozarlos.
Imaginad que si hice esto en el Mundo físico, que no he de ofreceros en el Mundo espiritual.
Todo, lo que viene de Mí es Bellísimo, porque Soy el Perfecto. Soy vuestro Dios, Soy el Creador, de TODO lo que os podéis dar cuenta.
De lo que veis y también de lo que no veis pero que todavía no os dais cuenta, porque está preparado para las almas que Me amaron y que fueron fieles a Mí.
Algo muy bello estoy esperándoos dar, son Mis detalles de Amor. Ahora os embelesáis con los colores de la Naturaleza, las bellezas en los pajarillos, en los mares, en los ríos, en las nubes, en todo lo que os rodea. Y si tenéis una sensibilidad bella, podéis gozar más.
Es vuestro Cielo en estos momentos en la Tierra. Si realmente os dierais cuenta y gozarais lo que Yo con delicadeza Creé para cada uno de vosotros, sería vuestro Cielo aquí en la Tierra si aprendierais a ver el Bien, si aprendierais a ver Mi Amor en todo lo Creado.
Los días los pasaríais felices viendo Mis Delicadezas por vosotros; pero os entretenéis en otras cosas a donde os lleva Satanás y desperdiciáis lo bello que tenéis a vuestro alrededor.
Os he dicho tantas veces que ES el Rey de la Mentira y vosotros le seguís creyendo; él os lleva hacia el mal, hacia la mentira, hacia la Obscuridad, a lo que no vale. Y le seguís.
Haced la prueba un día y ved a vuestro alrededor desde que amanecéis, todo lo que Yo he hecho para vosotros.
TENÉIS OJOS y podéis gozar lo que hay a vuestro alrededor. Ahora, imaginad que no tenéis ojos, os perderéis de infinidad de cosas bellas, que podéis ver a través de vuestros ojos. Como poder gozar la luz, los colores, las formas.
Pero os puse el sentido de la vista, para que gozarais todo lo bello y no os lo perdierais. Pero ciertamente os lo perdéis, porque no estáis atentos a ello. NO lo buscáis.
Os puse sonidos, sonidos armoniosos de la Naturaleza y los sonidos que puede crear también el hombre. Gozáis de la música, podéis gozar el movimiento de las aves, el aleteo, el trinar de los pajarillos, el susurro del viento.
Tantas y tantas cosas que podéis gozar de la Naturaleza, pero lo desperdiciáis y preferís oír ruidos que alteran vuestra paz interior.
Pero vosotros lo buscáis. Buscáis lo que no os da paz. Qué contradicción, queréis lo bello y buscáis lo feo.
Os puse en la Naturaleza sabores y OS DÍ EL GUSTO. Podéis paladear infinidad de sabores diferentes y con ello vosotros gozáis y NO Me dais las “gracias” de ello.
¿Qué os pasa cuando os enfermáis, que no podéis paladear lo que estáis comiendo? Prácticamente coméis por comer, pero NO degustáis lo sabroso de los alimentos. Pero Yo pensé en ello, os di el sentido del gusto.
Son Mis delicadezas de Amor hacia vosotros, para que gozarais con vuestro cuerpo infinidad de cosas.
OS DÍ EL SENTIDO DEL TACTO, para que tocarais todo a vuestro alrededor, que gozarais al sentir todo lo que os rodea; el terciopelo de una flor, el frío, el calor, la piel de vuestros pequeñitos cuando nacen. Una caricia, un beso…
Os he dado tanto, Mis pequeños y, ¿Cuándo Me agradecéis por ello? Imaginad que no los tengáis ya, caéis en desgracia, Mis pequeños. Sufrís cuando perdéis algún sentido y cuando lo tuvisteis, NI LO AGRADECÍSTEIS Y NI LO GOZASTEIS PLENAMENTE. ¿Cuándo aprenderéis a agradecerMe Mis delicadezas de Amor?
Os he dicho esto muy rápido, pero todos vosotros lo habéis vivido. Ahora, imaginad Mis Delicadezas Eternas.
En el Reino de los Cielos, os están esperando infinidad de bellezas. Vuestros sentidos se van a acrecentar, las ocasiones de gozar cada uno de vuestros sentidos, en el Reino de los Cielos, se van a multiplicar.
Recordad lo que os he dicho, que las potencias del alma son inmensas, infinitas, como Infinito Soy Yo. Ése es el regalo que os espera. Pero el mayor Regalo será el gozarMe a Mí vuestro Dios, con un pleno amor que tendréis, porque ya estaréis en el Reino de los Cielos.
Luchad, pues, Mis pequeños, por conseguir este Regalo que os prometo y luchad contra las intenciones de Satanás, que quiere evitar que vosotros gocéis lo que os tengo prometido y que más o menos, os he anunciado.
Tened Fe y confianza en Mí, vuestro Dios. Lo más bello que hayáis tenido en la Tierra, no se compara ni con lo más pequeño que tendréis en el Reino de los Cielos.
No os desesperéis hijos Míos, cuando os sintáis pequeños, inservibles, que no sois nada. Y ciertamente así es, porque os he dicho que sin Mí, no sois nada. Pero recordad también que de lo pequeño, de lo poco, Yo puedo hacer grandes cosas.
Y vosotros estáis aquí ante Mi Presencia, no sois nada. Lo que tenéis Me Pertenece, Yo os lo he dado. Pero cuando vosotros Me lo regresáis a Mí, reconociendo que lo que tenéis Yo os lo di; en ése momento, os volvéis grandes ante Mis Ojos.
¿Cuántos hay de vuestros hermanos, que se apropian de lo que son? ¿Se envanecen de su triunfo, de su conocimiento, de sus posesiones? No las tendrían si Yo no les hubiera dado las capacidades para obtenerlas.
Pero el hombre, es así. Se apropia de lo que no le pertenece, para aparentar ante vosotros, sus hermanos. Para creerse superior, para sentirse mejor dotado y pregonando que se merece un puesto más alto que todos vosotros.
Eso es lo que os enseña Satanás, que os envanezcáis con vuestros méritos. Ciertamente lucháis, estudiáis, os fortalecéis para alcanzar triunfos; pero no veis la realidad sobre: ¿Quién os dio las capacidades para lograr todo eso?
Yo, vuestro Dios. Yo os di capacidades físicas e intelectuales, con las que podéis hacer grandes cosas.
Ciertamente ponéis vuestro esfuerzo. Pero nuevamente, ¿Quién os dio ésas capacidades, para que vosotros pudierais aprovechar con vuestro esfuerzo, los dones y capacidades que Yo os di?
Por donde lo queráis ver, Mis pequeños. Siempre estaré Yo Presente en todo lo que tenéis, en la obtención de todo lo que recibáis, TODO, todo viene de Mí.
Si Yo no estuviera velando por vosotros y que en un supuesto caso Yo Me olvidara de vosotros, seríais como una piedra. No tendríais movimiento, no tendríais ningún tipo de evolución, por así decirlo. No creceríais en capacidades, porque así es como vosotros veis a una piedra: ahí está, no se mueve, no crece, no hace nada, es una piedra.
De todo lo que Yo os doy, ciertamente hay algunos de vosotros que sí lo sabéis aprovechar, aumentáis los dones que Yo os doy y por eso, es la Parábola de los Talentos. Todos vosotros habéis recibido dones, que son talentos, capacidades que algunos multiplican y que otros dejan dormir y no los aprovechan.
Cuando desperdiciáis los dones, capacidades o talentos que Yo os doy, tendréis ciertamente un castigo, porque lo que Yo os doy, es para que lo aprovechéis vosotros y vuestros hermanos.
Y sobre todo, para darMe Gloria a Mí, vuestro Dios y que vean todos que Yo os los concedí.
Hay otros que reciben quizá hasta menos, pero los saben aprovechar, los multiplican. Me dan Gloria a Mí, porque reconocen que Yo os los concedí.

Actor Eduardo Verastegui, star of the film “For Greater Glory” arrives for the film’s premiere in Beverly Hills, California May 31, 2012. The film is set during the 1920’s Cristero War in Mexico, an uprising and counter-revolution against the Mexican government set off by the persecution of Roman Catholics. REUTERS/Fred Prouser (UNITED STATES – Tags: ENTERTAINMENT)
Y estas almas recibirán mucho más, recibirán hasta el ciento por uno porque son almas fieles, almas agradecidas; almas que supieron aprovechar ya sea, lo mucho o lo poco que Yo os concedí a cada uno de vosotros.
AgradecedMe lo que tenéis, Mis pequeños. Y multiplicad los dones y capacidades que Yo os di para hacer el Bien a vuestros hermanos y para darMe Gloria en la Tierra, siempre agradeciendo que todo lo que tenéis, viene de Mí.
Y Yo os lo recompensaré en el Reino de los Cielos dándoos el ciento por uno o más, dependiendo del amor que pusisteis al obrar con los dones que Yo os di.
Confiad en Mí hijitos Míos, Yo no Me separaré de vosotros en ningún momento. Os daré fuerza física y espiritual para vencer en ésta Prueba.
Prueba que os hará alcanzar vida de Amor en ésta Nueva Era de Mi Santo Espíritu por venir. Confiad que Yo estoy a vuestro lado, para guiaros y en vuestro corazón para amaros y daros fuerza. Fuerza que ha de vencer a las fuerzas del Mal.
Yo os amo y os Bendigo en Mi Santo Nombre, en el de Mi Hijo y en el del Amor de Mi Santo Espíritu que os acompaña ungiéndoos con mi Poder Santísimo. Y en el de Mi Santísima Hija, la Siempre Virgen María, Donación perfecta al Amor.